Partida Rol por web

Aya se encogió de hombros ante la pregunta de la maestra, su cabeza aun estaba hecha un lio con lo sucedido.

- Uhh..pues no...el instituto era hasta ahora bastante tranquilo, pequeños altercados ocasionales entre alumnos, discusiones en la asociacion de padres pero nunca un escándalo de esta magnitud con un profesor. Pestañeó un par de veces mirando a la profesora directamente.

- Luego me doy una ducha y me cambio, prefiero hacerle ahora la entrevista. No se preocupe que es escueta y yo no muerdo. Sonrió divertida y se acercó junto a ella quedándose de pie mientras Aoki se sentaba en las gradas.

-¿ Se las leere todas y sea libre de empezar a responderlas en el orden que quiera vale?Sacó una pequeña libreta y un bolígrafo con detalles de ositos en su carcasa.

- De donde es? su edad? donde cursó estudios? anterior centro de estudios? Metas a cumplir en este curso? y luego vendría algunas mas personales como... ¿tiene pareja? Alguna anécdota que le haya pasado como maestra? Hobbies en su tiempo libre?..Se detuvo unos segundos por si había alguna duda antes de seguir-Bien, eso sería todo ahh y una foto para el periodico...le importa que le saque una? Dijo tras apuntarla con el objetivo de su cámara y mirando a traves de la pequeña pantalla de LCD.

" Vaya, estando la maestra asi sentada, desde esta perspectiva se le acentua su escote..." Sus mejillas se sonrojaron muy levemente y sonrió mirándola por encima del disparador.

Antes de empezar a responder me veo enfocada por la cámara. No soy una vergonzosa, pero así tan de repente y con su miradita, no ayudan a que me calme- Ademas, que con todo lo sucedido hace un momento, debo tener cara de confusa, cabreada o algo así, eso me pone nerviosa -intento dar mi mejor sonrisa- No hay problema -espero a que haga la foto, luego me relajo un poco- Soy de una ciudad a pocos kilómetros de aquí, allí curse estudios y superé las oposiciones. Aún no tengo ningún objetivo para el curso, soy sustituta y algo novata, es mi segundo año como profesora, me conformaré con ayudaros en lo que pueda... ¿Alguna anécdota? Pues... n-no, no se me viene a la mente ninguna, lo siento -si, siento cierto rubor- Mentira, aquella vez, con aquellos alumnos... pero no puedo contarle eso -suspiro- ¿Que más? ¿Pareja? ¡Je! Eso es puro cotilléo ¿Te hago yo esas preguntas a ti para sacarte los colores? -me río un instante, claramente bromeando- Pues no, estoy solterita, por desgracia, o por fortuna para los demás, aunque viendo el panorama, quizás debería decir que estoy casada, con un militar, cinturón negro en karate, muuuy posesivo conmigo, y tiene armas en casa, ballestas y granadas -me sonrío aún más, distraida de lo anterior con la entrevista, aunque intento tomarmelo en serio- De mis hobbies, el más obvio es el deporte, practiqué la gimnasia artística, pero me gustan cosas más normales... el cine, salir de fiesta, visitar lugares nuevos... tenía en mente visitar la ciudad, ver que puedo hacer por aquí para divertirme, incluso iban a mostrarmela, pero... -me encojo de hombros- Mi cita se fastidió -descarto llamar a mis antiguos compañeros de la banda para ver la ciudad, pues no quiero acabar con resaca otra vez- Aún no conozco a nadie que me la enseñe -hago memoria de las preguntas, y creo haberlas respondido todas. Me la quedo mirando un instante, se me dibuja una sonrisa- ¿Que hay de ti? ¿Me responderías tus propias preguntas para mi, "co-ti-lla"? -aunque he pasado lista, le hago notar que no me ha dicho su nombre aún.

Si,solo a ella

Aya fué anotando de forma rápida todo en su bloc y cuando se paraba para mirarla se dedicaba a mordisquear el capuchón del boli.

- A la gente que lee esa sección del periodico le gusta enterarse de cotilleos, es lo que mas les atrae.
Cuando hizo el comentario de que haría ver que estaba casada con alguien armado y peligroso Aya no pudo evitar reir, la hizo realmente gracía.

