Partida Rol por web

Vuelves a entrar en un estado de medio sueño.

Estas mas que relajado y por tu mente comienzan a salir imagen, vea a Lia, en un barco tiene el mismo aspecto y Leo esta a su lado, luchan en una batalla y ves como en medio del Caos ella lo busca con la mirada, sus ojos son completamente negros y al ver a Leo el plano cambia.

El rubio esta en el suelo de rodilla agarrandose el pecho, por un corte en su camisa ves que de bajo hay como una marca tatuada. Cuando parece que va a perder la consciencia por el dolor tras de el aparece Devron que no sabes como lanza un golpe de algo que parece Viento a Lia.

El brazo metalico del medico brilla e tonos grises y Majin agara a la muchacha inconsciente para que no caiga al suelo, todo pasa muy deprisa, salen de ese barco corriendo, entrando en uno mas pequeño que hay al lado de los dos que estan combatiendo. En el un hombre joven los espera un hombre que conoces, no sabes de que pero conoces...

Sin mas despiertas de uevo por el ruido de la calle.

Ella duerme a tu lado.

Mierda de ruido...

¿Qué demonios está pasando?

Ryordan se levantó despacio de la cama, sacando el brazo de Lia de su pecho y con cuidado, se separó de ella para dirigirse a la ventana de la habitación.

No era cosa de él, pero el ruido, además de molesto, le había hecho entrar la curiosidad.

Y se acercó a la ventana... y corrió un poco las cortinas sólo para ver que sucedía.

Un cuchillo apareció de la nada en su mano, listo para todo.

Al fin y al cabo, era un guardaespaldas.

Te asomas a la ventana y no puedes evitar esbozar una sonrisa divertida, pues la imagen lo es y mucho.

Ves a un pequeño raterillo que tendra como unos seis años, lleva una pequeña daguita como si fuer auna espada en una funda de cuero, y ves que esta toreando a la guardia como quiere, parece que ha robado un apr de bolas.

El niño riendose se toma incluso la libertad de coger una manzana de un puesto.

¡Chist! ¡Chiiiiiiiiiiiiiiiist! Chistó Ryordan desde la ventana esperando que los de allí abajo se den la vuelta.

¡Eh! ¿Qué pasa, soldados? Dijo con un tono de voz serio a los guardias que rodeaban al niño.

¿Cuantos años tendrá? ¿Diez? ¿Doce?

Por lo menos tiene los cojones bien puestos.

Dejad al niño en paz... ¿qué ha robado? ¿Una manzana?

Lo soldados miran a la ventana, y ves que el muchacho subido en unas cajas sonriete mientras come su manzana tambien mira. La guardia simplemente te mira mal y deciden volver a por el pero ves que el chico se queda palido mirandote... Se le cae la manzana al suelo y ves como mira tu cara y luego tu pecho mientras se lleva la mano al "corazon"

La guardia llega y lo captura sin que el se resista si que deje de mirarte. En sus labios puedes leer como susurra un  - ¿Mama...? - Cuando te fijas ves que en tu pecho esta comenzando a salir la marca que viste en Leo, el "tatuaje"...

¿Qué demonios es eso? ¿Un tatuaje?

En ese momento la mente de Ryordan se dividió en dos mitades.

El chico del tatuaje... la chica de su cama...

Después de todo, el bandido tenía buen corazón... y esto le causaría algún que otro problema, seguro...

Se encaramó a la ventana, sólo vestido con unos pantalones blancos de algodón que le llegaban a la rodilla y saltó hacia abajo, cayendo muy cerca de dónde estaban los guardias y el niño.

¡Quietos todos! ¿Qué ha robado? ¿Una manzana? Yo me hago cargo de lo que haya robado. Yo lo pago, pero dejadlo libre, se viene conmigo.

Los guardias te miran de primeras atonitos y sin saber muy bien que decir, el chico no parta la mirada de tu pecho, de tu nueva marca mas bien, pero no dice nada, ni hace ademan de intentar soltarse.

- Hace dias que lo bucamos esa robando a todos los nobles del pueblo - Te dice uno de los guardias - Si usted tambien tiene algo pendiente comprelo mañana en la feria d elos esclavos. - Te dice echando a andar denuevo, arrastrando al muchacho.

Pero soldado, esto lo podemos arreglar entre nosotros, ¿no es así? Me imagino el papeleo y los demás problemas que puede traer un chico así, si pudieramos arreglar esto de alguna manera, todo se solucionaría mucho más fácil, ¿no lo cree? Dijo Ryordan a los guardias mientras hacia tintinear una moneda en su mano.

¿No pensáis como yo?

