Partida Rol por web

Distinguís entre los chicos que están abajo a Xabier y Álvaro, hay otros dos que no podéis ver bien pero parecen estar hablando tranquilamente. Seguramente estén comprobando el perímetro de la casa.

Podéis decirles algo si lo creéis conveniente a través de la ventana, parecen estar discutiendo algo o tratando algún tema.

Tras hablar Simón se hace el silencio. Todos os miráis ya que todos sentís que os observan, levantáis la vista a las casas de alrededor y podéis ver que hay una ventana en la que parece haber alguien mirándoos.

Xabier revisa la calle y os dice en silencio:

- Creo que Silvia no está observando...esa ventana es la de su piso...lo que es venir sin que nadie se dé cuenta no lo hemos conseguido...

- Pues sí, se nos da un poco de culo eso de la discreción. Pero si eso sirve para que sepa que somos nosotros y esté tranquila... bueno es. - dijo encogiéndose de hombros, mirando tanto a Xabier como a Álvaro - Os sigo, que nunca he estado aquí. -

Al fin y al cabo no conocía a Silvia todavía...

Al ver por la ventana y notar quienes eran, Xavier y ese tal Alvaro, Ricanrdo no pudo evitar fruncir sutilmente el ceño, la verdad es que podía comprender que ellos estuvieran preocupados y quisieran comprobar que todo estuviera bien. Pero se suponía que Xabier haría que su tío pasara por ahí y no ellos. Él sabía muy bien que Silvia no deseaba verlos, ella tenía sus razones y allí estaban ellos, algo que podría ser malo para ella cuando buscaba evitarlos...

Les dije que no vinieran... Mejor espera aquí si? Ire a hablar con ellos, les diré que estas durmiendo, así no sera necesario que quieran verte o hablar contigo.

Le terminaba diciendo a Silvia esperando que al verlos no se pusiera mal, mostrándose dispuesto a cubrirla ya que en definitiva, se lo prometió y que ellos estuvieran allí, era como si hubiese faltado a su palabra. Ricardo no tenía problemas con nadie, pero la verdad es que no le gustaba mucho faltar a sus promesas cuando las hacía y menos si el bienestar de alguien estaba en juego.

Al ver a Alvaro, Silvia sintió un vuelco en el corazón. ¿Qué hacía allí? Ella ya había dicho que no quería verle. Eran demasiados los sentimientos que se entrecruzaban en su interior.

Hasta que Ricardo habló, la joven estuvo manteniendo la respiración. Soltó el aire que estaba conteniendo y se volvió a mirarle. En el fondo sabía que era mejor que subieran. Tenía que dejarse de tonterías, el pasado tenía que dejarlo atrás. Ahora tenían un problema mucho más grave.

Alargó la mano y la posó sobre el brazo de Ricardo.

- No... Diles que suban. Será mejor que hablemos cuanto antes ya que esto nos repercute a todos. No irán sólo a por mi y... son mis amigos - . Le dijo, intentando sonreír. Deslizó la mano hasta soltar el brazo del joven y se volvió a mirar nuevamente por la ventana.

Ricardo pensaba en como convencerlos, Xabi también era su amigo y no quería que se tomara mal sus palabras, mucho menos quería que se molestaran con Silvia. Pero antes de salir de allí para encontrarse con ellos, su atención volvía hacia ella para escucharla de nuevo y aunque parecía haber cambiado de opinión, no estaba muy seguro...

Entiendo aunque... Una pena que nos cortaran la peli no? 

Le terminaba diciendo buscando sonreírle un poco y de esa forma, animarla antes de aceptar sus palabras y sacarle la llave a la puerta antes de correr la silla. Al final parecía que iban a tener un debate amplio sobre lo que estaba pasando, puede que ellos también hubiesen tenido alguna novedad, pero no era algo que pudiera estar seguro ya que después de todo, solo había una forma de averiguarlo.

Ya vengo.

