Partida Rol por web

Ánima: Más allá del Bien y del Mal.

Seline Luna

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11/01/2012, 23:09
Seline Luna

El arma de Xerine cambió de manos, y pasó a Seline, la que dio un paso hacia atrás rápido, apuntando con la daga al grupo. Su expresión en la cara cambió, mucho más seria y desafiante.

-¡Ja! ¡Ahora tengo un arma!¡¿Os habéis creido todo lo que he dicho!?¡ILUSOS!

El ambiente se volvió tenso, habían caído en sus redes...

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Seline estalló en carcajadas, y volvió a hablar:

Era broma, todo lo que he dicho es cierto. Comprobó el filo de la daga. Esto va a doler. 

Con un suave movimiento se hizo un corte en la palma de la mano. Tratando de mantener las lágrimas dentro de su ojo no hizo ningún ruido, una sangre plateada salió de su mano para impregnar la daga de Xerine. Que empezó a brillar de una manera ténue.

Después, mientras se agarraba con la otra mano la herida para que dejara de sangrar, apresuró al grupo.

Id rápido, esto no durará para siempre. Además, os ruego que no volváis a dormir en esta isla. El marqués ha notado vuestro poder, y os busca. Os busca intensamente, si dormís os devorará en vuestros sueños.

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11/01/2012, 23:13
Xerine

Xerine asintió, apartándose para dejar paso al resto, mientras volvía a guardarse las dagas en la ropa. Observó a Seline durante todo el proceso, en silencio. Si obviaba lo extraño de la situación, y el aparente comportamiento bipolar de la niña, la verdad es que por ese simple gesto ya la respetaba. Que se hubiera atrevido a cortarse a sí misma era signo de que tenía valor, y fuerza de voluntad. Para Xerine, que sentía un especial miedo por el dolor y el daño físico, era un acto bastante noble...

Para una niña. O lo que fuera esa chica

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11/01/2012, 23:19
Xerine

Cuando terminó, Xerine se apartó unos pasos, dejando que otros bañaran sus armas en la sangre de la niña. No hizo ningún comentario, aunque por su expresión se podía intuir que aquel ritual pseudosatánico no acababa de gustarle demasiado

¿Y cuanto dices exactamente que tarda el Marqués en volver a su estado habitual? ¿Horas? ¿Días?

Notas de juego

Veo un espacio en blanco en tu post ;)

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11/01/2012, 23:24
Seline Luna

Después cogió el arma de Quint, y dejó caer varias gotas de su sangre en su daga, con idéntico resultado. Tras esto dijo:

-No impregnaré ninguna más. Por favor. Ya me duele bastante este corte, y con dos armas espero que sea suficiente. Xerine, en unas horas está como nuevo.

Señaló a la puerta.

¡¡¡Pero partid ya!!!

Notas de juego

Es un elemento para crear... "tensión"? cuando todo el mundo haya leído el post, lo quito XD

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11/01/2012, 23:27
Xerine

Maldita sea

Parecía que la idea de tener que volver a matar al Marqués no le resultaba nada agradable. Xerine se dio la vuelta, y se dirigió a la puerta, no sin antes hacer un gesto algo vago para despedirse de Seline

Ya veremos como acaba todo este sinsentido

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11/01/2012, 23:35
Seline Luna

Seline se quedó pensando un momento, y miró a Nahia y a Catherine, quienes habían estado en silencio durante toda la conversación.

-No... lo sabéis ¿verdad?

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11/01/2012, 23:43
Xerine

Se detuvo. Luego, miró a las aludidas, y acto seguido se cruzó de brazos, esperando a que hablaran, mientras alzaba una ceja

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11/01/2012, 23:44
Aaron Ningrem

Aaron entrecerró los ojos y miró directamente a Nahia y Catherine. No, aquello no le había sonado demasiado bien, para que negarlo, pero esperaba que alguien pudiera explicarlo.

