Partida Rol por web

2. La ciudad de las cadenas

2.3 Encuentros y preguntas

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22/01/2015, 22:07
Hild Thorbjornsdöttir

La völva frunció el ceño ante la actitud del juto, más que ayudarlos parecía que quería que todo saliera mal sino no llegaba a entender la indiscreción que a punto estuvo de cometer así como su urgencia por entablar una pelea esa noche que, con toda seguridad, sólo serviría para llamar la atención sobre ellos. Por fortuna, el nuevo talante que demostraba Jorunn había conseguido mantenerle a raya.

Siguió a sus compañeros hasta la taberna más cercana, y posiblemente la más asquerosa y maloliente de toda la isla. Cubriéndose la cabeza para que su llamativo pelo rojo no llamara demasiado la atención, se dedicó a observar con discreción a los que allí se encontraban.
 

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22/01/2015, 22:26
Hild Thorbjornsdöttir
Sólo para el director
- Tiradas (1)

Notas de juego

Hago una tirada de vigilancia, si la das por válida bien sino, como está sólo para ti, pasamos de ella.

9+5+2 = 16

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25/01/2015, 10:12
Director

Jorunn y Sigurd salieron tomaron una de las calles. Las nubes en el cielo empezaban a tomar tonos anaranjados. No tardaría en hacerse de noche. No sabían donde podía estar aquel mercader así que decidieron volver al puesto donde le habían visto por primera vez. Las calles seguían llenas de gente, escoria que iba de un lado a otro. Por suerte ahora pasaban mas desapercibidos que antes.

Notas de juego

Os dejo por si quereis rolear entre vosotros y limar asperezas de partidas anteriores, cuando me digais llegais al sitio.

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25/01/2015, 10:25
Director

No parece que haya ningún peligro ni nadie que se fije en vosotros especialmente... excepto un hombre. Un tipo bajito, con el pelo grasiento y nariz afilada parece no participar en la conversación de sus compañeros mientras os observa con curiosidad. No tendría por que significar nada ya que sois un grupo de daneses y jutos bastante llamativo pero igualmente le prestas atención.

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25/01/2015, 20:01
Hild Thorbjornsdöttir

Todos los presentes en aquella asquerosa posada estaban más dedicados a sus propios intereses que a la presencia de los daneses y los jutos. Eso era bueno para ellos, si no despertaban curiosidad menos les molestarían. Pero a ojos de la völva había un hombre que, al contario que el resto que estaba allí, se mantenía más atento al grupo que acababa de entrar que a lo que decían sus compañeros.

Hild, de forma disimulada, decidió no perder de vista a aquel hombre por si acaso pudiera resultar un problema para ellos. Mientras tanto, tendrían que hablar de lo que harían para rescatar a la princesa.

-Y bien... ¿Se os ocurre alguna idea? Porque a mí me parece que todas conllevan un riesgo demasiado enorme.

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26/01/2015, 12:28
Jorunn Hrolfdöttir

Las sombras que dibujaba el sol poniente se iban alargando en la Ciudad de las Cadenas, mientras, al no ver al Esclavista tras la esquina por la que se perdió, decidimos volver a su puesto, en el mercado. Toda suerte de escoria se mueve de un lugar a otro aún a esas horas, previas al anochecer, así que, siendo sólo dos, no nos cuesta mimetizarnos con el entorno, de cara a no llamar la atención.

Durante el camino, echo miradas furtivas a Sigurd, preocupada por el estado de mutismo en el que se encuentra: - Se estará arrepintiendo de su decisión de permanecer al lado de su tribu, a mi lado...??, voy pensando, con una punzada de culpa recordándome hechos pasados, por mi parte, que ocasionaron aquellas desavenencias:

- Sigurd, estas bien??, le susurro, posando mi mano sobre su brazo, mientras me paro ante un puesto de fruta, en el que una desdentada anda contando sus ganancias del día, mientras, no se me escapa el hecho, mantiene bajo la falda, un cuchillo de grandes dimensiones.

- Te noto algo distante, y estoy preocupada. Se que he sido la causa de tu desgracia últimamente, especialmente en la búsqueda de la Bruja Blanca, y me siento culpable. Agradezco enormemente que te quedaras con nosotros, pese a lo que ocurrió, y te prometo que la vieja Jorunn quedo enterrada con esa misión..., digo, sintiéndome bastante torpe, y cogiendo una bocanada de aire. No pudiendo mirar a los ojos del Ulfhednar, cojo una manzana, y le lanzo una moneda a la tenderá. Le doy un bocado y, nerviosa, espero su respuesta, escudriñando los alrededores, como si una manada de lobos fuera a echarse encima nuestra de un momento a otro.

