Partida Rol por web

Aguas Turbulentas - Sygnafylki

CAP 0 .- Partida de Gran Valor

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24/11/2014, 23:16
Odd "Haukinnsson"

Cuando la bersekr abandonó la estancia Odd comenzó a reir
- Que temperamento de mujer¡ ... no os preocupéis es su forma de decir que sí¡

Os mira a los dos

-¿También cuento con vosotros?

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24/11/2014, 23:44
Ottar Ulfson

Ottar escucha atentamente las palabras de Odd. Le extrañaba bastante la forma de actuar del Jarl, ¿retirarse? Entendería que quisiera morir en batalla reañizando una incursión, pero no retirarse. Ottar asiente a Odd mientras Wisna se va.

- Ciertamente Wisna tiene razón, no entiendo ese comportamiento. Pero si podemos ayudar en algo y pagar por los favores que hemos estado recibiendo pues contad conmigo. -

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25/11/2014, 03:25
Odd "Haukinnsson"

Por un momento Odd recapacita como si intentará recordar sus recientes palabras.

- Me temo que me mal interpretáis muchacho, Wisna da por sentado muchas cosas, no hablamos para nada de el fin de los días de mi padre, ni mucho menos, no es nuestra intención esa, al contrario ... a pesar de no ser el joven guerrero es muy capaz aun de hacer grandes cosas, y aun puede meter en serios apuros a la mayoría de los hirdman de este y otros clanes, es por eso por lo que quiere partir ... Nuestra intención es la de expandir el clan a otras tierras, lo que pasa que mi padre no se da cuenta de que además de experiencia para conseguir el propósito real, también es necesario juventud, se que muchos no tendrían reparos en dejar su semilla en las jovenes de cualquier tribu salvaje y llamarles prole, pero seguramente en seguida esa prole olvidaría de donde viene y quienes son sus aliados. ¿Entiendes ahora los propósitos reales? ...

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25/11/2014, 13:25
Ifrit Wodensdóttir

Andaba yo por un camino al borde del pequeño risco que daba al mar, volviendo a casa después de un duro día de trabajo, cuando me encontré con un grupo de comerciantes y diversas gentes de los caminos que se dirigía a la aldea. La tarde había caído ya y pronto llegaría la noche y la aldea aún estaba a un día de marcha. Uno de los comerciantes, al parecer el que llevaba la iniciativa, me paró para preguntarme, no sin un marcado acento, hacia dónde quedaba Hjelmeland.

-Vais en buena dirección, amigo -respondí- sin embargo la noche está cerca y los cuervos vuelan bajo; en el bosque los animales huyen ya en busca de refugio, temo que sea una noche fría y lluviosa ésta. ¿Tenéis algún lugar donde pasar la noche?

Al responderme el mercader que no, les ofrecí un techo en mis dominios. Mi cabaña se encontraba a menos distancia, situada en las afueras de las tierras del Jarl y, aunque era pequeña y, por supuesto, no cabían todos en ella, quizá Julie -mi esclava- y yo podríamos acomodarlos en el dique seco que tenía, un lugar techado y grande, donde ahora mismo no había ningún barco en construcción, por lo que era una especie de cobertizo donde cabrían todos sin problemas. 

Comencé así a guiarlos hacia el lugar y entonces vi que con ellos caminaba un joven scalda; lo reconocí por el instrumento que portaba y porque sus ropas eran algo diferentes de las de los otros comerciantes. Entonces me acerqué a él, siempre me habían gustado las historias y hacía tiempo que no escuchaba una buena. 

-Buen día amigo, mi nombre es Ifrit, ¿puedo saber el vuestro?

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25/11/2014, 13:37
Snorri Bragisson

Snorri es mi nombre, dama Ifrit. Y le doy las gracias en mi nombre y el de mis compañeros por su hospitalidad. Le respondí con una sonrisa.

Quizá unas canciones o algunas historias podrían pagar en parte la amabilidad que ha demostrado.

Se oyeron voces de aprobación de los mercaderes y sus escoltas, situados tras de mí.

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25/11/2014, 23:00
Rurik Anderssen

Solté una sonora carcajada cuando Wisna reaccionó de esa manera y salió de la habitación. Una mujer con carácter, como a mi me gustan. Volví a reir y mientras Ottar hablaba con Odd me serené

 

Al principio había pensado lo mismo que Wisna, pero su respuesta sería la misma, mas o menos honrosa pero la misma. ¿De verdad hace falta preguntar si voy a ir? Por supuesto que lo haré, mi padre me envió aquí bajo vuestra tutela para que mejorara, os debo mucho como para rechazar tu petición. Cuenta conmigo

Notas de juego

perdón por la tardanza pero ya estoy al 100%

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26/11/2014, 11:27
Ifrit Wodensdóttir

-Maravilloso -sonreí.

