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Angeles: El ocaso del mundo

El Ocaso del Mundo: Elección

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03/11/2009, 16:26
Director

En capítulos anteriores 

 

Las pantallas gigantes que ocupan la fachada de la mayoría de los edificios, y que normalmente ocupan los anuncios, ahora esta ocupada por la figura de un hombre tapado con una capucha, solo se le ve la parte de la boca y el mentón de la cara.

-Ciudadanos de Ángeles!! Dios, ese gran Dios supremo que nos guía a todos, ha decidido... que limpiará esta ciudad de toda la corrupción que la mancha! 

La voz de ese hombre, un fanatico religioso de alguna secta, sin duda, llena las calles de ángeles de forma atronadora. Su mensaje lo escuchan tanto aquellos que están en la calle como los que están tranquilos en su casa o en la oficina.

-Ciudadanos de Ángeles!! Qué ocurrió en Nueva Europa!? Dios quiso castigar la corrupción de sus ciudades y envió un terremoto para destruirla! Y pretende hacer lo mismo aquí. Pero... tenéis una oportunidad!! Si, hermanos míos! Dios es compasivo! Si os unís a nosotros y limpiáis Ángeles junto a nosotros, nadie tendrá que sufrir la cólera de Dios!!

La imagen del hombre se ve substituida por muchas imágenes de desastres naturales acontecidos en los últimos meses.

-Tenéis un día para decidir del lado de quien estáis, sinó... todo será destruido.

Las pantallas vuelven a emitir la publicidad que tenían programada.

 

¤°.¸¸.·´¯`»«´¯`·.¸¸.°¤¤°.¸¸.·´¯`»«´¯`·.¸¸.°¤

 

La reacción de la gente después de ver el mensaje de ese "hombre de Dios" es bastante dispar. Por un lado están los que se han asustado y corren a sus casas para estar con sus familias y por otro lado están todos aquellos que les trae sin cuidado lo que diga una panda de fanáticos creyentes.

Pronto el cielo de Ángeles se ve perturbado por la presencia de helicópteros que parecen militares pero no tienen ningún distintivo. También todas las salidas de la ciudad, están cerradas. Nadie puede escapar de la ciudad. Los fanáticos religiosos entran armados en la ciudad con animo de disparar, aunque no lo hacen.

Ahora solo hay dos opciones: Luchar o Sucumbir. Qué haréis?

 

Notas de juego

Tenéis hasta el jueves para rolear este capítulo y quiero que decidáis que haréis con buenos argumentos y buen rol... 

El mensaje solo para mi...

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03/11/2009, 19:02
Dick
Sólo para el director

Dick miró la pantalla asomando la cabeza por la ventanilla, con el cigarrillo en la boca, el cual acababa de encenderse. Negó con la cabeza. Otro loco. ¿Morir? a quien le importa, todo era una mierda, el mundo era una mierda, lo unico por lo que vale vivir ya estaba perdido, ahora solo se luchaba por el vil metal, por los creditos, por los urones. Si esa era la vida, Dick ya estaba cansado de ella.

Expulsó el humo por la boca y dejó caer el cigarro. Miró a Irina, sentándose bien en el asiento.

-Ve más despacio y no te pegues tanto al de delante.

Advirtió con desden, algo cansado, quizá, melancólico tras el mensaje y sus pensamiento.

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03/11/2009, 19:25
Irina Ivanova Petrova

Frena casi de golpe al ver que se echa encima de un coche que está justo delante.

-Uy... me había distraído con esa cosa que ha salido en la pantalla.

Sonríe radiantemente y continua conduciendo hacia la universidad, que no está muy lejos de allí. Lo mira por el rabillo del ojo al verlo desanimado.

-Te veo un poco decaído... que te pasa?

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03/11/2009, 19:55
Víctor Zilard Aerguees
Sólo para el director

Poco después de salir de la sede central de Biocorp, el mensaje del líder fanático se difunde por toda la ciudad. Justo en la fachada de un edificio que se alzaba al otro lado de un cruce, frente a la gran escalinata que había decendido, una de aquellas pantallas gigantes retransmitieron el mensaje.

