Partida Rol por web

- Esto se ha complicado demasiado para alguien que, seguramente, ya esté muerto. Vámonos. Todavía tenemos que intentar salir con vida de aquí. - dijo Vatrice mientras se alejaba despacio de la puerta teniendo cuidado de no hacer demasiado ruido y de no ponerse en la línea de tiro.

A Randy le fastidiaba en exceso tener que abandonar un trabajo, mas aun después de haber puesto tanto esfuerzo e incluso dinero. Entendía que entrar allí a ciegas era una locura, pero si no lo hacían en ese instante no lo harían nunca.

- Un segundo - susurra.

Tras asegurarse de que nadie estaba en la linea de tiro de la puerta, se situó con la espalda en la pared y sin exponerse mas de un segundo le dio una fuerte patada a la puerta para abrirla de golpe. Ni siquiera sabia si quedaba allí alguien o se había ido por algún lado, así que si no disparaban tras aquel estruendo debía ser seguro... y correría en silencio y agachada hacia dentro en busca de una buena cobertura.

¡Me estáis empezando a tocar los ovarios, puñado chatarras andantes! - Exclamo con una fuerza y hastío que se contradicen con un tono de voz que parece casi infantil. Con la tranquilidad de quien no tiene prisa dirijo de nuevo mis pasos hacia la escalera - ¡A ver que os quede claro, inútil par de sorbe-pollas! ... Vuestros amiguetes no han durado una puta mierda y ahora se han convertido en confeti saplicando el techo. ¡Vuestros amigutos del AV me los he cargado chasqueando los dedos y han muerto gritando y llorando como el par de maricas que son! - Sin dejar de hablar, me agacho y rebusco entre los pedazos descuartizados del Carnicero de las escaleras. Agarro un mechón de pelo que permanece agarrado a su cráneo y tiró del el comprobando como se desmontan algunos pedazos aun caliente de lo que era su pecho, pero contenta de ver como parte de un hombro y el barzo hasta el codo, se mantiene en una masa de carne amorfa y casi reconocible. -  ¿ Quien es este mierdas que se creía tan macho por tener una puta pierna que le hacia parecer un mueble de oficina ? ... ¿ Queréis verlo ? Lo tengo aquí. Espero que seáis capaces de reconocerle, aunque le falta medio cráneo. - Sigo refunfuñando mientras vuelvo a subir los escalones. - Os hemos dado a elegir. Morir o salir con vida. ¿ Os pensáis que os quedará el orgullo ? ¿ La admiración de vuestros amigos maricas ? ... ¡NO! Todo el mundo sabrá que habéis suplicado de rodillas por vuestras vidas. Que llorabais hasta ser incapaces hablar. Que habéis muerto como seres patéticos y con los pantalones llenos de vuestra propia hediente mierda aun humeante. Nos encargaremos de que todos sepan lo mierdas que sois. Hoy no solo vais a morir, sino que vuestra reputación se va a elevar hasta los altares de los ridículo. Hasta en los baretos mas apestados de NightCity hablarán de como palmasteis entre sollozos. - Dejando un rastro de sangre y pedacitos gelatinosos de ser humano, llego a la puerta y procurando no exponerme mas de lo necesario, lanzo el pedazo de carne al interior para luego volver a apartarme hasta una distancia que me parezca prudencial. - ¡Vais a acabar como el y todo por defender un puñado de órganos que no os valen ni para un par de chutes de cristal azul o una fulana trans que acceda a chuaparos vuestras micro-pollas sin condón. O ... salís y os largáis por las buenas y sin armar follón. Tendréis la posibilidad de inventaros la excusa que vuestros limitados cerebros sean capaces de imaginar y quedar como unos putos amos que sobrevivieron a la masacre. Como si queréis inventaros que habéis matado a a treinta de nosotros.

Vatrice giró el cuello sorprendida al oir a Mayuree soltar todo aquello  y pensó !Joder! ¡Con la mosquita muerta! Luego se giró de nuevo y pegó la oreja. Quizás podría escuchar algo al otro lado de la puerta que le advirtiera de los movimientos de esos joputas.

Mayuree empieza a soltar palabras una detrás de otra en un impactante discurso que parece dejar a todo el mundo en silencio. Sus palabras calan hondo y los ha dejado boquiabiertos, anonadados y llenos de dudas. A alguno de vosotros incluso les ha parecido escuchar una banda sonora de fondo mientras decía su discurso.

Ha dado en el clavo en cada una de sus palabras y es por eso que ni tan solo saben como responder.

Bueno, eso ... y también que escucháis a Randy, desde dentro la habitación, diciendo -No hay nadie aquí-

No supo que le sorprendió más, si el que Mayuree lanzara aquel discurso mientras arrastraba un pedazo de Slaughter por todo el lugar o el que Randy se arrojara contra esa nube de humo para ver si no había nadie del otro lado.

