Partida Rol por web

Observo el pueblo y las posiciones enemigas y después dejo cogido el subfusil con una mano y mezo mi barbilla pensativo y en silenbcio mientras los demás intercambian opiniones

-Necesitamos un reconocimiento de la zona de eso no hay duda aun no sabemos donde tienen a los prisioneros

Miro a los de todos y cada uno

-Vamos a ver necesito dos tiradores expertos en la colina para cubrir el avanze y en caso de retirada nos podeis proporcionar un buen apoyo desde aquí arriba, despues -tomo aire profudamente -Necesito un segundo equipo de apoyo en aquel grupo de piedras y arbustos-señalo con mi mano abierta en dirección al lugar- asique los que tengais el armamento pesado esa es vuestra posición sois nuestra primera linea de apoyo confio en vosotros, el resto avanzará a reconocer el terreno, nos moveremos por las sombras y lejos de esa carretera y las joidas patrullas al menos por el momento, parecen muy confiados y ese es un voto a nuestro favor y no dudaré e aprovecharlo, McAnn y Carrick os quedais aqui arriba -Observo al resto -Neceito un par de ametralladoras de apoyo ¿Quien se ofrece?

Los miro a todos fijamente y serio sin mostrar sentimiento alguno en mi cara

Desenfundando mis dos pistolas con silenciador, miro a nuestro teniente y señalo:

Señor, creo que mi lugar estaria mejor en reconocimiento, tengo armas con silenciador y buena habilidad en manejo de armas cortas. Pepe y yo hemos hecho antes operaciones de reconocimiento.

Después de escuchar el plan del oficial y las palabras de Larkin José interviene:

- Yo me ofrezco voluntario para el reconocimiento, la última vez que fuimos Larkin y yo los resultados fueron muy buenos.- dice mientras recuerda el reconocimiento en la ciudad francesa. Allí Larkin y el español localizaron la base enemiga y la posición de los blindados alemanes junto con la infantería que protegía el lugar.

José se echa al hombro el máuser y desenfunda su ASTRA 400 a la que recientemente consiguió un silenciador y también desenvaina el cuchillo, tras esto lo hunde en la tierra para oscurecer el metal y que no brille con los reflejos de la luna o de otras luces.

La próxima vez que hunda este cuchillo será en la garganta de algún alemán. Seguro.

James asiente a la orden del capitán. No es la primera vez que le toca quedarse atrás.

-Sí, señor! - dice casi en susurros.

Al ver la repartición del trabajo, noto que me he quedado con la parte menos atractiva de la operación.

Señor, yo ocuparé esa posición pero no cuento con armamento pesado. Bueno, al menos no de larga distancia. Sepa que soy su experto en explosivos y demoliciones, pero no cuento con armas de largo alcance salvo mi fusil.

Angus asintió mientras preparaba su fusil para la posible acciòn, mientras esperaba a Carrick:

- Asi se hará, Señor. - Miró a Carrick, no le desagradaba contar con Carrick, al contrario, era un buen tirador.- C, intentemos coordinarnos lo mejor posible. Si llegara el caso, es bueno contar con tu rifle.

-Lo sé - comenta Carrick no con poca chulería y dándole una palmada en el hombro a Angus.

Comienza a hacerle señar a McCann y entre los dos idean una ruta segura para tomar la posición indicada por Miller. Con un tirador experto como Angus al lado, Carrick se sentía más tranquilo, pero no por ello quería decir que pudiera permitirse el cagarla.

Agazapado, James avanza con el rifle entre las manos lo más sigilosamente posible.

Asiento firme y miro a Caparso

-Bien entonces Caparso y yo cubriremos vuestro avance desde las rocas, en una misión de exploración cuanto menos bulto mejor resultado, confio en vuestras habilidades muchachos, en cuanto sepais donde tenemos a nuestros chicos necesitare un informe exacto de la situacíón, no quiero heoicidades tened los pies en la tierra

Después le señalo el grupo de rocas y arbustos a Caparaso para que comience a moverse

-En marcha

Después comienzo a moverme hacía el grupo de rocas en silencio

Carrick y McCann se posicionan en la colina, echándose al suelo y colocando los rifles apoyados entre las rocas. Ambos tiradores tienen una buena visual de la entrada del pueblo y las primeras casas. Caparso y Miller se adelantan, apostándose en un promontorio de poca elevación cubierto de arbustos raquíticos y bajos. Pepe y Larkin se quedan a solas, dispuestos a realizar una batida por la zona.

