Julián parece sorprendido por la actitud de sus compañeros. ¿Es que van a temer las palabras de una anciana que puede que no esté en sus cabales?. Con un ligero golpe ordena a su montura que comience a trotar hasta que coloca al caballo a la altura del otro Julián.
- Uuuuuh, Juliáaaaan, cuidaaaadoooo con la daaaamaaaaaa, cuidado con el aaaaaguaaaaaaa. - Seguidamente el joven estalla en carcajadas a la vez que palmea el hombro de su compañero. - Vamos chicos, ¿es que ahora vamos a tener miedo de cuentos de viejas? Temo más el acero de una espada que a un fantasma y su cadena.
De repente Leyna sale de su ensoñación y comienza a relatar:
Pues no sé yo que es peor mi querido amigo - comienza refiriendose a Julián - Pues a un acero todos lo podemos parar, pero al abrazo frío y gélido de la Dama de Stautenbag poco puede hacer tu espada o tu corage. Cuenta la historia de que por aquí cerca hubo una ver un gran señorío, con una gran hacienda en el centro a pocas leguas del río. La presidían unos terratenientes severos pero justos, los cuales no tenian herederos. Por más que lo intentaron, no conseguían concevir descendiente que heredase su hacienda. Desesperados decidieron recurrir a una bruja para que los ayudara a concevir y por unos cientos de monedas ésta accedió, dándoles además un consejo: "tened cuidado de vuestra hija, pues muchos la querrán por lo que posee y no por lo que su corazón albergue".
Leyna se queda mirando a sus compañeros por si acaso se están aburriendo. Para para coger algo de aire y continúa.
Pues parece ser que años despues, una facción de la familia del padre, dispuestos a heredar lo que casi era suyo, urdieron un plan para casar a la hija de su tío con uno de sus hijos, pero para que no se notara, lo idearon de tal manera que no supieran que era sobrino de ellos. Durante muchos meses la muchacha fue cortejada por éste sobrino a la orilla del río, quedando ésta enamorada de él. Por lo visto, consiguireron desposarse y vivir unos pocos de años felices. Hasta que la fatalidad y el engaño salieron a la luz de forma trágica. Los padres de la niña fieron asaltados en el camino y muertos a espada. Mientras la hija moría a manos de su esposo en ese mísmo río en el que la cortejó. Dicen que a los pocos meses de heredar de tan ignominiosa forma la hacienda, los varones que pasaban por el río iban muriendo de forma misteriosa. Todos fueron apareciendo ahogados en la orilla del río, siendo el primero el esposo asesino. Le fueron siguiendo los demás varones de la familia. De repente conmenzaron a sospechar de la mujer ahogada y parece ser que las mujeres de la familia la vieron seducir a los varones y como los ahogaba en la mísma orilla donde ella murió.Y como ésta no ha quedado satisfecha con la muerte de éstos, sigue embaucando varones a los que ahogar para que compartan su sino.
Leyna se queda un rato meditando y al poco responde con aire tenebroso.
Tened cuidado de la dama del río, pues no son pocos los que con ella se han ahogado...
Un segundo después se le ilumina la cara.
¡Pero como yo soy mujer, no tengo ese problema!
Mientras Leyna cuenta la leyenda, Julián sigue haciendo el tonto por detrás, pero cuando la Eisena dice su última frase, Julián se queda callado y con los ojos muy abiertos. Segundos después vuelve a sonreir, pero ya no está igual que antes...
¿Que te ha parecido la historia?
Niño, me dijiste que me ibas a contar algo acerca de Julián Aldaña por el echo de ser mujer.
¿No será que el tal Julianin no es sino Juliana? No sé, me da la sensación de que es una chica disfrazada de chico.
Ya me dirás.
Una tirada de Ingenio Df: 25
Y la historia, cojonuda me ha encantado. Como te lo curras cuando quieres.
Niño, no me pidas milagros, que solo tengo 2 dados de ingenio.
Y voy y me cago. 29 en total.
Tirada: 2d10
Motivo: Milagritos del master
Resultados: 10, 1
Tirada: 1d10
Motivo: repetir el 10
Resultado: 10
Tirada: 1d10
Motivo: repetir el 10 (again)
Resultado: 8
Yo estoy casado, y soy fiel. Mi mujer es la historia y estoy dedicado a ella. No tengo nada que temer de las seducciones de un hada. Aún así, mejor que evitemos las corrientes de agua.
Hay el lloros, solo tengo 2 dados.
Te diré, que cuando tu estas en esos días del mes; Julian también esta igual de alterado. Tus sospechas están mas que acertadas.
Amigo Enrique, no pongo en duda tu honestidad y tu disciplina a la hora de soportar las tentaciones de la vida. Pero con lo sobrenatural no digas que no lo temes y que tienes fuerza, pues hasta los más puros sacerdotes han caido en las garras de ésta mujer.
