Partida Rol por web

Te mira confuso. Y mira a Wood cuando este te da una pequeña colleja.

-No lo engañes Tabby. Ella es cazadora. Y Harry es buscador.- le aclara a Mike -Parece que el verano le ha sentado mal a mi joven estrella. Está en mi equipo, claro.

-Así que cazadora. Entonces igual nos enfrentamos, yo soy cazador también.

-¿Eh? ¿He dicho buscadora? Lo siento, quería decir cazadora.

Le clava un dedo en las costillas a Oliver como castigo por la colleja.

-Tu joven estrella se ha pasado todo julio haciendo los deberes y ayudando en casa... no como otros, que tienen mucho tiempo libre - le clava otra vez el dedo en las costillas. Repetidas veces.

-Claro, que los deberes de segundo a tercero son tan complejos que los de sexto a séptimo palidecen....esta juventud...- suspira.

Pronto el olor a hamburguesas, costillas y chuletas lo inunda todo. Y de pronto ves una sombra de pelo azul que se cuela entre la gente ¡Y hasta salta por encima de algunos! De alguna manera acaba primera en la fila de las alitas picantes. Y se lleva un plato enorme con cara de felicidad.

-Si has acabado segundo y vas a pasar a tercero, sí. Pueden ser complicados.

Esa sombra verde que se intenta colar... sí, cuando puede verla bien se da cuenta que es la chica que le ha dicho que podía usar la escoba para ir al campamento y así no cargar con la maleta todo el camino. Parece bastante ágil y se ha colado delante de los demás con total impunidad.

Total impunidad, nadie le dice nada. Se acerca a un grupo de chicas que parecen francesas y se sienta con ellas. La saludan contentas aunque no parece encajar del todo allí.

-¿Quién es? La he visto tomando el sol justo en la parada de bus, pero no me ha dicho su nombre.

Señala con la cabeza en dirección a la chica del pelo verde.

-¿No sabes quién es? Es la cazadora más joven de la selección de quidditch de Inglaterra. Karen Lacroix. Es de origen francés y se ha criado allí pero el año pasado se mudó a Londres y el seleccionador le dijo que si tomaba la nacionalidad, su padre es inglés, podría jugar en la selección en cuanto cumpliese diecisiete. Cumplió en febrero de este año e hizo un partidazo contra Dinamarca en el clasificatorio para el mundial que se jugó en junio. Pero los muy guarros la tiraron de la escoba casi al final del partido. Se lesionó el hombro, y el médico le prohibió jugar a nivel profesional hasta noviembre. Su estilo es genial, ya lo verás. ¿Es que no recibes el Profeta? Pensaba que leerías sobre quidditch.

-Solo leo El Profeta cuando estoy en el colegio. ¿Y como es que está aquí?

Parece increíble que alguien que ya está en la selección se presente a un campamento como ese, más destinado a pasar el verano que a entrenar, realmente. Aunque se juegue a quidditch y se hagan partidos y todo eso. Además, es cazadora. ¿Jugará ella también en los partidos?

-Como está lesionada y no puede entrenar oficialmente por decisión médica ni en la selección ni en su equipo de la liga...y por lo que dicen puede ser muy terca...así que las Avispas y el campamento llegaron a un acuerdo y ella será instructora este año. Así al menos tiene un médico cerca...pero que todo el mundo coincide en que no dejará de jugar. 

Wood se apropia de una fuente de patatas asadas y costillas. La deja en el centro para todos.

-Oh, ¿será nuestra instructora?

Mira en dirección hacia ella, pero luego vuelve a centrarse en la comida. Debe de ser genial que te quieran en la selección incluso antes de poder jugar en ella por cosas de la edad.

-Ella es una de los que piensan que no sé volar y que he venido a aprender.

Coge una de las patatas asadas.

-Eso es que no te conoces...es normal que piensen que eres demasiado pequeña ¿No? Es tu mayor ventaja, que subestimen. Y después zumbas como tú sabes y les marcas tres goles antes de que se den cuenta.- te guiña. -Seguro que puede enseñarte muchas cosas.

-Solo si no eres tu el Guardián.

Coge unas costillas.

-Seguro que te gustaría que me quedase así de pequeña solo por el bien del equipo... si crezco, pesaré más y volaré menos rápido.

-Bah, serás más lenta en tu escoba, pero habrá escobas mejores. Y serás más fuerte por lo que podrás hacer más cosas. Tranquila por eso. Es normal crecer.- le quita importancia a tus palabras con un gesto.

Las costillas son deliciosas, untadas con una salsa de mostaza y miel.

-¿Quieres alitas picantes?- te ofrece la bandeja.

Coge un par.

-¿Quién eres y dónde está el Oliver que yo conozco?

Muerde una de las alitas y luego se bebe el vaso de agua de golpe porque están muy picantes.

-De todas formas... ¿me comprarás tú las escobas mejores?

-¿Yo? No tengo ni para la mía...pero cuando seas profesional el equipo te dará escobas. Tranquila. El equipo de Hogwarts siempre cambia. Todo el mundo crece. Seguro que sigues siendo la más rápida. Además, el resto sabe lo rápida que eres. Pero si ahora eres más fuerte, los sorprenderás. No puedes empeorar, Tabby.

Te acerca zumo.

-Es mejor para el picante, el agua no hace nada más que expandirlo.

-Pero si soy menos rápida, con la escoba que tengo ahora no podremos hacer frente a las Nimbus 2001 del equipo de las serpientes. Y aunque pueda conseguir un poco más de fuerza, no podría competir con ellos a ese nivel.

Acepta el zumo y es cierto que es mejor. Al menos, calma mucho más que el agua.

-Recuerda que el año pasado, casi me tiran de la escoba solo por chocar contra Flynt.

-Claro que no podrás con los brutos de Slytherin. Ni yo puedo. Pero si podrías tirar de más lejos y esas cosas. No le des muchas vueltas. ¿No te gustan las alitas? Karen parece engullirlas.

Y es cierto, la instructora tiene un montón de huesos delante,

-A lo mejor son su secreto.

-Pican demasiado para mí. Seguro que tiene un estómago de hierro o algo. Estará inmunizada.

Se fija en como la chica de pelo verde se ha zampado parte de su plato en un abrir y cerrar de ojos. Lo único que ha dejado es el rastro de los huesos de las alitas y seguro que aun puede comer más.

-Tampoco podría comer tanto. Es demasiada comida. Mi estómago es pequeño.

-Estás obsesionada con lo de "pequeño y pequeña" ¿Eh?

Seguís comiendo hasta estar saciados y es entonces cuando varios instructores, entre ellos Karen, se levantan. El que parece mayor de ellos, un hombre de raza negra y cara amable toma la voz.

-Bienvenidos todos al campamento "La Escoba Loca". Esperamos que os lo paséis muy bien y tengáis una experiencia instructiva. Parte de esa experiencia será vivir como en una concentración de un equipo o selección de Quidditch. Para eso hay que hacer dos cosas primero: examen médico y asignación de dieta. Estad atentos ala megafonia para cuando se os llame. Id a la caseta azul cuando ocurra.

Escucha atentamente a lo que dice el que parece el director del campamento. O, al menos, es el mayor de todos los instructores. Parece que van a tener un reconocimiento médico y les van a poner a dieta. Si ella está obsesionada con lo de pequeña y tal, los jugadores de quidditch están obsesionados con las dietas.

-Bueno... ¿y qué hacemos mientras esperamos? Si va por orden alfabético, seré de las últimas.