Partida Rol por web

Si crees que ha llegado el momento de buscar un medio para comunicarte con tu nieto Fu-Ken-Cioh-oh-oh, pasa a la página 48.

Espera espera espera
Entre los monos evolucionados te ha parecido ver un rostro familiar MUY MUY MUY FAMILIAR.

Si quieres saber quien es este mono evolucionado ve a la página 70.

Ya habrá tiempo para reuniones familiares cuando el Mundo esté a tus pies, así que aprovechando que nadie sabe que has vuelto y que tu nieto tiene ocupado a las autoridades del país, es hora de proceder con el plan D (D de Dominación).

Si crees que es hora de agenciarse con un virus mortal, ve a la página 50.

Unir las fuerzas con Fu-Ken-Cioh-oh-oh es seguramente el camino a la dominación final que tanto anheló Fu-Ken-Cioh cuando era algo más que un cerebro frito. Voy a la página 48.

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Narrar cómo localizaste y llenaste cuatro autobuses escolares con tu pequeña legión de leales servidores daría para un capítulo de una novela. Narrar cómo los condujíste a través de una ciudad en caos, con civiles tratando de salir, militares tratando de entrar y fragmentos de edificios volando por los aires, daría para una novela entera. Y no tenemos tiempo para escribir una novela entera. Dejémoslo en que llegaste a una emisora de televisión que seguía emitiendo y tomaste al asalto la sala de producción desde la que comenzaste a emitir una llamada para conectar con tu nietoh-oh-oh.

No tardó mucho en responder. De las muchos monitores que cubrían las paredes del centro de producción, la pantalla central, la más grande de todas, mostró la imagen de tu nieto.

Fu-K...-oh-oh - ¿Habéis decidido claudical? Ya ela hola. ¿A qué nación leplesentas?
Tú - No... yo soy tu Abuelo... únete a mí y juntos dominalemos el mundo.
Fu-K...-oh-oh - Mi abuelo murió a manos de 007.
Tú - Sí, pero congelaron mi celeblo pala estudialo, me escapé y me hice con el cuelpo de un Robo-Kid. Puedo demostlal mi identidad. Puedo decilte donde tenía un antojo tu abuela y que tu padle se hacía pis en la cama hasta los 5 años y se lo seguilía haciendo si no es polque electlifiqué su colchón.
Fu-K...-oh-oh - ¡¿Cómo puedes sabel eso?! ¡Es imposible! No sé cómo lo has descubielto, pelo no me implesionas.
Tú - Te dilé algo que nadie sabe. Implanté un miclodispositivo de seguimiento en un empaste de tu padle pala podel monitolizale en sus años de juventud díscola y alocada. Ni siquiela él lo sabe. Está entle las laíces de la pieza 18, es de celámica y es indetectable mediante detectol de metales y ladioglafías. - No es el único dispositivo que implantaste, pero no es necesario contarlo todo en la primera entrevista- Monitolizándole me dí cuenta que él nunca sería un genio del mal. Le faltaba talento e imaginación, no pasalía de sel un jefe mafioso más. Pero tú eles difelente. Tú has heledado mi mente supeldotada. Oh, estoy tan olgulloso de tí.

Tus palabras le han impresionado y se queda pensando durante unos instantes.
- Es cielto. Descublí ese dispositivo hace un tiempo con un dispositivo pala detectal microdispositivos celámicos. Te cleo. Nadie en el mundo puede hacelme sombla... salvo tú y yo no compalto el podel.

Las pantallas laterales del centro de producción mostraron imágenes del Dios Mono Ninja desde distintos ángulos, que sin dejar de derribar cazas con katanazos, misiles y la nube de drones bajo su control al tiempo que también pisoteaba vehículos militares, giró la cabeza hacia tu edificio. Lo último que viste es como sus ojos pasaban del blanco al rojo Iridio y destellaban al disparar sus laseres en tu dirección...

...es el chisporroteante...

FIN

Vaya, no fue buena idea tratar de contactar con el nietoh-oh-oh. Iré mejor a la página 50, para proceder con el plan D. Esa opción será éxito sin tirada.

50

Por un momento te dejas llevar por la nostalgia y casi la cagas decidiendo contactar con tu nieto, pero algo (digamos que un presentimiento) te dice que no es el momento y decides seguir tu propio camino. Con todo un ejército de animales evolucionados y robots engendros bajo tu yugo, es hora de empezar a sembrar el terror.