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26/01/2015, 14:51
Yngwe Gilsursson

Yngwe se acercó a la barra golpeando la madera con la palma de su mano- ¡Una jarra de cerveza! - Yngwe dió dos tragos largos antes de darse la vuelta y poder disfrutar del resto de la jarra mientras sus compañeros se dedicaban a husmear por allí, y buscó con la mirada si por aquella taberna venían algunos de esos guardas que vigilaban las celdas, tal vez tuvieran algun distintivo o uniforme, brazalete o arma en particular.

Jorunn y Sigurd buscaban al viejo... tardaban....

Hild y el resto se mantenían en grupo, mirando a su alrededor con desconfianza y el tipo al lado de Yngwe gruñó borracho - Eh perdona - Dijo el joven vikingo riendo y alzando una mano, devolviendo al extraño a sus quehaceres con una moza de piel más bien tostada y pelo negro y rizado

Notas de juego

No me sale en el manual el precio de los esclavos xD
 

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26/01/2015, 17:50
Sigurd Ivarsson

Sigurd no sabía cómo comportarse con Jorunn. En el viaje a la isla parecía que se había centrado, sobre todo tras su dirección en la búsqueda de la Dama. Al ulfhednar aún le entraban escalofríos al recordar a la bruja, y también su encuentro con ella.

-Estoy bien. -Contestó, aunque no al instante, pues no se esperaba que Jorunn se dirigiera a él. Había pensado que el camino sería una incomodidad llena de silencio y tirantez-. Dicen de ti más tus últimos actos que tus palabras...

En la mente del ulfhednar eso era un elogio, aunque no sabía cómo se lo tomaría la doncella.

-Lo que quiero decir, es que no estás siendo una joven imprudente esta vez. Además, mi reacción fue... desproporcionada. Mi orgullo se sobrepuso a la razón en la montaña...

De sobra era conocida la sangre caliente de Sigurd, pero eso no lo excusaba. Aún así dudaba que lo hubiera hecho sin tener el plan alternativo que tenía en ese momento. Aunque el ulfhednar aún seguía sin entender ciertas acciones de Jorunn, comosu reacción ante la Dama, prefirió no preguntar en ese momento. Las cosas estaban asentandose donde debían.

-Y con Hild... ¿cómo estás?

Al ulfhednar le había parecido percibir la tirantez que había tenido los últimos días con la völva, incluso echándole en cara el encuentro con Strigandi de forma más o menos velada, cuando no había en ello nada malo. Cosa extraña teniendo en cuenta su gran amistad, de la cual Sigurd siempre había sido consciente. Esperaba que sólo fueran cosas de... mujeres.

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26/01/2015, 22:25
Thorgrim Olavsson

Ni idea. Ya sabes que pensar no es lo de Thorgrim.-Contesta a la volva antes de dirigirse a la barra-¡Qué sea otra jarra por aquí!- Dijo una vez allí. En cuanto la tuvo en sus manos se la bebió de un único trago que fue acompañado de un sonoro eructo.- ¡OTRA!

Ya metido en faena le preguntó al hombre que estaba a su lado, bebiendo en silencio.- ¿Qué se prepara una boda real?- Cuando captó su atención y la de algunos otros curiosos se explicó.- En ninguna de mis visitas a esta hermosa ciudad - levantó su jarra acompañando esas dos palabras.- me había cruzado con tanto guardia.

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27/01/2015, 00:22
Klemet

Andando entre la gente me acerco a la barra donde no sin esfuerzo consigo una buena jarra de cerveza, o mas bien algo parecido a la cerveza, desde donde estoy observo todo lo que ese turbio lugar me puede ofrecer, algún comentario sobre esclavos, algún guardia que hable demasiado, a la vez que no pierdo de vista a mis compañeros.

