Se puso tensó cuando le nombro - joder, si todavía no hice na - pero lo corrigió al instante y eso le calmo completamente. Escucho la propuesta y sonrió agradecido mirando al techo como dando gracias a Dios - es una propuesta cojonuda - comentó mientras se ponía en pie, cogía su mochila y boli para luego dirigirse hacía el patio
- cespeeeeed.... ♪ - canturreo mientras salía de la clase
al patio
Esta también es una forma de dar clases, supongo. Pensé mientras cogía mi mochila y me levantaba del asiento.
- Yo prefiero irme a tomar algo de aire fresco al patio. Está mucho más fresquito que aquí todos hacinados y además, si puedo estirar lo de empezar las clases unas horitas más, mejor que mejor. -
Supongo que Gime y los demás también saldrán fuera, o no. Habrá que esperar un rato para saberlo.
Al patio, patio, patio.
Bueno, pues nada, otra vez a bajar escaleras. David esperaba acompañar a Gabriela, por ser la unica que le ha tratado bien, pero parece ser por lo visto que ha sentido la necesidad de salir de clase echando hostias. A lo mejor se ha sentido mal cuando han comentado lo de la delincuencia, al fin y al cabo comentaba que le han robado la moto o algo de eso, ¿no?
Se levanta del asiento con pereza y el primer sitio al que va es al lavabo. Luego se dirige al patio. A donde va todo Dios. Probablemente tenga tiempo para fumarse el canuto que antes ha tenido que dejar guardado, si es que encuentra un puto mechero.
Vicente va a donde va la gente. Patio.
De todo lo que dice el director, a lo único que presto atención es a el permiso para irnos. Recojo todo de forma rápida y contengo la sonrisa al poder perder una clase al mirar a Irgala. Ella necesita hoy estar distraída y con la mente ocupada.
Salgo con ella de clase camino al patio y le tomo de la cintura acercándola a mi en un gesto de confianza. Estoy contento de no tener clase y por eso estoy algo menos serio que de costumbre.
Irgala...dibujas muy bien y lo sabes. Que tal si haces algunos retratos de gente de la clase y se los regalas?. Seguro que hay mas de un interesado o interesada.
Patiora
Irgala se pone completamente roja, perceptible bajo esa capa de maquillaje blanquecino.
-Dibujar...yo? a la clase? y regalar que??? Estas mal de la cabeza Ander, Acaso crees que alguno de estos le interesa algun regalo mio? ni de coña, si quieres puedo dibujarte a ti...y a Aida...ah! no! ella ya es un dibujito animado de por sí
Miró a la animadora cuando pasaban por su lado, con su rostro algo frustrado. Le caiga mas que mal....la odiaba.
Sonrío a Aida al pasar sabiendo que Irgala la estaría mirando como si fuera el Anticristo. Aida esta hoy extrañamente callada así que aunque no sepa porque es posible que a ella le pase algo también.
Luego regreso mi atención a Irgala.
A mi no me importa si me haces un retrato...uno de esos en los que sales desnudo con un plato tapando tus partes. Según camino la suelto y hago el gesto de ocultar mi entrepierna con un libro. Que te parece mi idea?.
-Ander, sabes que no soy de ese estilo de pinturas, y no te voy a tener en mitad del patio en bolas. seria algo...
Mira a otro lado como pensativa.
...mejor no digo nada
Sonrie pocamente...ella era mas de paisajes, seres extraños, imaginativos...como el dibujo que habia terminado en clase.
Suspiro para mis adentros al ver que solo he logrado una leve sonrisa. Siendo el día que es debería sentirme satisfecho, pero la verdad es que quería tratar de animarla como sea.
No digo que me tengas desnudo en el patio de clase....me puedes tener desnudo donde tu quieras claro, pero seria mejor en mi casa o en la tuya. Y luego me puedes caracterizar como un vampiro o un hombre lobo...o un demonio. Así le das tu toque único.
Si no la hago reír al menos tratare de que su mente este en otras cosas todo el tiempo que pueda. Hasta si Aida la hiciera rabiar con algo que no sea el recuerdo de sus padres ayudaría.
Al contrario de lo que pudiese pensar Yi, Gina simplemente se encoge de hombros, y sale por la puerta, no sin antes echar una última mirada al director... Igual era demasiado joven para el puesto, y sólo lograría distraer a estudiantes modelos como ella, que "sólo querían alcanzar algo similar a la perfección en lo que respecta a notas"...