Para empezar, necesitas fondos, así que divides a tu ejército en pequeños destacamentos y los envías a casi todos a robar en bancos, cajas de ahorros y restaurantes de comida rápida donde hagan Wan-Tun frito. ¡Es que ya es una obsesión! ¿Cómo olvidar ese delicioso sabor a fritanga? Poco importa que no tengas boca, harás que la mujer lagarto se lo coma y espiarás su cerebro para reproducir la sensación en ti.

Te quedas con un pequeño destacamento de élite y la mujer lagarto, que no es que sea de élite, pero le has cogido cariño. Así no llamarás la atención mientras te mueves de un sitio a otro.

Haces memoria (claro, porque eres un cerebro, si fueras un estómago pues harías la digestión... pero no es el caso) y recuerdas que todo acabó para ti en el momento en que decidiste ir a por un virus mortal llamado Colona-vilus. ¿Por qué no aprovechar que las autoridades están distraídas con tu nieto y te agencias de un virus peor?

La división de inteligencia te informa de un centro de Investigación y Desarrollo de una Farmacéutica llamada AstraZeneca que ha elaborado algo que se conoce como el "Vilus T", una vacuna fallida del Colona-vilus que provoca que el conejillo de indi... el paciente que se vacuna muera, reviva, se despierte "at five o'clock" y se ponga a beber té, transmitiendo el Colona-vilus mutado a través de frases sugestivas como "God save the Queen" o "Let's take back control".

Te diriges hacia allí con tu pequeño destacamento de élite y ordenas a la mujer lagarto a que distraiga a los vigilantes mientras tú te aprovechas de tus 80cm de altura para colarte por los conductos de ventilación y acceder a la sala de laboratorio donde tienen la muestra del Vilus T.

Por desgracia, el Vilus T está almacenado en una caja criogenizada con una complicadísima contraseña de 4 cifras. ¿Qué deberías hacer ahora? ¿Poner el año de tu nacimiento?

Si decides poner a prueba tus poderes psíquicos y robar la contraseña de la mente del director del laboratorio, pasa a la página 21

No has llevago a señor del mal siendo tontorron. Si la caja esta cerrada LLEVATE LA CAJA CON VIRUS Y TODO.

Se practico. Ve a la pagina 81

Puede que seas un genio del mal y un cerebro, pero sabes que a veces la fuerza bruta puede ser la mejor solución: disparar tus cañones de plasma contra la caja no puede ser tan malo, lo peor que puede pasar es que el vilus T se desate por el mundo entero y, bueno, si eso es malo para la humanidad, es que es bueno para ti.

Si quieres disparar tus cañones de plasma contra la caja, ve a la página 5.

Normalmente usaría la fuerza bruta, pero esto no es un concurso de ver quién la tiene más larga y en caso de destruirlo todo e infectarte, no tienes dedos para sujetar la taza del té y levantar el meñique. Tampoco puedes llevarte la caja, mides 80 malditos centímetros.

Así que seguiremos el plan sutil: vamos a la página 21

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Una mente superdotada como la tuya podría romper la clave de seguridad con el tiempo y esfuerzo suficiente. Pero es mucho más rápido y sencillo que te den la clave. Y con tus incipientes capacidades psíquicas te crees capaz de entrar en la mente del director y tomarla.

Nadie dijo que fuese pan comido. Para empezar no quieres saltar de mente en mente hasta encontrar la del director. Primerizo como eres en la invasión de mentes, no sabes hasta qué punto puede agotarte. Así que envías a un orangután evolucionado  que con el disfraz adecuado puede pasar por mensajero y presentarse en secretaría preguntando por el director. Con su gorra, su caja de mensajería de tamaño grande para ocultarle el rostro y disimular sus andares desgarbados, el orangután cumple con el encargo y vuelve con la información.

Te cuenta que en el laboratorio la gente está histérica debido a que el ataque del Dios Mono Ninja continúa su devastación y además ya se han enterado de la "vaporización" del Instituto de investigaciones Cybernéticas y Evolución dirigida. No lo relacionan con el Dios Mono Ninja ya que hasta ahora este no ha usado armas nucleares. Lo achacan a un agente independiente oportunista con fines terroristas o para robar tecnología y borrar huellas después. Siendo también ellos víctimas potenciales de robos de tecnología, están doblemente acongojados.

