Primera Historia

Una Navidad Negra

24 de Diciembre de 2017

20 horas

En una casa de los suburbios.

La familia King tenía todo planeado para estas fiestas: el comedor había sido ataviado con un enorme pino en un rincón lleno de adornos hasta explotar. Incluso se había encerrado al perro de la casa, Thorn, en el patio interno para evitar que con sus jugarretas terminara tirando todo al suelo. Era un hermoso ovejero alemán de unos tres años, y con toda la energía que eso conlleva. Una chimenea antigua resplandecía con leños oscuros siendo consumidos por el fuego. El atizador de bronce yacía a su lado para empujar la pila o avivarla cuando fuese necesario.

La mesa tenía lugar para ocho invitados y dos habían llegado casi tarde (no era raro cuando los caminos estaban bastante bloqueados por la nieve y el mal tiempo) pero ya estaban aquí. Rain y Dolan no podrían parecer más diferentes y un tercero, alguien que no conociera a los Kings, podría preguntarse (con razón) cómo ambos estaban invitados a la misma reunión. La verdad era que ella había venido por el padre de familia, Stephen, que era un veterinario de esos que atiende todo tipo de casos (incluso ofídicos). Dolan, en cambio, era conocido de la abuela de la familia. Berta King tenía unos 70 años, una risa contagiosa y muchos billetes. Era también la novia del jefe de la empresa, y se comenzó a llevar bien con el “joven ejecutivo” también, invitándolo finalmente a la cena familiar.

Además de ellos, estaban: la esposa de Stephen (Mary Sue) y sus dos hijos. Matt tenía 15 y era un rebelde sin causa, y Megan contaba con 10 y parecía una especie de fantasma viviente ya que no le sacabas palabras si no era de suerte. Aun quedaba un lugar vacío tal vez de alguien que había cancelado a último momento.

Esta era la primera vez que Rain y Dolan se conocían.

-Pasen por favor, déjenme tomar sus abrigos -dijo Stephen, el anfitrión, apurándose a hacerlos entrar y cerrar la puerta a la intemperie y las bajas temperaturas. -Mary Sue, ¡trae algo de beber a los invitados! -farfulló con una sonrisa gigantona. Descorrió dos sillas adjuntas para que los nuevos invitados tomaran asiento. Tenía una mirada un poco melancólica y un vaho a vino dulce que daba a entender que había comenzado a festejar hacía rato.

-Una bonita familia feliz- pienso irónicamente para mi al ver la casa y toda la parafernalia navideña que han montado.

-Buenas noches Stephen- digo por cortesía nada más entrar y en cuanto Mary Sue trae la bebida la cojo, antes colgando mi abrigo de pelo y cuero y mi bufanda de calaveras donde me dice Stephen,   sonrío  a Mary Sue con un escueto pero amable gracias y observo la escena y la casa-madre mía ¿quien me mandaría a llevar a Pixxie y Dixxie a este veterinario?- Pienso-bueno veo que la familia está contenta- digo intentando parecer amable -creo que esto de encajar viendo el ambiente... No va a ser lo mio...- Lo pienso por el atuendo mio y mirando a la especie de yuppie noventero que entró conmigo.

"Jejeje" piensa Dolan "Una oportunidad como otra de ganarme el favor de su gran divinidad, el señor presidente-sama de la empresa"

"He traido un Chianti de 1964, para celebrar esta entrañable fiesta" dice otorgandole la botella a Steven, el hijo del señor Presidente-Sama. Que ni es japo ni nada, pero por algún motivo, la gente le dice "Señor presidente-sama" "Super-Jefazo" o cosas así.

"Muchas gracias por invitarme a esta cordial fiesta, mis queridos amigos" dice el hombre que no tiene amigos, sino herramientas para conseguir más dinero.

-Perfecto he quedado fatal y no pude traer nada vengo directa del ensayo..Ya saben "Show must go on"- digo casi sin pensarlo... a veces mi boca habla antes que mi cerebro piensa, miro al yuppie-soy Rain- digo interrumpiendo su momento peloteo

Dolan, el eterno tocapelotas sin pelotas, ve a la muchacha. No le suena que le hablasen de una chica rebelde, sino de Matt, el rebelde

"¿Se habrá cambiado Matt de género, se habrá operado y ahora se hará llamar Rain?" piensa "Bueno, al fin y al cabo, convertirse en mujer deberia de ser tan facil como coger un cuchillo, sostenerse el ZIB¹, y..."

"¡Auch! Mejor no pienses más en eso"

Viendo que ni se presenta entro a la casa y me acerco a la mujer de Stephen-¿necesitas ayuda?- Digo amablemente, la verdad no sé que hacer a veces en estas cosas familiares.

"He traido un Chianti de 1964, para celebrar esta entrañable fiesta" 

Dice Doland y el padre de familia toma la botella con una sonrisa de felicidad, aunque sigue con esos ojos tristes. Mary Sue viene a saludar a los dos invitados, ella es un poco más joven que su esposo y le gustan esos peinados tipo setenta.

