Partida Rol por web

Jericho decidió no seguir a Salvaje. Ya habían trabajado alguna vez para Hammer, y no era precisamente de los que se andaban con chiquitas. Era mejor dejar tranquilos a los que trabajaban con él. Además, ya se enteraría tarde o temprano de lo que tramaban esos cabrones.

—Dejad que Salvaje se pire. El alma de la fiesta sigue aquí, y todavía podemos sonsacarle información… cuando despierte, claro.

Levantó por la pechera a Titán, hasta tener los ojos a la altura de los suyos. Luego, con un gesto puramente paternal, le propinó un par de bofetadas.

—Oye, J, tú sabes más de está movida psíquica, ¿crees que sobrevivirá si nuestro amigo vuelve a hurgar con su cerebro o voy a tener que hacer de poli malo con este payaso?

Titán se recupera con las bofetadas de Jericho, pero nadie está de puta madre después de que te pinchen en el cerebro. ¿Le habrá dejado secuelas el jodementes de Smail?

Lo mismo le ha dejado balbuceando para el resto de su vida.

O no.

Creo que vas a tener que hacer de poli malo con este gilipollas.- respondo a Jericho.

Veo como el mierda de motero se enzanrza conmigo ... pero en el momento que me suelta , saco mis cuchillos y salto contra el ... - ESO ES MIO HIJO DE PUTA .... , me abalanzo contra el y le pongo los cuchillos en el cuello y lo tomo a la fuerza - DAME MIS GUANTES , sino te voy a matar y se lo dare para comer a Sonrisas JAJAJA.

Jerichó asintió y acercó todavía más el alelado rostro de su nuevo "amigo": había llegado la hora del interrogatorio.

—Muy bien, coleguita, podemos hacer las cosas por las buenas o podemos hacerlas a mi estilo. Y te aseguro que como las hagamos al mío, vas a desear volver con Smail para que siga jugando con tu cerebro de chorlito. ¿Me he expresado con suficiente claridad o necesitas una prueba de lo que Z y yo podemos hacerte?

Parece que Smail pretende ir tras Salvaje. Me la sudan él y sus putos guantes. A mí lo que me interesa es otra cosa...

... así que me abalanzo sobre la bolsa que contiene esa mierda verde: -A ver que tienes ahí, ¡puto traidor hijo de puta!.

Umbral recoge la bolsa de las manos de su seguidor, que no opone resistencia pues aún está intentando recuperarse. Dentro de la misma hay varias pastillas pequeñas, de color verdoso. ¿Te apetece probar una Umbral?

Mientras el resto se entretiene con Titán, Smail decide que sus guantes son muy preciados. Siempre es mejor una retirada a tiempo, pero ese no es el estilo del psíquico; asi que el motero se deshace de él empujándolo hacia atrás, saca su revolver y le dispara sin preguntar, al estilo barriobajero.

Veo como los mierdas que me acompañan pasan del tema, que panda de cobardes ... pienso mientras saca el arma y comenzamos a forcejear .... 

Salvaje desaparece definitivamente de las Cuatro Esquinas, dejando a Smail tirado en la calle. Esta vez tuvo suerte, pero quizá la próxima bala vaya directa a su cabeza. Smail se levanta maldiciendo al motero de Lord Hammer.

Me levanto indigando y me acerco al grupo ...

- PEDAZOS DE MIERDAS MIRA QUE SOIS COBARDES, JOOOOODER que tenga que venir yo para hacer el trabajo de un hombre... que verguenza niñita Jerico ..... -, miro de forma amenazante al Motorista que parecia que era el brazo fuerte del grupo pero no sabia si se habia metido la punta de la polla en el culo ( no es personal, es que pega que piensas esas brutalidades)

Me acerco a Titan de nuevo ..... - por tu puta culpa he perdido algo MUY IMPORTANTE para mi .... y lo recuperare ... pero tu ahora vas a contarme todo lo que necesito verdad .... sino voy a tener que urgar en tu cerebrito .... si ese cerebrito tan delicioso - momento que saco la lengua y comienzo a lamer la cabeza de Titan, en un solo lamentón y ciertamente asqueroso...

—No creo que sea necesaria la cata de sesos, Smail —dijo, conteniendo una mueca de —. Titán va a ser un buen pajarito y nos va a cantar hasta el Destroyer de los Kiss. ¿Verdad, coleguita?

El aliento del psíquico era un digno rival para el hedor que desprendía aquel lugar. No obstante, esperaba que aquella grotesca amenaza convenciese a Titán de cuales era su mejor opción.

Levanto la bolsa ante mis ojos hasta que las pastillas verdes se encuentran con mis pupilas dilatadas. -Esta debe ser la "mierda" que está causando tantos problemas. -Envuelvo con un viejo pañuelo unas pocas de esas piedras verdes y las guardo en mi bolsillo. -Tengo algo para ti Jade. -digo lanzando la bolsa restante a la matasanos. -Deberías analizar esa puta mierda. Sacaremos algo en claro seguro.

Puedo simplemente abrir mi mente y mirar. Mirar que cojones son esos esféricos cristales verdes, pero mi mente necesita descansar. Quizá mañana. Quizá lo haré mañana si Jade no es capaz de hallar respuesta en su "clínica".

- Joder...

Titán se recupera como puede mientras Jerichó le sujeta.

- Dejadme en paz.- Dice.- Sólo estaba trapicheando con un poco de Esmeralda de la banda de Lord Hammer; estoy hambriento y quería ganar unos pocos maravedíes. ¡Cómo iba a saber que daban esos chungos a la gente! Por eso estaba reunido con Salvaje, para decirle que su mierda no vale nada.

No me fio nada de este mierda ... en mi imagen parecia mas un traidor que una victima .... asi que no iba a dejar que se saliera con la suya ...CALAR A ALQUIEN ...

- No se yo piltrafita de mierda .... le tengo cogido por el cuello para evitar que se mueva demasiado mientras tenemos un ratito de intimidad, jijijij

- Os juro que estoy diciendo la verdad. ¡Soltadme!

Muevo la cabeza de lado a lado, negando.- Mal Titán, muy mal... te has apartado del Camino. Has desoído mis mandatos. Ahora por tu culpa Una Pierna y Castro están muertos. Dulce pronto lo estará también.

Pongo suavemente mis manos en sus mejillas y arrastro su cara hasta que está muy cerca de la mía. Puede oler mi fétido aliento. Puede oler el hedor a muerte que desprendo.

-Me debes tres vidas Titán. Dime, ¿cómo piensas compensar esto?.

- Lo siento.- Replica con los ojos llorosos.- Teníamos hambre...Ellos quisieron probar la Esmeralda para evadirse. No sabía que ocurriría esto...Perdóname.

-Entiendo... -digo con serenidad. -Dame tu arma Titán. Entenderás que no puedo arriesgarme...

Estiro la mano y espero que me de su pistola.

- No tengo.