También ha averiguado que la directora, una chica joven para el cargo tan importante, ha pedido que no se le moleste para nada y que no se encuentra en el centro sino en el despacho del ático donde vive. Afortunadamente el ático está en un bloque residencial adscrito al propio centro y se puede ver desde allí. Hubiese sido un problema si su apartamento estuviese en la otra punta de Osaka, tus capacidades no son tan poderosas. 

Así que desde un ventanuco estableces contacto visual con la terraza del ático y se concentras para penetrar en la mente de la directora. Comienzas a percibir fragmentos de su psique y de lo que ella misma percibe:

Un intenso olor a mar y un vago olor pescado. Un cuchillo con restos de sangre... debe estar ¿preparando la comida?

Estás en una sala amplia en la que no entra el sol e iluminada con velas.

Sus pensamientos son agitados y carecen de sentido para tí... -maldita sea, piensas, necesitas que se concentre en la clave - pero sus pensamientos están llenos de urgencia.

Pensamientos de la directora- Que Dios me perdone, que dios me perdone por lo que he hecho y por lo que voy a hacer....

Ahora el que se está asustando eres tú. Además hay un cadáver del tamaño de una persona tendido en el suelo junto a la directora.  Te preguntas en la mente de quién te has metido. Esta chica está resultando ser alguien muy siniestro... aunque pensándolo bien, tal vez deberías contratarla.

Pensamientos de la directora- Estamos en peligro con el Dios Mono Ninja y los que han destruido el Instituto de investigaciones Cybernéticas y Evolución dirigida, la policía y el ejército no van a sacarnos de aquí. Tengo que salvar mi vida y mi trabajo... ni toda la fuerza de la humanidad no pueden sacarme de aquí, pero no son las únicas fuerzas que existen. No voy a morir aquí.

Directora hablando en alto hacia un lugar indeterminado: Oh mi señor Nyarlathotep, recibe este sacrificio y escucha mi oración. Observa que he trazado adecuadamente el pentagrama y llevado a cabo los rituales. Usa tu poder para transportarme a un lugar seguro y te serviré con devoción.

Ves a través de sus ojos. Las velas, el pentagrama, los símbolos arcanos dibujados por toda la habitación y por la propia piel de la directora. Hay un cadáver de algún tipo de humanoide marino.

Sobre las paredes se materializa una masa tentacular oscura de consistencia vaga y unos ojos te dedican una mirada cargada de una maldad de unas dimensiones que tu mente no puede soportar. Tu cordura se tambalea por momentos.

Nyarlathotep accede a la petición desmaterializando en un torbellino el apartamento y materializándolo en un espacio y un tiempo seguros separado por millones de años del presente. Tu psique, aún conectada a la de la directora, se ve arrastrada por el torbellino que termina de hacer añicos tu cordura como si fuera cristal.

Es el Fin.

Una pena. Pues ahora ha llegado el momento de repartir hostias, adiós a las sutilezas.

Voy a la página 5

5

Miras la caja criogénica y la pantalla de la contraseña y, sí, en un momento de oscura lucidez, decides poner el año de tu nacimiento. Bip, bip, bip, bop.

—Anticontraseña-introducida. Iniciando-secuencia-de-autodestrucción.

...

... ...

—¡¿Autodestlucción?! ¡¡¿AUTODESTLUCCIÓN?!! ¡Mejol plueba esto! Autodestlucción MIS COJ...

RATATATATAFFFFFFFFBBIIIIIIIIIIUUUUUUURATATATATA

KABOOOOOOOM ÑAÑAÑAKAKAKAKAKAÑAÑA PIM PAM PUM TOMA LACASITOS

Los rayos, truenos y relámpagos de tus cañones de plasma pulverizan el sistema de autodestrucción de la caja criogenizada y también sus cerraduras. Cuando el humo desaparece de la escena y ves la caja criogenizada abierta de par en par, no puedes sino exclamar:

—¡Pol todos los Wan-Tun flitos del univelso! ... Hum, qué lico, Wan-Tun flito, con sus juguitos chol·leantes, su cáscala clujiente, su... ¡Concéntlate, Fu-Ken-Cioh!

Ante ti permanece la caja criogenizada, efectivamente abierta de par en par, pero en ella no hay Vilus T ni hay nada, básicamente, ni un asqueroso sashimi (“malditos japoneses estúpidos con sus comidas lidículas”, piensas mientras te entran unas ganas irresistibles de matar japoneses). Pero entonces ves una pequeña nota en el fondo de la caja: “Ja, ja, otra vez nos volvemos a encontrar. Buen intento, perdedor”, lees en la nota.

