Partida Rol por web

Cadaño nuestras espadas a Castilla ensanchan más

El Templo

Cargando editor
16/02/2012, 13:18
Director

Los dieciocho supervivientes no tienen más remedio que abandonar a sus muertos y continuar adelante, con la esperanza de encontrar el templo antes de que anochezca.

Desgraciadamente, no tienen tanta suerte y antes de que puedan llegar al templo ha anochecido, así que el grupo se reúne en torno a dos pequeñas hogueras, por aquello de no ser visibles a distancia, para combatir el frío, aunque son tan pequeñas que no lo consiguen.

Apenas descansan unas pocas horas, en un duermevela en el que casi todos los hombres pese a estar absolutamente exhaustos se sumergen. Pues es mayor el temor a esos condenados indios con sus endiablados palos.

Esas pocas horas se hacen eternas, por fin amanece y con la luz una nueva desgracia: Koldo, un tipo enorme, guipuzcúano, aparece degollado y inexplicablemente, sin sangre en el cuerpo! como si un animal nocturno le hubiera chupado toda la sangre.

 

Cargando editor
16/02/2012, 13:22
Director

Para Heriberto

Al despertarte vuelves a oler aquél olor tan fuerte que no conseguiste distinguir. Olor mineral o animal o vegetal, lo mismo da. No lo habías vuelto a oler desde entonces, huele fuerte cerca del cadáver pero decides no decir nada, más que nada porque Pizarro y Almagro están presentes...

Cargando editor
16/02/2012, 13:23
Director

Además del bueno de Koldo, otro hombre muere a causa de las heridas de batalla, Pepín natural de Zaragoza cabezón como el sólo y terco como una mula no ha podido superar el flechazo que le dejó un bujero en el pulmón y ha amanecido muerto. Tras una breve oración por el alma de los dos hombres, continúais la marcha.

Nuevamente Pizarro anuncia que estáis prácticamente en el templo, aunque lleva diciendo lo mismo desde ayer. Entonces os dáis cuenta de que habéis perdido la noción del tiempo.

La marcha continúa...

Cargando editor
16/02/2012, 15:46
Queitano do Riveiro

Siempre en la retaguardia, en silencio y cabizbajo, avanzo tras el fuerte del ejercito, silenciosa es la muerte que nos acecha a cada paso que damos, pues esta es paciente y rencorosa, pero ella sabe que nadie escapa a su juicio y que mucho que te escondas siempre acabas por ir a verla, murmuro en voz baja, pensando en todos los caídos, y rezando a dios todo poderoso, para que se apiade de nuestras almas, y rogando que tenga misericordia de sus fieles, pues es menester, que muchos de estos hombres aun mantienen a sus familias, a espera buenas nuevas por su regreso, no quiero creer que estamos solos y olvidados de la mano de dios en estas tierras paganas....

Cargando editor
17/02/2012, 21:53
Heriberto Fondón

Una vez reanudados, estaba yo apoyado en el brazo de Claudio, le susurré al oído:

Has de saber que he vuelto a percibir algo que se escapa al entendimiento de los hombres, Claudio. Esos tipos no han muerto por las heridas ni por enfermedad contagiosa o repentina. O don Almagro o don Pizarro... los han matado, estoy casi seguro...

Decía esto con suma cautela y muy bajito para no provocar ninguna confusión. ¿Has notado algo raro en los jefes?

Notas de juego

posteo por los pelos...

Cargando editor
17/02/2012, 23:04
Claudio Domínguez

Miro con extrañeza a Heriberto, mientras cargo con él, está muy debil pero ha luchado con valentía y aunque en la lucha no le haya podido ayudar ahora puedo redimirme. Aunque impulsivo siempre ha demostrado tener buen criterio, y si ha visto algo raro debe ser cierto.-Ahora que lo dices, si me resulta raro su comportamiento, esta puta prisa por llegar al templo casi nos cuesta la vida. Pero dime Heriberto, ¿que es lo que has visto que te resulta tan extraño?.- Le pregunto casi susurrándole.

Cargando editor
19/02/2012, 20:06
Heriberto Fondón

¿Alguna vez... -respiré profundamente pues aún las heridas me dolían- alguna vez has visto a un hombre sin sangre...?

La pregunta parecía un imposible, un desvarío propio de un malherido en la cabeza. Pero bien sabía yo que era verdad.

Pues yo si..., y después de partir de allá en el Panamá. Sólo te digo que abras bien tus ojos, Claudio. Quizá los corderos sean realmente lobos perspicaces...