Los guié a través de un pequeño soto hasta la linde del bosque, allí entramos por el camino que se acercaba a mi casa cuando el sol ya se escondía tras las lejanas montañas. Poco después, los árboles se abrieron y dieron paso a mi último hogar: en un pequeño claro que daba a una cala a la orilla del mar, los árboles se abrían dando paso a dos estructuras de madera. Una de ellas, con una puerta bastante más grande, hacía las veces de dique seco, pero en aquellos momentos estaba vacío; la única nave que tenía en aquellos momentos estaba varada en la orilla, pues estaba reparando su quilla tras el duro viaje que le había dado el hijo del Jarl, pero para eso no necesitaba meterla en el dique cubierto. 

La otra estructura era mi cabaña, en su puerta Julie me esperaba, con una gran cesta llena de leña en los brazos. 

-Podéis acomodaros bajo el techado del dique -les dije a la compañía- temo que mi casa no es lo suficientemente grande para todos. Mientras, Julie y yo os prepararemos algo de cenar y os lo llevaremos dentro de un rato. Voy a dejar todo esto -dije mientras cogía la cesta que mi esclava llevaba en los brazos, viendo que, además de la leña, en ella había setas y algunas bayas y raíces (estaba aprendiendo muy rápido aquella joven, sonreí)-, Julie, enciéndeles la chimenea, les servirá para mantener el dique caliente y a sus inquilinos secos durante toda la noche.

La joven asintió, sonriendo, sus trenzas rubias agitándose tras de sí.

-Por aquí, por favor -dijo, abriendo el portón del cobertizo y dejándolos pasar. 

Poco después, Julie llegó a la cabaña donde yo estaba guardando las cosas. Me ayudó a preparar algo de comida; no teníamos suficiente como para hacerles un festín a tantos, pero sí bastante como para que al menos no pasaran hambre por la noche. Con algunas de las piezas de caza que yo llevaba, las setas y las bayas que ella había cogido y un poco de hidromiel, hubo suficiente para todos. 

Una hora después, llevamos todo al cobertizo y ambas nos sentamos junto a ellos, alrededor de la chimenea, a compartir la cena con nuestros invitados.

-¿Y bien, mi señor Snorri? -dije mientras le daba un bocado a la pata de uno de los conejos- ¿nos deleitaréis con alguna historia?

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26/11/2014, 18:20
Sörr Ülriksson

Sörr notó el empujón y se giró cabreado, pues ya bastante malo era que por su tamaño tuviera que tener cuidado con no embestir a todos como para que encima le chocaran a posta, pero cuando escuchó la voz de la mujer no pudo evitar esbozar una sonrisa. Si quería guerra, la tendría.

-Que tu padre yaciera con una osa no quiere decir todos hagan lo mismo, y apártate tú, que eres una cosa pequeña que puede eludir a los mayores -movió los hombros mientras salía un poco del puesto, preparándose para lo que se venía, pues esa mujer sabía pegar y encajar los golpes.

Ese día se estaba volviendo cada vez más divertido.

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26/11/2014, 18:31
Snorri Bragisson

La joven nos llevó hasta su cabaña y nos acomodó junto a ella, en un dique cubierto que posiblemente sirviese para reparar los botes bajo techo cuando estuvieran demasiado dañados o el tiempo fuera inclemente. Se marchó con su esclava y nosotros dejamos todas nuestras cosas en uno de los rincones. Yo saqué mi kraviklyra y comencé a calentar mientras musitaba estrofas por lo bajo. Mis compañeros que habían terminado de atar a los caballos y asegurar la carga poco a poco se unieron a mí y, mientras escuchaban cómo me perdía en los senderos de la música, todos notamos un tenue calor en ascenso pues la chimenea comenzaba a prender con fuerza.

Al cabo de un rato un delicioso olor acompañó a la tibieza de nuestros improvisados aunque cómodos aposentos y poco tiempo después nuestra anfitriona y su esclava se unieron a nosotros trayendo más viandas de las que nos imaginábamos. Era un festín frugal, pero un festín teniendo en cuenta los días que llevábamos en el camino. Además, el olor nos hacía la boca agua.

Se sentaron ambas a mi lado y me pidieron historias. Mis compañeros comenzaron a pedir algunas, pero les refrené.