"Muchas gracias por invitarme a esta cordial fiesta, mis queridos amigos"

-Gracias por haber venido. Tengo entendido que las carreteras están hechas un desastre.

Mientras ella va y viene, trayendo algunas bandejas con aperitivos, los dos nuevos hablan un poco entre sí. Desde un teléfono conectado a un aparato de audio se escucha a Frank Sinatra.

-Perfecto he quedado fatal y no pude traer nada vengo directa del ensayo..Ya saben "Show must go on"-

Stephen pone la botella en medio de la mesa y responde al comentario de Rain.

-No necesitas traer nada, ¿Cómo está Pixxie? ¿Ha empezado a perder la piel de nuevo?

Rain se ofrece a Mary Sue por si precisa ayuda, Dolan piensa sobre la identidad de la muchacha.

-Oh, solo tengo que chequear el pollo en media hora, pero tenemos aquí aperitivos, sirvánse. ¡¡Niños apaguen esos teléfonos, tenemos invitados!

Una mujer se levanta y se acerca a Dolan, es la abuela.

-Mi queridoo muchacho, has venido, que gusto me daaaa...

Tiene una voz ronca, como si estuviera enferma, pero esa es su voz normal. En la mesa hay una bandeja con jamón y otros fiambres, algunos canapés y bebidas. Los dos niños aun no los saludaron, están cuchicheando entre ellos. Desde lejos se oye un aullido perruno.

Dolan contempla a los niños un poco extrañado. Se rasca la cabeza

"Vale, ese con una camiseta negra de "Yo odio a la navidad" tiene que ser Matt. Entonces Rain no es Matt cambiado de sexo ¡Menos mal que no he abierto la boca!"
"Asi que seguramente Rain sea la esposa de Matt. Estarán casados y a la espera de tener 1d12 hijos al año"

Como sea, se aclara la voz muy profesionalmente para presentarse a quienes no le conocen: A la señora MarySue y a los peques.

"Yo soy Dolan. Dolan Smitherson. Si, como el pato" dice poniendo la expresión que en el fondo, todos quieren que ponga

[color=#990000]"Gooby Pls"[/color]

(Aun no ha visto a la abuela... AUN)

-Están ambas bien, les estoy poniendo las vitaminas que me comentaste y todo genial la verdad..La piel.. La cambiaran el mes que viene seguramente- contesto a Stephen casi sin pensar-vale Mary- sonrío amablemente tras decírme lo del pollo y me siento donde me dicen, pongo cara de este tipo es imbécil tras el comentario de Dolan sobre el pato.

"Yo soy Dolan. Dolan Smitherson. Si, como el pato"

Matt deja de cuchichear y lo mira, tiene puesta una camiseta negra en donde se lee algo sobre el tratamiento ético de los animales. Su cabello rubio está desordenado y posee un aire de rebeldía en toda su persona.

-Hola, no sé quién es el pato.

Responde con un alzamiento de hombros.

-Están ambas bien, les estoy poniendo las vitaminas que me comentaste y todo genial la verdad..La piel.. La cambiaran el mes que viene seguramente-

Contesta Rain al comentario de Stephen luego se sienta y se prepara para disfrutar la velada, o algo por el estilo. Mary se sienta enfrente de ella y empieza a servir el vino.

-Dolan, DOLAN!!! Ah veces creo que estás más sordo que yo-, alega Berta.

Miro a Matt-hola soy Rain- le digo amablemente-adolescente rebelde sin causa con pose de poeta maldito...- Pienso para mi-quizás hasta es divertido..-Me vuelvo a decir para mi misma

Dolan ve al objeto de su interés: Al dinero, la posición y las posibilidades de un gran futuro.
Ah, y ve a la anciana Berta, que es la mano que puede mover todo eso de las promesas del futuro a la realidad del presente.

"Señora Berta, un placer" dice tomandole la mano y besándosela. Seh. Como en la peli de Titanic.

"Lo vi hacer en una película" se justifica.

Dolan se sienta a la mesa, dejando ver en su sonrisa sus dientes blanqueados con algún tratamiento químico bastante caro. Y entonces ve la silla vacía

"Esto... ¿Esperamos a alguien más?"

-hola soy Rain-

Matt asiente como toda forma de saludo. Está bastante alejado del ánimo festivo y la interrupción de Berta es casi una bendición.

"Señora Berta, un placer" dice tomandole la mano y besándosela. Seh. Como en la peli de Titanic.

"Lo vi hacer en una película" se justifica.

-¡OHHHH jajajaja! -Berta se siente halagada, sus mejillas se enrojecen con coquetería y afirma -si sigues así tendrás un lugar en mi herencia.

Su risa de nuevo irrumpe mientras Dolan pregunta por la silla vacía. El jefe de familia responde con un poco de amargura.

