Partida Rol por web

Campaña Forgotten Realms

Capítulo primero: Marsember.

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19/11/2007, 11:33
Director
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Marsember está situada en el Reino de Cormyr, dirigido por una antigua y respetada línea de sangre. A continuación os dejo un enlace a un mapa amplio de las tierras centrales en las que se encuentra esta nación, (más o menos en medio, junto al Dragonmere, o Mar del Dragón en castellano).

http://www.blackwyrmlair.net/~rabain/faerunmap/map...

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20/11/2007, 11:23
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Es día de mercado en Marsember, y en la Plaza del Laud se han levantado unos cuantos tenderetes.

No es la plaza más importante de la ciudad, pero los vecinos de la zona pululan ruidosamente entre los puestos, mientras los gritos de los vendedores se hacen eco en las fachadas de piedra gris de las casas: "¡Las mejores verduras, las más frescas!", "¡Semillas!, ¡Semillas de primera calidad!".

Un carro cubierto con una lona de colores se ha estacionado frente a la puerta de madera vieja y agujereada de una bodega. Junto ella un hombre gordo ha improvisado un tenderete, y comienza a atraer a la gente: "¡Pasen y vean!, ¡Pasen y vean!, ¡Dos terribles criaturas provinientes de los desiertos de Calimshan, podrán verlas por un cobre nada más¡".

Al cabo de un rato, la gente empieza a hacer cola junto a la carreta, y el primer grupo de clientes entra bajo la cubierta de lona. Empiezan a escucharse voces de asombro desde el interior.

Todo es un alegre alboroto en la Plaza del Laud.

Hasta que el caballo atado a la carreta, un grueso percherón, se encabrita cuando dos niños se acercan jugando. La bestia suelta una coz y la carreta se agita con fuerza, crugiendo por el golpe: se oyen gritos en su interior, y la gente corre espantada, como si las criaturas que la lona esconde se hubieran liberado de sus jaulas.

Acto seguido, el obeso dueño de la atracción sale trastabillando con dos criaturas sobre él: dos lagartos de un metro de largo, parduzcos, feroces, con aspecto de iguanas, que muerden y arañan y sisean mientras el pobre hombre cae rodando por las escalerillas de madera que salen del carro.

La gente grita, se forma un gran alboroto, y los dos monstruos se escurren por la puerta de la bodega, huyendo, y dejando a su pobre dueño herido, intentando levantar su corpachón del empedrado de la calle...

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26/11/2007, 10:11
Capitán Trent, el Severo

Los pasos del capitán resuenan con fuerza sobre el suelo de madera de su despacho, un habitáculo sobrio con un escritorio, un tapiz con el dragón púrpura rampante, y una ventana que va a dar a una ajetreada calle. Tú te encuentras sentado al otro lado del escritorio, que no tiene ni un documento sobre él: es evidente que tu interlocutor no es un oficinista.

Embutido en su armadura, el Capitán Trent, miembro de la milicia urbana, explica lo que desea de tí; "Hace unos días, recibimos un soplo sobre un cargamento de contrabando de tabaco lantano en un bajel, el Delicia del Mar. Nuestros hombres abordaron la embarcación y encontraron dos fardos mal escondidos, pero el capitán del barco, un tunante llamado Sullivan, alega que es la víctima de una conspiración, y que alguien colocó allí esos fardos la noche anterior. Normalmente lo hubiéramos metido en los calabozos, pero dado que encontramos los fardos por un chivatazo en vez de por una inspección de rutina, le he dado al tunante el beneficio de la duda. Me gustaría conocer la verdad, pero la escoria de los muelles no va a decirle nada a la guardia. Tu padre me ha dicho que podrías ayudar, así que... aquí estás. Quiero que encuentres a Sullivan, que frecuenta la posada de la Pluma, y que averigües si esos fardos eran suyos o no: la guardia te pagará treinta piezas de oro por la tarea. Tu padre es un patriota y un hombre honrado, y yo espero que tú también lo seas, ¿aceptarás el trabajo?", te pregunta a bocajarro.

