Partida Rol por web

Del amor verdugo

I. El pueblo de Yepes

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15/12/2018, 19:21
Bandidos

El tipo, ignorante todo él tu la buena misericordia de Gonzalo, creía que éste estaba jugando con él, y que allí mismo acababa su vida. Entonces se orinó en sus pantalones,y no pudo decir nada más que un nombre: Pedro. No supo contestar a lo otro que el clérigo le contó, en tanto que tenía la boca llena de sangre y también seca de saliva, fruto del nerviosismo.

Notas de juego

Debéis decirme qué hacéis, si os lo lleváis al pueblo o lo dejáis por ahí.

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15/12/2018, 19:58
Severino Modrego

Tras los pasos de Baldomero, recogía los filos caídos en el suelo como un pollo hambriento sigue al gallinero - Ya'stán tos recogídos, prior. No vaya'un zagal destos campos a'cerse daño - que ya bastante los lugareños tenían con doblar el lomo y un hijo pachucho sería demasiado. Sacudiose las manos cuando hubo acabado, viendo desaparecer los cuerpos de los fallecidos - Vaya unos desgraciáo, que por menos que yo con Dios se van - entre los altos trigales.

El temeroso con vida enfrentábase al suyo juicio ante un hombre consagrado al Señor - ¡Ya pasaó tó Peeeedro!, ala maño ya's'cuchao al prior. Totieso pa el Yepes - sin tener fuerzas ni coraje para aguantar la orina. Severino agarrósele al brazo y tiró hasta ponerle en pie.

Notas de juego

Por lo que a mí respecta, nos lo llevamos.

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16/12/2018, 01:31
Gonzalo de Castilla
Sólo para el director

Notas de juego

Escribo desde un móvil y es harto complicado, pero básicamente escribo para decirte que mi intención es llevarlo al pueblo y no entorpecer la acción. Entre domingo y lunes tengo ordenador a disposición y hago un buen post.

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16/12/2018, 16:56
Director

Mientras Severino hubo de recoger aquellas tres almaradas, que ningún bien hicieron seguramente antes de estar en el suyo poder, que Baldomero y el clérigo Gonzalo levantaron al desgraciado bandido, y luego se lo llevaron como pudieron por el camino que quedaba hasta Yepes. Claro que, antes, Baldomero hizo caso al prior y echó los otros dos cuerpos al camino, eso sí, con el pertienente registro de los suyos bolsillos.

Y que aquel bandido iba como Jesucristo en la cruz, con los brazos en alto, ya que a un lado le agarraba Baldomero y a otro Severino. Tal vez se os hiciera menos pesado habiéndole dado muerte, pero el clérigo Gonzalo que no podía dejarle allí por convicción propia y misericordia. Y tras una media hora de camino, que por fin entrásteis en la aldea de Yepes, que no era sino más bien un lugar con medio centenar de habitantes. Tenía una pequeña iglesia, una casa más sobresaliente que el resto (que debía ser una posada o una taberna) y el resto eran casas bajas, de campesinos y villanos, y había unas treinta o cuarenta casas. Había también campos de cultivo y huertos rodeando el pueblo.

Una vez entrásteis allí, en el primer cruce dentro del pueblo, os topásteis con un montón de gente congregada en una de la casas. Vecinos y curiosos se agolpaban en una de las viviendas bajas, y oíais llanto detrás del todo el cúmulo de gente, dentro de la vivienda.

Notas de juego

Baldomero: apúntate 5 maravedíes.
Severino: apúntate las 3 almaradas (daño 1D4+2+HAB)

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16/12/2018, 18:29
Severino Modrego

Pequeño trecho quedaba para llegar a los aledaños de Yepes, que al malparado salteador de caminos tuviéronle que llevar por poco en volandas. Condenado creíase quien corto tiempo atrás andaba amenazándoles almarada en mano, que Gonzalo hubo hecho entrega de la suya piedad para que el escarmiento le viniese en la aldea. Llevar el cuerpo a rastras era cansado y el calor complicaba la tarea - Mira co, ya vamo'a llegar y podremos tomar unos vinos. Qu'esto de llevar en corderetas al cagalind'es parte de la'nmienda - aunque el almogávar habíase acostumbrado a cargar prisioneros durante sus andanzas por reinos Musulmanes.

