Partida Rol por web

La puerta del almacén se abre en cuanto Raz toca el panel de acceso. Una vaharada de suciedad y sangre seca revuelve el duro estómago del dug. Las luces parpadean y se encienden mostrándole una colección de monos de vuelo sucios y con agujeros de bláster desperdigada por el suelo. Las insignias y distinciones que llevan son totalmente desconocidas...

Antes de que Vra pueda responder a R3 se escuchan sonidos mecánicos provenientes de la esclusa que indican que la Vetusta Morla y el COR-8177 se están desacoplando. Una vibración sacude la nave cuando los motores del carguero fantasma se encienden a toda potencia alejándose de la otra nave.

En el puente de mando R3 y Adrianne comprueba estupefactos la consola del operador del sistema: el ordenador de navegación está calculando una ruta hiperespacial hacia lo desconocido...

La sacudida pilla por sorpresa a R3 que por un momento piensa que han colisionado contra algo, pero la confusión inicial se transforma en estupefacción al comprobar que la nave parece cobrar vida...

-"¿En serio?... esto no puede estar pasando, esto no puede estar pasando", repite una y otra vez mientras se abalanza sobre la consola.

Dubitativo recuerda la descarga de energía que sufrió antes pero no podía alejarse del único hogar que había conocido... La Vetusta Morla. Se conecta e intenta anular los protocolos de salto.

Una cara de estupefacción se planta en el rostro de Adrianne.

- ¿Quien ha encendido el hiperespacio? ¿No habrás sido tú, verdad R3?

La cúpula de R3-G1 gira hacia a Adrianne y hacia la consola compulsivamente mientras trata por todos los medios evitar que lo que sea que controle la nave los lance sin rumbo por la galaxia.

-"Adrianne no me estás ayudando en nada, ¿sabes a la presión a la que estoy sometido? Trato de salvar mi pellejo... er... quiero decir el nuestro".

- ¡Esto se mueve! - exclamó Arctan al notar el traqueteo de la nave.- ¡R3, qué estás haciendo? - preguntó/exclamó mientras se dirigía a la cabina de mando.

La visión y el olor de lo que acababa de presenciar le abrumó por un momento, incluso a él que había visto los horrores de la guerra e incluso creado unos pocos. Negó con la cabeza al cerrar la puerta y tomó la decisión de no decirle nada a sus compañeros todavía, había mucho revuelo y mencionar asesinos en aquella nave secuestradora era todo lo que hacía falta para que cundiese el pánico en un grupo que todavía estaba haciéndose a trabajar como un equipo.

Con un chasquido de estática la voz de Raz se transmitió por los comunicadores. Ya no se reía sino que su voz salía gutural y rasposa, arrastrando las vocales dejando entrever un importante disgusto.

- Bid khodolj, ¿khodolguuriig zogsookh uu?

Spoiler (marca el texto para leerlo):

Querida -miro a Adrianne- el ordenador de abordo habra tomado la consideracion que al desactivar las defensas somos parte de la tripulacion y ha intentado saltar a unas cordenadas ya programadas- digo mientras me acerco y miro a donde ibamos ha ir- ademas R3 estaba con nosotros. Por cierto a ver que te ha pasado, aunque si te digo la verdad hasta que no volvamos a nuestra nave no podre echarte un buen vistazo.

Para cuando Arctan y Vra llegan al puente de mando R3 ya ha conseguido abortar el hipersalto, pero los motores del COR-8177 siguen funcionando a plena potencia hacia unas coordenadas que se encuentran más allá de los límites externos del Borde Exterior..

Los motores del COR-8177 rugen a plena potencia. Incluso para alguien con tan pocos conocimientos de mecánica como Raz resulta obvio que la nave ha recibido un buen mantenimiento, lo que resulta extraño para una nave que se supone que lleva 20 años a la deriva.

Mientras el dug merodea entre los bloques de máquinas escucha zumbidos de servomotores. Siguiendo la dirección del sonido descubre lo que parece un droide deforme que sale de un pasillo apuntándole con el bláster que tiene por brazo izquierdo...

Vra aparece con ese alo de tranquilidad que la caracteriza, como si nada de lo que ocurriera pudiera afectarle.

Cita:

-"No eran para mis tus aptitudes de reparación de droides, sino para nuestro desvencijado amigo. Su procesador de memoria podría estar intacto y arrojar algo de información sobre lo que le sucedió", señaló con su cúpula a un droide que se hallaba en uno de los asientos posteriores de la cabina.

R3 siguió conectado, pero esta vez tratando de apagar la combustión súbita de los motores.

-"Raz, trataré de apagar los motores desde cabina, pero preparaos a desactivarlos manualmente, pero no vallas solo...", ¿de verdad R3 se estaba preocupando por la seguridad del dug?, eso último había sonado a comentario materno en exceso, así que tras una pausa añadió, "...si te matan me tocará doble de trabajo en el Vestusta Morla".

Arctan observó la situación en la cabina y comprendió que allí no podía hacer nada. Lo único que podía hacer por ayudar era acompañar al dug por si necesitara ayuda con los motores.

- Iré a echarle una mano a Raz. R3, confío en que puedas arreglarlo porque si estropeamos los motores nos quedaremos aquí varados para siempre… ¡Que la Fuerza te acompañe, pequeño amigo!- dijo antes de abandonar la cabina.

El disparo de Raz hace que el droide explote en pedazos que se extienden por la cubierta, pero al momento asoma un segundo droide que dispara su bláster contra el dug...