Partida Rol por web

Codex Gigas

Payne - Introducción

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11/05/2012, 02:12
Yohiro Harada

Yohiro trabaja como tatuador en su propio salón en Nueva York, sus obras son famosas en todo el mundo tanto por su belleza como por su habilidad para dotar de habilidades espectaculares a quienes las portan. Esto último por supuesto es sabido tan solo por aquellos iluminados que se interesan en ello.

Yohiro es de los cultistas más respetados en la ciudad y aunque no suele hacer demostraciones de poder sus capacidades son muy conocidas, respetadas y por algunos incluso temidas. Llevas varios tatuajes hechos por él y en alguna ocasión has sentido hasta qué punto puede llevar a los sentidos con una simple gota de tinta. La relación entre ustedes es amistosa, no le definirías como un amigo pero sí alguien de confianza y muy fácil de llevar.

Al llegar a su salón parece estar esperándote, el sitio está vacío y lo encuentras sentado en una de las sillas de tatuajes. Apenas entras se pone de pie y te hace una seña para que le acompañes al fondo del salón, donde atiende a aquellos que desean sus especiales tatuajes.

Al pasar por la puerta que separa el taller de los durmientes del taller de los iluminados (como él llama a las diferentes salas) te encuentras con el mismo espectáculo de siempre. Paredes completamente decoradas con láminas de tatuajes y un gran armario de vidrio con toda la parafernalia de su oficio, la principal diferencia con la sala por la cual pasaste al entrar no es en lo que se ve sino en lo que se siente si se presta atención, aquel sitio suda poder.

- Payne, cómo ves un viaje a Praga? Todo pago por industrias Harada sociedad anónima por supuesto. - te pregunta luego de sentarse en un cómodo sillón de cuero

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14/05/2012, 07:40
Payne

Seguí a Yohiro sin poder evitar cierta solemnidad en mi caminar. Sentía auténtico respeto por su trabajo y por lo que hacía con su arte, por lo que cada vez que pasaba por aquellas salas miraba como quien estaba en la sala más secreta de un museo. Los recuerdos de las experiencias vividas mientras le dejaba actuar libremente sobre su sensible piel le hacían además sentir que el tiempo se hacía más espeso cuando prestaba atención a aquellas maravillas.

Cuando el artista se sentó y le hizo la pregunta, fue como si lo sacaran de aquella superficial pero agradable ensoñación, y su reacción de sorpresa hizo evidente su distracción.

¿Eh? —preguntó, con aire atontado, más por reflejo que por no haber escuchado—. ¿A Praga? ¿Y qué pinto yo en Praga? ¿Qué se te ha perdido allí? ¿O es que me quieres tanto que me quieres regalar unas vacaciones? —hizo una media sonrisa, lo cual le arrancó una efímera mueca de dolor en el entrecejo: aún no habían curado del todo unas heridas que se había hecho en el labio. Respiró profundamente aunque en silencio, ya estaba acostumbrado a soportar el dolor casi como un acto reflejo.

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14/05/2012, 15:41
Yohiro Harada

- No tienes tanta suerte - te contesta sonriendo - la cosa es más complicada que unas vacaciones. Alguien se robó un libro de la biblioteca nacional en Praga y hay quien nos culpa a nosotros. - hace una pausa y encoge sus hombros en un gesto algo resignado, el culto era vista por muchos como una secta de depravados y las acusaciones sin fundamento no eran extrañas - Alguien necesita ir allí y asegurarse de que el tema se resuelva, bastantes problemas tenemos como para tener que soportar algo así. La verdad es que quizás debería ir yo, pero si voy y me encuentro con que comienzan a acusarme y señalarme las cosas no van a terminar bien - aunque normalmente está de buen humor el corto temperamento de Yohiro es bastante conocido, por algunos desafortunados incluso en carne propia - No estoy hecho para estas cosas. - te sonríe y mira por la puerta hacia el frente.

- Disculpa, alguien llega

El tatuador desaparece cerrando la puerta tras de sí, le escuchas explicar que el salón está cerrado y al momento vuelve a entrar en la sala.