-Están locas- alcanzó a pensar justo cuando Randy les indicó desde el otro lado que no había nadie. Con el arma frente a él, avanzó hacia la voz de Randy, esperando que nadie le estuviera encañonando para hacerle decir eso y conducirles a una trampa. El pandillero deberia estar por ahi, quizas no en esa habitacion, pero les estaria esperando en un terreno mas favorable para él o ellos, que tampoco sabia la cantidad.

Artemis entra en la habitación junta a Randy, el humo dificultaba mucho la visión y era casi imposible estar seguro de que allí no hubiera alguien escondido. Sin embargo había una pared que llevaba a la terraza y las puertas estaban totalmente abiertas, dejando que poco a poco el humo fuera saliendo hacia afuera.

Pasarían largos minutos antes de que la habitación se limpiase de humo y no fuera agobiante de respirar.

Por el suelo había mas de un cadáver. Alguien había degollado, y arrancado los ojos, nariz y orejas de varios Slaughters que aún lucían sus colores y emblemas en sus ropas.

Adicionalmente se podía ver como todas las habitaciones de ese lado del piso habían tenido sus paredes derribadas, haciendo una larga sala que llegaba de la terraza hasta donde uno de los Slaughters había muerto detrás de un sofá.

Se podían intuir mesas de trabajo, cajas ... y neveras? También parecía que había como bañeras en un rincón? Era difícil de ver.

Le dolía la mandíbula por mantener los dientes muy apretados al cruzar la cortina de humo, como si eso le salvara de un disparo de escopeta a bocajarro. Pero del otro lado no les esperaba ningún loco de los implantes con el arma en alto.

-Parece que huyeron- avanzó con el cuerpo algo inclinado, para que fuera un poco más difícil darle, sus ojos iban de un lado a otro, pero el lugar aún estaba un poco inundado del maldito humo. Las neveras hablaban por sí mismas, seguro que dentro había muchas partes sangrantes de algún pobre diablo… pero también había una bañera un poco más allá. ¿Estaría el pandillero escondido ahí? Solo por si acaso le hizo una señal a Randy, sin hablar, para luego acercarse cautelosamente al lugar. Estaba tranquilo con respecto a que Mayuree y Vatrice cubrían la entrada, aunque el verdadero peligro vendría sin duda desde dentro.

Tras la pausa y silencio que responde a mi verborrea, suspiro frustrada. - 역겨워! ... 그들은 나를 바보처럼 말하게했다.

No tengo prisas para entrar en el cuarto humeante, aunque permanecer en el pasillo me genera también cierta incomodidad, como si cualquier zumbado pudiera salir desde cualquier puerta en cualquier momento y volarme cualquier cabeza de cualquier disparo, así que en cuando pasan unos largos sin oir a Randy y Playboy gritando de dolor, doy por sentado que puede ser seguro entrar en el piso.

Toso un par de veces antes de ponerme la mascarilla que agrava mi voz como si hablase desde la habitación de al lado. - 젠장 ... Alguien nos ha quitado el trabajo. - Observo uno de los cadáveres de Slaughters y usando el pie, le doy la vuelta a uno de los cuerpos para examinar sus restos.

Parece que huyeron

No lo creo ... precisamente los Slaughers son los únicos que no han huido a ninguna parte. Creo que alguien se ha encargado de ello. - Miro hacia la terraza y de memoria intento recuperar la imagen que tenia desde el exterior cuando miraba a través de mi viejo amigo kamikaze. ¿ Se puede hacer huido por ahi o quien sea el responsable de eso aun ... ?

- Creo que Mayuree tiene razón - dice mientras se dispone a cubrir a Artemis con el cuerpo en tensión mientras este se aproxima a la bañera -. Y el que lo haya hecho no parece ningún novato. Se los ha cargado en silencio y sin que fuesen capaces de hacer nada para defenderse. Sera mejor que comprobemos si nuestro objetivo esta aquí o no y luego nos largamos.

Mientras se iban acercando una idea empezó a rondar la cabeza de Randy y tras encogerse de hombros como si concluyese una especie de conversación interior volvió a hablar.

- Oye, Mayuree, podrías echar un ojo en todo este desastre y ver si hay implantes útiles y salvables que podamos llevarnos con facilidad. A ver si con un poco de suerte no nos vamos de aquí de vacío.

Hay dos bañeras en la esquina que Artemis está mirando, estas están llenas de agua y hielo y hay varios cuerpos amontonados en ellas, como esperando su turno a ser descuartizados por los slaughters. Todos llevan un extraño aparato en el cuello, una especie de inhibidor de señales.

Mayuree puede ver como el AV cayó a un lado de la terraza llevándose un buen cacho con ella, debajo de esta deben estar los balcones de los pisos inferiores y no debería ser muy problemático saltar a ellos desde la zona ruinosa del impacto.

-¿Para qué son esos aparatos en sus cuellos?- se acercó con cierta cautela a los cuerpos, como si quisiera saber que secretos desentrañaban. Con la mirada buscó reconocer a la mujer por la que habían recorrido todo ese camino tapizado de slaughters, quizás estaba allí-. No me importa quién les haya asesinado mientras que no interfiera en nuestras cosas- se encogió de hombros-. Solo vinimos por la chica… o lo que haya quedado de ella.