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11/01/2012, 23:45
Aaron Ningrem

En silencio, valoró mágicamente a la mujer. Quien sabía, quizás no era lo que aparentaba.

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12/01/2012, 10:36
Nahia

La pequeña no estaba segura de que se refiriese a ella. Aunque tal y como estaba discurriendo el día, ¿porque no? ¿Qué más le podía pasar? 

Miró un segundo a Catherine, quizás ella sabía algo, pero su expresión descubría el mismo desconcierto que el de la pequeña.

Y con la sorpresa aún es su rostro preguntó:

- ¿Saber el qué? 

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12/01/2012, 15:29
Catherine Absolom

La chica se quedó mirando a su amiga, sorprendida por la alusión directa que había recibido. Al ver que Nahia estaba en su misma situación, respondió, casi a coro con su compañera.

-¿Saber qué?

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12/01/2012, 15:42
Seline Luna

-No, ya veo que no lo sabéis. Vaya contrariedad, tendré que decíroslo.

Seline suspiró y se acercó a ambas y les dio un pequeño toque en la frente, nada significativo, sólo simbólico.

-Eso no ha servido para nada, era solo una tontería.-sonrió- Lo que deberíais de saber es que dentro de vosotros duerme un poder inmenso, y que tenéis que despertarlo. 

Tú ya lo has despertado una vez, Catherine, pero no lo sabes. En cambio tú, Nahia, no sabes aún lo que puedes hacer.

Miró a ambas un segundo.

¿Os gusta cantar y tocar música no? ¿por qué no cantáis a coro?

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12/01/2012, 15:46
Faliar Eldwen

Faliar miró a Nahia incrédulo; ¿una muchacha tan joven, otra poderosa hechicera?. Había visto el poder que tenía Catherine, y si la pequeña tenía un poder similar, entonces las dos juntas podrían desatar una magia increíble.

- Si, Catherine, ya vimos una vez de lo que eres capaz. ¿Pero Nahia también....? -hace una pausa; no quiere pronunciar la palabra- Sea como sea, parece que tu poder se manifiesta a través de tu música, y quizás Nahia también tenga esa capacidad. Estoy seguro que vuestra magia combinada será mucho más poderosa que la mera suma de vuestras habilidades individuales. 

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12/01/2012, 15:57
Nahia

No entendía nada. Miraba a Faliar, de nuevo a su amiga y después a su inseparable instrumento.

-Mmm, vaale, pero la he tocado miles de veces y nunca ha pasado nada excepcional.

Se acercó a los labios la flauta y miró a Catherine.

-¿Qué dices?¿Probamos?

No esperaba que nada fuera de lo común pasase..pero al menos mostraría a los allí presentes lo que podía hacer. Quizás eso le hiciese ganar algunos puntos a su favor.

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12/01/2012, 17:41
Director

Cantar.

Seline sólo les había pedido una cosa para despertar su supuestos poderes. ¿Cantar? Era algo que hacía todos los días, y acompañada de Nahia. No era nada nuevo. No tenía nada de especial. Y sin embargo, por la situación, el lugar, la tensión acumulada, o las ganas de soñar que tenían ambas no lo dudaron ni un momento. Si había que cantar, si Seline les había dicho que tenían que cantar... cantarían.

Catherine suspiró profundamente mientras acomodaba su garganta tosiendo un poco. Faliar y Quint le dijeron esa misma mañana que tenía poderes, que había recitado una canción solo presente en sus sueños y había conseguido liberar un extraño ser luminoso. La chica no se lo creyó. En ese momento nada tenía sentido... pero ahora... ahora todo era distinto. Había presenciado la magia de Faliar, había visto los misterios de la catedral, y escuchado el posible destino de la isla de boca de aquella "niña" pequeña. Si podía ayudar símplemente por entonar una melodía, no iba a dejar de intentarlo. 