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26/11/2007, 11:48
Director

Thorgar llegó a la ciudad buscando aventuras, peligros y recompensas heroicas, pero al principio sólo encontró un paupérrimo trabajo vigilando el almacén de la posada de La Pluma durante el día de mercado.

La paga es de risa, pero no hay mucha gente que quiera contratar a un enano; muchos os ven con suspicacia.

El dueño de la posada necesitaba a alguien que asustara a los ladronzuelos, (chavales, seguramente), que le vacían la despensa los días de ajetreo, así que te dio las llaves de la bodega.

Ahora te encuentras en la oscuridad, bastante aburrido, sentado sobre un barril de cerveza que, comparada con la cerveza negra de tu hogar, es meado de Rothe. A tu alrededor hay cajas con cereales y con pescado en salazón, y del techo cuelgan infinidad de fiambres despidiendo agradables olores.

La ténue luz, (para tí más que suficiente), que ilumina la bodega, entra desde las rendijas de una deteriorada puerta que se encuentra cerrada y que va a dar a la calle. Tiene algunos huecos por los que, supones, entran los pequeños ladronzuelos de chorizos y salchichones.

Estás bastante aburrido, cuando, de repente, se arma un jaleo tremendo en la plaza al otro lado de la puerta de la bodega. Sorprendido, ves como dos criaturas del tamaño de niños, pero que no tienen nada que ver con niños, se cuelan por las rendijas del portón.

Se trata de dos lagartos de color parduzco y con aspecto de iguanas, que se arrastran sobre sus panzas siseando furiosos. Cuando te ven en la penumbra de la bodega, te muestran sus pequeños, pero afilados, colmillos, ¡y se lanzan contra tí!.

La bodega sólo tiene dos salidas: una, el portón por el que acaban de entrar los dos lagartos. Otra, la puerta que va a dar al interior de la posada, por la que has entrado. Si quieres escapar, la única salida sería la puerta, ya que los dos lagartos se encuentran entre el portón y tú. O también puedes luchar, claro.

Sin embargo, antes de que puedas tomar una decisión, uno de los lagartos se lanza contra tí con un salto inesperado, intentando morderte. Lo único que consigue es chocar contra la hombrera metálica de tu armadura, y cae al suelo rabioso.

¿Que harás ahora?. ¿Lucharás contra ellos?. ¿Huirás corriendo?. Tú decides.

Nota por si quieres atacar: C.A. de lagarto patético = 14.

- Tiradas (7)

Tirada: 2d20+2
Motivo: Iniciativas de los lagartos
Resultado: 23+2=25

Tirada: 1d20+2
Motivo: (1/2)
Resultado: 4+2=6

Tirada: 1d20+2
Motivo: (2/2)
Resultado: 18+2=20

Tirada: 1d20+2
Motivo: (1/2)
Resultado: 8+2=10

Tirada: 1d20+2
Motivo: (2/2)
Resultado: 16+2=18

Tirada: 1d20+1
Motivo: Iniciativa de Thorgar
Resultado: 9+1=10

Tirada: 1d20+4
Motivo: Ataque del primer lagarto
Dificultad: 16
Resultado: 2+4=6

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26/11/2007, 12:12

-Pero!! Por Haela!-exclamo al ver a los lagartos escurrirse y atacarme.

Tomo presto hacha y escudo, siempre colgando cerca mio como me habian enseñado tiempo atrás, y encaro a los seres. Deberían ser oponentes fáciles, pero a veces las apariencias engañan, tal como Kertin de la Cueva de Fuego y sus ropajes femeninos.

El primer lagarto sucumbe ante mi primer golpe, bien puesto en la cabeza. Pero el segundo se escurre rápidamente, y me doy cuenta que podría llevarme un poco mas esto.