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27/01/2015, 19:09
Jorunn Hrolfdöttir

El tiempo que tardó Sigurd en responder solo podía escuchar el latir de mi corazón: Boom... Boom... Boom... Pese a que ya tuviera claro que, lo que hubiese sentido por el ulfhednar, quedó enterrado en el corazón de hielo de la Montaña de la Bruja... Bueno, realmente en el viaje de vuelta, en el snekjar de Osvif, cuando el guerrero eligió, aun podía sentir la tirantez de su relación con él. Y no era solo porque el guerrero se habia separado de ella, por sus acciones inconscientes y mal medidas, no... También, tenia que reconocerlo, estaba el hecho de que se habia sentido traicionada, al verle con la Volvä...

Muevo la cabeza, desechando esa idea: - Eso lo pensaría la "vieja" Jorunn. No debo caer en los mismos errores, me repito, con un inicio de sonrisa: Debo dejar de comportarme como una niña capriochosa, si quiero servir bien a mi padre y al Clan, y que aquellos a mi cargo, mis amigos y compañeros, me respeten por lo que represento, y me quieran por lo que soy... En el fondo, Sigurd casi la había hecho un favor, pues, aunque su corazón pudiese haber sentido ciertas cosas, su parte racional le recordaba, una y otra vez, cual era su papel en todo esto: tendría que casarse con algún Harl, o su descendencia, que afianzase la posición de su Clan.

De pronto me doy cuenta de que el ulfhednar me ha contestado!! Me giro hacia él, absorbiendo sus palabras. En un principio, mi corazón se acelera, pensando que es un reproche, pero su cara dice lo contrario, aunque no me mira a los ojos. Me vuelvo a girar hacia la tendera, que me mira extrañada, como diciendo: - Ehh!! Que haces aquí?? Circula!! Así que, con un lento caminar, le hago un gesto a Sigurd para que me siga, diciendole, con una sonrisa: Esa tendera empezaba a preguntarse si le ibamos a quitar las ganacias del dia..., orientado, sobre todo, a quitarle tensión a la conversación, para que, si aun quedan problemas entre los dos, se queden en esta sucia plaza.

- Bueno, aunque no se trate de buscar culpables, creo que te forcé en exceso. Tu juramento te obligaba a protegerme, y, sencillamente, no te dejé hacerlo, poniendome en peligro a mi, y al resto, y casi empujándote a romperlo, en mas de una ocasión, le reconozco, simple, y llanamente. Sorprendentemente, aunque sé que es lo que debo decir, me sorprendo de que no me resulte dificil. No con él. Además, si tuviesemos que competir a orgullo, te aseguro que te lo pondría pero que muy dificil!!, le sonrío sincera.

Cuando habla de Hild, algo dentro de mi, vuelve a doler, como si, allí tambien, y sin estar, le pudiese quitar su momento: - Jorunn, eres tozuda, eh??, se reprendió de nuevo, como si tuviese que ponerse de supervisora, evitando que la niña volviese a ponerse al mando: - Sí, con ella tambien tengo una conversación pendiente... Espero que podamos irnos pronto de aquí, y, tranquilamente, de vuelta, poder charlar con ella... La echo de menos..., le reconoció, con un punto de tristeza en la voz.

Después, dando otro mordisco a la manzana, se la pasó al ulfhednar, diciendo: - Sigurd, te agradezco tus palabras, y que decidieses permanecer a nuestro lado, a mi lado, en esta misión. No me está resultando fácil sobreponerme al fracaso de mis antiguas acciones, y, las mas de las veces, necesito saber que tengo vuestro respaldo en lo que hago, acabo, mirándole serenamente a los ojos.

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28/01/2015, 20:21
Sigurd Ivarsson

Sigurd miró sorprendido a la joven hija del jarl, pregutándose qué le habían dado para cambiar de esa forma. Le sorprendió el hecho de que ahora viera como le había forzado, al igual que los errores y locuras que había cometido. Si algo había sacado al ulfednar de sus casillas, más que los errores de la joven, había sido su incapacidad para reconocerlos, y su increíble habilidad para justificarse.

Le dirigió una mirada intensa, evaluando las palabras de Jorunn, y al final devolvió la sonrisa.

-Me alegro de escuchar esas palabras. -Confesó el ulfhednar-. Has madurado. -Sentenció con gran vehemencia.

Aunque el guerrero aún se preguntaba qué, o quién, le había impulsado a hacerlo. Prefirió no preguntar ni indagar en algo que, tal vez, no hiciera gracia a Jorunn. Sigurd no sabía cómo de frágil era el buen ambiente que ahora se respiraba entre ellos.