Agregaba antes de abrir la puerta y salir de allí con calma, sin apuros para reunirse con Xabi y Alvaro, ver que estaban hablando y preguntándose si también estaban los demás cerca o solamente ellos. Pero la verdadera pregunta, era  Por qué no había llegado aun el tío de Xabier, era araro que no se hubiese pasado aun si el dijo que lo mandaría.

Mientras Silvia observa la escena Ricardo se aproxima al grupo. Xabier lo saluda, luego Brais aunque no tiene mucho trato con él. Álvaro hace un ademán con la cabeza.

- ¿Pasó la policía por el piso? - pregunta Xabier sin mediar palabra. Se le ve algo inquieto al no ver presencia policial y más tras lo sucedido.

Como?

Ricardo se acercó a ellos esperando hablar y terminar por invitarlos pasar como al final le comentó Silvia, pero en cambio al escuchar esa pregunta él quedó un poco traspuesto. La verdad es que al principio, pensaron que podían ser unos policías cuando los escucharon, pero al no ser así y encontrarse con esa pregunta, no pudo evitar tener un mal presentimiento.

No, no apareció nadie... Estas seguro que mandaron a alguien? Deberías preguntarle a tu tío.

Le terminaba diciendo Ricardo mientras eso no le gustaba nada aunque, puede que no les tomaran en serio y decidieran decir que enviarían a alguien y no lo hicieron. Pero dudaba que el tío de Xabi no lo tomara en serio o al menos, no hubiese enviado ni a un efectivo para asegurarse al menos.

- Me dijo que avisaría, pero no sé si vendría él o mandaría gente...pero ya deberían estar aquí...Álvaro y Simón vieron a dos policías pero deberían haber pasado por el piso...me parece algo raro. ¿Vosotros qué tal estáis?

La verdad es que ninguno pasó, puede que solo hubiesen revisado los alrededores.

Comentaba Ricardo que pronto intentaba ponerle algún sentido a todo aquello, era realmente raro que a Xabi le hubiesen dicho aquello, viera esos policías y sin embargo, ellos nunca escucharon que nadie tocara la puerta o se acercara. Puede que sean solo pensamientos paranoicos, pero prefería no pensar lo peor cuando todo se había calmado o al menos, eso parecía.

Nosotros estamos bien, Silvia esta mejor... Estábamos mirando una película incluso, aunque la verdad es que esperábamos a tu tío o a un policía llegara pronto a comprobar el lugar.

Le terminaba respondiendo con calma mientras que por otro lado, parecía que el resto de los que se iban a juntar no estaban allí. Pero no importaba, estaban ya bastante rato afuera y no quería dejar a Silvia sola por lo que teniendo en cuenta lo que ella le dijo antes, terminaba por sonreír un poco.

Quieren pasar?

Silvia estuvo mirando durante unos minutos a través de la ventana. Vio como Ricardo se acercaba a Xabier y al resto y empezaban a hablar. Pero no se quedó mucho rato allí. Colocó bien la cortina y se volvió. Su mirada recorrió la salita, donde hacía tan sólo unos minutos había estado junto a Ricardo, volviendo a ver la película de Willow. 

Se acercó al vídeo y sacó la cinta, guardándola de nuevo en el mueble. Estaba claro que tendrían que dejarla para otro día. Se acercó al sofá y se sentó, colocando ambas manos sobre sus piernas y quedándose con la mirada perdida en la pared que tenía delante. 

Tenía sentimientos encontrados referente a Ricardo. Él se estaba mostrando muy atento, quizás demasiado. Casi no le conocía y no se había apartado de su lado, preocupándose en todo momento por lo que pudiera estar sintiendo. Era consciente de que el chico quería algo, pero ella no sabía lo que quería... 

No puedo pasarme la vida lamentando lo que pasó con Álvaro. Desde que lo habían dejado, Silvia había visto a otros hombres. Pero siempre habían sido encuentros casuales, sin ninguna pretensión. Era joven y guapa y muchos chicos le tiraban la caña en el pub. Pero estaba claro lo que buscaban y a ella le estaba bien. No quería compromisos tras la relación que había tenido con Álvaro. Pero Ricardo no se comportaba como todos esos buitres. Él buscaba atenderla, procuraba que estuviera bien y se preocupaba por ella. Cuando le había dado aquel beso en la cabeza, ella se había sorprendido muchísimo. Era la primera vez que un chico la trataba de esa manera. Otro hubiera ido directamente a por su boca y... Si no hubiera sido por el mal rollo que tenía en el cuerpo tras aquella llamada, lo más seguro es que la hubiera encontrado. 