- Tiradas (2)

Tirada: 1d20+5
Motivo: Ataque Hacha Enana
Resultado: 14+5=19

Tirada: 1d10+3
Motivo: Daño Hacha
Resultado: 5+3=8

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26/11/2007, 12:32
Director

Tu maestro y padre adoptivo, Merundo de Tantras, te salvó de un destino de esclavitud y te enseñó el uso de la magia convirtiéndote en su aprendiz. Sin embargo ya ha pasado mucho tiempo, y actualmente eres más un ayudante que un aprendiz; la última tarea que te ha encomendado es difícil: conseguir las uñas de la pata izquierda delantera de un Fodo Geco, un lagarto de tierra de considerable tamaño, que sólo se encuentra en áreas secas o desérticas.

Ya has recorrido varios mercadillos buscando tan extraño material, (por supuesto sin éxito), cuando alguien te dice que puedes encontrar lagartos vivos en la plaza del Laúd.

Sin embargo, cuando llegas, te encuentras con el espectáculo de la primera escena: llegas a tiempo para ver a las dos preciadas criaturas, (que identificas como Fodo Geco), perdiéndose entre las grietas de la puerta deteriorada de una bodega.

A juzgar por el estado de su dueño, ensangrentado en el suelo, no parece que vaya a quejarse si acabas con los dos monstruos y te haces con las uñas que tu maestro necesita... la gente grita y corre, asustada, llamando a la guardia, y tú puedes ver que el portón de la bodega está cerrado, pero no con llave: podrías abrirlo y entrar dentro en busca de los lagartos.

¿Qué harás ahora?...

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26/11/2007, 12:54
Director

Tras caer aturdido a tu lado, el lagarto no tiene mucho tiempo para rabiar; tus reflejos de guerrero actúan por sí solos, y de un hachazo descendente seccionas el cráneo de la criatura a la altura del cogote con un chof.

Mientras el lagarto muerto temblequea agitando la cola, el otro, sin amilanarse, se lanza contra tí violentamente, pero apenas consigue mordisquearte la bota de cuero; notas sus pequeños dientes, pero éstos no llegan a causarte daño.

Es tu turno ;)

- Tiradas (1)

Tirada: 1d20+4
Motivo: Ataque del segundo lagarto
Dificultad: 16
Resultado: 7+4=11

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26/11/2007, 13:26

-Bichejo inmundo, mis mejores botas! Y únicas, además!!.

Otro golpe, y la lagartija amiga de los zapateros fue aplastada contra el piso. Miro los dos cuerpos con un poco de asco, y busco una tela para limpiar mi hacha.
Los olores del almacén ya me habia hecho dar un poco de hambre, y me pregunté, por espacio de unos momentos, que sabor tendrian las lagartijas asadas.

-Arrrjj, mejor espero a la hora de la comida.-me reprendi a mi mismo.

Quizás haya mas de estas criaturas. Ire a ver, por las dudas.

Me asomo por el porton.

- Tiradas (2)

Tirada: 1d20+5
Motivo: Ataque hacha
Dificultad: 14
Resultado: 14+5=19

Tirada: 1d10+3
Motivo: Daño
Resultado: 10+3=13

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26/11/2007, 14:17

Notas de juego

Aceptare el trabajo capitan. Sera un honor para mi poder ayudar de alguna manera al cumplimiento de la ley. Mi unico deseo es ser apto para seguir los pasos de mi padre de manera digna a su apellido.

Me despido con una reverencia y voy a buscar un almacén. Compraré una pipa y algo de tabaco. Luego, en un retrete arrojare casi todo el tabaco como para que quede apenas unas migajas, y me dirigiré a la posada a buscar a Sullivan.

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26/11/2007, 21:28
Sólo para el director

discretamente me introduzco tras los lagartos intentando pasar desapercivido

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27/11/2007, 08:49
Director
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Frederick, no te cuesta localizar un paquete de tabaco local, seco y envuelto en un hatillo, y una pipa de madera pulida. (Quítate una pieza de oro de tu inventario y añade hatillo de tabaco y pipa). Antes de buscar la posada, te pasas por un urinario público situado junto a la orilla, una sola cámara maloliente con tres agujeros practicados en el suelo de madera, sobre el agua, y allí vacías parte del hatillo (¿?).