Nahia sacó la pequeña flauta de madera de su estuche y sopló su superficie un par de veces, para tratar de liberarla de cualquier impureza debida al polvo que pudiera haber cogido por el camino. La mente de ésta estaba mucho más perdida. Demasiadas sensaciones para el corto día, que al parecer no había terminado aún. Pero, al igual que su mejor amiga, no iba a decir que no sin motivo. Nahia no había visto nunca magia, y la presencia en la catedral fue realmente desconcertante para ella. Pero... si aquella pequeña le decía que ella también podía... sería por algo ¿no? La mente de un niño es más facil de amoldar que la de un adulto, al fin y al cabo siempre hay cosas que no conocen, y tienen una curiosidad innata por buscarlas. Nahia tenía curiosidad... a la vez que miedo y euforia.

¿Qué iba a pasar?

Catherine y Nahia se miraron a los ojos. No hacía falta que hablaran, ya contaban con muchas horas juntas y podían casi saber en qué canción estaba pensando su compañera, si es que directamente no habían tenido la misma ocurrencia. Ambas afirmaron con la cabeza silenciosamente mientras todos en la habitación callaron. Cerraron los ojos, y empezaron a cantar.

la música empezó a invadir la pequeña estancia. Seline se sentó en el suelo a disfrutar del recital. El corazón de las dos amigas estaba fundido en uno solo, estaban cantando y tocando desde el alma. Las notas acariciaban los oídos de todos los que asistían al improvisado recital. Era realmente bello, quizá en algún momento había pequeños errores, pero eran casi imperceptibles.

Catherine estaba concentrada en el sonido de su voz, en como llegar a las notas más complicadas de la melodía que estaba entonando. No era precisamente fácil la que habían elegido, pero para una ocasión así, la obra era perfecta.

Pero... no pudo evitar sentirse aliviada al poco de empezar a cantar. Algo había, algo estaba haciendo que nunca había hecho. Su cuerpo empezó a brillar y de él surgían pequeñas esferas de luz que la rodeaban y bailaban a su son, haciendo intrincados movimientos y figuras en torno a ella. Lejos de sentirse asustada, Catherine siguió cantando, cada vez con más fuerza y vigor, proyectando su voz por toda la habitación.

Un pequeño hilo brillante unió a ambas intérpretes, un hilo casi invisible que vibraba al son de la música, como si se tratara de una cuerda de un violín invisible que el propio destino estaba tocando. Pero, lo más sorprendente de todo, es que todos los que estaban allí podían verlo. No solo los magos o los ojos expertos, sino también los ojos más inocentes podían contemplar la grandeza de aquella primera obra... mágica.

Nahia también estaba concentrada. Estaba realizando la interpretación de su vida. Nunca le había salido tan bien aquella pieza... ¿quizá tuviera algo que ver lo que estaba ocurriendo a su alrededor?

Primero una pequeña mariposa de un tono verdoso, casi trasparente salió de su flauta para revolotear en torno a ella acariciando su nariz de vez en cuando. Segundos después salió un pequeño cervatillo que también la rodeaba, y que más tarde empezó a jugar con Seline a un juego parecido al pilla-pilla.

No eran los únicos animales que salían de la propia música creada por Nahia: ardillas, ratones, gatos, perros,... todo tipo de animales surgían cada pocos instantes y acariciaban a los oyentes.

El aire en torno a ellas había cambiado, o puede que fuera la propia energía sobrenatural desembocada, pero sus cabellos se mecían al son de las notas que tocaban. Tanto Catherine como Nahia parecían sumidas en un remolino de energía. Un remolino de energía creado con magia, creado con música.

Una sensación de tranquilidad extrema creció en Xerine, Quint, Faliar, Aaron, Catherine y Nahia. Todo el grupo se sentía en paz, en plena paz. Ya no había miedo, no había sospechas, no había ira, no había malas intenciones. Sólo quedaban ganas de sonreir, ganas de salvar a la aldea, ganas de resolver todo aquel lío. Es como si aquella canción hubiera sido la llave a la felicidad.

Poco a poco el viento se fue retirando, y los animales desapareciendo. La canción había acabado.

Catherine se quedó con la boca abierta.

