Partida Rol por web

Emma, que casi se había olvidado de su situación y se estaba sintiendo muy cómoda con el joven animal, pone los pies en el suelo de nuevo al oír los gruñidos. Se asusta sin poder evitarlo y cuando cree que va a morir ahí mismo, nota como le tiran del pantalón.

Se queda mirando al animal, como la arrastra hacia su posición. ¿Quiere que le siga? No lo duda ni dos segundos, y se agacha moviendose lentamente por donde le indica el perro.

El perro empieza a moverse, pegando al máximo que puede su cuerpo al suelo y mirando de reojo si lo estas siguiendo a medida que pasa por entre raíces y por debajo de las onerosas plantas del lugar.

- ¿Y bien? Esperamos un poco más o seguimos buscando la base... 

Yo espero.

Respondió Emilie, frunciendo el ceño y cruzándose de brazos. Ellos si querían podían largarse.

Consigues evadir los hocicos que te persiguen olfateando la zona mientras te arrastras como puedes por debajo de las plantas intentando escapar de esta pequeña encerrona en la que te has metido tu sola.

Puedes observar como el perro que te ha sacado de allí comprueba periódicamente que aun le sigas y te va llevando por varios sitios que parece que se conozca a la perfección. Para ti es como si estuvieras dando muchas vueltas o yendo a ningún lugar en particular pero no puedes negar que hasta el momento ninguno de los perros te ha atrapado.

Aunque los puedes notar pisándote los talones.

Finalmente, cubierta de barro y alguna que otra cosa desagradable que había en el suelo ... llegas a un punto en el que el joven perro se para y olfatea el aire. Parece que ya nadie os sigue y delante de ti puedes escuchar las voces de alguien diciendo "¿Y bien? Esperamos un poco más o seguimos buscando la base..." y tu hermano que responde "Yo espero."

Han pasado unos 5 minutos desde que estáis esperando ... se oyen sonidos de perros ladrando a su manera pero no hay ningún grito femenino ni nada parecido.

Al cabo de este tiempo, parece que el silencio vuelve lentamente.

Al ver que el silencio vuelva a la zona Zulene lo intenta de nuevo.

Primero en voz baja, como susurrando algo...

- Emma, ... ¡Emma! 

Luego un poco más alto.

- ¡Emma! ¿Estás ahí? ¿Estás bien? ¿Puedes orientarte hasta nosotros por el sonido de nuestras voces?

Puedes escuchar mas voces luego, primero en voz baja, como susurrando algo...

- Emma, ... ¡Emma!

Luego un poco más alto.

- ¡Emma! ¿Estás ahí? ¿Estás bien? ¿Puedes orientarte hasta nosotros por el sonido de nuestras voces?

¡¡ Me cago en la grandisima pÚta que la pario !!. - refunfuño con rabia, sin molestarme mucho por si ofendo a las presentes.

Me giro a las demás - Voy a volver. Si en 5 minutos no he vuelto, para allá deberían de estar os restos de la lanzadera. Estad atentas a la orientación del sol si en algún momento perdéis el norte. Os debe de quedar en todo momento al la derecha, un poco hacia delante. Id. - Acto seguido, tras dar algunas ligeras indicaciones de orientación y sin disimular mi frustración por tener que hacer lo que estoy haciendo, me dirijo nuevamente al interior del "campo de amapolas".

No soy ningún maldito héroe. Si se la están zampando, no pienso jugarme el pellejo. Mi madre ya sufrió lo suyo para parirme, como para mandar ahora tanto trabajo a la mierda.

Emma se despide del joven perro que le ha salvado la vida.

Gracias. Le dice con dulzura acariciandole la cabeza y luego dejándole marchar.

Oye las voces.

¡Lo intentaré! Exclamo en voz alta, pero no demasiado, no quería que los perros la oyesen.

De repente todos escucháis la voz de Emma, no parece estar muy lejos y parece responder a Zulene diciendo "Lo intentaré!" ... justo cuando Ellis parecía volver a entrar en la plantación.

Escasos segundos mas tarde, podéis ver como sale Emma ilesa de las plantas ... eso si, sucia de toda clase de sustancias pegajosas y embarazosas que no le da un aspecto muy higiénico.

Pero teniendo en cuenta que ha sobrevivido ... ¿Que importa haberse restregado por el barro y las heces en un planeta alienigena?

A unos metros por detrás de ella, podéis observar que algo se mueve, lentamente ... observando.

Vale, pues me quedo.

Con un rápido vistazo miro quien de nosotros tiene alguna arma de fuego. Si hay alguno, le intento llamar al atención con un sutil silbido y le hago algunas indicaciones con la mano, aseñalando hacia donde parece que algo acecha.

Puag.. qué asco.. Murmura mientras se mira y se intenta quitar algun pegote de encima. Era de agradecer sentirse a salvo y poder ponerse de pie. Pero estar sucia y oliendo a... excrementos de animales, no le hacía sentirse muy cómoda.

Al ver los movimientos de Ellis, Emma se gira.

¡No! ¡Quieto! Dice poniendose entre el sitio del que provenía el ruido y Ellis. Es bueno. Me ha salvado la vida. Se agacha para intentar ver al joven perro que la había salvado. No se esperaba que la hubiese seguido.

Con cara de incomprensión levanto las manos hacia Emma, mostrando que no tengo armas. - Pero si no he hecho nada.

Un chucho/hiena/lobo de esos sale de las plantas con las orejas gachas y se pone detrás de Emma. Parece ser mas pequeño y delgado que los que os han atacado, probablemente sea un jovenzuelo.