- ¿Yo? pues no hay mucho que contar...La idea de que la "entrevistaran" a ella le dió un pelin de corte, sonrojandola. -Pues... mi nombre es Aya, llevo viviendo toda la vida con mis padres en la urbanizacion cercana al instituto. Me gustaría estudiar periodismo al salir del instituto y trabajar en algún periodico importante...puede que incluso en la tv.

- Vale, ahora las personales, y si, dan corte de responder ehh jeje....Pues no tengo pareja...la imagen del chico al que le había hecho esa misma tarde una felación le vino a la mente incomodándola antes de proseguir...me gusta la fotográfia, leer, el cine, salir con las amistades....ahora que pienso señorita Aoki, podría enseñarle la ciudad si quiere, no es molestía alguna. Me servirá de excusa para salir un poco que últimamente tengo complejo de hermitaña de tanto encerrarme a estudiar.

Nunca me imaginé que la policía llegase tan pronto, apenas tardaron unos minutos desde mi llamada así que sorprendida observo la escena, la verdad es que el profesor Shibuya no me da ninguna pena y lo miro con asco. ¿Como puede hacer eso a una niña de 13 años?. Aunque lo más patético de todo son las mujeres que lo defienden, si ellas o sus hijas hubieran sido las violadas seguro que no serían así de idiotas. Ellas no vieron llorar a Tomoyo ni la vieron totalmente ensangrentada y muerta de miedo como yo. Es muy fácil ser bondadosas con un violador cuando no se es la victima ni se tiene contacto con ella.

Iro, ahora estoy con la chica en la enfermería esperando a sus padres, mejor dejamos lo de la tablet para otro día.

Sin decir más palabras pero dirigiendo una mirada de ira a las dos estúpidas defensoras del violador regreso con la pobre Tomoyo a la enfermería.

Me fijo más atentamente en su rostro y en la forma que tiene de expresarse- Si, podría ser, en televisión es más importante tener buena fachada y una voz llamativa -asiento- Creo que podrías tener futuro con tu aspecto en television, Aya -se me hace extraño, llamarla por el nombre apenas conociendola, pero justo ahora no recuerdo su apellido y no me lo ha dicho. Hago memoria de la lista de clase, hasta que tras mucho esfuerzo de mi limitada cabecita doy con él "Kumagae, Kumagae Aya", y que debería haberla llamado "Kumagae-san". Sigo escuchandola, hasta que llega a su propuesta de enseñarme la ciudad- ¿Querrías? Pense que por ser tu sensei te incomodaría algo así, pero... si dices que por ti está bien... -le sonrío agradecida y me pongo en pie- Ese era mi plan para esta tarde, si no tienes otra cosa que hacer ¿Cuento contigo, o buscamos otro día? -doy los primeros pasos hacia el vestuario mientras escucho su respuesta, y luego añado- Si vas a cambiarte, te acompaño -me quedo un instante pensando en la frase mientras camino- ¿Así dicho está bien? No hay motivo para que malinterprete mis intenciones, la acompaño por su seguridad ¿Porque debería explicarme? -la idea de que ella pueda pensar que yo pienso en ella de alguna manera diferente a como lo que es, una alumna, me resulta seductora, rebuscada y bizarra a partes iguales- Aún no se si Dao-san es realmente el culpable, y te he entretenido un poco con mis preguntas, disculpame. Si hay un pervertido suelto, no querría dejarte sola, que te retrasaras más que tus compañeras y que te sucediera algo -le digo- Ah, ¡Ya esta! ¡Lo dije! Cielos, ¿Porque le doy explicaciones?

Me puse a correr junto a los demas y como siempe me concentraba tanto que no prestaba atencion a lo que pasaba a mi alrededor. Aya me explico que mi hermano se habia metido en problemas.

-¿Que?- Le dije a Aya, buscando con la mirada a mi hermano que en ese momento iba hacia el baño.

Luego fue el otro chico que me comento algo, pero justo cuando le iba a contestar oyo las voces afuera y siguio al resto para ver que pasaba.

-¿un violador en el colegio? ¡Sera Cerdo!.- No me meti, como lo hizo Aya y finalemente se llevaron al profesor en el coche de la policia.

Tras acabar las clases esperaba a mi hermano en la salida y cuando le vi sonrei.- Hola hermano. Hoy no tengo entrenamiento ¿Nos vamos para casa? por cierto ¿que ha pasado en clase de gimnasia?¿te has metido en lios?

No habia podido hablar con el desde entonces, asi que era momento de que me contara lo que me habia tenido preocupada todo el dia.

