Partida Rol por web

El engendro con cuernos corre hacia Braun haciendo que el suelo tiemble bajo sus pies. Cuando quiere darse cuenta lo tiene encima y recibe una fuerte cornada que lo estampa contra una gran roca. Tras unos segundos en los que se le ha nublado la vista se da cuenta de que está ileso, por lo que ha tenido mucha suerte. De lo que no está tan seguro es de que ese estado vaya a durar mucho más, pues el demonio está justo en frente, y dirige su puño hacia Braun. Si acertaba no solo pulverizaría la roca que tenía el joven muchacho detrás...

De repente una maraña de árboles agarra el brazo del demonio justo a tiempo. Parece que esta vez la magia que emana Alura a través de los árboles está evitando que el monstruo se "evapore" y se deshaga de sus ataduras. Una segunda rama agarra una de sus piernas, y así hasta que el demonio queda totalmente inmovilizado.

Éste comienza a sacudir bruscamente su cuerpo, a la vez que grita, pero no consigue zafarse.

Maggadon intenta materializar una bola de fuego y la lanza contra el demonio, haciendo que las llamas devoren parte de su oscuro cuerpo. El Demonio grita más y más, pero esta vez de dolor.

Corréis desesperadamente hacia el poblado. Una multitud se queda mirándote y se paraliza cuando ve el terror en tu rostro. Sus expresiones pedían algún tipo de explicación por vuestro cambio corporal, así como por vuestras prisas y el color barro de vuestra piel y ropajes. Faltaban pocos centímetros para que el sol desapareciera por el horizonte...

"Chicos, el hada de la esperanza nos ha dado estos cuerpos para poder llegar antes. Cuerpos más fuertes para enfrentarnos a lo que está por venir"

"Y nos dijo que debeis de beber de estos frascos antes de que se ponga el sol ¡O vosotros desaparecereis tambien, como le pasó a pandora, la foca!"

Mishra sabe que ella no es la más carismática ni convincente, pero sabe que hay alguien en quien si puede confiar para estas cosas:
Su hermana, Sasha. Ella es un hacha en el trato con las personas, y es capaz de convencer a un cojo de que necesita zapatos.

"Sasha, hermana mia, diselo tu! ¡Es importante, apenas hay tiempo!"

Mishra intentaba desesperadamente convencer a los demás niños y niñas de beber de la sabia recolectada de la nifa-hada-coso-árbol o lo que sea.

Golpeé mi frente con la palma de mi mano, era tan elocuente como un muñeco de paja. ¿Qué intentaba? ¿Crear caos?

-Esto- grité -¡que además dijo que el último en beber sería un bebé llorón!-.

Añadí de esa forma un condimento a las palabras de la arquera, casi no tenía aliento pese al cuerpo nuevo, inhalé profundamente -¡Vamos, venga, que hay muy poco y hasta sabe bien!- concluí entre risas con mi respiración aun agitada.

Alura comenzó a sudar por el esfuerzo de mantener al demonio atado, el miedo a no poder sujetarlo y que atacara a Braun comenzó a hacer mella en su voluntad y al final perdió la concentración.

El minotauro se retorcía cada vez con más violencia, de tal forma que arrancó uno de los árboles de cuajo, aunque el otro aún lo sostenía. La magia de Alura no aguantaría mucho más... había que buscar una solución.

Elsa preparaba una nueva flecha mientras preguntaba a Braum.- ¿Qué hacemos?.- estaba realmente preocupada, viendo la violencia que tenía el monstruo.

- Ya sé. Esto debe de ser un demonio. Si no me equivoco hay una chica que tiene el jarrón de donde salieron todos estos males. No lo derrotaremos jamás si no lo devolvemos donde pertenece ¿Cómo se llamaba?.- Miraba a Braum y a Alura esperando que recordaran.

Sasha Grey añadió:

- Vamos chicos, ¿No querréis desaparecer?.- Y puso su boca para recibir el elixir ella primero.

Entonces los demás chicos comenzaron a hacer fila para tomar la extraña poción, mientras los cambios se hacían notables en Sasha. Nix se dio cuenta de que había dos jóvenes que no podían beber el elixir, pues ya no quedaba más...

Con un tono que pretende ser neutro para no preocuparla mas le digo a Elsa. – Intentaré retenerlo el maximo tiempo salvados. – Girándome un instante mirándola a los ojos. – Me ha gustado mucho volver a verte, salvate.

Me quedo sorprendido por las palabras de Maggadon cuando creía que estaba preparando un conjuro.