Al final no había dicho nada, y eso la había desconcertado un poco, pese al codazo de Allie, no había actuado a tiempo, por lo que suspira y se dirige hacia "el patio". Pero entonces recuerda que se está dejando las cosas en la clase.
-Ahí va, ahora vuelvo, ir yendo al patio.
Camina rápida hacia el aula preguntándose cómo había podido dejarse el iPod y sus libros, si es que estaba tonta...
Entra pidiendo disculpas:
-Lo... Lo siento, me he dejado las cosas...-baja la cabeza, va derecha a sus ítems, los pilla, y vuelve a salir lo más rápido que puede, debido a la vergüenza que le daba llamar la atención de esa manera.
Allie asiente a las palabras del director y cogiendo sus cosas sale también de clase junto a Yi, Gina y Dulce.
¡Estupendo! ¡A disfrutar del aire libre! ¿No es genial? Con el día que hace, es una pena quedarse encerrados en clase. Quizá podríamos proponer dar las clases al aire libre. Eso ayudaría a que el ambiente estuviera menos tenso y las auras más relajadas y receptivas. Aunque quizá las distracciones son mayores...
Empieza a hablar para sí misma, mirando los pros y los contras de aquella idea sin pararse a pensar de que era absolutamente seguro que tanto los profesores como el director se negarían, por muy transigentes que parecieran el primer día.
¡Patiooooooooooooooo!
- Yo me voy de aquí. Es una oportunidad que no puedo desaprovechar. -
Y me puse de pie, dejándo mis dos cosas sobre la silla y salí del aula con las manos en los bolsillos.
No se podía desperdiciar la oportunidad de campar a mis anchas en la escuela, y aunque seguro que nos vigilará algún bedel, no son tan inteligentes como para darse cuenta si consigo escaparme de aquí. ¿Quién sospechará que pienso pirarme si dejo mi carpeta y mi boli sobre mi silla?
Yo me piro al baño.
Jajajajaja Dulce ríe abiertamente y con su toque natural ante la locura que propone su amiga. ¿Las clases al aire libre? Eso me da que solo pasa en el Club de los poetas muertas y en China... Te aseguro que no serían pocas las distracciones, serían TODO distracciones dijo enfatizando el todo abriendo los brazos y señalando todo su alrededor. Aunque estoy totalmente de acuerdo contigo, algunas clases serían mucho mejores así, pero somos muchos, si fueran grupos reducidos de como mucho 5 o 7 alumnos, quizás se arriesgaran... Así no lo creo cielo. Pero me encanta tu idea.
Una vez estaban lejos del director se atrevió a decir: El director está cañón ¿eh? por alguna razón se sonrojó al pensarlo.
Excelente. Hora libre, pero que no es hora libre. Creo que este director me va a gustar... bueno, me va a gustar un poco más por qué madre mía, si está para mojar pan. Claro, como el año pasado lo vimos poco, ahora viene, se presenta y nos deja a todas con las bragas en el suelo.
Por que estoy segura que hasta la más santita se le ha caído un poquito la baba con el tiarraco este.
Me puse de pie a un lado del asiento y le guiñé un ojo a Manu.
- Tengo que ir a hacer cosas de chicas al servicio, después salgo al patio, ¿vale? - Le susurré al oído sin preocuparme si alguien más me escuchaba. - ¿Vosotros saldréis con Diego? -
Los chicos escaparon como un grupo de adolescentes que están esperando que abran las puertas de un concierto. Uno a uno, iban dejando el aula, en dirección al patio. Estaba claro que si el director les había dado permiso, no se iban a quedar allí encerrados entre cuatro paredes mientras nadie les daba tareas o cosas para hacer.
Por lo visto, eran todos hombres y mujeres libres.
Aún así, dos de ellos decidieron quedarse en el aula. Manuel y Mariano, que al parecer estaban absortos mirando las musarañas del techo, no le respondieron a Gimena ni a Diego absolutamente nada, y se quedaron allí sentados en sus asientos mientras los demás salían por la puerta.
Lentamente, el aula se quedó casi vacía, sólo con el Director sentado en el escritorio y con Mariano y Manuel sentados en sus sillas, sin decir una palabra.
Manu y Mariano: Como no habéis dicho nada, os dejo aquí. Si hacéis algo, posteadlo aquí.
Los demás, pasáis todos al patio del recreo. :D Otra vez. :D
Poco a poco, algunos más rápido que otros, vais entrando nuevamente al aula.