Informando de nuestras intenciones a nuestros compañeros, señalo:

Bueno señor, lo que tenemos pensado es en primer lugar, bajar hasta la costa, cosa facil, pegados a los arboles, el objetivo sera localizar si los alemanes disponen de lanchas rapidas, algo con motor, que nos permina salir pitando si hay problemas, se que es secundario, pero nos pilla de paso. Veremos si el embarcadero esta controlado, puesto que cruzar por esa zona sera la mejor via para acceder al centro del pueblo, que sera donde se encuentre la radio, que habra que inutilizar, y los barracones, que sera de donde salgan nuestros principales problemas, tambien creemos que junto a esos elementos se encontrara el cg del pueblo. La cuestion es que en torno a ese lugar es donde retendran a nuestros amigos, puesto que es el lugar mas cerrado y fortificado del pueblo.
Tras revisar esa parte, subiremos a donde nos encontrabamos y avanzaremos por el lado que da al bosque, siguiendo la arteria principal del pueblo, viendo que tienen en la linea de casa esas. Contamos con puestos avanzados, quizas mgs 42... pero es una zona buena para acceder al puesto de control, donde seria conveniente montar una maniobra de distraccion, para que mientras sacamos a nuestros amigos tras haberlos localizado, no nos presten mucha atencion, o se encuentren distraidos.
Teniendo reconocida esa zona, solo nos quedara el centro del pueblo, pero antes es necesario reconocer la periferia, asi que lo de dentro sera segun como ande de caliente el exterior...

Pepe escucha las palabras de su compañero Larkin. La idea le parece buena. Empezando el reconocimiento por la zona del embarcadero podrán acercarse con mayor facilidad al núcleo urbano, dando un pequeño rodeo y pudiendo evaluar el despliegue de los soldados alemanes. Además podrán buscar la estación de radio, el ex-republicano español supone que no será difícil, seguro que tiene una enorme antena en el techo.

- Me parece bien. Pongámonos en marcha camarada.- le dice a su colega.

José deja el máuser para ir más ligero y algunas de sus pertenencias. Con su pistola ASTRA 400 en la mano y el cuchillo bien dispuesto, se encamina hacia los arboles más cercanos, en dirección sur hacia el embarcadero.

Los dos soldados se alejan entre la oscuridad rumbo hacia el embarcadero. Rodean las casas más exteriores de la villa mientras se acercan a la costa. El embarcadero se adentra unos treinta metros en el interior del mar y lo forma una plataforma de madera rectangular anclada al lecho con unos gruesos pilones de madera. Las barcas de los pescadores cabecean perezosamente con la marea. También hay dos embarcaciones alargadas con un motor instalado en la parte de atrás que destacan entre las demás. Seguramente pertenecen a los nazis. Dos soldados alemanes montan guardia de cara al mar con los subfusiles colgados al hombro. Están separados entre si por unos nueve metros. Uno de ellos está fumando tranquilamente.

Carrick parece farfullar en voz baja.

- Joder, desde aquí podrán vernos con los primeros rayos del alba. Más vale que sea rápido...

James apoya el rifle comodamente y mira a través de la mirilla. Posa el blanco sobre el nazi que está fumando.

- Miller me cortaría las pelotas si lo hiciera... ¿pero que te juegas Angus a que podría volarle las pelotas desde aquí a ese cabrón...? - murmulla en un tono muy, muy bajo.

Angus suspiró:

- Si, encima nos haria fusilar... Pero por si la cosa se va de las manos, apunta a ese nazi y yo a su compañero... Si la cosa se les tuerce abajo, ya sabemos lo que hacer. - Dijo apuntando al otro alemán. Tenia ganas de disparar contra ese cerdo, pero no podian hacerlo, seria un peligro innecesario, al menos de momento.