Mundo Friki: Libros

Argumento

La historia se sitúa en Campo de Emond, un pequeño pueblecillo de la región de Dos Ríos, cuyos habitantes se ven envueltos en una desafortunada cadena de sucesos que llevarán a los protagonistas a embarcarse en una aventura que nunca habrían podido llegar a soñar... Ni desear

La vida de Rand Al'Thor y sus amigos en Campo de Emond ha resultado bastante monótona hasta que una joven misteriosa y su temible "guardaespaldas" llegan al pueblo. Moraine, una maga capaz de encauzar el Poder Único, anuncia el despertar de una terrible amenaza. Esa misma noche, el pueblo se ve atacado por espantosos trollocs sedientos de sangre, unas bestias semihumanas que hasta entonces se habían considerado una leyenda. Mientras Campo de Emond soporta la ofensiva, Moraine y su guardián ayudan a Rand y a sus amigos a escapar.

La huida sólo será el comienzo de sus problemas, ya que Moraine, miembro de la antiquísima orden de las Aes Sedai, cree que los chicos que lleva con ella están destinados a desempeñar un papel protagonista en los acontecimientos que se avecinan y de los que dependerá la supervivencia del mundo

Autor

Robert Jordan

Clasificación

Temática:
Juegos a los que puede adaptarse:

D&D y todos sus sucedáneos

Opinión de Kyra W

 No me creo que nadie haya subido una opinión aún sobre este libro (y en caso de que sí se haya hecho, pido por favor que se borre esta reseña sin más dilación, aunque yo no he encontrado nada). No por lo bueno que me haya parecido el libro a mí personalmente, si no por el tirón que tiene la Rueda del tiempo en este mundillo de la fantasía épica, considerada ya una obra maestra por gran parte de los aficionados a este tipo de literatura

Antes de nada, aviso de que este no es más que la primera parte del primer libro (Sí, decidieron vender "El ojo del tiempo" -The eye of the world- separado en dos entregas -Desde Dos Ríos y La Llaga-, por algún motivo que aún no he descubierto, ni ganas que tengo) de una saga compuesta por unos 13 libros (libro arriba, libro abajo) que, de hecho, aún no está del todo acabada (el autor que concibió toda la trama murió hace unos años, pero dejó suficientes notas como para que su "sucesor" -Brandon Sanderson- finalice la historia), quedando aún un par de libros por salir, si mal no he oído

También estaría bien advertir que yo, como tantos otros probablemente, llegué a este libro con cierta idea preconcebida. No son pocos los que hablan de esta saga con reverencia e incluso cierto nivel de fanatismo, y, según lo que me contaron algunos amigos cercanos de cuyo criterio suelo fiarme bastante, son unas verdaderas joyitas del género. Aún así, no todo eran buenas noticias: Me advirtieron que tuviera cuidado con los nombres, pues con el tiempo se van acumulando hasta que ya no te acuerdas de quién es quién, y también me aseguraron que los libros eran una "carrera de resistencia, más que de velocidad", añadiendo que, probablemente, no podría leérmelos todos del tirón

Y ahora, paso a mi opinión personal, que ya va siendo hora

El libro... Me ha dejado un buen sabor de boca. No excelente, pero tampoco agrio. Eso sí, ni punto de comparación con lo que me esperaba. Es la pena de ir con muchas expectativas, al final es bastante fácil que no esté a la altura de lo que creías. Quizás esperaba una historia que me mantuviera enganchado de principio a fin, sin poder sacar la nariz de entre una marea de páginas y tinta, obsesionándome tanto como han logrado otros ejemplares del género. Pero nada de eso

Se deja leer, por supuesto. Y es entretenido. Además, saco un montón de cosas positivas leyendo en frío. Pero el bajón de ir esperando una obra maestra para encontrarte con un "simple libro entretenido" empaña un poco la sensación final que puede quedarme tras finalizarlo

