Partida Rol por web

Daeron, crees que puedes abrir esa celda?

- ¡No abráis! ¡Que salga ella sola! - Espeta a sus compañeros.

Por otro lado, viendo la cercanía de la bárbara, le susurra de forma que el enemigo no pueda enterarse.

- Puede que si la provocamos... Más... - Comenta.

"Oido, brujo!"

El druida comienza un cantico en el idioma conocido sólo por su clase, es un conjuro largo que le llevará unos 6 segundos...

El picaro se aproxima cinco pies y prepara sus armas.

- No creo que fuese dificil ... ¿Pero queremos que salga?

La bella pero claramente peligrosa criatura, da un paso atrás y murmura unas arcanas palabras y ... DESAPARECE.

Su risa demoniaca tarda unas décimas de segundo en desvanecerse.

Aquella criatura parecía bastante resistente, al menos a la magia arcana del traductor.
- Abrid bien los ojos, podría estar en cualquier parte. No creo que lanzase su amenaza porque si... - Comentó Jonathan.
Miró a la bárbara, sabedor de que estaba afectada de su anterior encuentro y quiso poner las cosas en su sitio.
- Prepárate Raudia. No puede curarte pero te ayudaré a que aciertes los golpes, si son necesarios... - Realizó de nuevo los movimientis de manos hacía su compañera Raudia para lanzarle aquella maldición, mientras se reía, manteniendo los anteriores.

Escucho las palabras de Jonathan mientras asiento con la cabeza, mientras mantengo aferrada la gran espada con las dos manos.
Intento calmar mi respiración, para aumentar mi percepción de lo que hay alrededor.
Busco con la mirada en la celda desde la lejanía, en los rincones de esta, hasta miro los barrotes por si fueran a desaparecer.
Escucho atentamente, algún ruido de movimiento posible alrededor, o en la lejanía.
En algún lado tendría que estar esa maldita criatura.

Acabo mi conjuro e invoco una stirge.

indico a Raptor que busque

El raptor parece confundido por el olor a sangre, que satura su olfato.

Raudia cree haber oido algo fuera en los pasillos anteriores.

Eorsten trata de averiguar a donde ha ido el bicho infernal y se dirige hacia el pasillo por el que habian entrado con mucho cuidado por si hay una emboscada

El elfo acompaña a Eorsten hacia el pasillo, prestando mucha atención por si escucha algún ruido proveniente de cualquier parte.

Eorsten, permiteme ir contigo, en estos momento no creo que sea recomendable ir solos a ninguna parte.

Raudia, Eorsten y Daeron parecen percibir un sonido en los pasillos que os trajeron hasta aquí.

Corriendo os asomais para ver una pequeña distorsión en el aire del pasillo, como si algo que no fuese humano hubiese intentado acceder a este plano de existencia desagarrando la realidad como si fuese un simple trozo de tela ... y no hubiese podido.

Un grito de frustración resuena desde la entrada ...

Raptor, busca. Estemos todos muy atentos.
 

Esto parecía no haber terminado. Escuche algo tras nosotros, en los pasillos por las que habíamos entrado, y algún compañero parecía que también se había percatado de ello, o simplemente,  viendo la desaparición de la mujer, se preparaban por si ocurrirá algo tras nosotros.

Intentando adelantarme a los movimientos de alguien que pudiera venir, avisado por la criatura que acababa de desaparecer, avance hasta colocare en uno de las entrantes del pasillo, esperando con la espada levantada, lista para dejarla caer sobre el primero que se presentara.

Avisa si llega el momento. Le comento al druida a la vez que avanzo hacia mi posición 

Viendo que el grupo volvía tras sus pasos, para investigar el ruido que habían captado en el pasillo anterior, donde la trampa de la entrada, el traductor hizo lo propio y siguió a sus camaradas.

- ¿Podéis ver algo? ¿Dónde está? - Preguntó sin encontrar respuesta.

Lo que si tenía claro es que si aquel enemigo podía desplazarse de aquella forma, era bastante peligroso, y no dudó en tocar el hombro de Daeron y avisarle de que le otorgaría algo de suerte en el combate.

- Es tu turno, elfo. Ahora serás más diestro en combate, ya lo verás. - Le comentaba mientras movía las manos de una manera extraña.

Tras eso, Jonathan se concentró en buscar a su enemiga en el lugar, aunque no fuera la percepción uno de sus fuertes, trató de recordar que podría ser todo aquello. Pues ahora había escuchado un grito de frustración de esa criatura, sin duda, a la vez que contemplaba una distorsión en el aire.

El picaro y el paladin ven a la bella figura demoniaca al lado de las escaleras .... y desaparece.