Al fin pisaron suelo del poblado Toledano - ¡Yeeeeeeeeeeepes!, ya'mos llegado - que con un torrente de voz considerable, que pregones ya quisieran para las suyas obligaciones, lo anunció el Severino. Parecía un lugar pequeño, donde todos se conocen, que esconder secreto alguno resulta tarea imposible. Adentráronse un poco más - ¿Qué facemos ahora, prior?, si pudiera ser tomar unos vinos cuando demos cuenta del zote este. Que pa'el perdón dicen que la sangre de Cristo es buena pues - en la humilde villa como foráneos despistados que no veían más que casas, iguales todas ellas, y una iglesia.

Una vasta reunión de vecinos parecía sucederse frente a una de las bajas viviendas - ¡Jodó!, ¿qué pasa pues?, 'sos lamentos no son nada bueno prior - de donde escuchábanse unos llantos.

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18/12/2018, 00:16
Gonzalo de Castilla

Llevávase el Dominico la mano a la tripa constantemente, pues la herida, pese a no haberlo matado, parecía estar intentándolo con ganas a cada momento. Un camino de media hora hízosele de día entero, pese a todo, contento andaba de haber encontrado dos buenos sirvientes como Baldomero y Severino, que cargaban con el malhechor herido.

 

Fue fijándose el monje en el pueblo cuando víase ya a la distancia, y percató el bullicio al llegar. En otras ocasiones hubiérase parado, más otras cosas le urgían en la cabeza. Primero de todo llegar a la Iglesia, entre hombres de Dios solía haber cooperación, y seguro el párroco de la zona sabría donde curar heridas, tanto las propias como las del tal Pedro. También había de darles descanso a tan buenos servidores como eran el almogávar y el antiguo bandido.

 

-Claro, claro mi buen Severino, habéis de poder ir a por esos tragos, mas primero habéis de llevarme a Pedro y a mi a la Iglesia. Luego tendréis el resto del día libre para vosotros, hasta que nos juntemos a la noche. Y de paso que os dais un descanso para mojar el gaznate, a ver si os enteráis de que pasa en esas casas- dijo señalando el grupo de locales que se arremolinaban alrrededor de unos llantos.

 

Dicho esto, despachó con una sonrisa y apurando el paso, que buena gana tenía de un descanso.

Notas de juego

Aunque no me pare ahora en las casas ni pregunte, me fijo mientras paso a ver si saco algo de información al vuelo. Como jugador me da la sensación de que pueda ser igual un velatorio, pues a ver que se le antoja a Gonzalo. De hecho, apuro el paso una vez pasadas las casas.

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19/12/2018, 18:30
Baldomero Cubero

Si bien no le gustaba la idea de cargar y vigilar al tal Pedro, poco más podía hacer, pues si la remisión y cambiar su mala usanza quería, acatamiento era lo primero que tenía que aprender de su mentor. Y a regañadientes, pero haciéndolo al fin y al cabo, llegaba el agotado grupo a Yepes.

Le importaba poco y nada sobre qué pobre desgraciado hubiese muerto en la vivienda aglutinada de gente deplorando y lamentando. Sólo sabía que si no reposaba su grueso y pesado cuerpo de una vez, acabaría igual que el tipo.

- Vale, te dejamos en la iglesia, prior, y busca un médico para esa herida. Pero ya no cuentes más conmigo hasta que me tengas que sacar y llevar como a este fulano. – bromeaba a pesar del enojo que mantenía desde la refriega. - No te agobies, Modrego, que los amigos de Pedrito nos han invitado. – respondió al almogávar mientras daba un par de fuertes palmadas en la espalda del extenuado preso. - Reza por ellos cuando lleguéis, y dale las gracias de mi parte. - sin dejar el viejo bandido su desabrido e hiriente sentido del humor.

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19/12/2018, 19:04
Director

Baldomero bromeaba un poco, a sabiendas que en ese día ya había hecho más de lo que habría hecho una semana sin estar bajo la tutela del señor (que sobrevivir a unos tipos, y cargar con uno de ellos hasta el pueblo más cercano no lo hacían muchos). Por su parte, Severino estaba por la labor de obedecer al prior, y llevar al maleante hasta la iglesia, según su designio. Luego ambos sabían que les vendría el descanso. Mientras pasásteis de largo por aquella pequeña multitud, vísteis los tres de reojo que allí entraban y salían muchos vecinos, como si de velatorio se sucediese aquello. Pero al no preguntar ni nada por el estilo, que no supísteis aquellos porqués. No hizo falta preguntar por la iglesia de Yepes, que allá se campanario se alzaba el más alto tejado entre cualesquier vivienda. Y que avanzásteis calle adelante, llegando a una plaza (la más grande del pueblo), y que allí estaba el templo santo. Entonces el bandido y el almogávar dejaron en la puerta a Gonzalo, a sabiendas de que había alguien dentro del templo, y se marcharon por el camino de la izquierda (el cual bordeaba una esquina y daba directamente a la taberna).

