Partida Rol por web

Digo. Porque por tu post anterior, dices "más os vale volver pronto porque quedarse tirado con el coche en este momento sería un problema muy grande". Pensé que es porque habría algún tipo de problema con esa lluvia.

El vehículo avanza despacio, moviéndose entre el pavimento y la vegetación. Mientras tanto la lluvia negra cubre el cristal mientras el viejo limpiaparabrisas hace lo que puede. Duna se queja de la situación varias veces mientras avanza despacio. Los demás también os desesperáis por la lentitud a la hora de volver a un lugar seguro.

No había mucho que Coronas pudiera hacer. En realidad tenía muy poco en común con sus compañeros de viaje. Intentó dar un poco de conversación, pero no acababa de cuajar. Las respuestas a sus comentarios eran breves y cualquier intento por continuar la conversación se veía artifical. El paisaje tampoco ofrecía mucho interés y menos aún con la lluvia que caía que impedía ver a largas distancias.

Los minutos pasaban como horas, las horas como días...

La vieja furgoneta avanza despacio, cada vez más, mientras duna esquiva la densa vegetación que se ha comido la carretera e intenta visualizar la carretera. Finalmente acaba parándose, el motor esta muy forzado y se esta calentando demasiado. Continuar así podría forzar que el vehículo se estropeará definitivamente.

En la carretera, a salvo de la lluvia dentro de la tartana de duna os miráis las caras... y todas son de preocupación. Un rayo cae entre la lluvia negra y unos pocos segundos después se escucha el trueno. Aunque lo que os preocupa es si el vehículo aguantará, y si puede haber algo ahí fuera. Entre esa lluvia radioactiva que esta impregnándolo todo.

Rex estaba echado en el asiento de atrás con su enorme arma en brazos. El coche traquetea y se para. Rex estaba medio en coma y despierta sobresaltado. Coge su arma, su dedo siempre ha estado en el gatillo y mira en todas direcciones.

Estamos en medio de la jodida puta nada. ¿Qué huevos ha pasado Duna? ¿Sigues sin aprender a conducir?

Rex mira por la ventana, pero el agua negra que resbala por el cristal le impide ver más allá del interior del vehículo.

Duna resopla en lugar de contestar, casi parece que se este mordiendo la lengua para no enfadar a rex. Pesar continúa envuelta en la manta ajena a todo mientras coronas permanecía pensativo y en silencio.
Mientras tanto, rex limpia el vaho que se va acumulando en la ventanilla con la manga pero la deja peor de lo que estaba. Así que coge la parte de la manta que cubre los pies de pesar para limpiar la ventanilla justo a tiempo de que pesar se de cuenta del frío que esta entrando en su cubículo seguro dentro de la mantita.

Escucháis el sonido de un rayo que ilumina a vuestro alrededor pero no veis nada. Contáis los segundos hasta que se oye el trueno, han sido solo ocho.

Ahí afuera, entre la densa vegetación y la maldita lluvia radiactiva acabas de ver a una persona pequeña observándoos. Cuando ha caído el rayo se ha iluminado la zona alrededor del vehículo y estas seguro de que había alguien ahí fuera porque seguidamente ha huido. No sabes si es un niño o alguien que estaba agazapado porque solo has visto un rostro difuso que usaba unos prismáticos.

Acabo de ver a un jodido cabrón espiándonos con unos "agrandaojos". –Rex se refiere a unos prismáticos.– Esos hijos de puta nos vigilan. Seguramente quieran conocer nuestra ruta para asaltarnos en la próxima visita comercial. Vamos a por ese pingajo.

Rex patea el asiento del conductor para que apriete el acelerador de la bestia.

Rex señala hacía la densa espesura que se ha comido parte de la calzada carretera. Entrar allí con la tartana de duna es una locura, el vehículo es "perezoso" y el camino no esta limpio. La opción rápida sería salir corriendo detrás de esa persona. Pero claro, esta lloviendo, el agua cae en forma de densas y oscuras gotas de lluvia.

-No me parece demasiado prudente-contesta Coronas encogiéndose de hombros-pero como al fin y al cabo, el que te la vas a jugar eres tú...

Total que el vehículo ya estaba en marcha. Probablemente lo lamentasen pero...¿qué era esta vida sino un lamento constante?

-No me parece demasiado prudente-contesta Coronas encogiéndose de hombros-pero como al fin y al cabo, el que te la vas a jugar eres tú...

Probablemente lo lamentasen pero...¿qué era esta vida sino un lamento constante?

La experiencia ha demostrado que es mejor acabar con cualquier rastro que podamos dejar. Así que sólo nos la jugamos si dejamos vivo a ese pingajo. Vamos Duna, arranca el monstruo.

Se escucha un pinzamiento metálico cuando Rex carga su arma.

Duna mete la primera marcha, el vehículo avanza despacio mientras el motor resuena con fuerza. La furgoneta se abre camino atravesando la vegetación mientras evita las partes más grandes pero los baches son evidentes, la suspensión se esta resintiendo.
Rex y coronas observan desde los laterales de la furgoneta, ayudando a duna para dirigir el vehículo mientras pesar se queja desde la parte trasera.

Al cabo de un rato, ya que va avanzáis despacio, empezáis a elevaros dejando la densa vegetación por debajo vuestra. Descubrís que estáis siguiendo una carretera elevada, y esta se alza por encima de los árboles. Desde esta posición se puede apreciar que esta nueva carretera es más amplia, esta es mucho más grande que la que estabais usando, y en medio hay un constante bloque de hormigón que divide la carretera en dos. Pero la vegetación no se ha apoderado de ella, así que podéis avanzar más rápido yendo por aquí.

Duna para el vehículo cuando acaba la cuesta, dejando que el motor se enfríe. La lluvia ha bajado de intensidad, ahora apenas es una suave llovizna, y podéis ver un cartel al otro lado de la carretera. Se puede leer un nombre borroso* seguido de un número 5.
Detrás del vehículo podéis ver una marca en la carretera, una estrecha de una rueda.

-Parece que el cotilla ese se ha pirado en una moto-comenta Coronas-¿Qué hacemos? No creo que logremos alcanzarlo así que va a ser mejor seguir camino. Eso sí, habrá que estar bien atento por lo que pueda pasar.

Terminemos y cobremos. Aunque si venía en una moto, ese pingajo tenía que estar asentado cerca. Dudo mucho que sea un corredor solitario. Pertenecerá a alguna banda de la que escucharemos hablar en poco tiempo.