Luego te diriges a la posada de la Pluma; no es difícil encontrarla, y cuando llegas te encuentras con un desbarajuste.

No es una plaza muy grande, y la gente está huyendo de ella. Los únicos que se quedan son los dueños de los puestos, que intentan recogerlos a toda prisa. Hay un caballo encabritado, dándole coces al carromato al que se encuentra enjaezado. También hay un hombre gordo con la marca de un mordisco lleno de pequeños dientes en el rostro, y un muchacho rubio, barbudo, corpulento y vestido con un traje de mago y un sombrero puntiagudo, que se acerca hacia la puerta de la bodega de la posada de la Pluma.

El muchacho eres tú, Máximus; te acercas poco a poco, con cuidado, intentando pasar desapercibido, aunque es dificil pasar desapercibido en una plaza vacía, acercándote a una puerta de la que todo el mundo huye. Al menos dos personas te siguen con la vista desde la plaza, un tipo de cabello claro y un recién llegado con aspecto de guerrero, portando una enorme espada a dos manos, (Frederick).

Cuando Máximus se acerca a la puerta de la bodega, ésta se abre, y en su quicio aparece un enano fornido, pero bajito, (bajito incluso para ser enano: se trata de Thorgar), portando en la mano un impresionante hacha de dos hojas. Entre los barriles y las cajas de madera podéis distinguir los cadáveres de los dos lagartos; uno con el cráneo seccionado y otro clavado al suelo de madera por un hachazo, tirado sobre la panza en un charco de sangre.

Cuando la gente se da cuenta de que la amenaza ha sido eliminada, empieza a volver a la plaza, y poco a poco la cosa empieza a tranquilizarse: cuatro guardias, liderados por un sargento, llegan y reúnen a los testigos directos mientras recogen los cadáveres de los monstruos: tras hacerles unas preguntas a Thorgar, Frederick, Máximus y al desconocido, Sullivan, os dejan tranquilos.

El posadero de la Pluma se acerca a vosotros para agradecerle al enano que acabara con los lagartos; "Ni se me ocurre lo que podrían haberle hecho a mi despensa esos lagartos... ¡ha sido una buena inversión contratarte¡, ¡Este enano es de fiar¡, ¡Ya lo creo¡, ¡Puedes cogerte el resto del día libre, si lo deseas¡", dice antes de marcharse a toda prisa para atender su abarrotado establecimiento, no sin antes cerrar con un candado la puerta de la bodega.

Os quedais los cuatro juntos, y antes de separaros Sullivan os hace una proposición;

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27/11/2007, 09:09
Capitán Sullivan
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"Bueno, caballeros", os dice con una sonrisa descarada, "Como ya les he dicho a los guardias, mi nombre es Sullivan, capitán de barco, y precisamente estaba buscando a un grupo de valientes. Oh, sí, el tipo de valientes que no huyen porque se escapen un par de lagartos. Verán, tengo un problema con el que quizás puedan ayudarme, a cambio de... digamos, ¿treinta piezas de oro por cabeza?. Mi bajel, el Delicia del Mar, está inmovilizado por las autoridades".

Entonces levanta las manos en un gesto teatral, sonriendo. "Oh, no, no soy ningún delincuente, pierdan cuidado. Lo que sucede es que algún malvado, un competidor, o algún envidioso de mi éxito con el mar y con las mozas, me ha colado dos fardos de tabaco lantano de contrabando y ha avisado a la guardia. Ahora están investigando pero, claro, no creo que consigan averiguar nada... de hecho, ¡ni yo mismo averiguaría nada, puesto que soy el interesado, y los soplones no van a delatar al autor sabiendo que voy tras él para cascarle¡".