Al recordar aquella llamada, un escalofrío recorrió su cuerpo. Inconscientemente llevó su mirada hacia el teléfono, casi esperando que volviera a sonar. Ahora que estaba sola y no tenía la anestesia de la película ni de los brazos de Ricardo, volvía a sentir los nervios a flor de piel. 

Se levantó de nuevo y se dedicó a registrar el piso, tenía la sensación de que no estaba sola... 

Xabier tiene cara de preocupado, que no apareciera su tío le preocupa y mucho. Saca el móvil y lo llama:

- Ramón, soy Xabi. Estoy en casa de Silvia ¿has mandado a alguien?

Su rostro se oscurece al escuchar la respuesta y les dice al resto:

- No pudo mandar a nadie, dieron orden de no acudir a esta llamada a la policía local...rápido subid al piso cagando leches...

La sensación de que no estás sola en el piso se incrementa por momentos, los miedos que tenías parecen tomar poco a poco el control aunque sabes que no debería de haber nadie. Ricardo y el resto están a sólo unos metros, con cualquier grito acudirían así que no deberías sentir miedo...pero lo sientes igual...

Caminas por el piso con cautela y escuchas lo que parece el sonido de una persiana batiendo contra el cristal, parece que proviene del baño. Recuerdas que debía de estar bajada del todo pero ahora mismo no lo puedes asegurar...y ¿si él entró en el piso y está esperando su momento?

El sonido de la persiana batiendo contra el cristal le puso los pelos de punta a Silvia. Se detuvo y miró hacia la puerta del baño. Sus ojos se habían abierto como platos y sus pestañas aletearon. 

Está allí... Seguro que está allí... Tragó saliva y apoyó su mano temblorosa en la pared. Sentía las piernas de gelatina y la boca reseca. No... No puede ser... No se habrá atrevido... No quería parecer una paranoica. Tenía a sus amigos allí abajo y no quería salir gritando y que pensaran que se había vuelto una gallina. 

Sólo tengo que acercarme y encender la luz. Verás como no hay nadie... Se dijo y se mordió el labio con fuerza. El miedo a veces hace a la gente actuar de forma estúpida. Seguro que me he dejado la persiana subida. No es nada raro... Dio un par de pasos más hacia la puerta, necesitaba mostrarse a sí misma que no era tan cobarde. 

Respiró profundamente y le dio al interruptor de la luz antes de abrir la puerta de un golpe y mirar en el interior del baño. Sentía una presión muy fuerte en el pecho. Sus pupilas se afilaron y su corazón bombeaba con fuerza la sangre por todo su cuerpo...

Ricardo guardó silencio al ver como Xabi hacía esa llamada, puede que realmente hubiesen pasado o estuvieran en camino incluso, pero al notar como la expresión de él cambiaba, el mal presentimiento que tuvo antes sólo resurgía con mas fuerza, mas cuando lo escuchaba decir aquello.

Como que alguien dio la orden? Quién dio esa orden?

Le preguntaba a Xabi aunque no para quedarse quieto esperando una respuesta, sino para girarse en el acto y empezar a dirigirse rápido a la casa de Silvia. La forma en que Xabier dijo aquello, hizo que el pensara que pudiera pasar algo mas, aunque Silvia estaba segura dentro de la casa y ellos se encontraban ante la puerta, puede que solamente estuviera exagerando al preocuparse demasiado.

- No tengo ni puta idea, pero supongo que un mando indicó que nadie viniera...subid que me está dando mal rollo esto... - dice - ...esos dos policías con los que os encontrasteis no os dieron buena espina ¿no? - le pregunta a Simón y a Álvaro.