El joven científico presenció aquello al pie de la torre, mientras esperaba el taxi encargao de conducirlo de nuevo a casa. El muchacho observó la figura disfrazada de aquél tipo con gesto indiferente. Aquello era absurdo, ya se sabía de muchos lunáticos que deambulasen por los suburbios y bajos fondos de la ciudad, radicales y supuestos profetas en contra del desarrollo y la evolución; Sin embargo, no llegaba a comprender como uno de esos dementes había interferido en la transmisión de los canales de información... Sin hacerle mayor caso, continuó su espera del taxi hasta poco después de que el mensaje terminase.

Subió al vehículo (al parecer la muchacha había decidido quedarse en el rascacielos) y le indicó la dirección de una calle cercana a la zona portuaria. El trayecto transcurrió, nuevamente, sin problemas, aunque en esta ocasión el tipo parecía ser más parlanchín, durante los quince primeros minutos. Todavía seguía fingiendo atender a las incoerencias de aquél hombre sobre lo que acababa de decir el chiflado de la televisión, que prestaba más atención al retrovisor que a la carretera, cuando un ruido ensordecedor cubrió el cielo. Al mirar por la ventanilla, Zilard comprobó impertérrito que varios helicópteros militares surcaban los aires sobre la ciudad. Aquello parcía altamente improbable, ¿qué estaba ocurriendo?, ¿acaso el ejército estaba movilizando las tropas?, ¿tenía que ver con el tipo de la televisión?. Víctor se preguntaba todo eso mientras el taxista recorría las calles a cada vez mayor velocidad, víctima de los nervios. En más de una de las avenidas que cruzaron pudieron ver múltiples unidades y regimientos de guerrilleros avanzando, infestando la ciudad...

En el tercer desvío que tomaron pudieron comprobar, alarmados, que se había producido un grave atasco debido a la invasión. La gente corría enloquecida por las calles a refugiarse (aunque poco podrían hacer al respecto) en sus hogares. Zilard sabía que poco podría hacerse contra esa gente armada y, aparentemente, bien organizada. Por otro lado, tenía que regresar a su casa y recoger algunos objetos y documentos de gran importancia. Luego, tal vez, pudiera refugiarse en el laboratorio de la empresa. Aquél laberínto subterráneo disponía de los más avanzados sistemas de seguridad para impedir la entrada y/o salida de cualquier entidad a las instalaciones.

-¡No se quede ahí parado!, ¡siga por ese callejón!-exclamó impaciente el científico al amedrentado conductor, señalando una calle que se desviaba a su izquierda, oscura y bastante angosta, lo suficiente como para dificultar bastante la conducción por ella.

-¡VAMOS!

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03/11/2009, 20:32
Andrew Wallace "El Francés"
Sólo para el director

 Tras curarlo, lo llevan a uno de los lugares más seguros que tenía.Un auto completamente negro, se para delante de unas puertas metálicas.Estas se abren y salen cuatro hombres que ayudan a salir a Oliver que practicamente no podía andar.Lo llevan cuidadosamente hasta su despacho en lo alto de la fábrica.Allí lo dejan reposar sobre su cómodo sillón.Es entre quejidos, hace una señal de que se podían marchar.Se saca un pitillo y le fuego para comenzar a fumar poco a poco.Mientras tanto......

