Partida Rol por web

No tienes muy lejos el coche y aun no habeis llegado hasta la salida a la autopista, sigues pisando a fondo y ves como los coches al verte en el retrovisor aceleran esperando perderte.

21:05:37

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21:05:47

Norinco ya ni se acordaba que tenía a Bella en la linea esperando. 

Por suerte la llamada pasaba por su comunicador mastoideo y no tenia que hacer nada para mantener la llamada mientras continuaba dando gas a su moto. -Han extraído a mamá. Myuki está examinando la casa.-

Decía brevemente mientras el ruido del motor se dejaba escuchar y ella se centraba mas a esquivar un par de coches y pasar por el medio de ellos rugiendo como un demonio. La configuración de las dos ruedas traseras conjuntas le daba una estabilidad envidiable a esa moto.

A veces parecía que se conducía sola y era imposible caer de ella. -Estoy dirección a la autopista con P90, detrás de los posibles culpables.- continuó un par de segundos después mientras observaba a los dos coches cada vez mas cerca.

-"P", dispara a sus ruedas!!-

Norinco pudo ver como las calles se hacían estrechas. Estaban haciendo obras y uno de los carriles estaba cerrado, lo que dificultaba el paso, sobretodo teniendo en cuenta que ya había vehículos circulando.

La moto lo tenía bien para pasar entre los coches y las vallas, pero los dos sedans tendrían que romper esas vallas y arriesgarse a encontrar un agujero insalvable, o apartar a los demás a golpes.

-Mala suerte colegas.- Masculló por lo bajo.

A P90 todo aquel asunto lo estaba jodiendo, ¡pero qué bien jodido!.

Por un lado, estaba el "temita" de la descarga de adrenalina que le recorría ahora el cuerpo haciéndole cosquillear los músculos, - algunos mas que otros -, a la vez que se le apunaban los oídos con el desbocado ritmo de su propio corazón; Por el otro, la gran revolución hormonal de la cual era víctima por más de que ya había pasado la fase adolescente hace un largo tiempo, y que le inducia a querer follarse a todo aquel ser humano que fuese femenino y entrara dentro de su órbita de “me gusta” (y su órbita era muuuuuuuy amplía a decir verdad).

Como fuese, la puta atención se le había ido a tomar por el culo y en su lugar, su fértil imaginación ya se había montado una buena película de sexo duro y acción a tutiplén digna del jodido Quentin Taran-quetefollotía-tino sobre la moto de Norico.

¡Hay P90, si que eras gilipollas a veces!

 -"P", dispara a sus ruedas!!-

Como una pompa de jabón explotando bajo un viento fuerte, el grito de Norico le saco de su introspección con rudeza, P90, medio apollardado aún por los remantes de la película mental que se había montado, intento sacar de la cintura el gigantesco y pesado armatoste que era la Comanche “Rosita” pero tenia los putos dedos traspirados y el arma se le escurrió como si estuviera hecha de mocos pringosos para caer dando saltitos y giros sobre el asfalto para perderse entre las sombras.

¡MIS PUTOS ANCESTROS!, exclamo con desesperación, no vas a creer esto Norico…

21:05:47

El conductor del primer coche, pisa con fuerza el acelerado con la intención de empujar al pobre citycar que conduce a sus correctos 50km/h en dirección a la zanja de la obra que se abre a su derecha y así tener paso libre...

Uno de los faros del sedán revienta salpicando miles de cristalitos por la carretera, pero nada detiene su marcha… aunque el incidente les ha hecho perder parte de la ventaja que tenían.

El conductor asustado por las posibilidades de terminar de papilla en la zanja y no confiando mucho en las habilidades de su compañero pisa el freno en demasía, perdiendo aún más ventaja si cabe y perdiendo parte del control del vehiculo que golpea lateralmente al citycar haciendo dar vueltas sobre si mismo al pobre minielectrico... gracias al "apoyo" del citycar endereza y vuelve a la carretera...

...el primer coche se distancia de su compañero varias decenas de metros…

...mientras el citycar aunque es eléctrico empieza arder...

21:05:57

Norinco resopló con frustración.

-No me jodas "P"-

-Joder ...-

Dio gas pasando rápidamente al lado del vehículo en llamas, zizageando entre cristales y parachoces rotos para dejar esa zona rápidamente, así como el pistolón de su compañero.

Levantó su brazo cibernético y este se abrió por la parte superior, el cañón de una arma oculta se levantó y empezó a disparar balazos al sedan que había quedado atrás. Linias de luz incandescente brillando en la noche y que producían pequeñas explosiones de fuego allí donde impactaban

-Pues al menos usa la pistola que me estas clavando en el culo.- No sabía que diablos hacía P90 en su trasero, pero lo estaba desquitando y uno de sus disparos literalmente fue al cielo. Y mientras perdía el tiempo disparando tampoco le daba al gas. 

El otro coche los estaba dejando atrás y enfundó el arma del brazo para agarrar el gas y darle de nuevo, lo que hacía que empujara su cadera contra el cebolleta de detrás suyo y aún se irritara mas.

-¡MIERDA!- Maldijo viendo que se quedaban rezagados.

Me dejas...mama... ¿para qué?

Bueno que más da... tras unos segundos de silencio

Supongo que necesitáis cobertura, darme unos minutos y veré que puedo hacer a 7000 kilómetros

Y tío, a esos cabrones meterles el cibermiembro por el culo hasta arrancarles la lengua... y luego ya preguntaremos si eso.

*Bep**Bep**Bep*

21:05:57

Poco a poco el coche va cogiendo distancia...  el cartel que indica la incorporación a la autopista aparece brevemente en vuestra retina y como una exhalación queda atrás...