En el fondo de tu ser, sabes quién ha escrito eso y sabes que, de algún modo, seguir esa pista te llevará a la dominación final y, por supuesto, a tu codiciada, querida, soñada, deseada, acariciada, amada VENGANZA. (No tanto como un Wan-Tun frito, pero a veces hay que priorizar lo urgente por delante de lo importante)

¿Qué haces a continuación?
 

Tu nieto ha creado al Dios Mono Ninja.

La unica alternativa es que tu crees una alternativa. Ve a la sala de LOS PLANES MALVADOS en la 14

Si decides hacer una visita a quien escribió la nota, ve a la página 23

Antes de fabricar mi propia Barbra Streisand*, quiero ver quién escribió la nota y qué pasa en el cara a cara. Voy a la página 23.

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Sabes quién ha escrito el mensaje porque trabajó para ti en exclusiva hasta que se fue a trabajar con tu archirival y por ello quieres vengarte. Se llamaba Takuna Tatama y era un friki de la caligrafía china y adicto a los gadches que desarrolló un dispositivo chivato a base de papel y tinta ultratecnológicos. Sin más metales que los minerales que los de la tinta, sin más dispositivos electrónicos que la nanoestructura de la fibra del papiro, en cuanto el mensaje es tocado, envía una señal.

Nada hay de personal en el mensaje. Esta allí para que lo toque el primero que abra la caja y al hacerlo, envíe la señal de que el robo ha sido descubierto... pero tú no vas a tocar la nota. La vas a dejar ahí para que otro descubra el pastel y se lleve el privilegio de ser rastreado por el ladrón de virus.

Por tu parte vas a hacer una visita a quien escribió la nota, vas a sacarle toda la información que puedas sobre su actual empleador en particular y sobre el mundo del crimen y del Wan-Tu actuales en general.

Takuna Tatama no puede estar vivo un siglo después pero alguien debe continuar con su "legado" y enseguida descubres la existencia del emporio Takuna Tatama de las Galletas de la Suerte con sede en Tokio.

Sales de Osaka que, al no claudicar las naciones del mundo, es reducida a cenizas por el Dios Mono Ninja antes de volver a desaparecer bajo las aguas del Pacífico con la promesa de una reaparición muy próxima.

Escondes a tu pequeño ejército en un pueblucho abandonado de las montañas y llegas en solitario a Tokio. Una vez allí te cuelas por los conductos de ventilación en el edificio Torre Tatama hasta la planta más alta donde se encuentra el despacho del presidente. Takuna Tatama Junior, que resulta ser el casi centenario hijo del Tatama que tú conociste.

Esperas a que termine su trabajo y apague las luces para marcharse. En ese momento, casi en completa oscuridad, te presentas ante él flotando a un metro sobre su cabeza con los ojo encendidos en rojo y le dices.- Soy un diablo del pasado y he venido pala que me lo cuentes todo, todo y todo.

Al abuelete le da un infarto y lo reanimas en el último momento gracias a los electrodos de tu cuerpo multi funciones de Robo-Kid. Más para allá que para acá, vuelve en sí y cagado de miedo te cuenta hasta el detalle más ínfimo y vergonzoso de su vida. Confiesa que su padre le legó el secreto de los mensajes chivatos y que bajo la tapadera de mensajes en las galletas de la suerte, él trabaja ahora para el villano y genio del mal Ning Un-Omegana.

Ning tiene varios centros de control repartidos por el mundo además de dos bases subterráneas supersecretas, una en Korea del Norte donde desarrolla armamento y una en la jungla tropical en la frontera entre Vietnam y Camboya desde la que controla la producción de té y lleva a cabo experimentos biológicos.

Tampoco olvidas tomar buena nota mental de los descendientes y legado de tu antiguo empleado, a su debido tiempo harás caer tu venganza sobre ellos por el desplante del Takuna que conociste.

Aunque eso no corre prisa. Dejas al viejete recarcomiendose de remordimiento por todo lo que te acaba de revelar y te vas a un lugar tranquilo a pensar cuál será tu siguiente paso.

A por los cañones de Navarone: si decides ir a la base de Ning en Korea del Norte para hacerte con el control del armamento que pueda haber allí, ve a la página 6.

Si crees que mejor te vas a rezarle a tu dios, Bishamón el Cabrón, a ver si te da una ayudita contra tanto armamento, ve a la página 8