El libro en sí (como tantos otros del estilo) recuerda bastante al Señor de los anillos en mayor o menor medida (en especial con "los malos de la peli", que, y aviso de Spoiler

, aunque difiere en muchas otras cosas, por lo que esto no se convierte en defecto en ningún momento (quizás más bien en aliciente, si se me permite el comentario). Por supuesto, deja la historia inconclusa, y con un gancho lo suficientemente atractivo como para que te entren ganas de leerte el siguiente, pero también lo suficientemente soso como para darte cuenta de que sólo es la primera parte de "algo más grande", por lo que aconsejo encarecidamente que se lea junto con "La Llaga", el cuál empalma perfectamente con este primero

La historia está bien hilada, con un ritmo narrativo adecuado y unos giros bien colocados para mantener cierta atención sobre esta cuando el lector comienza a perder interés al respecto. Se nota que el autor es un muy buen escritor, ya que su estilo es cuidado y pulcro, no exento de varias estructuras y recursos literarios que son más que adecuados para este tipo de libros. Aún así, esto a veces juega en su contra, llegando a perderse en descripciones extremadamente detallistas y minuciosas, que, si bien a parte del público le agradaran, a la otra gran mayoría pueden llegar a resultarle cansinas y pesadas

Mi consejo es leer el libro con tiempo, sin prisa, intentando perderse entre entre sus páginas con la suficiente concentración y voluntad como para imaginar el mundo que Robert va creando a nuestro alrededor. No lo considero un libro para leerse en el tren, de camino al centro de trabajo o estudio, si no más bien para dedicarle un par de horillas en tu casa, sentado en el sillón, con la luz de la lámpara alumbrando sus páginas. A menos, claro, que tengas la suficiente capacidad de abstracción -y el tiempo suficiente- para hacerlo en el tren. Aquellos que vayan buscando una lectura facilona y amena, dirigida a público con pocas ganas de sumergirse en la historia, que dejen de leer aquí: Este no es su libro

Nada más empezar la historia, el marco que proyecta Jordan en nuestras cabezas es el de la ya conocida región apacible y rural, en la que los protagonistas han vivido de forma tranquila y exenta de problemas desde su tierna infancia (¿Alguien ha mencionado Hobbiton?). Y he de decir que, al menos por mi parte, me parece que consigue trasmitirnos esa sensación de paz y normalidad de forma bastante acertada y agradable. Casi sentía la emoción de los pueblerinos preparando su fiesta más importante (En la que, por supuesto, comenzarán a sucederse los acontecimientos detonantes de la verdadera trama, como en cierto cumpleaños de cierto Bolsón que yo me sé), la embriagante rutina de sus vidas diarias, y la aparente y satisfactoria sensación de encontrarse en un lugar donde parece que los problemas nunca llegarán (Aunque cualquier lector con dos dedos de frente sabrá, tanto por la portada como por la costumbre en este tipo de novelas -y en cualquiera, vaya- que se encuentra ante un verdadero imán de aventuras y sucesos extraordinarios, esperando a su momento para dotar a la historia de una verdadera emoción que, a cierto punto del libro, comienza a echarse de menos)

Aún así, la acción tampoco se demora tanto como para llegar a aburrirse demasiado, y cuando llega, recompensa la espera de forma más que adecuada. A partir de ahí, el libro va cogiendo más y más ritmo, enganchando cada vez más. El autor raciona sus elementos sobrenaturales (criaturas no humanas, poderes mágicos y lugares encantados) con cuentagotas, lo que en mi opinión es un verdadero acierto, pues consigue que estos encuentros no lleguen a tornarse rutinarios y que te pegues al libro cada vez que algo fuera de lo común sucede (además de que están bastante bien repartidos)

