Partida Rol por web

Akira mira a Daneel y con una leve sonrisa...

No lo intentes, no funcionará. En este mundo los aparatos electrónicos del vuestro no funcionan...

Luego se queda mirando a los demás.

Vaya, no os conozco... Yo soy Akira... Seguro que os ha traido Yuuko... Susurra la última parte y vuelve a miraros.

Mirando de forma incómoda al chico canino, cosa de la posición en que me encuentro, le comento No te canses... tiene razón. Cualquier cosa que huela vágamente a tecnología queda automáticamente neutralizada cuando se 'aterriza' aquí.

Miro a la gata blanca y comento Akira... ¿cuanto tiempo debo estar así? Soy medio lobo, no medio perezoso...

Oh... Bueno, vale. -musita Daneel, poniendo ojos de perrito triste mientras guarda su objeto en la bolsa correspondiente- Es una pena, a mí es que me gustan mucho estos cacharros!

Pero que le vamos a hacer...

Entonces apoya su mandíbula en sus rodillas y se mueve hacia adelante y hacia atrás, aburrido ya que no puede ayudar a nadie. Por un momento, se fija en su hocico. Que grande es... Antes tenía la nariz tan grande? No lo creo, pero... Que?! -exclama mientras se toca el hocico con las dos manos. Se las lleva a la cabeza y se encuentra sus orejas caninas. Espera, no... Que es esto?! -se levanta, y de la excitación empieza a mover violentamente la cola- Y esto?! -consigue agarrarla, no sin antes dar un par de vueltas a su alrededor cual cachorro joven e inexperto. Cuando consigue dar con ella se da cuenta que la puede mover, y empieza a hacer el tondo con ella.

Anda, mirad! Soy un perro!! -exclama, con una sonrisa de canino a canino y quedando como un idiota.

Friederich mira con gracia y un poco de ridiculez al joven canido mientras juguetea  con su cola. observa al fiero medio lobo tumbado en la cama, que a pesar de todo no peirde sus sensatez y mira de reojo a la gatra blanca.

Le dirige primero la spalabras a su compañero canino

- Un poco despistado ehh -Y esboza una sonrisa ligera -¿No se sienten extraños? -Dice Friederich sin cruzar miradas hacia algun interlocutor-  La noche, este lugar, la luna en su amplio esplendor, la energia que fluye en nosotros por la oscuridad....¿No se sienten como en casa? -Friederich medita la respuesta, se queda mirando a la luna y vuelve a la realidad -Me he fijado que somos creaturas nocturnas, Un perro, un lobo, un buho, una gata....por cierto, yo soy Friederich y Friederich soy yo felina...¿Existen influjos en nosotros? o es solo....¿Instinto?

Con un dejo extraño en el timbre de voz, como un tinte brutal que no tenía antes, respondo en voz ténue mientras miro hacia el techo con ojos entrecerrados, más por actitud que por otra cosa Como en casa, ¿eh? Lo dudo mucho... aún con el tiempo pasado en este lugar, mir orígenes y raíces no han variado un ápice. No me gusta... la 'emigración'.

A la última parte de Friedrich, respondo con una sonrisa fiera ¡Oh! Puedes apostar que uno tiene instinto cuando 'muta'. Yo mismo, aún reprimiéndolo al principio, no he podido evitar que me arrollase... Sin embargo, no todos somos seres de la noche. Hay compañeros que son... y eran... criaturas diurnas... Miko, sin ir más lejos. Yo creo que tiene más que ver la personalidad del indivíduo que otra cosa... Cuando menciona los caídos, la mirada se ensombrece levemente y el ritmo de palabra se ralentiza.

Yo, sinceramente, me siento como metido en un RPG de los buenos. De esos que te da hasta pena terminar! -les sonríe tras su comentario. Entonces se rasca la cabeza. Aún poco acostumbrado a la situación- Aunque hay cosas que no terminan de gustarme... Como el peligro de muerte que nos acecha y todo eso. Espero que podamos salir bien de la situación...