-¿Por mi aspecto?...que va, si tampoco soy tan guapa... Se ruboriza por el comentario, mientras van juntas al vestuario.

- Claro, esta tarde ya va bien. Puedes tutearme, odio los formalismos, a no ser que la otra persona me caiga mal. Rie con el comentario, una sonrisa bonita y grande mirandote directamente a los ojos.

- Me hace un favor, me daba un poco vergúenza pedirselo. Estoy acostumbrada a ducharme con las demás chicas....incluso mi amiga Reika se ofrecía siempre a frotarme la espalda...y ahora con lo del violador...se me pone la carne de gallina.

Al llegar al vestuario y mientras hablaban Aya se fué quitando la ropa sin ningún pudor, aunque aun algo sonrojada.

"Espero que no me queden restos de semen entre las tetas y me vea así, sería muy vergonzoso...justo me vine a la clase de gimnasia después de que ese chico se corriera encima..." La idea además de preocuparla y sin saber bien el porqué la excitó.

- ¿Por que no aprobecha el tiempo y se ducha tambien? Se sorprendió preguntando a la profesora. pero es que verla ahi plantada le resultaba extraño.

Mientras se dirigía al baño, pasó por la escena, se quedó curioseando, especialmente al ver violencia, intentaría detenerla. Pero la profesora y Aya se hicieron escuchar y la discusión con el oficial abusivo no duró mucho... de todas maneras le daba pánico meterse, pues más gente se podía dar cuenta de su peculiaridad.

-

Finalmente terminaron las clases y no hubo mucho problema después de aquella escena. Al salir se encuentra con su hermanastra, sonríe a la vez que ella lo hace cuando se notan. Pero aquella bella sonrisa sincera que le provocó su hermana, no tardo en opacarse, pues recordar los eventos de la clase de gimnasia, incluyendo aquel funesto evento sobre el tema de la violación, eran bastante perturbadores... hubiera deseado ayudar de alguna manera a la pobre niña, pero imaginaba que ser discreto al respecto era lo apropiado.

-pues...- musita, mientras comienza a caminar -...no es nada...- voltea y sonríe para ella, no quería preocuparla. No le parecía apropiado preocupar a su hermana o esperando las gracias de parte de Mahiru. -solo intenta no toparte con Tetsune... parece hasta peligroso...- le pide poniéndose un poco serio, pues le preocupaba mucho su hermana, especialmente con aquella figura; de hecho, pensaba comenzar a estar un poco más atento. Las actitudes de Tetsune y la violación de una menor, ya no podía sentir que fuera un ambiente seguro para su hermosa hermana.

Luego de caminar un rato, llegan a un pequeño puente, bastante tranquilo y acompañado de un ruido armonioso del agua moviéndose bajo éste. Nunzio voltea y se detiene; ambos hermosos y exóticos extranjeros, parecían más que familiares para algunos, pero Nunzio aún no se daba cuenta de como podía comenzar a confundir su relación con su hermanastra.

-Hermanita, ...- le dice, mientras la mira con dulzura y algo de preocupación, sus suaves y ágiles manos toman las de ella, para enlazar sus sentimientos y hablarle con sinceridad -... comienza a preocuparme tu seguridad... con todo lo que ha pasado... el imbécil de Tetsune.- no solía usar groserias, especialmente frente a una mujer, pero su rostro se amargo al solo mencionar el nombre del abusivo -... y lo del maestro...- sus gestos cambia a preocupación y algo de lastima por la pobre víctima del pedofilo aquel. Ella era una atleta y hasta a veces le parecía más fuerte que Nunzio, pero no podía dejar de preocuparse. -...yo te cuidaré.- le promete, solemnemente; mientras sostiene su mirada sobre la de ella.

La hermana o hermanastra de Nunzio me iba a contestar, pero en ese momento más sirenas se escucharon y todos terminamos yendo a ver que pasaba.

Acusaban a Shibuya-sensei de ser un violador pederasta, aunque este decía ser inocente una y otra vez lo golpeaban bastante, no me agradaba, pero si era culpable sería peor lo que le harían en la cárcel.

Al final se lo terminaron llevando y nos dieron el día libre.

No tenía mucho que hacer y note como todos se estaban retirando, ahora que haría? Iría a la enfermería a ver a la chica o me quedaría.

Escuché como Mahiru hablaba sobre lo ocurrido y luego se iba contoneándose de una forma provocadora.