 Un hombre de negro iba andando por la calle cuando de pronto aparece aquel tipo en los paneles diciendo todas aquellas cosas.Este, como caulquier otra persona, levanta la cabeza prestando atención, para que cuando acabe de hablar, siga andando como si no hubiera pasado nada.Anda metros y metros por la ciudad hasta llegar a una fábrica que parecía en ruinas, pero si te fijabas, tenía varios tipos escondidos en sitio calve donde tenían a tiro a cualquiera que pasara por la zona o quisiera entrar a la fábrica.Se acerca a la grandes puertas de acero que hacían de entrada y saca una de sus manos de su bolsillo y comienza a teclear números y letras en un miniteclado que había al lado de las puertas.Por supuesto habian camaras ocultas por todos lados que vigilaban día y noche junto con los hombres que realizaban sus correspondientes turnos..Tras escribir una continua linea de números,letras y signos, las puertas se abren, dejando ver el fragmento hecho de cemento antes de llegar a la fábrica.Había algunas cajas de metal sobre esta zona, esperando a ser guardadas en los pequeños lamacenes que había a los lados de la fábrica y otras que acababan de llegar.El hombre avanza entre todo aquel jaleo de meter y sacar cajas.Abre una de las puertas metiendo otro código distinto en otro teclado que había junto a una puerta de acero normal para entrar en la fábrica.

La puerta se abre, el tipo entra y se vuelve a cerrar.Allí habían treinta veces más hombres trabajando que en el anterior local.Un sistema de escaleras situadas en las alturas, te facilitaba moverte por encima de los trabajadores, que ocupaban todo el piso inferior mientras trabajaban en lo suyo.Finalmente, llega a una puerta blanca.La toca tres veces, cada una a distinta velocidad, y de pronto se escucha un "pasa" grave y parecía ser serio.El tipo entra y observa un despacho bien amueblado, y un sillón de piel mirando hacia la pared, parte de la cabeza del tipo sobresalía por la parte superior del respaldo, y una nube de humo flotaba sobre su cabeza.

-Nuevas noticias señor....- dice también algo serio aunque para nada preocupado por lo que había visto.

-Puede que se avecinen tiempos de guerra o de auge, eso depende de como lo quieran ellos  usted.- le explica mientras avanzaba por el despacho dejando una grabadora sobre la mesa lacada de Oliver.Este se da la vuelta poco a poco en el sillón para que girara.Suelta algo de humo de la última calada que le había dado al cigarro y agarra la grabadora dejándo ver las bendas que tenía rodeando fuertemente su pecho y parte de la cintura.Le da a un botón y se levanta de la silla cogiendo una muleta en la cual apoyaba todo su peso y le era necesaria par amoverse en esos momentos,que la tenía apoyada sobre la pared.Se levanta poco a poco y anda de un lado para el otro mientras escuchaba atentamente.Mientras escuchaba, asentía a veces y otras ponía cara de satisfecho, aunque también negaba y fruncía el ceño mostrando que no le gustaba nada algunas ideas.La grabadora se para, la cinta había terminado.Le vuelve a dar otra calada al cigarro dejándolo en sus límites.Suelta el humo mientras se lo pone delante de su cara y lo mira pensativo.Pasan unos segundos y suelta el humo a la vez que estrella lo que quedaba del cigarro en un cenicero de plata de estilo moderno.

-¿Sabes que? George....Esto de los negocios es como un cigarro.Comienzas encendiéndolo, y se va gastando poco a poco.Como sabes, todo lo que termina tiene que acabar algún día.Pero a veces, una brisa acaricia al cigarro y hace que se consuma más rápidamente....Eso son graves problemas.....- se vuelve a sentar en su sillón andando lentamente con la espalda curvada y con cara dolorida poníendose cómodo.Vuelve a dejar la muleta sobre la pared tras el.

-Por eso hay que proteger al cigarro para que así dure más.....Y así, que tu predecesor le de una calada y mantenga el negocio, y así sucesivamente....

-¿Piensa en abandonar....?- pregunta el tipo intrigado.

-¿Abandonar yo?..ahaha- rie-.No me hagas reir querido amigo.Esto debe durar hasta el fin de los tiempos y pasaremos cualquier bostáculo- le dice levantándose su camisa gris oscura que estaba por fuera de los pantalones.Allí, en su cuerpo de podía verse ahora completamente la venda.Parte de ella manchada de sangre,aún sentía dolor y el proceso de curación era lento.Suelta la parte de la camisa agarrada y esta cae suavemente.