En honor a nuestra anfitriona que sea ella la que decida qué tipo de historia desea. -Se oyeron algunos comentarios de decepción.- ...o al menos de la primera. ¿Y bien, mi querida dama ígnea, qué es lo que deseáis?

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26/11/2014, 21:02
Ifrit Wodensdóttir

Sonreí. Aquel scalda me caía bien.

-Bueno -respondí-, me gustan los viajes. ¿qué tal algo sobre algún explorador o algún viajero que se haya aventurado más allá de la brava mar?

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26/11/2014, 21:24
Snorri Bragisson

Comencé a tañir la kraviklyra con algunas notas sueltas para crear alguna atmósfera, una melodía bella y sencilla que flotaba junto a las palabras mientras mi voz, medio hablando, medio cantando, comenzaba a narrar. Sin darme cuenta de lo que hacía o de qué decía, me introduje en mi propia narración.

Ninguna de primera mano, pues al parecer o acaban todos en los salones de Ran o no están al alcance de un joven scalda como yo, pero mi maestro me ha contado sobre los lugares más allá de nuestros reinos. Lugares donde el sol brilla con tanta fuerza que es capaz de quemar como el fuego y la tierra es inhóspita y poco hospitalaria. Y otros con inmensos mares de hierba que te llega hasta casi cubrirte por completo, donde los ríos fluyen con calma y se escuchan sus murmullos tranquilos. Donde se yerguen ciudades enormes con grandes riquezas y en cuyos suelos crecen cosechas que superarían todo lo que los nuestros esperasen.

Donde existen pueblos y batallas, gloria y muerte. Donde van nuestros guerreros y vuelven con dos destinos: siendo felices con riquezas y esclavos, o siendo aún más felices en los salones del Valhalla junto a nuestro señor Odhinn, bebiendo hidromiel y escuchando a Bragi, el señor de todos los scaldas.

Cuentan que las gentes que habitan cada una de las tierras son como ellas mismas, duros y fieros con terrenos áridos y poco halagüeños y sencillos y débiles cuando es terreno demasiado amigable. Pero no hay que confiarse, pues aun esos hombres débiles siguen siendo hombres, y nos les impele el honor que poseen los nuestros y muchos de nuestros guerreros pagaron con sus vidas la confianza que mostraron.

Dicen que aún más allá hay tierras aún más ricas, pero ni los más valientes se atreven a molestar a los monstruos que habitan las profundidades de los océanos yendo hacia allí. Pero aquel que se atreva a aventurarse y consiga llegar obtendrá el mayor botín que pueda llegar a imaginar, además de ser honrado hasta por los Dioses por su valor.

Ese es uno de mis mayores sueños, el ser capaz de viajar, de luchar, de ver todo el mundo y poder contárselo a nuestros hermanos. De aprender historias de gentes que jamás se conocerían aquí de no ser por mí. De crear historias de gloria y sangre de mis compañeros y de mí mismo. De ser un scalda tal que cuando mi espíritu sea recogido, mi señor Bragi me sonría y me dé la enhorabuena, pues mis historias y mis canciones se conviertan en imperecederas.

Quiero oler los vientos cálidos e impregnados de aromas, quiero sentir las calmadas aguas a mi alrededor, quiero notar las exuberantes plantas junto a mí. Por eso soy un scalda errante, para obtener mi oportunidad.

Pueden ver que la historia que estoy contando no es una historia pasada, es una historia futura, que quedará grabada en los corazones a la espera de su conclusión, pues éste es tan sólo el comienzo y, si lo desea, señorita Wodensdóttir, estaré más que encantado en contarle la historia según se vaya formando...

Continué tocando algunas notas más mientras seguía tan embelesado como mi audiencia. Tras unos instantes desperté y con ello se rompió el hechizo. Todos comenzaron a parpadear, incluido yo, que no sabía cómo había ocurrido todo, aunque no iba a decirlo así porque sí.

Notas de juego

Como aclaración, al final he dicho señorita Wodensdóttir PRECISAMENTE porque aún no me lo habías dicho.

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27/11/2014, 10:43
Ifrit Wodensdóttir

Me había quedado embelesada con las palabras del joven scalda. Cuando terminó el hechizo, parpadeé un par de veces y lo miré fijamente.
-Me gustaría ser alguno de los que protagonizara esas vuestras futuras historias, señor scalda... -dije mientras avivaba un poco el fuego de la chimenea- , sin embargo hay algo por lo que siento mucha curiosidad... La historia de mi apellido es larga y extraña... Y cuando menos, poco conocida, ¿cómo es que lo conocéis, si aún no os lo ha dicho?

Notas de juego

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27/11/2014, 10:53
Snorri Bragisson

¿Vuestro apellido?