Notas de juego

Aquí os separáis. Gonzalo se queda en la iglesia y Severino y Baldomero se van a la taberna (o eso he deducido de sus diálogos). Por ello, Gonzalo posteará para sí mismo, y Severino y Baldomero para ellos mismos.

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19/12/2018, 19:10
Padre Alfón Torrero

Andábase la iglesia alta, con buen campanario sobre ella, y con el maleante tendido en la puerta, llamaste al portón y pronto salió alguien. Era un tipo delgado, entrado en años, un anciano (los cincuenta), y se quedó estupefacto cuando vió al malherido bandido al lado de tus pies.

¡Dios lo dice! ¡Está herido! ¡Qué ha pasado! -decía entonces, mientras se aventuró a agacharse y a intentar levantar al tipo-. Pero señor -entonces vió tus ropas de monje-, ayúdeme, ¿y quiénes sois vos que traéis a este hombre así? -las ropas del pecho y el abdomen ensangrentadas del tipo lo decían todo-. Entonces entrásteis en la iglesia, y atravesásteis la fila de bancos hasta llegar a la sacristía. Allí lo colocásteis en una mesa de madera, tumbado hacia arriba. En la sala había túnicas para oficiar misas, un par de sillas, un crucifijo de madera en la pared y un armarito. ¡No me diga que aparte de desapariciones, hay bandidaje en este pueblo! Soy el padre Alfón -añadió-.

Notas de juego

Te recuerdo lo de los destinatarios. Postea sólo para tí de momento.

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19/12/2018, 19:12
Andrés

Tras caminar unos minutos por el pueblo, que vísteis que allá atrás el que debía ser el cura del pueblo abría el portón de la iglesia a don Gonzalo, y los tres entraban dentro. Vosotros habías cumplido, y que entonces decidísteis que la mejor forma de celebrar que habíais sobrevivido al ataque (y que cada vez estábais más cerca del perdón y de la Justicia) era mojar el gaznate. La taberna que ahora veíais frente a vosotros era el mejor lugar para hacerlo (y el único). Era un edificio más grande que una casa, pero tampoco muy alto. Poseía una segunda planta (seguramente para alquiler de habitaciones). Tras entrar vísteis a un tipo en detrás de una barra fabricada con barriles y tablones, y algún que otro parroquiano asiduo. El tabernero, que limpiaba el tablón con un trapo, se lo echó al hombro y os miró arqueando las cejas, señal de que no os reconocía (vaya, que os tomaba por forasteros).

Qué va a ser, ¿señores? -os decía mientras salía de la barra y caminaba hacia vosotros-.

Notas de juego

Os recuerdo lo de los destinatarios. Postead para vosotros (Severino y Baldomero)

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20/12/2018, 01:16
Severino Modrego

Bien recibida que fue la noticia del libre albedrío - ¡Rediós!, ¿fasta la noche dices?. Baldo, maño, que al final nos v'a'dar tiempo pa'burrirnos y tó -  que Gonzalo resultaba más santo por la suya generosidad que por ser hombre de Dios. Junto al beato y al delincuente, que de malaventurados es eso de dejar sin socorro a los heridos, que llegaron hasta las puertas de la iglesia en plena plaza mayor. Parecíale escuchar a alguien en los adentros de los sagrados muros y que con una sonrisa de gratitud despidiose del prior, y que con un firme apretón al cuello - Sé bueno pues, que como m'entere de algo te met'un viaje que vas a ver - hiciese lo mismo con Pedro.

En Yepes jamás había pasado ni una tarde el almogávar, quien echaba algún vistazo atrás para ver que al Dominico no le faltaba asilo - Co, que decías algo de los amigos de Pedro, ¿yésopués?. Mejor tener los dineros que de ná le sirven a la tierra y bien viene chipiar el gaznate con'un poco caldo tinto - antes de empezar a pensar en el vino. Suerte tuvieron de encontrarse en plena taberna nada más cruzar la primera esquina - Hay qu'ir al alcuerce siempre, Baldo - que el bodeguero mostró sorpresa de ver caras nuevas. Aquel lugar parecía un poco pequeño - ¡Puesunos vinos!, que'l bochorno que sopla nosa'dejado tiesos por los andurriales de Toledo. Maño, una cosa que entoavía no me'nterado, ¿qué pasa pues con to la gente llorando namás'emos llegado? - aunque limpio por empeño del suyo propietario.