Con todo yo estoy de acuerdo con vosotros, no tengo ganas de perder a nadie por el embrujo de un fantasma.
Acto seguido espolea a su caballo para que vaya más deprisa.
Enrique se queda un rato pensativo.
¿Sabes qué? Tienes razón, no se debe subestimar lo desconocido. Cuando dije lo que dije estaba pensando en las sirenas, resistí su embrujo cuando era más joven y arrogante, y lo volvería a resistir. Pero no tiene nada que ver, además he de confesarte que mi primer impulso fue de saltar por la borda y abrazarme a ellas, si no llega a ser por el capitán del barco, Ulises Montero, nunca hubiera reunido la fuerza de voluntad necesaria para resistir. Después de eso acabamos descubriendo el verdadero secreto de las sirenas, y viendo los monstruos carnívoros que son y nunca más funcionó su pantomima con ninguno de nosotros.
Lo siento, no pude resistirme a hacer la referencia XD.
Master, se me ocurre otra cosa que podemos meter en el hilo de Ambientación: Un pequeño bestiario como el del libro de jugador, o el del libro del narrador. O si quieres según nos vayamos encontrando con bichos los vamos añadiendo.
tras escuchar el relato de Leyna, y sabiendo que incluso los científicos más renombrados no lo saben todo y de las viejas eras quedan vestigios, ¿porque no van a quedar criaturas que escapen a nuestro entendimiento y que de forma inconsciente transformemos en leyendas y cuentos? aunque solo sea por prudencia y buen juicio, haríamos bien en acampar a resguardo y lo más lejos posible de cualquier fuente de agua, una vez aprovisionados.
"Aun que solo sea por prudencia deberíamos tener en cuenta la advertencia de la anciana "
- Entonces, llenemos bien de agua nuestro ojibe y que nuestras monturas se sacien correctamente para evitar el contacto con el lugar -
Enrique comienza a hablar con Leyna en voz susurrada. Lo suficientemente baja como para que sus compañeros, más alejados no oigan nada.
- Volviendo al tema de anoche... Aún me interesaría que realizaras un listado de las piezas que te faltan. Este tipo de artefactos son muy llamativos y tal vez algún otro historiador se haya topado con ellos. Ahora no, pero tal vez cuando todo esto acabe y pasemos por alguna ciudad apropiada, o cuando esté de vuelta en Castilla, pueda localizar algo.
En eso es en loo que llevo pensando todo éste tiempo. Creo que las piezas que faltan son pocas, peto, otro guantelete, casco y lo más fácil, las dos armas que faltan. La pistola y el mosquete, serán las más fáciles de encontrar ya que seguirán estando en uso por parte de alguien. El peto lo más seguro es que esté diseminado por piezas, y el guantelete igual.
Leyna parece entusiasmada al hablar de las piezas de la armadura. Pero sabe que no debe tener demasiadas esperanzas, el guantelete último que encontró le costó 5 años de busqueda y sobornos. Los demás serán más difíciles de encontrar.
De acuerdo. Trabajaré sobre ello. Necesitaré hacer dibujos y una pequeña descripción de alguna de las piezas, tal vez cuando lleguemos al barco. Después envíare una copia por mensaje y cuando vuelva a Castilla podré buscar la información.
Hace una pausa.
Es increible la entereza y la devoción de esta chica. No, de esta chica no, de esta mujer. No quiero que se haga falsas esperanzas... después añade:
Recuerda que es sólo una posibilidad, no tiene porque encontrarse nada, pero existe la opción de encontrar algo así, así que haré lo que pueda.
La oscuridad cae. La noche arropa a nuestros héroes, y el camino sigue sin ver luces al fondo. Se empieza a plantear la posibilidad de acampar. Las aves nocturnas, empiezan a llenar el ambiente con sus sonidos. Después de un recodo del camino, veis un claro, donde la noche podría ser tranquila.
- Bueno, inspeccionemos este claro que la suerte ha puesto en nuestro camino y veamos si realmente es un buen sitio para acampar. Y también deberíamos decidir cómo organizar las guardias que, doy por hecho, llevaremos a cabo.
Si no les importa a los presentes, me pido la primera guardia.
Leyna baja del caballo y comienza a desensillar el caballo para que esté más cómodo. Después busca ramas secas para empezar a hacer una fogata.
¿Alguien me echa una mano?
- Yo te ayudo. Y, de paso, haré la segunda guardia. Como siempre, ya sabes que puedes despertarme a la mínima: prefiero levantarme cien veces sin motivo que no hacerlo una vez que realmente tocaba.
Somos suficientes para hacer las guardias de dos en dos, así estaremos más seguros. Yo puedo hacer cualquiera de las guardias.