El guardia te mira y sonrie de medio lado - Bueno siempre podriamos vendertelo ahora a ti, pero la puja empezaria en unos 1000 jades... - comenta mirando a los otros guardias que sonrien.

El chico arquea una ceja.

¿Mil Jades? ¿Por este escuchimirriado enano? Juas, juas. ¿Me habéis visto cara de idiota o que? Mil Jades es lo que vale una princesa guapa y viciosa, esto... como mucho vale unos 200 Jades. Estáis queriendo jugar conmigo, ¿eh? Dijo Ryordan haciendose el importante.

Mirad, llevaoslo y perder el dinero. Quiero ver cuanto de esos "mil jades" os darán cuando se lo vendan.

Los guardias ponen cara de consecuencia y siguen andando, comentando que tu verias, que ellos no perdian nada.

Ves que el niño te mira de reojo mientras se deja llevar por los guardias.

La gente cuchillea a tu alrededor, depsues de todo eres un tio que ha saltado desde una ventana solo con unos pantalones y esta intentando sobornar a la guardia...

Chist. Chist. Chistó Ryordan a los Guardias.

Serán mil, entonces. Dadme al niño.

Después, buscó entre su "pantalón" improvisado las monedas necesarias y las hizo mover dentro de su mano.

Aquí tengo los mil. Ven conmigo, chaval.

Los guardias cogen el dinero sin decir nada, simplemente sonriendo y empujan al chico hacia ti - Todo tuyo, ahora es tu problema muchacho - Te dice uno levantando una mano a modo despedida y llendose todos por una de las calles.

El muchacho que ha chocado contra tu abdomen, se intenta aparta, manteniendose serio y recto, e intentando ver la ventana de donde habias salido tu - No hacia falta que pagaras por mi...  - Dice mirando la marca de tu pecho... - Te devolvere hasta el ultimo jade, lo juro.

La verdad, tío, el dinero no era mío, así que no necesito que me lo devuelvas. Ya pensaré en algo para justificar el gasto, ahora, ven conmigo que te quiero presentar a alguien. Le dijo Ryo mientras le daba una palmada en la cabeza y comenzaba a caminar hacia la posada.

Oye... ¿qué miras? Le dijo después al ver que no le sacaba la vista de encima. Y por cierto, mi nombre es Ryordan, ¿cual es el tuyo?

El chico se para en seco ante la puerta de la posada - ¿La quieres...? se que estas con Lia... Y... tambien se que...- Mira el tatuaje de tu pecho - Tambien se que habeis estado juntos... - Realmente es impresionante con el tono y la spalabras maduras con las que te habla. Pero esta vez no te mira en ningun momento y ves como aprieta sus manos - Yo soy Jake...

Hola Jake, yo soy Ryordan, otra vez. Le dijo el chico al niño con una sonrisa. La verdad es que tienes toda la razón, estoy con ella y sí, creo que la quiero lo bastante como para no querer que le suceda nada... pero tú... ¿cómo es que sabes que estoy con ella? ¿Nos has espiado?

Lo miró a los ojos y después, siguió con la mirada hacia donde miraba el niño.

¿Y por qué me miras tanto?

- Porque ese tatuaje es el que sale en los hombres que ella quiere...- susurra aun sin mirarte...- Mi padre tambien la conserva... Por eso se que has estado con ella...- aprieta mas sus pequeñas manos y da un par de pasos atras - Ayer fuy a buscar a mi madre... y la vi entrar en esta posada contigo... - tras decir esas palabras echa a correr hacia los callejones casi llorando.

Claramente quiere hacerse el hombre aun y no quiere que nadie lo vea llorar como un niño.

¡Eh! ¡Eh! ¡Ven aquí! ¡Enano, ven aquí! Gritó Ryordan mientras salía corriendo en busca del chico.

¡Eh! ¡Tío! ¡Que me has costado 1000 jades! ¡Ven aquí y explícate!

Aunque poco había que explicar.

Espero que esté bien el muchacho.

Lo pierdes de vista rapidamente, parece que el crio es tan escurridizo y rapido como Lia. Entonces caes en la cuenta, ella esta sola en la habitacion ¿Aun dormida? ¿Habra visto algo? ¿Al muchacho? Se supone que esta tarde os vais a la roca pero... las coasa estan un poco raras, cuando llegaste a ese barco no habia pensado en Lia de esa manera y mucho menos te habia salido un tatuaje de la nada.

Me detuve en seco y regresé corriendo a la posada.

¿El tatuaje? ¿Qué demonios significará eso?

Entre a la misma y subí rápido a la habitación, para abrir lentamente la puerta, esperándome encontrar a Lia aún dormida...