Para los personajes debería hacer también otro pequeño aparte. La mayoría aparecen poco definidos (excepto un par de excepciones, como Lan o Nynaeve) y llegan a resultar incluso algo ambiguos, lo que los aleja de estereotipos del género. Aunque este detalle llegó a decepcionarme un poco (suelo buscar cierta profundidad en los personajes de una historia, aunque estoy dispuesto a aceptar "modelos 2D" siempre que el resto del libro lo merezca), los mismos amigos que me recomendaron el libro me aconsejaron que no tuviera esto en cuenta, ya que según ellos la única razón de esto es prepararlos para un futuro desarrollo en los siguientes libros. Habrá que ver que tal

El concepto del bien y el mal también se toca, por supuesto. Como en la mayoría de sus compañeras de género, hay una lucha eterna entre el bien y el mal, que, por suerte, queda bastante diluida debido a cierta ambigüedad respecto a estos conceptos. Sí, hay un malo malísimo (El Oscuro) que domina a las criaturas de la oscuridad, pero es que los que teóricamente podrían ser considerados como "buenos" no son tan "blancos y puros" como uno podría llegar a esperarse. Más de uno vendería a su madre con tal de acabar con el Oscuro, e incluso se llegan a observar situaciones de cierta paranoia y tensión, en las que cualquiera que se salga un mínimo de la línea establecida puede llegar a ser tachado de corrupto y vendido a los poderes de la oscuridad (O "Amigo Siniestro", como los llaman en el libro). Se agradecen estos pequeños conflictos morales, aunque tampoco sean imperantes en la obra, ya que le hacen replantearse a alguno ciertos aspectos del mundo de la Rueda

Ah, el mundo de la Rueda. Sí, creo que lo que más me ha llamado la atención de la historia no es tanto la trama, como el mundo que la soporta. Se nota que Robert Jordan ha invertido horas y horas (y días y días, y semanas y semanas, y meses y meses... Y no sigo, que quizás me paso) en crear esa maravilla de mitología, historia, y geografía, que te envuelve como si estuvieras observando una verdadera realidad paralela en la que la magia existe y las aventuras están a la orden del día. Desde el primer momento se nota que todas las referencias, toda la historia, todos los nombres de antiguos reyes, generales e incluso leyendas han sido más que mascadas por el autor, y que detrás de esas líneas aún queda mucho, mucho por descubrir. Además, el hecho de que no suelan explicarte nada, limitándose a resumir algunos relatos importantes sin dar más detalles de los estrictamente necesarios, consiguen que, si eres un mínimo curioso, acabes deseando sumergirte en esa colección de libros que se nota han sido escritos por amor al arte, y no como una burda manera de sacar cuartos (que oye, después podría ser cualquier cosa, pero la sensación que da, al menos, no es esa)

En resumen, es una buena lectura, con un autor experimentado que consigue dotarla del realismo necesario como para darla cierta credibilidad e interés literario, sin llegar a resultar aburrida, y enmarcada en una rica ambientación que trasmite bastante bien la dedicación de este por su "obra magna", como muchos la consideran. Una aceptable introducción a la que -dicen- es una de las mejores sagas de fantasía épica de los últimos tiempos (aunque he oído tantas veces esta frase que ya acaba por perder sentido...), que los lectores más apasionados disfrutarán sin duda alguna, a pesar de que pueda resultar algo tediosa y lenta para aquellos más impacientes y activos (que no por ello más inexpertos). Aconsejada, pero con un par de avisos de por medio, para que no pille a nadie por sorpresa

¿Mi nota? Un 6. Una buena obra, pero sin llegar a entrar entre mis preferidas. Actualmente me estoy leyendo "La Llaga", la continuación y "segunda parte" de este primer libro, y me queda poco para terminarla -Aunque dudo de que tenga mucho tiempo libre en un futuro cercano, por lo que este proceso puede alargarse más o menos según circunstancias ajenas a mi persona-, por lo que cuando lo haga probablemente suba otra reseña... Hasta entonces, me reservo mis opiniones ;)