- Había olvidado colgar el cartel de cerrado. - se disculpa antes de sentarse

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16/05/2012, 13:17
Payne

¿Un libro? —preguntó, intentando imaginarse qué tipo de libro podía requerir la presencia de un Extático como Yohiro, y aún más, qué libro podía hacer que Yohiro pensara que él era adecuado para ir a ver qué tenían que decirle sobre eso—. Ya tiene que ser un libro importante, ¿no? ¿Estás seguro de que quieres que vaya yo? Espero no asustar a la manada de Herméticos que seguramente tiene que haber ahí, revoloteando alrededor de la biblioteca como polillas alrededor de un farol y en pleno mono.

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16/05/2012, 14:44
Yohiro Harada

- Ja! La verdad que si les asustas mejor que mejor. Por mi mientras más indignados estén mejor - dice riendo - Sería todo un suceso para ellos ver que alguien con tantos tatuajes, pins y deformaciones autoinflingidas es mejor que ellos. La verdad que si lo pienso más puede que seas el mejor para ir.

Yohiro se acomoda, cruzando las piernas en su silla e inclinándose un poco hacia delante.

- En cualquier caso, aún si no nos acusaran no estaría mal asegurarse de que se encuentra y vuelve a la biblioteca. El libro es el Codex Gigas y el asunto no va solo porque se perdiera un libro viejo, hay muchas historias y leyendas a su alrededor y todas le adjudican algún poder. Podrían ser falsas claro pero hay quien asegura que aunque estas sean falsas el libro es más que una colección de letras. Virgil Endrina, uno de los pocos maestros que aún viven, dice que el libro es poderoso y que debe ser recuperado. Él vive desde la época en que se escribió el Codex así que imagino que algo debe saber, además teme que pueda haber sido robado por algún nefando. - hace una pausa y vuelve a recostarse - A sí, porque no todo el mundo es tan idiota como para culparnos de robar un libro solo porque tenga lindos dibujitos.

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16/05/2012, 17:49
Payne

Codex Gigas... —murmuró en voz baja mientras Yohiro seguía hablando—. ¿Qué clase de poder dices que tiene para que lo quiera robar un nefando? —se levantó, excitado y asustado a la vez, recordando el rugido infernal que marcó su Despertar. Si aquel libro tenía que ver con demonios de alguna manera, ése era un libro que tenía que conocer, y si realmente era capaz de permitir tratos con seres extraterrenos de maldad incalculable, un nefando era el último ser sobre la faz de la tierra o la Umbra que debía tenerlo.

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16/05/2012, 18:01
Yohiro Harada

- La verdad no se, lo único que puedo contarte es una o dos leyendas. La más impresionante habla de esferas así que podría tener algo de realidad. Se dice que quien estudie el libro descubrirá los secretos del tiempo, el espíritu y el destino, o como yo lo entiendo la entropía. Se supone que el libro incluso es capaz de hacer que un durmiente despierte pero si su avatar no es lo suficientemente poderoso entonces enloquecería. Otras leyendas indican que es posible tratar con el diablo o preveer el futuro y conocer el pasado. En lo único que parecen estar de acuerdo es que el libro siempre termina cobrándose de alguna manera lo que regala, ya sea a su lector o a alguien más.

Hace una pausa y luego de cerrar los ojos un segundo y dibujar un pequeño círculo en su mano con su dedo los vuelve a abrir.

- Hay algo que no muchos saben - te confiesa - Normalmente un libro como ese estaría hecho con piel de cordero o de algún otro animal, para sus hojas. En realidad, y te lo digo yo que de esto conozco, es piel humana tratada con con químicos. No creo que le hayan hecho pruebas para saber de qué eran las hojas, al menos no últimamente. Así que es algo que poca gente sabe y a decir verdad la mayoría que escuchó esa historia la descarta. No son pocos los libros que se suponen hechos con piel humana y que al final no lo son pero yo he estudiado la piel desde que me di cuenta que podía dibujar en ella y te puedo asegurar que ese libro fue hecho de piel. Lo fui a ver cuando escuché la historia y me alcanzó una mirada para saberlo.

