Partida Rol por web

Tras pasar todo el día durmiendo despiertas en el Palacete de Pedralbes, ya que Corts te había dicho que lo hicieras. Al ir hacia el hall principal encuentras a Corts sentado, el cual te hace un gesto para que sientes junto a el.

Os despertais en el hotel de Sabadell donde habeis pasado la noche al huir de un posible ataque Sabbat.

Al mirar tu movil tienes un SMS de un número desconocido. Dice que es Daylon Grey, un ghoul de "La Mujer" y que vayas a recogerla en el lugar donde os conoceisteis, extremando las precauciones.

Te despiertas en uno de los hoteles del centro de Barcelona.

Me levanto y voy al pequeño saloncito que nos sirve como sala de reuniones.
Me acomodo y comienzo a revisar mi teléfono.

Kyriand saluda inclinando la cabeza antes de tomar asiento al lado de Corts

- Buenas noches excelencia.

48h son muchas horas, incluso para un vástago. El exceso de cordialidad, pese a la posible intervención de Trump, no podía dejar de incomodarme en cierto modo. Lo más sencillo era pensar que pretendieran seguirme y que les llevara hasta los demás pero... 

Salgo del hotel confirmando antes en recepción que mi cuenta este pagada y pregunto si han dejado algún recado para mi, tras ello abandono el hotel de camino a la boca de metro más cercana. 

--He recibido una llamada de alguien que dice ser un ghoul de la mujer, quiere que vaya a recogerla, y que extreme precauciones, pero iré solo, no quiero niñas voladoras, ni muertes extrañas, yo la recogeré de manera segura y limpia.-- su tono de voz no dejaba lugar a dudas, aquello no era una de esas decisiones que se toman en consenso, mas bien era una decisión unilateral y dictatorial.
--A ver si cerramos ya este maldito asunto que empezó con el suicida.

--Ustedes mientras tanto pueden proseguir con la tarea que nos ha traído hasta aquí.
Para ello estaría bien para empezar contar con unos cuantos refugios seguros, con buenas mazmorras para futuras necesidades.
Después de eso reanudáremos la búsqueda de refugios--alguien debía tomar el mando.

Levanto la vista de mi teléfono.

-Tal vez crea que hice eso porque me aburría...
Soy consciente de mi aspecto, pero no soy una niña, ni con mucho...
La situación se complicó y me vi obligada a tomar medidas... Bastante tuve con dale con vida.
Si va a ir a buscar a la mujer, espero tenga cuidado, si se encuentra con el diabolista que me asaltó, dudo que llegue a verlo venir...
Aunque por otro lado, no deberíamos esperar algo diferente que el señor Guasch...
Por cierto, ya que perdí a mi ghoul, voy a tener que buscar otro, tal vez necesite su colaboración en un momento dado.

Lo dice dándolo por seguro, tampoco parece ser un tema discutible.

-- Solo digo que hay que ser mas ciudadoso para no tener que salir volando.
Ya medirá a quien debo subyugar la mente

Buenas noches Sr. Hinds.

Cojo una copa y bebo de ella.

Ayer pidió que le entregara miembros para su propia manada, pero ayer igualmente se rehusó a unirse a nosotros con la vaulderie. Hago un gesto de negación con la cabeza.

Si bien es cierto que ha trabajado con el Arzobispo de Valencia, debería saber que el respeto a los superiores es esencial y que los ritos de la secta deben ser seguidos. Con lo cual niego que ningún miembro se una a usted, es más, usted mismo pasará a disposición de Eustaquio Velazquez, se hermanará con el y su manada y darán caza a esos Camarillas.

Dejo la copa en la mesa con gesto serio.

Puede marcharse.

El recepcionista te deja un mensaje.

Cita:

Una vez sales del hotel, no percatas que haya nadie siguiendote con lo cual sin problemas te diriges al lugar donde has quedado con Diego para tu extracción.

Sales del hotel y usas al taxista ya dominado para que te lleve al lugar del encuentro con "La Mujer"

Tras la marcha de Diego, quedais las dos solas en el hotel.

- Sr Corts. Creo que se equivoca. - replica serio - No rehusé a la valduerie porque si. No fue una decisión por una pataleta, sino por otra cosa. No merezco semejante regalo aún. - suspira - Como bien debe saber de boca del Arzobispo de Valencia mi manada fue de las mas fuertes y destacadas por el lazo que nos unía. Eran mi familia. - recalca con rabia - y perdí a mi familia. Unirme en valduerie a mis nuevos hermanos en esta ciudad seria una falta de respeto a mi familia que no pude salvar. - aprieta los puños de manera que se oye el crujir de sus huesos - Por eso pido una manada, para restablecer a mi familia, una vez mi familia esté restablecida, seré merecedor de la sangre de una Valduerie. Hasta entonces no puedo permitir gozar de ese privilegio. - se levanta - si aun sabiendo el porque desea que me una a la manada de Eustaquio nos presentaremos ante él tanto mi aprendiz como yo para presentarnos formalmente. - dice dando la espalda al anciano esperando algo para partir o escuchar lo que tenga que decirle el anciano.