Cargando editor
19/02/2012, 20:27
Claudio Domínguez

-Tranquilo compañero, vigilaré bien mis espaldas y por descontado las tuyas si hiciera falta. Quizás Queitano sepa del asunto algo, y no ha querido decir nada. Muy pensativo llevo viendolo días ha, y no queriendo decir nada mas que lo necesario. Podríamos intentar sonsacarle algo, pués paréceme buena persona y creo que necesita de nuestra atención tanto como nosotros la de él. Quizás si nos diera más información podríamos estar más prevenidos. Por otro lado podríamos intentar hablar con Pere, es un hijo de puta mas grande que una casa, pero está cerca de los jefes y aunque fuerte y valiente, paréceme un poco zoquete, aunque la última vez que intenté hablar con él por poco me echa al océano.- Le digo a Heriberto en voz baja.

Cargando editor
20/02/2012, 11:11
Director

El remanente de la expedición camina pesadamente arrastrando los pies en parte debido al cansancio y en parte a las heridas que muchos arrastran, incluso el propio Pizarro camina sin el vigor la alegría en el paso que antaño tuviera.

En un momento dado, mientras los dos primeros hombres que abren camino a base de estocazos entre la maleza, dan un grito de asombro.

Almagro da la orden de que os detengáis y él y Pizarro se adelantan a vanguardia a ver qué ocurre, al poco vuelven para confirmar lo que todos sospechan: Estáis en el templo.

Continuáis caminando y en medio de la selva se abre un claro en el que cabe un templo de piedra que jamás vísteis cosa igual, con escalones de piedra en toda su altura y con forma cuadrada.

Lo más curioso es que no se ve oro por ninguna parte...

Cargando editor
20/02/2012, 11:16
Diego de Almagro

Yendo a retaguardia

- Haremos un pequeño descanso frente al templo. Vosotros tres, vigilad la entrada a la selva, que no queremos ser sorprendidos. El resto que descanse algunos minutos, en cuanto estemos preparados entramos.

Cargando editor
20/02/2012, 11:17
Francisco Pizarro

Colocándose en la base del templo, se quita el morrión  y se seca el sudor que empapa su cabello

- Os dije que el templo estaba oculto y que lo encontraríamos y aquí estamos. De acuerdo que no se ve oro en las paredes externas, parece que nos mintieron en que el templo estaba recubierto de oro, pero lo cierto es que hay oro en su interior de eso no os ha de quedar ninguna duda. Hemos perdido a muchos compañeros en el viaje, pero yo  os digo que es aquí y ahora cuando todos nuestros esfuerzos nos serán recompensados por Nuestro Señor que en su divina providencia ha propiciado que unos humildes castellanos recorran medio mundo para llegar a este lugar inundado con riquezas. Descansad ahora mis valientes y rezad si así lo deseáis antes de que nos internemos en este lugar.

Cargando editor
20/02/2012, 11:21
Director

 

Los hombres se desploman sobre la maleza, que sorprendentemente no crece en abundancia ni descontroladamente, sino que crece a una altura uniforme, como si estuviera recortada a propósito.

El cansancio es patente y varios de los hombres quedan dormidos, mientras que otros miran maravillados el templo. Las palabras de Pizarro elevan la moral de los hombres, pero en ese momento, empieza a llover a cántaros...

Cargando editor
20/02/2012, 18:49
Queitano do Riveiro

 

Busco en la linde del bosque, un árbol donde guarecerme, que junto con la manta que a modo de capote me hecho por encima, para que haga la vez de cubre aguas, o chubasquero...Va..vamos compañeros aquí debajo, le..leches, no se me enfe..fermen vuestras mercedes, pu..pues son de los po..pocos que aun la cabeza conservan so..sobre sus hombros, les increpo a Heriberto y a Claudio...

 

Cargando editor
20/02/2012, 20:44
Claudio Domínguez

Oigo la llamada de Queitano.-Vamos para allá, y sentémonos junto a Queitano, que ya tengo ganas de descansar esta pata mala que tengo.-Le digo a Heriberto, mientras nos encaminamos hasta el buen Queitano y observo ensimismado la gran pirámide que se levanta frente a mi.- En toda mi vida hubiera jurado que estos salvajes serían capaces de alzar semejante monumento, desde luego si no es para guardar oro no se para que querían este templo.

Cargando editor
20/02/2012, 20:50
Queitano do Riveiro

...pa..para los muertos mi..mi buen Claudio, pa..para los muertos; oí tiempo atrás histo..torias del lejano o..oriente, en el que pirámi..mmides majestuosas se alzaban pa..para custodiar las pertenencias de los re..reyes de aquellos países que dentro fu..fueron dejados, pero también se decía...  ay! de aquellos que osasen usu..surpar y alterar su..su descanso... ; pu..pues aquí  no será muy distinto, pu..pues quitando lo que..que allá arriba se ve, co..como un templete, el re..resto parece pi..piedra maciza.... y te..tengo un mal pre..presagio con eso de pe..perturbar lo que allí de..dentro more...digo mirando a la pirámide con total sobriedad e intentando escrutar algo del interior de la cúspide...