Que rayos?

Espere a que todos se fueran para quedarme con Aya-sensei:

-Le dijo lo de Tetsune? Como salió corriendo tras escuchar las sirenas? Creo que es un dato importante...-

Nos dirijimos hasta los vestuarios femeninos- No es molestia, Aya -al llegar, me fijo en mis alumnas, varias tienen un físico llamativo, aunque no doy muestras de una actitud diferente, verlas cambiarse es algo bastante natural. Es mi imaginación la que vuelve a volar por si sola- Nos entretuvimos con su entrevista y mis preguntas, va más retrasada que el resto, al final está claro que nos quedaremos a solas aquí ella y yo, las demás chicas se ducharán rápido, deben estar deseando irse a casa... y luego... -escucho su idea de ducharme junto a ellas- Ya lo hice apenas hace unas horas en casa, antes de venir a clases, y yo no he estado corriendo y sudando, como vosotras. No lo necesito de momento -trago saliva- Podría... haber mentido, decir que no me duche aún y unirme a ellas, pero ¡Que guarrada! ¿Que pensarán de mi si les digo que vengo a clase sin lavarme? Ademas, no soy de esas pervertidas... no, no lo soy -mantengo la mirada baja, solo observando de reojo a Aya y las demás chicas de vez en cuando, con algo de rubor por mis propias fantasías en las que me ducho y atraigo sus miradas. Esperaré ahí, hasta que todas las alumnas terminen de ducharse y vestirse, y esté segura de que se marchan a casa y a salvo, sin ningún encuentro más con ese pervertido de Tetsune o con el violador.

Aya se quedó en ropa interior mientras guardaba su libreta, su camara y sus cosas en el interior de la bolsa para poco después meter esta en su taquilla. Mientras las ultimas alumnas habian acabado su ducha y ya se iban. Se giró hacia Aoki tras su negativa de darse una ducha.

- Vamos no sea vergonzosa profesora La cojió de la mano sacandola de sus pensamientos, y la instó a que se levantara del banco de madera. - Para que llegar tarde a casa y gastar agua si ahora no hace nada y puede hacerlo aquí. Además ya se fueron todas y no tengo a nadie que me frote la espalda con la esponja, me haría un favor. Sonrió, sonrojandose ligeramente por el atrevimiento, pero era cierto, por norma general su amiga Eika o Soun solían hacerlo.

Se quitó el sosten mostrando unos pechos firmes y bien definidos coronados por unos pezones rosaditos y duros a causa del frio del vestuario. Luego se agachó bajandose las braguitas, levantando ligeramente uno de sus pies para sacarselas, revelando al agacharse una insinuante visión de la rajita de su vagina depilada desde atrás y el punto rosado donde se marcaba su ano. Se irguió y dió un par de saltitos hasta situarse en medio de las duchas, donde giró uno de sus grifos y comenzó a caer una cascada de agua caliente.

Noto que la profesora esta mirandonos...para ser extraño...me cambio sin ir a un lugar privado...de forma que la profesora me va...me pongo el mismo tanga de hilo y sujetador de encaje que llevaba antes (lo que provoca una sorpresa en sus compañeras....es muy raro verme en ropa interior) pero lo hago con parsimonia mientras espio las reacciones de la profesora...y cuando me he cambiado y puesto el uniforme encima me voy contorneandome mirando hacia ella y me voy

Master voy a la enfermeria...abro la puerta ¿que veo y cómo es la situación?

La miro desvestirse ante mis ojos, igual que hicieron las demás, aunque al estar a solas todo tiene una perspectiva diferente. Me quedo observandola mientras se ducha bajo el agua caliente, aunque no tardo en desviar la mirada a cada tanto, para no ofenderla- Me gusta dar rienda suelta a mis perversiones, pero, con mis amigos... mis compañeros de mi banda, mis alumnos el año pasado... -me bajo la cremallera de la sudadera, me la quito y la dejo sobre una de las bancas de madera, luego, las zapatillas deportivas. Me detengo ahí, conteniendo el impulso de seguir desnudandome, y me dejo puesto el pantalón de lycra y la camiseta de tirantas- Maldita sea, que ganas... Solas las dos. Esto es tan íntimo, y tan erótico. Haría algo más que frotarle la espalda ahora mismo pero, no, no lo haría por ella, solo por el calentón, no estaría bien -se quedo parecer ruborizada, pero mantengo aún mi compostura- Te ayudaré con tu espalda, pero no es necesario que me duche o me... desnude ¿O si? -le sonrío- "¿O si?" ¿Has preguntado "¿O si?"? ¡Pues claro que no! ¡Y si te dice que si! -le hago un gesto para que se acerque, cuando ha terminado en la ducha- Ven aquí, venga.