-Me temo que con Hild no puedo ayudarte, tú la conoces mejor y tienes más confianza. Sea como sea, espero que se solucione, se me haría raro no veros juntas.

Cogió la manzana que le tendía y le dio un bocado, volviéndose hacia ella de nuevo cuando confesó que necesitaba nuestro respaldo.

-Yo tampoco soy ajeno al fracaso, fracasé como hirdman ¿o no? -Era una gran verdad, alguien con capacidades de guerrero de Odín jamás sería un buen hirdman-. No necesitas siempre el respaldo de todo el mundo, pero sí usar la cabeza. Aunque si quieres mi opinión, la preocupación del jarl le nubló la mente. No tendría que haberte puesto bajo mi protección y, a la vez, haberte dado el mando por completo. Si sabe que estás capacitada para el mando, debería haber dejado bajo tu responsabilidad tu seguridad. Una cosa es proporcionar escolta, otra muy distinta, una niñera. Pero yo no era quién para cuestionar sus decisiones, y tampoco lo soy, sólo es una opinión que era mejor no expresar en su momento. Tu padre es un buen hombre, y mejor líder, es comprensible no obstante que el corazón traicionara la mente, no es algo que se pueda reprochar. Ni por tu parte, ni mucho menos por la mía.

Por primera vez, Sigurd, manifestó cómo se había sentido durante la misión de la Dama. Tal como había dicho, había pensado que era una niñera.

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29/01/2015, 13:53
Jorunn Hrolfdöttir

Asiento lentamente, y agradecida, a las palabras de Sigurd, dichas desde el corazón, y pese al poso de amargura que aún tienen al final, me parece ver que esta conversación no se podía haber tenido antes, no sin un extra de tensión nada deseable.

Cuando habla de mi padre, un pulso de añoranza vibra en mi pecho, y le digo: - Puede ser que el hecho de mandar a su heredera a una misión le nublara el juicio, pues, pese a ser un buen líder, como dices, también es padre, y trató de sobreprotegerme... Pero bueno, la suerte es poder hablar del pasado, y, salvo algunos flecos, digo, moviendo la mano parcialmente mutilada,  lo que nos queda es la experiencia de lo bueno y de lo malo, no??, le sonrió de nuevo.

En esas, vamos llegando a la plazoleta donde estaba la tienda del viejo, así que, mudando el semblante a uno más pétreo, me calo un poco mejor la capucha, y le susurro al Guerrero de Odhin:

- Ahí delante está el puesto del viejo: Por su bien, y por el nuestro, espero que no quiera sacar más tajada de nosotros de lo que le vamos a pagar por la información..., tras lo que espero su respuesta con interés, antes de buscar con la mirada al esclavista.

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30/01/2015, 09:40
Guldeif Guldeifsson

Ahi estaba el viejo, como si nada hubiese pasado, entretenido colocando la mercancia de su puesto.

-Ah hola, ¿venís a por alguna tela? ¿Quizás a por un buen brazalete?-les respondió vivaracho mirándoles con el ojo bueno.

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30/01/2015, 09:42
Director

-¿Boda? ¿Que boda?-le respondió al berserker aquel tipo tras dar un trago- aquí hay siempre lo mismo, hay mucha gente armada por que por si no te has dado cuenta esto es Hirsk y no es buena idea andar desarmado por aquí-le respondió para luego dirigirse a su bebida de nuevo dando por terminada la conversación.

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30/01/2015, 09:44
Director

No veis que haya guardias como tal pero si que casi todos los hombres van armados. Hasta asegurarías que algunas mujeres llevaban algún tipo de cuchillo bajo la ropa para protegerse. Lo que si notais es a un tipo bajito, con el pelo grasiento y nariz afilada parece no participar en la conversación de sus compañeros mientras os observa con curiosidad. No tendría por que significar nada ya que sois un grupo de daneses y Jutos bastante llamativo pero igualmente le prestáis atención.

Os dais cuenta por la forma de mirarle de reojo que Hild ya ha notado su presencia.

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30/01/2015, 09:47
Juren

-Será dificil llegar hasta esos esclavos-respondió a la Völva- podríamos crear una distracción y que alguno se acercara  para comprobar si la princesa está allí. Pero sería un suicidio.