-Sí, esperábamos.

Todos callan. El aullido del perro vuelve a interrumpir. Frank Sinatra ha terminado de cantar y ahora suena otro oldie. Stephen continúa sirviendo el vino. Los aperitivos parecen deliciosos, pero todavía nadie ha tocado ninguno. La hermana de Matt permanece callada, apática. Mary Sue toma un trago largo, parece que desea que la fiesta comience antes.

-A veces Dios tiene sus propios planes -comenta Berta un poco seria. Rápidamente agrega, observando a la joven invitada.

-Te llamas como la lluvia.

La tia del dinero escribió:

"¡Quite, quite, señora! Que aun nos queda a todos mucho que decir y que vivir como para pensar en eso!" miente. Por dentro, está dando saltitos de felicidad, pensando en lo que más ama en este mundo: El dinero.

Pero al ver como Stephen intenta contener su tristeza ante la silla vacía, Dolan decide sabiamente no hacer más preguntas al respecto. Quizá algún inesperado venga a última hora. Quizá.

Mientras tanto, decide hacer la cosa más malévola que puede hacerse a un ser humano, y que aunque no se ha especializado, tiene algo de experiencia al ser un comercial:
Dolan va a psicoanalizar a Matt. Va a intentar ver que se le pasa por la cabeza

-Sí, justo como la lluvia, mis padres se pasaron quizás de originales- digo con una sonrisa de medio lado y bebo un trago de vino.

Observo la escena de "familia feliz" villancicos...Vamos el pack completo de navidad feliz con su Grinch caracterizado en Matt y todo... Y por supuesto Dolan intentando ser la cara amable que por el otro lado te clavará el puñal cuando menos te lo esperes todo por supuesto con un blanqueamiento dental cutre...

"¡Quite, quite, señora! Que aun nos queda a todos mucho que decir y que vivir como para pensar en eso!" 

Comenta Dolan, con esa sonrisa brillante, ese encanto que sabe usar. La abuela ríe tontamente y a su vez toma un poco de vino. El hombre, por su parte, presta especial atención ahora al adolescente rebelde. Quiere indagar un poco más en su psicología, tal vez entender qué está intentando decir con esa actitud. No toca nuevamente el tema de la silla vacía, es más inteligente que eso. Además, ya bastante ver a Stephen con esa mirada de amargura.

-Sí, justo como la lluvia, mis padres se pasaron quizás de originales-

aclara Rain mirando todo este asunto con un poco de hastío. La típica familia feliz que no tiene nada de feliz, o que sabe esconderlo bien. Y Dolan con su fachada de ser agradable, como la cereza de la torta. Una voz dulce interrumpe un momento a todos, los ojos de Megan están llenos de luz.

-Quiero ir a ver a Thorn, mamá.

-Estamos con invitados -aclara Mary Sue.

-Pero le tiene miedo a los cohetes...

La mujer mira a su hija y sopla el aire de entre sus dientes -te dejaré ir cuando empiecen los cohetes, lo prometo. Pero aun falta mucho, la noche recién empieza.

Berta sigue hablando -Rain me parece un lindo nombre para una bella muchacha. ¿A qué es una bella muchacha, verdad Dolan?

Guiña un ojo que no tiene nada de discreto.

Cuando ve como mira su hermano a Megan, Dolan siente que allí existe amor. No entre el chico y su familia, parece desconectado de todos ellos, exceptuando su hermana. No entiende más que eso, pero la rebeldía del chico es una fachada a su familia, un muro que él desea levantar entre ellos.

-Gracias Berta- digo en tono cortés-pero no se preocupe no estoy interesada ahora mismo en tener pareja- digo intentando ser bastante educada-realmente ni por un millón de pavos me iría con este tío...- Pienso para mi, miro a Megan-¿que tienes un perrito?- Le digo en tono amable

Ante la salida de la anciana Berta, Dolan le rie la broma, dejando ver una vez más los reblanqueados dientes. Que jurariais que les han echado tanto fluor en el dentista que esos piños deberían de brillar al apagar la luz.
Creepy...

"Rain, es un nombre muy poético, si me permite señorita. Parece salido de una canción" Y es que con los hombros tan tatuados, y esa forma de vestir y maquillarse, a Dolan se le antoja que ella es una chica de las calles.
Y por supuesto, se le antoja como una chica que sólo puede medir su edad en la cantidad de bandas, la cantidad de bajos, de baterias y de solistas que han conocido ¿Cuantas canciones le habrán dedicado sus amantes, con ese nombre? La respuesta, por supuesto es: A Dolan eso no le importa. Eso no da dinero.

Pero ¡Hey! El sigue sonriendo. Que para eso está

"Oh, Megan" le dice a la pequeña "Thorn ¿Es un cachorro, o un perrito ya mayor?"
Quizá el único nombre que le guste a Dolan es el de Megan... y es porque le recuerda a su Renault Meganne.