-Aguantaremos el negocio haciéndolo como nosotros sabemos.Dale un aviso a los muchachos, que se vayan preparando, porque presiento que se avecianan tiempos difíciles para Angeles.....- el tipo asiente, se da la vuelta y sale por la puerta volviéndola a cerrar.Oliver, cogiendo de nuevo su muletase acerca a la cristalera que tenía como ventana, cubierta con un estor.Tira de una cuerda y este se levanta dejando ver toda la fábrica en pleno funcionamiento.Algunos tipo practicando tiro contra unos monigotes pegados a una pared, otros dividiendo la mercancia, otros cargándolas en autos, y otros ordenándola.No iba a permitir que todo su esfuerzo y trabajo que había hecho durante toda su vida, se perdiera por unos chalados de poca monta.El cristal reflejaba su cara, rencorosa, oscura y dolorida.

 

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04/11/2009, 20:17
Dick
Sólo para el director

Dick es movido hacia adelante por el brutal frenazo. Con mirada inquisitiva, miró a su protegida, moviendo la cabeza despacio para dar más enfasis a su enfado.

-Ve....con mas....Cuidado

Dijo despacio, como si estuviera hablando con una retrasada, mas que eso, le preocupaba la salud de su culo si le pasaba algo a la hija de su jefe. Pero su pregunta le cogió por sorpresa, fruñó el ceño y ladeó la cara.

-Nada, solo pensaba. Atenta a lo que tienes delante.

Dick no era alguien de hablar de sus cosas, quizá era un poco borde con la chica, pero no podìa evitarlo, supuso que con el tiempo se acostumbrarian al modo de ser de ambos, para evitar que la conversación se alargara, puso la radio. Sonaba una canción Electro, si Dick era más  bien de musica rockera retro, le sorprendió gratamente el estilo musical, que cantaba en un dialecto rusonès, japoruso, bastante común en angeles. Se sorprendió a si mismo vocalizando estribillo tan pegadizo, a la par que movía el pie.

-soo sa soo te mayooo

Dijo, sin maldita idea del idioma...miró hacia Irina, como si acabara de recordar que estaba acompañado y levantó una ceja.

-Que...

Se calló y miró al frente.

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04/11/2009, 20:35
Irina Ivanova Petrova

-No puedo avanzar... hay un atasco enorme... que habrá pasado?

Mira a Dick cuando pone la radio y comienza a sonar esa canción. La verdad es que le gusta casi todo tipo de música y espera algún día conseguir lanzar su single.

Sonríe de esa forma espectacular y saca la cabeza por la ventana para ver si puede ver alguna cosa de lo que pasa.

-No veo nada... - vuelve al coche pero abre la puerta y se baja para ver que tal - a ver si así...

- Tiradas (1)

Tirada: 3d10
Motivo: Seducir con sonrisa
Resultados: 2, 10, 8

Notas de juego

Creo que te gustará ese 10 XD

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04/11/2009, 23:41
Faye
Sólo para el director

Observa la pantalla con atención y escucha lo que dice el hombre misterioso. Es un fanático, un loco, el fanatismo solo ha llevado a destrucción y matanzas, en lo poco que recordaba de su época como estudiante..

- Ese es un loco.. a ver si le cogen

Dice mientras se adentra en el edificio.

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04/11/2009, 23:47
Director

Una hora, más o menos, después, Faye ya ha encontrado un trabajo nuevo o al menos se lo han ofrecido. Es decisión de ella tomarlo o dejarlo. Además, parece que la agencia es legal, cosa rara en estos tiempos en Ángeles. Las dos chicas que antes la han acompañado bajan con ella para acompañarla a un taxi.

-Que bien que te hayan cogido!! - dice una.

-Sabíamos que te cogería! - dice la otra.

-Espero que aceptes, por que se los veía entusiasmados contigo - dice la primera.