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30/01/2015, 11:18
Jorunn Hrolfdöttir

Cuando nos vamos acercando y el tal Guldeifsson nos ve con el ojo sano, con discreccion, para que no me vea el viejo, le susurro a Sigurd:

- No pierdas ojo de los alrededores, aunque supongo que esperaría a cobrar su parte, esta es la primera ocasión de traicionarnos que tiene, pues sabía que vendriamos...

- Ese pañuelo de ahí estará bien, buen señor!!, digo, señalando una tela sin importancia que pueda tener el esclavista en su puesto, sintiéndome segura con la protección que me brinda el ulfhednar.

- Supongo que con esto, nada saldrá de aquí, verdad??, le pregunto, obviamente con segundas, haciendo un gesto como si me fuese a sonar las narices. Porque el dinero que pague, quiero saber que está bien invertido..., acabo con una sonrisa que, a ojos de aquellos avezados, tiene ciertas similitudes con la que pudiera ponerle un lobo a una presa.

Cuando me da el pañuelo, cojo una de las monedas de plata que ya tenía separada para darle y se la acerco, mientras, con la otra mano, en la que tengo el trapo con el dinero restante por sus servicios, la coloco sobre las suyas, agarrandole durante un momento, que aprovecho para susurrarle, sin cambiar la sonrisa de lobo: - Aprovecha tu premio, hijo de Guldeiff, y si, en algun momento se te pasa por la cabeza traicionarnos, espero que tu buen juicio no se nuble. Recuerda, no nos conoces, y, por supuesto: nosotros no te conoceremos a tí..., haciendo hincapie en esta ultima frase, esperando que el viejo lo sepa entender.

Tras eso, me separo, y con cara cándida le digo: - Muchas gracias, buen señor, mis catarros están ahora en buenas manos!!, tras lo que, dandome la vuelta, me alejo del puesto del viejo, observando aquí y allá, lo que ofrecen los de alrededor. No me demoro mas de un par de minutos, lo justo para no levantar sospechas, tras lo que haciendo un gesto a Sigurd, echo a andar calle arriba, de camino a la taberna de mala muerte donde nos esperan los demás. Tras una centena de metros, me acerco ya al ulfhednar, diciendole:

- Bueno, ya solo queda esperar a ver qué nos ofreceran las nornas esta noche. Espero que el viejo se olvide de nosotros. Creo haber sido convincente..., pienso, desechando con la cabeza oscuros pensamientos sobre traiciones.

- Ahora, vayamos con los demás, de repente tengo la boca seca como un bacalao en salazon!!, le digo, guiñandole el ojo, con una sonrisa.

Notas de juego

No se si estará bien, mal o regular, pero al viejo le doy 2 onzas de plata (20 monedas de plata), que he visto que es el equivalente a una vaca lechera, una casa pequeña, un taller... Espero no haber hecho el "primo", o que, al menos, no nos delate!! xDD

Por cierto, dado que soy de ciencias, no se si los vikingos salanozaban el pescado, así que el simil que hecho, igual está fuera de época!!! Jajajaja!!!

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31/01/2015, 23:54
Guldeif Guldeifsson

-Muchas gracias, señora-dijo el hombre guardando rápidamente las piezas de plata en su zurrón- Se verá como una princesa con ello-dijo cortesmente sin responder a lo que le había dicho la mujer. Desde luego disimulaba muy bien y no parecía tener ningún interés en denunciarlos al señor de Hirsk ni a ningún otro. 

Notas de juego

Lo del pescado sazonado te lo puede decir sigurd que lo sabrá mejor que yo. Y si habeis hecho un poco el primo(nadie paga una casa por información) XD

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02/02/2015, 17:34
Sigurd Ivarsson

El ulfhednar se mantuvo vigilante, como Jorunn había pedido, meintras la noble hacía el intercambio con el comerciante.

Cuando terminaron los negocios Sigurd se sorprendió de que Jorunn diera todo lo que contenía la bolsa.

-¿No crees que has sido demasiado... generosa? -Preguntó, aunque a lo mejor eso para Jorunn era calderilla, y seguramente lo fuera por quien era su padre. En cambio, a Sigurd, todo ese dinero le habría conseguido muchísimas alegrías.

Notas de juego

Del pescado.... poca idea tengo, tendría que mirarlo aunque dudo que encontrase algo. XD

En cuanto a la información, no, no sabía que estaba más cara que la vivienda XP Pero a lo mejor eso nos da un aliado (?) XD