Entonces piensa en lo que el hombre lobo les ha dicho. Instinto y habilidades... -se pregunta- Quizás siendo un perro pueda oír mejor lo que me rodea y... Traer palos? Si bueno, no se en que situaciones podría ser eso útil. Hmmm... Supongo que también tendré un buen olfato también.

Así que, dadas las circunstancias, Daneel prefiere probar su oída por simple curiosidad. Así que cierra los ojos e intenta concentrarse...

La renqueante respiración de Johan

El áspero roce de las plumas de Friederich

El suave y rítmico movimiento de la cola de Akira...

Y...

Bien, ahora tendrás que poner agua hirviente... e ir añadiendo un ingrediente cada dos minutos y tres segundos. No importa el orden. Lo que sí importa es que el último tiene que ser el sandimelo... el cual exprimirás ahora mismo, verás que te quedará con un zumo con un olor apestoso... y de color amarillento. Después tendrás que dejarlo hirviendo 59 segundos, ni uno más... y dejarás la pomada toda la noche en reposo, a la ventana.

Todo esto lo va diciendo mientras Miko lo va haciendo a velocidad extrema... casi se equivoca, casi, pero al final, y después de apagar el fuego la pócima queda de un color amarillento verdoso... con muy mal olor.

Acuérdate de ponerla a la ventana... y ahora vete a dormir, habrá sido una noche dura para ti.

Vuelve a sonreir... y después bosteza.

El pequeño Jiglypuff se acurruca al lado de Evelyn... despertando por los silenciosos sollozos de la pantera. Él la mira con grandes ojos... y los cierra... saliendo de su boca una débil y preciosa vocecita en forma de canción...

Las sensaciones que provoca aquella canción en Evelyn son asombrosas... cada vez se siente mejor, calmada... relajada y tranquila. Cómo si aquella canción le estuviera arrancando todos sus problemas uno a uno... con los ojos cerrados... Evelyn acaba cayendo en un profundo sueño...

Se abre la puerta de la cambra.

Entra el chico de antes, su cara no muestra nada más que determinación y seguridad... pero sobretodo confianza. En sus brazos lleva a un joven chico con orejitas y cola de zorro... dormido, parece, porque está con los ojos cerrados y con una leve sonrisa en su rostro.

Bryan, el chico león, en cambio... tiene la ropa rota por varios puntos, y varias heridas superficiales en la cara y en los brazos. Pero parece no importarle.

Será mejor que vayamos todos a dormir. Mañana tendremos tiempo de hablar.

Esboza una sonrisa... mientras deja con cuidado al chico que llevaba en brazos a la cama del lado de Johann... el cual se queda mirando. De un movimiento de la Vara, aparece un palo que le sostiene la pierna al chico lobo, permitiendo que Akira se pueda apartar...

Miko sigue las instrucciones, y cuando ha terminado, sigue las órdenes de Kairi y lo deja junto a la ventana.

Espero que resulte.. Desea.

Después se dirige a la bola de nuevo. Gracias Kairi. Le dice sonriendo. Y se dirige con la bola entre las manos con los demás, con los ojos medio cerrados del cansancio.

Sin sorprenderme de la aparición de la vara bajo mi pierna, a Bryan Como desees... pero hay que hacerlo largo y tendido. La cosa se ha vuelto muy desagradable y me gustaría hacer un 'cambio de impresiones'... La mirada es seria y, en ese momento, no muestro el cansancio producido por el esfuerzo y la herida en la pierna.

Muevo la pierna incómodamente ... sin embargo te doy la razón. El día ha sido largo y debemos reposar. Suspiro finalmente y vuelvo a sumergirme en mi mundo de tinieblas personal.

Y...

Se queda dormido. Sentado como estaba, a Daneel le vence rápidamente el sueño. Así que no acierta a descifrar las últimas palabras del hombre lobo ni del chico que los encontró por primera vez.

Miko aparece de nuevo en la habitación... lleva la bola de cristal entre sus manos, pero Kairi ya ha desaparecido, y el dragón de su interior parece estar durmiendo