- Pues claro que si, si no no podrá acercarse y mojaría su ropa....Vamos, no me haga salir desnuda del agua caliente...cogeré frio! Aya sonrió e hizo un gesto con su mano insistiendo para que viniera a darse esa ducha. " Tiene un cuerpo muy bonito....la verdad que me pone mucho la idea de que desnuda me de un masaje..." Se mordió el labio inferior y se sorprendió sonriendo de nuevo como una tonta y guiñándole un ojo a Aoki. [imagen borrada por contenido ambigüo]

Me aferro al poco sentido común que me queda- Quiero hacerlo, aquí y ahora, en estos vestuarios y con su actitud... me da morbo, pero no sería inteligente... mi primer día de clases, y ese pervertido de Tetsune está suelto, puede que aún rondando el instituto... aún así, podría... ¡No! ¡Ya está! ¡Olvidalo de una vez! -suspiro, adoptando una postura más firme- Abre el grifo con el agua fría un rato antes de salir, así no notarás tanta diferencia de temperatura -explico- Esta tarde las dos tendremos tiempo de sobra para... -no termino la frase- ¿Conocernos? ¿Divertirnos? No encuentro una palabra que no me haga pensar en ella y yo... casi mejor no digo nada más -vuelvo a hacer el gesto, para que se acerque a mi- El frío solo es un pequeño sacrificio, si quieres que te ponga las manos encima, en tu espalda, y... eso, ven aquí -la miro decidida, no voy a cambiar de opinión. Sigo sintiendome insegura aquí- Por favor.

- Esta bien...Pese a la decepción sonrió, bajó temperatura al agua y se enjuagó un poco antes de acercarse a la mujer.

Corrió su melena empapada sobre su espalda por encima de su hombro para dejar libre su piel mientras le acercaba la esponja jabonosa. Se dió la vuelta-

- Gracias, me gusta primero suavito y luego mas fuerte, que se ponga la carne un poco rojita. Le dijo mientras miraba de reojo hacia atras.

Agarro la esponja y empiezo a pasarla por su espalda. Escucho su petición, pero yo soy quien decide, y lo hago a mi manera- A mi me gusta suave todo el tiempo, que sea como acariciar la piel, incluso... llegas a sentirlo de una manera sensual ¿No te parece? -y así lo hago, intentando transmitirle esa sensación, suave, a traves de sus curvas, el arco de su espalda- Aguanta un poco si te hago cosquillas -le pido, sonriente, mientras deslizo la esponja por su costado, hasta las caderas. Sigo así un rato más, intentando hacerla sentir cómoda, y despues aprieto un poco, lo justo para frotar y limpiar, aunque no tanto como para dejarle la piel enrojecida, como ella querría.

- Aquí tienes -extiendo la mano por encima de su hombro, apoyando en este mi antebrazo, y le devuelvo la esponja, una vez que he terminado- Ha sido relajante, aunque sigo excitada por la situación -vuelvo a dedicarle una sonrisa- Enjuagate otra vez el cuerpo y marchemonos, no debe quedar mucho para el almuerzo. Te puedo llevar a casa, he venido en el coche -y ademas, pregunto- Antes de irnos ¿Te importaría prestarme una toalla para mis manos y los pies?

Aquel suave masaje con la esponja por su espalda la ruborizó, no sabía porque pero le estaba gustando demasiado, aunque intentó que no se le notase de forma tan evidente.

- Gracias, ha sido muy...relajante. Dijo agradecida recogiendo la esponja que le devolvía. Claro, mi taquilla esta abierta, encontraras varias plegadas limpias en el estante de arriba. Dijo mientras se enjuagaba bajo el grifo.

Se vistió de forma rápida para no hacer esperar mas a Aoki. Si me acercas me harías un favor, ahora con este frio oscurece tan pronto que me da no se que volver sola en el bus, además mis padres estan de viaje y llegar a una casa vacia....ufff, se me pone la carne de gallina de pensarlo. Dijo poniendo cara de susto para luego sonreir.

- Bueno, ya estoy lista, cuando quieras Aoki...