Sin dejar de vigilar al monstruo aferrando mi lanza le respondo. – ¿Te refieres a Pandora?

- Efectivamente, no me salía el nombre de esa bastarda.- Dijo naturalmente sin reparar en los insultos que profería, pues nunca había sido de su agrado.

- Eso significa que...- Elsa parecía preocuparse por lo que fuera a ocurrirle a Braum.- Resistiré. No voy a huir...

Apuntó y disparó al demonio con la intención de acabar con él de una vez por todas.

Maggadon vio como la ranger sacaba ira desde sus entrañas y se unió al ataque. Levantó sus manos y unas ascuas comenzaron a salir del suelo hacia el monstruo.

"Wow Sasha! ¡A ti te ha sentado de lujo, Ahora si que parwces fuerte!" Dice Mishra.

Aunque por dentro esta en plan "Fastidiate! ¡Si a mi se me pone el pecho y el culo gordo ¡A ti también! "

Luego se fija en los dos chicos a los que no les llega la pocion

"Tranquilos. Maggadón el Cabrón trae mas frascps. Simplemente me aligeré corriendo, para que enpezaseis a beber antes" dice guiñandoles un ojo "Enseguida estara aqui, Es Maggadón el Cabrón"

Mishra calla lo de que esten luchando contra el monstruo, porque no quiere asustar mas a esos niños

"Vamos Alura..." piensa para si

Recordando lo que les acababa de pasara a sus compañeros la sanadora intentó reblandecer el suelo a los pies del demonio para que se hundiera como si fueran arenas movedizas.

- Si alguno de nosotros se va moriremos todos.

Gracias a su enorme fuerza de voluntad logra no morir de un infarto tras ver a todos en la aldea cambiar de forma, tamaño y... Proporciones.

Sacude la cabeza y toma a Mishra del hombro -No hay timepo Mish, hay que llevarlos donde está el resto-. Tomé a uno de los infantes y lo colgué en mi espalda -Sujétate- le dije -...De mis hombros, por favor- añadí luego y corrí hacia donde estaban nuestros compañeros.

Mishra le hace caso a la pícara, y coge a Dick el Pequeño, el más menudillo de la aldea, y se lo carga sobre los hombros

"¿Sabes? Una ventaja cuando te tomes el licor superpoderoso es que ¡Con las piernas largas, corres más!" dice corriendo a grandes zancadas. Lo que Mishra no se acababa de esperar era que cansase tanto. Al fin y al cabo, esta moviendo un cuerpo el doble de pesado.

Mishra empieza a gemir por el camino.

El demonio se soltó de sus ataduras finalmente, arrancando de cuajo uno de los árboles, pero la flecha de Elsa fue certera, aunque no podemos decir lo mismo del hechizo de Maggadón, que no pudo conjurar por su falta de energía. De hecho se debilitó momentáneamente cayendo de rodillas. El demonio recibió la flecha en el centro de su cuerpo, y dio un fuerte quejido... para desaparecer como la bruma y volar hacia el cielo. Sabíais que no lo habíais derrotado, sino que era una retirada temporal. Quién sabe cuándo volvería a importunar de nuevo, pero hasta ese momento estaríais salvados.

Elsa miró a Braun.- ¡Vaya! Le he acertado...

En ese momento llegaron Mishra y Nix, ambas con un niño a la espalda cada una. En el lugar donde antes estaba el demonio se encontraba la pócima que necesitaban los dos, así que sin demorarse Nix cogió la poción y la suministró cuidadosamente a los jóvenes. A los pocos segundos sus cuerpos comenzaron a cambiar como ocurrió con el resto.

Los jóvenes habían logrado salvar la aldea, y habían derrotado a un demonio muy peligroso.

Los escasos rayos de sol finalmente se escondieron, dando lugar a la más absoluta oscuridad. 

Al llegar a la aldea Elsa fue bien recibida, pues fue conocida como la flecha certera que dio en el momento adecuado al monstruo para que se retirara. Incluso la más popular del lugar tuvo que comerse su orgullo y permitir su entrada en la ciudad, por lo que se puso muy contenta.

El hada de la esperanza recompensó a los jóvenes nombrándolos guardias dorados, un título distinguido que indicaba que ellos serían los nuevos protectores de su pueblo hasta la reincorporación de los mayores, si alguna vez lograban encontrarlos...

Un nuevo día renacía, y la joven aldea volvía a su normalidad, aunque algo diferente... ¡Eran adolescentes! en un futuro si no aparecían los mayores ellos mismos podrían acabar con la maldición que asolaba su zona.