De pronto se oye un grito en el callejón y a una chica llorando diciendo cosas como "no... dejadme... no he hecho nada" Unas risas masculinas son toda respuesta que la chilla obtiene.

-Ayuda! Por favor!! - grita la chica desde el callejón.

-Cállate zorra! Nuestro jefe pronto vendrá a esta ciudad y las putitas como tu, harán todo lo que queramos nosotros, en nombre de Dios! - dice uno de los hombres. Aunque parece que hay un par mas con el, por las voces.

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04/11/2009, 23:32
Víctor Zilard Aerguees
Sólo para el director

El aterrorizado taxista viró violentamente el vehículo, aunque en el sentido equivocado. El coche dio una vuelta casi completa, subiéndose a la acera, antes de detenerse.

-¿¡Qué hace!?-exclamó Víctor nervioso-¡por el callejón!

-¡Déjeme!, ¡no me ponga nervioso!-exclamaba el taxista con la mirada inquieta y la frente sudorosa.

Por fin el coche arrancó, adentrándose en el callejón (aunque uno de los espejos laterales lo perdieron al chocar contra una de las esquinas). El taxi sucó el angosto trecho como una exhalación, con el rugido del motor reverberando por todo el lugar. Cada vez la milicia fanática parecía más cercana y, cuando el coche emergió a una de las calles principales, los soldados ya casi lo había cubierto todo. El taxi volvió a zarandearse de un lado a otro con el último volantazo del conductor y salió disparado contra uno de aquellos muros humanos, formados por decenas de soldados, sino cientos, avanzando codo con codo. Estos, en lugar de tratar de apartarse, abrieron fuego contra el vehículo y, sumido en el pánico, el conductor giró de golpe hacia la izquierda. Aquél movimiento había sido excesivamente brusco y precipitado, terminando con el taxi empotrado de lado contra el escaparate de una tienda de moda.

Cuando recobró el conocimiento, el doctor Zilard comprobó que se encontraba tendido en una posición bastante incómoda sobre el suelo de la parte trasera del taxi. Del conductor no había ni rastro, pero se veía un pequeña mancha aún goteánte de sangre sobre el volante y se oía bastante ruído.

-Pero... ¿qué...?-masculló dolorido el joven científico.

Recordaba el choque contra el escaparate. La cabeza le daba vueltas y se sentía bastate dolorido, pero no habían daños graves. Un pequeño hilillo de sangre caía desde su ceja izquierda y por su mejilla, pero nada más. En ese momento escuchó como la puerta delantera se abría brúscamente. Consiguiendo deslizarse sobre los asientos pudo asomar un poco su cabeza por la ventanilla. Tuvo suerte en aquel momento de que los cristales del taxi fuesen de esos tintados, pues lo que fuera vio era al taxista, sangrando por la frente (sin duda por el golpe contra el volante), y corriendo despavorido con las manos en alto, en señal de paz. Sin embargo, no llegó a dar ni dos pasos antes de que los soldados congregados allí lo acribillasen a balazos. En un instante no fue más que un amasijo de carne sanguinolenta tendido en el suelo. "Menudo imbécil...", pensó aturdido el científico. Sin la menor intención de correr su misma suerte, volvió a deslizarse por el asiento hacia la otro puerta trasera, que se encontraba dentro de la tienda (pues el coche había quedado empotrado de lado contra el escaparate, con la mitad fuera y la otra dentro) y la abrió con cuidado para no hacer ruído. Si aquellos infelices creían que el tipo conducía solo no tardarían en dejar de buscar más víctimas por allí.

Una vez hubo salido, volvió a cerrar la puerta con sumo cuidado y se escabulló por entre los pasillos cargados de prendas de vestir, muchas de ellas rotas y tiradas por el suelo en la zona cercana al accidente. No había ni rastro de vendedores ni de clientela por allí, cosa bastante normal vista la situación.
Más atrás, en la zona del coche estrellado, los soldados ya se habían aproximado e inspeccionaban la zona. Desgraciadamente para el científico, pese a las molestias que se había tomado para cubrir su rastro, había un detalle que daba pie a los soldados a creer que allí podía haber alguien más... dentro del coche, junto al espejo retrovisor, el cartel del taxi indicaba que había estado ocupado y, además, había algunas gotas de sangre en el asiento trasero.