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21/12/2018, 17:21
Gonzalo de Castilla

Gonzalo veía por fin esperanza de descanso para su pobre cuerpo, del camino, del carretamiento del bandido y de sus heridas. Llamó a la puerta de la iglesia con desgana, fruto del cansancio y esperó a que abriesen. Un hombre de Dios,mayor que él, salió  al encuentro, sorprendiéndose por la visión.

-Buenas tardes padre, soy Gonzalo , prior de los Dominicos. Me he topado con este hombre en el camino y ambos hemos acabado heridos - dice suavizando la verdad y señalando su propia herida, pues la del bandido era obvia -. ¿Puede Yepes proporcionarnos alguien que nos de remedio a ambos?. Y ya de paso, dónde podría encontrar al corregidor de la zona, o al alguacil del pueblo.

Gonzalo buscó donde sentarse y esperó la respuesta del padre.

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22/12/2018, 22:30
Andrés

El tabernero, que decíase se llamaba Andrés, marchó hacia una barrica, la abrió por un grifillo que tenía a un lado y llenó una jarra. Luego llevó dos vasos, uno para cada uno de vosotros, y comenzó a serviros.

Que dicen que el beber muy de mañana no es bueno, pero son habladurías -y os echó abundantemente en los vasos, en vuestra propia mesa-. Ah sí... los padres de la chica, Maribel. He oído que están destrozados. Ha desaparecido la muchacha, y sus padres, andan destrozados. Y no es el único, han desaparecido más gente... El diablo mismo se ha cebado con este pueblo, señores.

El vino llegó hasta el borde. Olía muy bien.

Si vienen de Toledo, vive Dios que harían ustedes en marchar de aquí cuando los asuntos vuestros háyanse acuciado -dijo apenado-. Pero entre tanto, ya saben que aquí hay buenos vinos -esto último lo dijo con una alegre mueca en el rostro-.

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22/12/2018, 22:37
Padre Alfón Torrero

El sacerdote miraba al malherido mientras asentía a lo que le contabas.

Pues de momento no hay nadie, señor, que pueda daros audiencia y diagnóstico. No tenemos médico, aunque lo único que sé hacer yo es coser carnes, ni tampoco corregidor. El único, don Manuel, que viaja mucho a Toledo y se dice el señor de esta villa. Pero viene muy de vez en cuando. Y así está la cosa, sin presencia señorial, de mal en peor -entonces tiró de las prendas del bandido, postrado bocarriba en la mesa, para intentar verles las heridas. Algunos botones de la camisa saltaron-. Y es que el diablo ronda por aquí, padre -entonces señaló con la mano en alto-. El campanario, ¿no lo ha visto ennegrecido? Un rayo lo quemó hace dos semanas, destruyéndolo con mala fama. Alguien nos está castigando, y tan sólo vuestra presencia, prior, es lo mejor que nos acaece en semanas. Ya son cuatro los desaparecidos -y se santiguó mientras comenzó a inspeccionar las heridas, como para poder coser al desdichado. Y tal vez a tí-.

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23/12/2018, 17:14
Severino Modrego

Jamás habíase sentido tan venturoso de saborear un vino de mañana, que el tabernero con cariño decantaba desde una barrica en frescos vasos de barro cocido. Ávido de mojar la suya garganta, llevábase la loza a los labios - ¿Andrés dices?, pues por ti'empino los codos maño - y sendo trago dio el almogávar que hubo de llenarse de nuevo el recipiente - Esto'es bueno, Andrés. ¿Qué dices queste vino'es de cosecha propia? - que saciar la sed del camino no es fácil y menos cuando cargas cuerpo ajeno. Con un gesto pidió espera al bodeguero, y que comenzó a buscar entre sus pertenencias y que el odre de agua sacose con diligencia - Mira'ver si puedes abarrotar'el pellejo este de vino. El agua l'aventas pá las ranas - para de él hacer entrega a quien llenáralo de buen zumo de uva.

Aferrado aún a la bota miró a Andrés - Co, y que Dios'os pille confesaos. Que poco sé de los demonios, pero sí de hombres malos. Un pesar lo de la moza, ¿qué pasa pues que nadie face nada con los desvanecidos'estos? - y soltábala con lentitud. Muchas eran las desapariciones para una aldea tan pequeña.

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23/12/2018, 23:36
Baldomero Cubero

- Si algún bribón tiene dinero para malgastar y arruinar su vida, mejor lo haré yo por él y le quito un peso de encima. – respondió en tono de chanza al almogávar, mientras se divertía haciendo ruido con su bolsa de dinero.