Repasé mentalmente lo que acababa de recitar, ni siquiera yo estaba seguro de qué había dicho.

¿Wodensdóttir? ¿así os llamáis, Ifrit Wodensdóttir?... Ehhh, conozco de dónde proviene. Wotan o Woden es otra de las formas a las que se le suele llamar al Padre de todos, Odhinn. Al igual que yo, poseéis el nombre de un dios en vuestro apellido. Por lo demás no estoy seguro de cuál es vuestra historia o la historia que acompaña a vuestro apellido. ¡Ah! y mi nombre completo es Snorri Bragisson, como muchos otros scaldas errantes.

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27/11/2014, 12:25
Ifrit Wodensdóttir

-Vaya... Conocéis muchos kenningars y nombres del de larga y blanca barba, veo que sois joven culto -sonreí- casualmente ese es mi apellido... ahora. Pero ¿por qué entonces me habéis llamado así? Tengo curiosidad

Notas de juego

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27/11/2014, 14:41
Snorri Bragisson

No lo sé... -me quedo mirando al suelo, avergonzado.- A decir verdad no sé exactamente qué fue lo que estuve contando. Creo que caí preso de mi propia historia. Mi maestro siempre dijo que yo estaba destinado para grandes cantares, que los Dioses me tenían reservado un gran destino. Por eso me enseñó bien.

Sonreí a Ifrit.

Digamos que no tengo ni idea de por qué dije su apellido, ni de por qué lo sabía. Y déjeme decirle que también admiro su cultura. Me imagino que es algún tipo de sabia mujer, y que es más que seguro que sea una mujer que se deba tener en consideración cuando hable. Por lo que estoy encantado de conocerla.

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28/11/2014, 00:32
Ottar Ulfson

Ottar se sienta y se rasca la barbilla meditando un instante.

- Entonces, ¿la idea es ir a conquistar tierras salvajes y que nosotros crezcamos ahí? - Siguió meditando, eso haría que se alejara de su hogar, pero el día que consiguiera volver, sería el hombre que querría enseñarle a su familia. - Bueno, si piensas que estamos a la altura de ayudar en esa conquista... -

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28/11/2014, 22:43
Wisna Finndöttir

-Por mucho que repitas lo de yacer con una osa, esta hija de osa no dejará arañazos en tu espalda, así que guárdate las ganas para alguna que se crea que todo lo tienes igual de grande- Hizo un gesto con la cabeza y la enorme testa de oso indicó la salida del asentamiento antes de salir corriendo- ¡Mueve el culo, abuela!- le gritó girando sobre sí misma usando la punta del pie como punto de apoyo.

Notas de juego

¿Te importa que esto lo hagamos narrativo, Sörr? Los combates de Yggdrassil son infumables por foro y prefiero evitarlos hasta que no me quede más remedio XD

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29/11/2014, 12:37
Director

Notas de juego

De hecho la idea es no hacer tiradas por combate, salvo que vaya la "vida" en ello y realmente aporte algo el "azar".

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30/11/2014, 17:02
Ifrit Wodensdóttir

-También estoy yo encantada de conoceros, joven Snorri, aquel que se nombra a sí mismo como un famoso scalda de antaño y cuyo apellido es el de un dios -sonreí ante el cumplido y respondí en consecuencia-. En verdad mujer culta no lo soy demasiado, más bien mujer de mundo diríase. Mi madre lo intentó pero las artes de mi padre más me atraían, la verdad... Sé que no es propio que una guardabosques cualquiera hable y un scalda tan dotado calle y escuche mas, si lo deseáis, puedo contaros la historia de mi apellido pues, como vos decís, a un dios hace también referencia.

En ese momento un ave entró volando en el cobertizo, oscura como el ébano. Revoloteó un poco por el techo hasta que yo silbé, entonces voló hasta mí y se posó en mi hombro. 

-Por cierto, os presento a Scad, mi cuervo. En realidad no es mío -aclaré- pero una vez en un camino le di unos granos de comida que llevaba encima y desde entonces me sigue allá donde voy. Ha sido mi mejor compañero de caminos desde entonces.

Cargando editor
30/11/2014, 17:10
Ifrit Wodensdóttir

En el día de mercado estaba yo, junto a mi esclava Julie, como casi siempre desde hacía tiempo ya, en la plaza central del pueblo, vendiendo mis mercancías; leña, setas, raíces, bayas, frutos y plantas comestibles, algo de miel y la caza de aquella semana.

Notas de juego

Básicamente por si alguien quiere venir a comprarme algo y profundizar en las relaciones sociales conmigo XD.