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05/11/2009, 00:02
Faye
Sólo para el director

Sonrie a las chicas, se la ve feliz, por lo menos ha encontrado un trabajo que le gusta y que va más con ella, no el estar en un motel limpiando habitaciones.. Su mente ya volaba imaginando que viajaría por todo el mundo, que conocería a gente famosa.. pero los gritos de una chica captaron su atención.

- Esperad aquí..

Dice a las chicas y se adentra al callejón, ve a los tipos alli intentando aprovecharse de una pobre chica.

- Ehh!!! Vosotros!! Dejad a la chica en paz!

Lleva mano a su bolso como si buscara algo por si se atrevian a acercarse.

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05/11/2009, 00:12
Director

La escena es bastante escabrosa. La chica está tendida en el suelo con las mejillas surcadas en lagrimas y con mirada suplicante. Los hombres tienen los pantalones bajados dejando sus vergüenzas al aire y apunto de aprovecharse de la pobre chica. Parecen de los fanáticos esos que siguen al tipo de las pantallas, por como hablan y por lo que dicen.

-Aquí tenemos a otra putita que nos hará favores y nos respetara cuando el enviado de Dios llegue a esta ciudad para purificarla... ven putita, aquí hay para las dos! - dice tocándose entre las piernas y haciendo gestos obscenos hacia Faye.

Cargando editor
05/11/2009, 00:21
Faye
Sólo para el director

Los miraba asqueada, se agachó a coger una piedra y la tiró contra ellos.

- Cabrones!! Vuestro Dios bajará para cortarosla en trozos y darsela de comer a los perros!!!

Seguía tirandoles todo lo que tenia a mano para apartarles de la chica.

- Tiradas (2)

Tirada: 1d6
Motivo: Tirar piedra
Resultado: 3

Tirada: 1d6
Motivo: Tirar piedra
Resultado: 4

Cargando editor
05/11/2009, 00:32
Director

Faye tiene suerte de haberlos pillado con las manos en la masa, los pantalones bajados y mas pendientes de otra cosa que del posible ataque de una "putita que no sabe hacer nada, solo chuparla" o eso es lo que piensan ellos. Así pues, el lanzamiento de piedra a la cabeza de uno de ellos los sorprende y no pueden evitarla, aunque va con menos fuerza de la esperada y acaba perdiendo angulo, dandole en sus partes a uno que cae poco mas que redondo al tener esa zona bastante mas sensible de lo normal.

El que ha hablado antes a Faye, se sube los pantalones y va a por ella con cara de cabreado.

-Las putas deben obedecer, zorra!

Cargando editor
05/11/2009, 00:40
Faye
Sólo para el director

Saca el spray del bolso, uno de pimienta por si acaso.. que hoy le viene de fábula, estira el brazo y le intenta dar de llenos en los ojos, retrocediendo para evitar que se le acerque demasiado.

- Vete! - le dice a la chica.

Cargando editor
05/11/2009, 16:51
Viacci

Notas de juego

2d6 por favor faye y si corres otros 2d6

Cargando editor
05/11/2009, 16:52
Faye
Sólo para el director
- Tiradas (1)

Tirada: 2d6
Motivo: Disparo
Resultados: 6, 2

Cargando editor
05/11/2009, 16:55
Viacci
Sólo para el director

Notas de juego

Prueba superada, describe como quieras

Cargando editor
05/11/2009, 17:40
Director

Notas de juego

A los que no les he escrito y estan esperando a que yo lo haga... no teneis que esperar a que yo escriba para continuar... esto tiene que estar ligado a las 23:59 asi que no me espereis para escribir.