Partida Rol por web

Me quedo sorprendido por la pregunta del señor Mario, parece que me leyera la mente. Al segundo me repongo.

-Pues no hijo, no se que es lo que no encaja en este rompecabezas. Pero si quereis venir será mejor que nos pongamos en marcha lo antes posible, insisto. No hace falta que me acompañeis si teneis que hacer otras cosas.

Efel llega a la reunion y saluda a todos:

- Bueno, ¿Tenemos un plan?

-Bueno señores, esperemos que la señorita Maures se levante temprano- dije terminando la taza de café, pensando si era como me sentía realmente.

Me levanté del asiento, y con un gesto a modo de saludo general, salí del hotel hacia el edificio, cigarro en boca.

Bien vas a ver a la viuda Maures, hoy al llegar al portal ves que no hay tanto alboroto como el día anterior, pero sigue habiendo ciertas miradas de reojo al edificio por parte de los vecinos que pasan por la calle libreros, como era de esperar y buena mujer de hogar se encuentra en el domicilio y te abre el portal.

- Sí .... Suba por favor ...

Suena por el telefonillo

Buenos dias-dije dirigiendome a Samuel-Tengo pensado ir de nuevo a visitar el despacho, lo que no tengo muy claro es si tu querrás acompañarme...ya sabes por lo que ocurrió el otro dia. Quizas sea un buen momento para que te disculpes, ¿no crees?

Mierda, olvidé pasar por la farmacia. Que gran detective...

Al oír el visto bueno de parte de la mujer, entré al edificio y tomé el ascensor hasta el tercer piso. Al llegar a su puerta, toqué dos veces suavemente.

-¿Florencia? Soy yo...- avisé en tono afable.

Ahora viene la mejor parte pensé preparándome mentalmente para lo que seguramente venía.

Horacio ya está de camino al edificio por lo que intentar no meterle en los mensajes que no pueda leer, salvo móvil, etc.

Corrijo el mensaje de Jose y proseguir ....

Subes al piso y te abre la puerta, está terminándose de arreglar el vestido que se parece que se acaba de poner, como alisando unas arrugas prácticamente inexistentes … te mira fijamente algo sonrojada …

- O por favor, pasa pasa, no te esperaba y menos tan pronto … si lo hubiera sabido te hubiese preparado unas tortitas o algo para acompañar el café … estará usted hambriento seguro … Mientras caliento el café si quiere puede sentarse en el comedor, ya sabe donde está … (sonríe dulcemente)

- ¿Lo quiere con leche?

Samuel se encoje de hombros:

- Digamos que ya me disculpé, pero si quieres que vaya de nuevo, está bien.

-Por favor, no es necesaria tanta molestia. Después de todo, no puedo decir que soy una visita- dije con una sonrisa.

Entré a la casa y me dirigí al comedor, donde me senté en el mismo sofá que el día anterior.

Que buenos recuerdos pensé burlándome de mí mismo.

-Con leche estaría muy bien-

Te acerca la taza y sin querer mira tu entrepierna …

- Esta bien cargadito (sonríe de forma pícara) … la verdad que no pensé que volvería … y bien que puedo hacer hoy por usted …

- Vayamos todos. Ya habrá tiempo de dividirnos más tarde.

A la abogada le rondaba por la cabeza volver a visitar al notario, pero aún era una hora temprana y el hombre tendría trabajo que atender.

Bien, yo voy a ir saliendo fuera, que tengo que hacer una llamada, ahora nos vemos.

Salgo fuera y cojo mi movil, tenia a alguien a quién llamar

Este no será el mejor de mis días

-Gracias- dije sonriendo y tomando la taza. Le di un sorbo con algo de ruido, ya que estaba caliente. -Verá Florencia, iré al grano. Vine aquí para saber si podría conseguir esa llave. La de la portería. Por supuesto, su hospitalidad me convenció de regresar. No quiero importunarla, pero es mi trabajo ser insistente. Aún así, lo último que querría hacer es molestarla Florencia. Usted es una buena mujer- dije en tono conciliador. -Entiendo lo que es perder a alguien que ama. He perdido familiares también. Y entiendo que sea pronto, pero considere que esto podría ayudar a hacer justicia por la memoria de Jaime. Entiendo que era un hombre bondadoso, no merecía tal desgracia-

A continuación, miré al suelo con una expresión de desasosiego.

-Dios, esto está mal. No puedo pedirle una cosa así a dos días de tal tragedia. Disculpe Florencia. Recién ahora me doy cuenta de lo terrible de mi petición. Entenderé que me quiera fuera de su casa- dije con pena fingida, amagando dejar la taza sobre la mesita.

En un principio tus contactos no pueden facilitarte gran información al respecto, prácticamente lo que te cuentan es lo que ya sabes. Lo único que te comentan que si quieres podrían investigar algo para ti, y te llamarían en cuanto tengan algo de información.

- No puedo dejarle la llave comprenda que sería una falta de moralidad por mi parte y hacia el bueno de Jaime, (sonrojada dice …) ¿si puedo ayudarle de alguna otra manera?

Parece como si ella también estuviera acostumbrada a usar las falsas lagrimas para conseguir sus objetivos, ser la cotilla del edificio y estar bien vista no es algo fácil ...

A pesar de que la mujer sonaba honesta, no pude dejar de desconfiar de sus verdaderas intenciones. Despues de todo el mundo funcionaba de esa manera, mediante indirectas y engaños.

-Comprendo, comprendo. Le pido disculpas- dije fingiendo pena. -La verdad es que sí podría ayudarme de otra manera- Deje de respirar. -¿Le parece tener un encuentro más... informal?- le sugerí, esperando que entendiera tan pobre indirecta.

Como me irritan estos jueguitos. Y para colmo tal vez no consiga nada

¿Todos al seminario?

- ¿Un encuentro más informal?, no se si le estoy entendiendo bien, pero si viene esta tarde a comer y trae un buen champán creo que podré ser todo lo informal que usted quiera ... (sonrojada como un tomate) que calor que me está entrando de repente ... (rápidamente apura lo poco que queda en la taza como para conseguir oxigeno) si oficialmente no tiene más preguntas, creo que tendré que ponerme a preparar el guiso, ya verá que postre más rico tengo para usted …