Nahia no sabía que decir.

...

Seline empezó a aplaudir.

 

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12/01/2012, 18:59
Aaron Ningrem

Aaron dio un paso atrás cuando la música comenzó a sonar, asombrado. Después, simplemente se sentó en el suelo, apretó la piel de lobo contra su pecho y soñó.

La música de las dos mujeres juntas era lo más inspirador que jamás había oído, todos los pequeños matices que las notas destilaban le transportaban a unas tierras muy lejanas, donde no existía el miedo, la desolación o el dolor. Ese era el poder de la música pero ellas...ellas lo multiplicaban.

Los pequeños animales salidos de la flauta de Nahia invadían toda la habitación y Aaron, convertido en una masa crepitante de sentimientos, no podía hacer otra cosa más que jugar con ellos mientras seguía disfrutando del espectáculo. Era maravilloso, por primera vez desde los últimos días se sentía en paz, por primera vez se sentía completamente feliz, esa felicidad que no puede ser empañada por nada ni por nadie, esa felicidad que te hace sentir vivo.

Cuando el dueto terminó, Aaron pudo sentir como una tímida lágrima corría por su mejilla, la cual no se molestó en enjugar. Con energías renovadas comenzó a aplaudir y a sonreír sin cuestionarse ni el como ni el por que de aquella magia. No le importaba, no por el momento. Se limitó a comprobar si el resto del grupo estaba tan emocionado como él y a seguir sonriendo, casi con expresión estúpida. Si aquellas sensaciones se pudieran pagar Aaron no tendría suficiente dinero.

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12/01/2012, 19:19
Faliar Eldwen

- Maravilloso... Simplemente maravilloso.

Faliar sonreía; no solo la melodía le había transmitido todos aquellos sentimientos positivos, sino que empezaba a vislumbrar una verdadera esperanza de salir con vida de todo aquel embrollo. Si permanecían juntos, ni Emil ni toda su guardia, ni el Marqués, podrían detenerlos. Y además, aquello era la prueba de que la magia podía usarse para algo bueno y hermoso; él solo sabía como dañar y destruir, pero algo de provecho se podía sacar de todo aquello. Por primera vez desde aquel día en que se despertó en aquella posada, tuvo la impresión real de que era posible construirse una nueva vida.

 

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12/01/2012, 19:53
Xerine

Do... Fa... La... Re...

Acordes mayores. Puntea levemente la segunda cuerda para dar una sensación de ligado, sin llegar a cubrir del todo las voces ni a la flauta solista. Efecto de acompañamiento, con algún que otro movimiento arriesgado para convertir en arte lo que se quedaría en ruido de otra manera. Un breve cambio en la posición del La para dar prioridad a la séptima durante unas décimas de segundo, antes de volver a su consecución natural, el Re. Cierto efecto de rasgado para la parte más sentida de la canción, acompañando a una voz imponente que podría romper cualquier cristal, y a una flauta acompañante que destila inocencia y sinceridad en cada una de sus notas

Xerine no tocaba. Tenía su violín abajo, guardado en el estuche, y no habría sido buena idea sacarlo en aquel momento. Haber intervenido en ese dueto casi parecía una herejía, una manera directa de empañar algo hermoso y delicado, pero tan frágil que podría romperse con solo añadir otro ruido disonante al conjunto. Así que no dijo nada. Se limitó a cerrar los ojos, y dejar que la música hiciera el trabajo. Música pura, sin adornos ni tapujos. Música para el alma

No vio los animales que surgían de la flauta de la niña, ni los otros efectos secundarios de la canción. Para Xerine, esas florituras mágicas no eran más que una simple y burda manera de empañar algo perfecto en sí mismo. La música no necesitaba nada más que la música, y cualquier persona que llevara la armonía en el alma lo sabía. Sintió como sus miedos, su rabia y su frustración desaparecían, convirtiéndose en polvo tras la sincronizada conjugación de unas notas que habían nacido para ser escuchadas en ese momento, y en ese lugar

