Partida Rol por web

Una vez en el salón con el resto, el periodista se dirigió a los presentes.

"Bien. Creo que por aquí hemos acabado.

No obstante, me gustaría visitar al jardinero.... no recuerdo bien su nombre..." - preguntó.

Aunque no tenía excesivo interés en el jardinero, tras el testimonio de Olga, trató de desviar la atención de las sospechas hacia el hombre.

"¿Serían tan amables de indicarme su nombre y dirección?" - pidió Erik.

 Si claro, tome-dijo mientras les apuntaba con un lapiz los datos en una hoja.-Si a tenido algo que ver...-dijo angustiada.

Justo cuando Joseph iba a por la criada aparecieron en el salón la señorita Lesek y Sauch.

Señorita Lesek, por favor, será mejor que coja lo que necesite. Nos iremos cuando esté preparada. Dijo dirigiéndose a la criada.

El detective dio una última y profunda calada a la pipa, tras lo cual la coge con la mano izquierda y se adelantó para tender la mano al señor y a la señora Cornelisz.

Mañana sin falta nos pondremos en contacto con ustedes. Nos marchamos ya, pero cojan esto...

Le tiende una tarjeta con su numeros de teléfono de contacto.

Localicennos de inmediato si tienen cualquier noticia. En caso contrario mañana les veremos.

Tras esto se acerca al coronel y le saluda firmemente.

Señor cuide de la familia en estos momentos tan complicados.

Sam asintió con un suave gesto a las disculpas del coronel, añadiendo a éstas las suyas. Se disponía a explicarle, de modo más calmo y amistoso, la razón de sus últimas preguntas, sin florituras ni nada que indujese a una interpretación errónea, cuando Hudson apareció en la sala.

Escuchó las palabras de éste y miró al coronel, susurrádole un "A ésto me refería". Sonrió para sí al ver que sus indagaciones no estaban mal encaminadas, había hecho las preguntas correctas sólo que no a la persona adecuada.

La señora Lessek y Sauch no tardaron en presentarse nuevamente en esa sala. Sam permanecía en un discreto segundo plano, sin intervenir ni interferir de ningún modo con lo que allí sucedía. Era hora de marcharse, los Cornelisz estaban visiblemente fatigados con todo ese asunto, aunque lo lógico era que, mientras no tuvieran noticias de su hijo y dado lo reciente de todo, no consiguieran pegar ojo en toda la noche... al menos ese sería su caso de estar en igual situación.

-No dude en llamarnos, no importa la hora que sea -añdió cuando Peter les entregó la tarjeta.

 Ella no te puede decir el apellido por que no lo sabe, que yo sepa Thomas era policia. Y si no me equivoco esta vivo :p

Ya te digo que en este caso no es el mismo thomas, lo que no quiere decir que ese Thomas no vaya a aparecer en esta o en otra aventura :p

Por cierto, estas preguntas por el offtopic please ^^

 El general Elis se quedó con los Cornelisz explicandoles por que se iban con Olga. Tratando de hacerles entender que asi podría identificar a un sospechoso tal como habia dicho el detective. Los cinco ya estaban en la calle dirigiendose a sus coches, la noche estaba avanzada y hacia frio. Muchas cosas se habían desvelado esa noche, pero se suele decir que por la mañana las cosas se ven con mas claridad...

Bien detective Hudson, ha comentado que ha encontrado una posible pista... Dice Blood, sin miramientos.

¿Nos puede explicar a que se ha referido?

Joseph escuchó la pregunta del señor Blood, pero antes se dirigió a la criada.

Señorita Lesek, espere en el coche. La acompañó para abrir la puerta del vehículo y volvió cuando la criada se acomodó en el mismo.

No hay ninguna pista señor Blood. En el coche puede ver al responsable de la desaparición del bebé. Aunque mientras decía esas palabras el peso del pequeño libro que guardó en su abrigo se hizo mayor.

Sam parpadeó, atónita. Su mirada pasó del rostro de Hudson al de Sauch para posarse otra vez en el de Hudson. Frunció el ceño, no es que pusiera en duda la aseveración hecha por el detective, simplemente necesitaba más detalles del asunto.

-Por favor, detective, explíquese.

Pues ni más ni menos que lo que he dicho. La señorita Lesek es la responsable de la desaparición del bebé. Lo único que queda en lo referente a este caso es encontrar a quién se lo dió. Esperamos que con su ayuda podamos encontrarlo.

Hudson sacó un cigarrillo que tenía guardado en su abrigo y lo encendió. Llevaba tiempo con la necesidad de fumarselo.

El caso solo se ha aclarado un poco...

Prepotente, hijo de puta... Estos fueron los pensamientos que asaltaron a Peter.

Seguro que algo de su actitud se pudo percibir en su cara, pero de inmediato volvió a ser la misma de siempre.

Creo que debería aclararnos que le ha hecho llegar a esa conclusión y detalle lo que pueda su razonamiento.

Hudson dudaba si hablar más, pero teniendo en cuenta que el periodista estaba a punto de hablar tendría que contar más. Antes de decir nada le dió otra calada al cigarrillo.

La señorita Lesek dejó que unos hombres se llevaran al niño. Nos ha confesado esto mientras estábamos con ella en la habitación. Por eso dije que el caso estaba solucionado en parte. Hay que encontrar a esos hombres y daremos con el bebé.

Dió otra calada al cigarro mientras miraba los alrededores.

El problema está en cuanto buscamos los motivos que la llevaron a actuar así. Aquí es donde entra este diario. Hudson sacó un librito de su abrigo.

"Bueno sres. y sra." - dijo Erik, en un tono grave.

"Lo que hemos podido averiguar tras la declaración de la srta. Lessek es que el bebé no es hijo de los Cornelisz. Es el hijo de una tal María, de quien tenemos un diario estremecedor.

Olga recibió una visita un tanto misteriosa, instándole a dejar la ventana de la habitación del niño, a fin de poder secuestrarlo." - relató el periodista.

"Ahora creo que lo mejor es que Olga esté bajo protección. Su testimonio será vital.

El primer paso debería ser encontrar a María, si es que aún vive."

Sam frunció el ceño a todas luces sorprendida y por qué no, confundida por la revelación. Miró el libro que Hudson tenía en sus manos y parpadeó mirando por encima de su hombro en dirección a la morada de los Cornelisz.

-Señores, es mejor que continuemos esta conversación en la comisaría, no es aconsejable que la mantengamos en este sitio. Si las cosas son como Erik plantea mientras antes pongamos distancia entre esta casa y la señorita Lesek mejor.

Buscó en sus bolsillos las llaves del coche.

-Detective, usted y Peter deberían ir en su coche con la señorita Lesek... Ambos van armados y será más seguro -miró entonces al periodista-. ¿Vino usted en coche? Sino, haga el favor de subir al mío que yo lo llevo, así nos pueden, de paso, poner al tanto camino a la comisaría de algunos detalles porque pese a que nada estaba descartado, no dejo de estar sorprendida.

Peter, sin decir más mira el diario y asombrado lo cierra tras leer las palabras escritas en él.

Vamos a la comisaría, sí.

Joseph resopló. Desde luego iba a ser una noche muy larga. Guardó el diario y se dirigió hacia su coche.