En los bancos del final podéis ver a Mariano y a Manu jugando a lo que parece ser un ajedrez pequeño.
El aula está tal cual la habéis dejado, sin embargo, hay un maletín en el escritorio del profesor, apoyado junto a la pata de la mesa.
Bueno chicos, ya os habéis conocido tal cual sois. ( Nada de conclusiones por un off-topics y esas cosas. ) Ya sabéis más o menos de qué pie cojea cada uno. Digamos que el "prólogo" puede darse por terminado. Ahora id pensando, mientras roleáis la clase ( que será la única que se rolee el día de hoy que son aburridas, lo sé xD ) que vais a hacer después de clase para ir preparando las escenas o si os quedáis en casa, os juntáis a tomar un helado, etc. etc. etc.
Bueno, ahora empieza lo divertidillo. :D
Entro en clase junto con Irgala y sonrío al ver a Aida charlando con Diana. La chica tiene mala fama en el colegio...pero tal vez por eso me caiga bien, porque no parece necesitar ser de otra forma para agradar a nadie.
Aunque claro, ser chica y estar buena seguro que le ayuda.
De nuevo en el sitio en clase, no puedo evitar hacer una mueca al ver lo cerca que estamos del profesor de turno.
Me giro hacia Irgala y le sonrío señalando la puerta.
Al menos estamos cerca para salir pitando de aquí, verdad?.
Entré otra vez a la puñetera clase y me volví a sentar en mi silla. Por lo menos ya había pasado una hora y quedaba menos para salir zumbando de aquí a la libertad. ¿Qué le ven de interesante pasar cinco o seis horas escuchando a unos capullos que te quieren explicar cosas que en tu vida utilizarás?
¿A quién le interesa que hizo Napoleon o cual es la capital de Zaire?
Todas gilipolleces.
Tendrían que enseñar a sobrevivir en la calle o con poco dinero, eso si sería algo interesante de escuchar.
Apoyé el culo en la silla y me crucé de brazos, a esperar qué capullo aparecería por esa puerta para brindarnos su sabiduría.
Irgala asiente.
-Tranquilo Ander, no te quemaras si hay un incendio, ademas...tosatado no debes estar bien
Sonrie ante su comentario, pero sigue con el dibujo que habia empezado en el patio, le habia dado tiempo a terminar buena parte de él, solo quedaria terminar algunas sombras que otras.
-¿Te gusta Ander? - dijo mientras lo levantaba de la mesa y se lo enseñaba.
En los ultimos dibujos de Irgala, denotaba la oscuridad que se cernia en su corazon, y las ansias de libertad de la joven, Anderya sabia escenificar todos y cada uno de los dibujos de Irgala, ya habian sido muchos años juntos, muchos dibujos explicados, muchos dibujos adivinados por lo ya aprendido.
Luego lo mira por encima del papel.
-Vendras pues con mi hermano y mi tia al cementerio?
Ésto ultimo lo dijo con un susurro, para que nadie se enterase de lo dicho, aunque ya lo sabian tanto Aida, que lo sabia de años anteriores, como David C. que los habia escuchado anteriormente. Pero poco le importaba, solo queria afianzar el compromiso de Ander, si lo habia, y si no iba, tampoco iba a ser ningun problema, ni se enfadaria con él.
Miro el dibujo y se que me hace mas tiempo para opinar de el. De todas maneras me parece que como el resto es una especie de grito pidiendo algo...aunque nunca se muy bien que podría ofrecerle yo.
Claro...bajo la voz a la par que la suya. Después de clase iré a casa a cambiarme y luego pasare en taxi a recogeros a vosotros...de acuerdo?.
Estoy deseando que el día termine para que Irgala recupere su autentica personalidad, que suele ser algo mas alegre. Algo al menos.
Ejem...no puedo ver el dibujo. Lo siento.
Editado:No me sale nada en el enlace...igual es culpa mía. No me odies...
Re-editado: Creo que soy yo...no me va ninguno de ellos ni buscándolo a parte. Sorry. Pero seguro que el dibujo era muy chulo xD
Irgala sonrie y asiente.
-Gracias, la verdad es que seria algo trsite con solo mi tia y mi hermano, ya sabes
Sonrie mientras vuelve a dejar el dibujo sobre la mesa, detallandole los ultimos retoques. Soplando, para quitar la mina que sobraba ya que si pasaba la mano quedaria un restregon que estropearia todo el dibujo por completo, y le gustaba demasiado como para desperdiciarlo.