Cargando editor
21/02/2012, 00:08
Heriberto Fondón

¿Estáis seguro, Queitano? -dijo Heriberto haciéndose el interesante- ¿No sería más prudente preguntarnos qué nos pertuba ya aquí fuera?

Se tumbó como pudo, al lado de sus compañeros. Sólo quería descansar.

Descansar...

Dormir un poco...

...aquí fuera... -susurró con los ojos ya cerrado y como hablando con su mente.

Cargando editor
21/02/2012, 10:45
Director

Sin darte cuenta te quedas dormido...

Ante ti se aparece la figura de un ángel con una balanza en la mano y una espada en la otra

- Hemos fracasado.... Sólo quedáis vosotros.

No sabes a qué ni a quienes se refiere el ángel pero cuando vas a preguntárselo te despiertas sobresaltado, estás junto a Claudio y Queitano. Parece que sólo has dormido unos pocos segundos.

Cargando editor
21/02/2012, 23:18
Heriberto Fondón

Sí, don Pedrarías... ¡Nos ha escuchado! ¡El Arcángel Rafael ha llegado al fin! ¡Véalo! ¡Véalo! ¡¡Allí!! ¡¡ALL...

Herberto parecía como en trance una vez despertar de la cabezada que echó, como si el sueño se hubiese extendido unos segundos y se hubiese solapado con la realidad unos instantes... ¡Estaba hablando al cielo!

Eh... ughh... -sacudí la cabeza y parpadee adrede varias veces. Luego miré a mis compañeros que tenía al lado. ¿¡Lo habéis visto!? ¡¡Si!! ¡¡Sí, lo habéis vi... auuughhhh!! -un grito de dolor en su espalda debido a su efusividad invadió al soldado- ¡don Pedrarías tenía Razón! ¡Dios lo quiere! ¡Lo quiere! ¡Ha escuchado sus plegarias y lo quiere!

Parecían palabras sin sentido. El caso es que muchas veces había acompañado a Don Pedrarías a los oficios y las misas en domingos y a veces entre semana allá en el Panamá, cuando mis tareas en las cuadras o con los cerdos habíanse acabado. No me obligaba a hacerlo, pero yo sentía curiosidad en formar parte del cristianismo, como generación conversa en la que me encontraba. Cristo se convirtió en mi Señor y tiempo ha que pedía al Arcángel Rafael encendiéndole una velita, al igual de mi amo, para que conservara las buenas cosechas, negocios y riquezas del patrimonio (humildemente, claro).

Sin embargo... ¿Qué le pasaba a Heriberto?

Dios lo quiere -alcanzó a decir-, y en esos momentos intentó arrodillarse y rezar.

Cargando editor
22/02/2012, 12:05
Claudio Domínguez

Heriberto con sus desvarios me pone en alerta, me levanto y voy junto a él.-¿Que te pasa compañero?.- Le digo al tiempo que le sujeto los hombros y lo sacudo ligeramente para que entre en razón.-¿Podeis venir aquí?. Seguramente comprendais lo que le pasa a Heriberto mejor que yo. No es la primera vez que oigo desvariar a alguien en esta expedición.- Le pido cortésmente a Queitano.

Cargando editor
22/02/2012, 16:21
Queitano do Riveiro

Tranquilo Claudio, de seguro es causa de algún mal sueño producido por las influencias de este lugar y de los hecho acontecidos estos días, aunque como ya he dicho yo al igual que Heriberto en sus sueños, tengo un mal presagio, pero tanto si Rafael o Gabriel hasta aquí llegasen no seria por nimiedad alguna, sino por que los que allá dentro este es a poco un igual en poder y un némesis de ellos, por lo que de seguro no será aconsejable adentrarse en aquel impío lugar.... porque hay de aquellos que osen despertar a lo innombrable, que en su despertar la bestia engullirá a 1000 almas y 1000 cuerpos, pues sus lugartenientes caos y destrucción camparan con sus hordas por todo el mundo corrompiendo y adulterando a la humanidad hasta los confines de esta y por toda la eternidad, del mundo  un purgatorio creara y ni los mas puros de espirito a este mal escaparan......de repente y retirando la mirada del templo, me centro y acerco hasta al lado de Heriberto, le propino un buen par de cachetes en la cara para espabilarle,.... Heriberto despierta ya hombre y no divagues....