21:06:07

Mientras el sedan negro se aleja,  por fin los dedos ciberneticos de Norinco vuelven a encajar en sus sitio dejandole coger bien el acelerador de la moto y afrontar el ultimo tramo hasta la autopista.

Parece despejado y sin sorpresa cuando nota como P90 empieza a moverse nervioso detras suyo y a palparlo...

Llegaba el momento de entrar en la autopista y continuar la persecución. Podía ser arriesgado pero si Norinco jugaba bien sus cartas podría acortar un montón de metros. Si no ... bueno, siempre podía llevar la moto al taller.

-Agarrate "P"- Y dió un golpe de gas.

21:06:07

Controlando firmemente el coche entra en la autopista derrapando entre dos coches y situandose en el carril central.

a toda velocidad entra en la autopista controlando a la perfeccion el coche y situandose detras de su compañero...

21:06:17

La moto entro en la rampa de incorporación a la autopista a más velocidad de lo que sus fabricantes creían que podría, la velocidad hace que por culpa del desnivel la moto entre literalmente volando sin control en la autopista. Gracias a la suerte no se encuentra ningún vehículo en su camino, lo que le permite aterrizar, pero aunque está bien encarada a la persecución la moto sigue por la inercia con un deslizamiento lateral ..que la lleva a golpearse levemente con un coche en el carril de más a la derecha… saltando chispas y el retrovisor derecho os mantenéis en la carretera…

Y aun estáis en la carrera…

"Pues al menos usa la pistola que me estas clavando en el culo."

 

La queja de Norico le hizo sonrojarse – si eso era posible en su tez oscura -, pero no era su culpa que el cuerpo reaccionara así al peligro.

¡Todo era culpa de la adrenalina!

¿verdad?

La adrenalina tiene efectos intensos en el cuerpo humano, ¡sí!, esa amigable hormona puede hacer la diferencia en momentos donde los niveles de estrés o peligro son muy altos.

Entre los muchos efectos que provoca en el cuerpo podemos contar, por ejemplo, con la aceleración del ritmo cardiaco cosa muy necesaria para poder llevar mas sangre y oxigeno a los músculos, que las pupilas se dilaten para poder ver mejor o, elevar la presión sanguínea para que los vasos de los órganos más importantes se ensanchen.

Ahora, quizás P90 fuera mutante, su hormona fuese un poco tonta o, el cipote fuera en verdad un “órgano” tan importante como la mayoría de los hombres pensábamos en la intimidad, pero en momentos como estos, donde la acción primaba sobre otra cosa, P90 se empalmaba que te cagas.

Duro como un puto madero de roble y sin posibilidad de ocultarlo.

Tampoco ayudaba mucho que Norico le refregase el culo sobre el cipote como si quisiera sacarle brillo. ¡Anda ya Norico!.

Sumado a este pintoresco asunto, estaba el hecho de que iba cada vez más incómodo en aquel casi inexistente asiento, apenas sosteniéndose entre tanta aceleración y esquive, y para colmo de males, sin una puta arma.

Intento fijarse si Norico llevaba alguna a la cintura y – vaya los dioses y su humor negro que metían mano en sus actos -, justo en ese momento una frenada inesperada de la moto le hizo lanzarse sobre la espalda de “Nori” de quien se aferro como un naufrago a la deriva lo haría con un salvavidas.

Visto por un tercero podría parecer un manoseo, - que tampoco venia mal vamos -, pero no era la intención principal.

¡Enculé Norico avisa cuando hagas estas cosas, casi me caigo de la putain motocicleta!, le dijo con los labios casi pegados al cuello de su “compañera”. ¡Ey “Nori”!, ¿No llevas algún arma que puedas prestarme?, le pregunto y esperaba que la respuesta fuese si o P90 bien podía ir yéndose a tomar por el culo.

La enculada de P90 no pasó en el mejor de los momentos y Norinco perdió el control de la frenada. Su moto, un monstruo masivo de tres ruedas, se deslizó de lado y golpeó a una furgoneta en un aluvión de chispas. -Ostia puta.- fue lo único que masculló mientras intentaba dar bandazos con el manillar para no perder el equilibrio.

-Soy mecánico, si te parece llevaré todo un puto arsenal encima.- Contestó mientras daba un golpe de gas e intentaba aderezar la moto. -Joder lo estamos haciendo con el culo.- 

Se preguntó si valía la pena continuar con la persecución. A duras penas podía mantener el ritmo y "P" no podía hacer nada más aparte de estorbar.

En las viejas holo-series el prota solía decir cosas chulas como “Nota mental” y luego soltaba una frase antológica para dejar bien en claro que era el puto amo, el prota y un tío muy sabio y cachas. Quizá por los nervios, o porque era un puto adicto a esas mierdas prehistóricas, el casi choque de “N” le recordó a P90 una de aquellas viejas cintas.

El Halcón callejero se llamaba aquella mierda y en ella, el prota se movía por la ciudad sobre una moto que podía dar unos saltos que te cagas, rodar a mas de 500 km/s y como si aquello no fuera mucho, disparar su cañón laser, sus dos poderosas gatilings o, - ¡anda ya!, ¿no te parece mucho? -, su lanzamisiles. Eso si era una moto y no esta mierda que conduce “Nori” pensó.

Norico estaba perdiendo la concentración y eso era peligroso, era hora, se dijo a si mismo P90, de darle una buena “frase de prota”.

Le apoyo ambas manos sobre los hombros volviendo a acercar sus labios al cuello de “Nori” – con cero respeto por el espacio personal -, y le soltó así, en plan prota de los cojones.

“Si sabes lo que mereces, ve y consigue lo que vales Nori”.

Tras aquella pedazo frase P90 se sintió conforme de motivar a Norico, lo que el gilipollas no sabía es que la había como el culo.

¡Hay P90!, mejor te callas puto mamón.