-Mierda. Es ella- y por ella se refería a la mujer que provocó todos esos problemas. Se acercó más a la bañera, como para ayudarle, aunque no sabía si estaba viva o no. ¿Por qué ponerle un collarín a un muerto? Quizás eso mantenía los aumentos en funcionamiento o alguna mierda de esas, Mayuree debería saberlo. Por las dudas no tocó nada hasta que ella le diera una mirada, solo por si acaso eso provocaba algo malo. Sus manos eran buenas para muuuchas cosas, pero las maquinas no eran lo suyo. Apoyó dos dedos en el cuello de la mujer, prácticamente esperando solo sentir su frio tacto y nada mas.

Vatrice estaba en la entrada de los pisos, vigilando por si alguien se acercaba por los pasillos cuando escuchó a Artemis. Parecía que había encontrado a la mujer en una de las bañeras ¿Está viva? preguntó por puro reflejo aunque sabía que  era bastante improbable que lo estuviera. Daos prisa. Tengo un mal presentimiento. estiró el cuello y echó otro vistazo a los pasillos. Tanto silencio la ponía nerviosa

Ciertamente la planta estaba silenciosa. Todas las puertas de los pasillos estaban cerradas ... exceptuando el tío que parecía drogado que no se ha movido un centímetro de su posición. El exterior era el otro espectro del ruido, tiros, gritos, sirenas de policía que llegaba con sus AV3, dando voces por los altavoces y lanzando salvas de advertencia para que la gente se dispersara ...

Artemis arrastra a la chica - desnuda - fuera de la bañera y le comprueba el pulso. Estaba viva. Tenia el pulso muy débil, pero lo tenia. Por no decir que estaba muy fría, por supuesto.

Mayuree podía reconocer el aparato del cuello. Era un inhibidor de señales, para evitar que nadie pudiera localizar su posición o usar sus implantes para llamar, tenia un cable retráctil por la parte posterior que se conectaba en los puertos de interface de la victima. Normalmente no era buena idea intentar arrancar esos cables a lo bruto.

Mientras comprueban que la chica sigue viva, Randy echa un vistazo procurando que no se le note el asco que le produce aquel despiece de personas que hay organizado en ese piso. Metódicamente empieza a comprobar el pulso del resto de personas "enteras". A nadie le hacia daño rescatar a otros inocentes de aquel desguace. Ademas, nunca se sabia cuando podías encontrar algún premio oculto.

- A ver si Mayuree puede desmontarle ese cacharro, preferiría no tener que ir arrancándole cables a lo loco.

Al comprobar que estaba viva, la sacó de donde estaba, donde esperaba su turno para ser troceada y vendida como si estuviera en una antigua carnicería. Artemis buscó algo con que cubrirla hasta que Mayuree desactivara el collar, para que recuperara el calor lentamente. Luego ayudó a Randy a quitar a las otras personas de la bañera, las únicas vivas que encontraron aparte de su objetivo.

-Menuda operación tenían montada- murmuró observando las burdas medidas que utilizaban esos tipos para mantener la mercadería fresca. Lo cierto es que debiera haber lugares así por toda la ciudad. Y cosas aún peores.

Vuelvo a entrar en el piso, traas ausentarme un rato con el espectáculo que se puede disfrutar desde el balcón. Tengo que admitir que cuando los AV de la pasma llegan, son bonitas. Con sus luces de colores, las siernas a ritmo, los flashes de los disparos y esos gritos de autoridad que tenían hasta un cierto morbo que en algunas ocasiones habían decorado mis sueños húmedos. - Chicos, fuera se esta liando la de Dios.

De repente las miradas hacia mi persona, me delatan que algo esperan. Tardo un par de segundos a darme cuenta. El collarín de fantasma. Me acerco mientras busco ya en la bandolera mis herramientas. - Es un collarín para joder la conductividad de los ciberimplantes. Básicamente te hace desaparecer. Si te metes uno de esos en el cogote, vuelves al siglo pasado. - Me agacho para examinarlo de cerca. Necesito una pua del 5 ... ¿ o es una 6 ?. Pruebo con una 5 y en menos de un par de segundos parpadean las luces del collarín. Pulsas el botón de bloqueo ... 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7 y 8 segundos. El pitido informa de que la operación ha resultado exitosa. Doble pulsación del botón de avance y ... después de un leve zumbido y se desconecta de la mujer.

Hecho - Informo de la obviedad con un tono rutinario. - Ahora sus rastreadores empezarán a funcionar y como tenga contratado un servicio de TT, van a llegar de un momento a otro. Mas nos vale que no nos pille cerca.- Antes de ponerme en pie, levanto el pedazo de ropa que Artemis ha usado para cubrir sus vergüenzas - ... es mona. Bastante mona. - Dictamino con una indiscreta sinceridad ausenta de tabúes.