Luego de otra pausa en la que te observa continúa

No es que ello le de necesariamente más poder al libro pero al menos dice que alguien se tomó un trabajo más que inusual en hacerlo, es algo que resultaría monstruoso para casi todo el mundo y más aún en un monasterio del siglo XII

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16/05/2012, 18:22
Payne

Mientras el tatuador hablaba, una chispa de interés nació en sus ojos durante un instante, tras el cual se convirtió en todo un incendio de pasión que aumentaba a cada palabra. Se acercó a él y le estrechó la mano:

Cuenta conmigo, tengo que ver ese libro a cualquier precio —prefirió no decirle que, si se lo encontraba, probablemente lo destruiría—. ¿Piel humana, dices? Viniendo de ti me lo creo de todas todas. Todo esto me apesta a nefando... Ese monasterio no debía ser precisamente el lugar más agradable para un cristiano devoto, me temo. ¿Sabes si irá mucha gente más?

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16/05/2012, 19:16
Yohiro Harada

- Alguien de la Orden de Hermes sin lugar a dudas y algun eterita, estaban metidos en el diseño de la seguridad del libro así que querrán ver qué pasó. Podría haber alguien más pero no sabría decirte quién. Hay un tipo, un tal Martin Meyer, un durmiente que trabaja para la Orden de Hermes que se está encargando de la organización y de ver que tengan todo lo que necesiten en Praga. Es inglés pero irá con ustedes, además habla checo por lo que les servirá de traductor si lo necesitan.

Poniéndose de pie va hasta la puerta y la abre para pasar a la sala principal

- Necesito tu número de pasaporte y un nombre además de Payne para el viaje, Meyer reservó un pasaje a mi nombre pero tendré que traspasártelo a ti. Se supone que alguien te estará esperando en el aeropuerto para llevarte al hotel donde te encontrarás con Meyer y los demás, algunos de ellos estarán allí desde el lunes y tú hasta el martes en la mañana no llegarás. Por las distancias, Meyer viaja desde Inglaterra y seguramente no sea el único europeo. El vuelo sale el domingo de noche, a la 1am del lunes así que deberías llegar al aeropuerto a las 11 al menos.

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16/05/2012, 19:29
Payne

Asintió con sus explicaciones. Solo se le cambió la cara cuando le pidió su nombre.

¡Maldita sea, tío! Mi nombre suena a "Atención, pardillo suelto", así que ni se te ocurra dárselo a nadie más: James Maximillian Pastrani —a continuación le dictó su número de pasaporte.

Bueno, me pondré a hacer las maletas. Espero tus noticias.

Notas de juego

Y supongo que me iré a mi casa a hacer las cosas cotidianas antes de irme.

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17/05/2012, 03:55
Director

El domingo en la noche te encuentras en el aeropuerto a la espera del vuelo, ya has hecho el check-in de las maletas y tan solo queda viajar.

El tuyo es el último avión a Europa de esa noche, este va directo a Berlin y desde allí deberás tomar un vuelo corto a Praga por una aerolínea menor. Yohiro te ha dado los datos de ambos vuelos y aunque seguramente tengas que explicar una o dos cosas en el detector de metales no deberías de tener mayores problemas, al menos no si no llevas nada que pueda considerarse un arma.

En el vuelo terminas sentado junto a una anciana que no deja de hacer sonidos extraños mientras duerme, al menos la mujer no parece molesta por tu presencia y no hace ningún comentario sobre tus "adornos". Pasan una selección de películas y finalmente logras dormirte. En Berlin pasas 4 horas entre vuelos sin poder salir del aeropuerto, al menos este es gigante y puedes dedicar dos horas a recorrerlo por lo que el tedio disminuye un poco aunque no demasiado. Cuando por fin llaman al último vuelo a Praga te diriges a la puerta de embarque, allí un niño no deja de mirarte mientras tira de la ropa de su padre señalándote. El padre te sonríe y levanta en brazos al niño que no separa sus ojos de ti.

Por fin en Praga te toca luz verde en la aduana por lo que no te revisan y sales a la sala de espera donde parientes y amigos esperan a sus seres queridos luego del vuelo.

Allí logras ubicar a un hombre de unos 40 años que viste una populosa barba con un cartel que indica

Hotel Rott: Mr Pastrani & Mr Hanagan

Rott es el nombre del hotel donde te hospedarás y Pastrani sin duda alguna que eres tú, pero a ese tal Hanagan no lo conoces.

Notas de juego

Seguimos en otra escena