El Do, dominante y paternal, se imponía a la cabeza de la procesión, como un mero prólogo de lo que estaba por venir. El Fa le seguía, fiel como un guardaespaldas, acariciando los sentidos de los presentes con su voz grave y ronroneante. De repente, un La, como no podría haber sido de otra manera, entraba en escena, animando a los presentes con una alegría dicharachera y traviesa, anunciando el final de la introducción. Por último, un Re, solemne y tajante, preparaba a los oyentes para el tornado de notas que se iba a desarrollar a continuación

Los dedos de Xerine se movían solos. De repente, era ella, sin disfraces ni máscaras, simplemente ella. No Xerine, la música. No, era su alma la que vibraba, la que imaginaba un violín uniéndose a ese dueto, creando algo más hermoso, más completo. Un violín plañidero, alegre, o agresivo, según la situación, tapando ese silencio que parecía quedar cuando la flauta y la voz callaban al unísono. Silencios, notas fantasma, arrastres y ligados, y, por último, un gran crescendo final antes de comenzar con el cierre de la pieza

Entonces todo terminó. Xerine abrió los ojos, y volvió a ser ella. Para otros, la melodía había sido música, música bella, sí, pero música, al fin y al cabo. Para Xerine, había sido algo más. Había tocado con ellas, aunque no lo supieran. Dentro de su cabeza, el dueto se había convertido en un trío de cuerda, flauta y voz, resonando juntos en perfecta armonía durante un instante fugaz y etéreo

Pero ya había acabado. Y ni la paz que parecía inundarla podría sellar el vacío que dejaba. Un vacío satisfecho, un vacío hermoso y vibrante, pero un vacío, al fin y al cabo

Sois muy buenas Murmuró, más como la mera confirmación de un hecho que como un verdadero cumplido o halago Si salimos de esta, hablaré con vosotras

La pareja triunfaría en Gabriel, de eso no cabía duda. Eran un diamante en bruto, y que hubieran llegado a ese punto sin un aprendizaje controlado, simplemente practicando por su cuenta, era muestra de que tenían más potencial de lo que podría aparentar a simple vista. Casi le recordaban a una niña huérfana ya perdida en su memoria, hacía tantos años, que vagaba por los callejones de Gabriel con un violín robado. Pero eso no le importaba a Xerine. El dinero, la fama, y la magia eran cosas que poco le interesaban. Eran medios para conseguir algo. Pero la melodía, la armonía, el ritmo... La música

Era un fin en sí misma

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12/01/2012, 20:43
Seline Luna

Ha sido simplemente, fantástico. Increíble. NO Había escuchado nada tan bonito desde... hace... bueno... ¡nunca!

Seline se levantó, y se acercó a las dos chicas.

Ahora ya sabéis que disponéis del poder. Duerme en vosotras, y es tarea vuestra despertarlo. Ya es tiempo de marchar.-se giró hacia el resto.- Id a por el marqués. Y espero que estas nuevas habilidades os funcionen. Recordar... los sentimientos oscuros le fortalecen...

No caigais en el miedo.-miró a Nahia y a Catherine-Vuestra música será un aliento para el alma de todos. Estos sentimientos debilitan al marqués. No dudéis en tocar en su presencia. No le gustará.

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12/01/2012, 20:56
Catherine Absolom

Catherine estaba asombrada por lo que habían conseguido. Si bien la música había sonado quizá solo un poco mejor de lo que sonaba habitualmente, el sentimiento dejado tras acabarla había sido maravilloso. Se sentía completamente en paz. Estaba emocionada por su descubrimiento, y para su sorpresa, nada aterrorizada.

El hecho de descubrir que la magia duerme dentro de uno puede ser un suceso traumático, pero para las chicas había sido tranquilizador. El primer conjuro formulado las había tranquilizado. Quizá sea ese el mejor primer paso en la maratón que es la magia.

-Gracias... supongo. Y ahora... ¿qué es lo que podremos hacer?