Llegando finalmente al anhelado destino, Baldomero se encajaba por la puerta de la taberna junto a su acompañante, de vuelta a las viejas costumbres de sentar el trasero y rellenarse de vino para sentirse holgado y despreocupado una vez más, tras el duro día. Dejó caer unas monedas en la barra, y dejó que Severino eligiera por él. Si bien no fue propenso a preocuparse de en nada más que en su bebida, no quitó la oreja de la respuesta del tabernero, ante la pregunta de Modrego. Mas no se sorprendió ni cesó por un momento de sorber su vaso. Pues alguien que había caído tan bajo en este mundo como lo era el viejo bandido, estaba acostumbrado a haber catado cosas similares e incluso peores.

- En este mundo demente y mezquino, la gente mira por sí misma, busca su propia conveniencia, sin importar la de los demás. Habemos de estar acostumbrados a eso, no es algo nuevo. – respondió, sin influenciar con sus palabras, mucho optimismo.

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24/12/2018, 14:01
Andrés

Hay gente muy mala, sí -dijo el posadero Andrés mientras recogía las monedas-. Pues de momento, señor, que nadie hace nada -respondiendo a Severino-. El señor de este lugar anda en Toledo, y lo que está pasando es muy reciente. Mala cosa. El caso es... ¿les preparo habitación arriba o les lleno los pellejos de vino para el viaje? -os preguntó-. Acto seguido comenzaron a entrar más habitantes del pueblo, para tomar los "chatos", oséase, el vinillo del mediodía. Muchos, bueno, prácticamente todos, eran campesinos, y había algún que otro buhonero que iba y venía de pueblo en pueblo.

Notas de juego

Si seguís hablando con Andrés, en cuestión de saber cosas del pueblo, habréis de tirar una tirada de Elocuencia.

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24/12/2018, 17:50
Severino Modrego

Con el trajín de los lugareños entrando a tropel a casa de el Andrés - Mal asunto'se, que los señorones nos tienen abrumados pa'los suyo intereses y bien pronto que s'olvida'n'el pueblo - habíase dado el tema por zanjado. Negó el ofrecimiento del posadero a una habitación - Deja, quel prior ya nos'ospeda. Vete colmando'l pellejo de caldo pa darnos un paseo por los Yepes - mientras levantábase de la mesa con su mano aferrada al mango del hacha - Maribel ... so verriondo quien fiz daño a una moza, que de un fachazo le voy quitar del camino - apurando el último chato con el que entibiar las ideas.

Acercábase al mostrador para recoger el suyo néctar - ¿Que na más sabes, maño?, algo raro pasa y que no es sencill'o'cultarlo en una aldea. L'abadía Toledo tiene las'orejas p'arriba y va'mpezar a gulusmear pronto - con labios entornados para intentar ocultar la sonrisa que le avergonzaba, que tizones más claros se han visto que los dientes de Severino. De reojo observó lo abarrotado que estaba el lugar y pidió a Baldomero que se acercase con un movimiento del cuello.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Me quito 11 puntos de Suerte y logro la tirada.

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24/12/2018, 18:16
Gonzalo de Castilla
Sólo para el director

Gonzalo asintió a lo que el párroco le contaba, con gran preocupación. Mientras ayudaba a este a coser al bandido, explicó un poco su situación.

-Veréis padre Alfón, dirigíamonos cara este pueblo, cuando aquí Pedro - dijo señalando al hombre al que atendían - y dos compadres suyos nos asaltaron a mis ayudantes y a mi. Hiriéronme en la panza - hizo una mueca de dolor al recordarlo - y a cambio dos acabaron muertos y este moribundo. No eramos beligerantes, pues acudíamos a prestar ayuda a vuestro pueblo padre, pero los caminos del señor...en fin...si Pedro, que así se llama este hombre, sobrevive a sus heridas, ayudará al pueblo como redención o se enfrentará a la justicia, que lo más probable es que lo conduzca a la horca por bandidaje y asalto a un hombre de Dios.

Cuando el párroco habló del diablo, Gonzalo quedó pensativo, para romper su silencio con una declaración de intenciones.

-Ya veo....ya veo... Lo cierto es que mi camino me traía aquí por lo que me comentáis hermano, las desapariciones. ¿Qué podéis comentarme sobre los desaparecidos y sobre todo lo acaecido con respecto a estos hechos? El propio Abad me ha mandado a brindar cuanta ayuda esté en mis manos, y así lo haré, Dios mediante.

 

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24/12/2018, 18:43
Director

Notas de juego

Cuando puedas, haz tirada de Elocuencia (bonus del 25%).