Con un gesto, abarca la plaza y el resto de la zona portuaria. "Por eso os necesito: me gustaría que consiguierais información sobre quién me la ha jugado, a mí, a un honrado capitán mercante y aventurero aficionado... ¿qué me decís?, ¿me echaréis una mano?. ¡Aunque os aviso que es muy posible que os las tengais que ver con cosas mucho peores que un par de lagartos¡", termina riendo despreocupadamente.

- Tiradas (1)

Tirada: 1d20+6
Motivo: Tirada oculta 1
Resultado: 17+6=23

Notas de juego

¿Qué haréis?. Para dos de vosotros, es el primer trabajo serio que os ofrecen en la ciudad, y con treinta piezas de oro podríais comprar algunas cosas... aunque posiblemente tengais que mezclaros en los bajos fondos portuarios... ¿aceptaréis?.

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27/11/2007, 12:18
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Observo con cuidado a quienes podrían ser mis compañeros, rascandome la barba. Escualidos, si, y altos como un palito de escoba. Quien sabe como se sostienen con esos palillos que tienen por piernas.
Sopeso cuidadosamente las alternativas entre tomar y no tomar el trabajo. Por un lado, tengo trabajo asegurado en el almacen de la posada. Por otro, lo que tengo es de un pago mísero, y treinta monedas no son para despreciar. Ademas, me agrada la idea de que me paguen por averiguar si alguien es culpable o no. Asi que finalmente me decido.

-Si.

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27/11/2007, 14:00
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Frederick sonrie de oreja a oreja. Si! Acepto!, grita impulsivamente.
Luego, carraspea, y calmandose un poco dice: Ehh, Si señor Sullivan, estoy interesado en conseguir algun trabajo, asi que puede contar conmigo para esta mision...Le daremos una paliza al tunante que le hizo esto...

Cargando editor
27/11/2007, 14:03
Cargando pj

Miro al joven humano que acaba de hablar con el ceño fruncido.

-Hey!! No dejes la piedra rodar tan lejos antes de quitarte de en medio, como decimos en las montañas! No daré ninguna paliza hasta averiguar quien es el culpable.-Agrego, mirando alternativamente al joven y a nuestro empleador.

Que quede claro de entrada.

Cargando editor
27/11/2007, 14:13

En realidad Frederick actuó impulsivamente debido a su inexperiencia. Internamente pensó que era una gran suerte y una oportunidad para quedar bien con la guardia, y por eso trato de "actuar" pero mal, simulando ser una buena opcion para ser contratado...

Notas de juego

Nota: Si querés puedes hacer algún "averiguar intenciones" secreta :) Frederick es bastante astuto, pero lo juego así por ser nivel tan bajo

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27/11/2007, 17:00
Cargando pj

cuenta conmigo
digo adelantandome un par de pasos
esas 30 mo me vendrian de perlas

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28/11/2007, 08:49
Director

Te das cuenta de que la alegría de Frederick cuando Sullivan le plantea la misión se debe a algo más que conseguir las 30 piezas de oro o a la aventura.

¿Quizás tiene intereses ocultos?. ¿Quizás trabaja para alguien más?.

No lo sabes, pero está claro que la proposición de Sullivan le ha gustado demasiado.

- Tiradas (2)

Tirada: 1d20
Motivo: Tirada secreta 1
Dificultad: 15
Resultado: 9

Tirada: 1d20+2
Motivo: Tirada secreta 2
Dificultad: 15
Resultado: 20+2=22

Cargando editor
28/11/2007, 08:52
Director

Hecho ;)

Cargando editor
28/11/2007, 08:55
Capitán Sullivan
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"¡Muy bien entonces¡", dice Sullivan.

"Yo os esperaré en la posada de la Pluma, llevo hospedándome aquí desde que me incautaron el bajel y, ya sabéis, he hecho un par de amigas, y me gusta la vista del Dragonmere desde la ventana de mi suite", guiña un ojo. "Hasta pronto, espero vuestras noticias, muchachos", enuncia mientras se dirige a la entrada de la abarrotada posada.