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Digibuddies: El despertar Virtual

Cap. 2 ¿Compañeros?

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23/08/2025, 11:29
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Las voces de los niños elegidos, de los portadores de los HoloStraps, sus guardianes y algo más que era incapaz de definir. Los reconocía aunque todavía no pudiera estar con ellos. Y los que eran como él (o ella, o eso). Los que ya habían nacido y pertenecían al mundo digital. ¡Tenía tantas ganas de estar junto a ellos! Verlos con sus propios ojos, hablarles con su propia voz.

Pero para eso debía crecer hasta nacer y romper ese cascarón. Eclosionaría fuerte para proteger a Ramón, lo tenía decidido. Era su compañero y eso se suponía que debía hacer, ¿no? Protegerlo de esos hombres de negro. Con su anterior portador no pudo hacerlo.

Con la velocidad de su microprocesador interno y los pocos datos que poseía, rápidamente localizó la información sobre el hombre que lo transfirió a Ramón. Si a esa medida desesperada e improvisada se le podía llamar así. Sabía tan poco al respecto...

- Sé que vosotros podéis escucharme. Los mayores que ya están con su humano. - El holohuevo parpadeó trasmitiendo en cada pixel la información a sus hermanitos. - Algo ha escapado de su control, ese algo somos nosotros. Pero no entiendo, ¿qué somos?

Bien por casualidad, accidente o fruto de una argucia premeditada, los Digibuddies habían terminado en manos de unos niños que de repente empezaban a ser famosos. Quizás ocultarse no fuese posible y de hecho, ser personajes públicos en cierta medida los protegía. ¿Quién se atrevería a hacer daño a un niño? Especialmente uno sobre el que demasiadas miradas están puestas. Cualquiera notaría su ausencia, la cercanía de un desconocido, la ruptura de su rutina.

Fuese lo que fuese, aquello que querían de los Digibbudies o los niños elegidos, por ahora se ocultaba a plena vista.

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12/09/2025, 00:48
Director

Eran más los interrogantes que las respuestas esa mañana en la biblioteca para los niños y niñas elegidos. En calma tenían la posibilidad de desentrañar el misterio que envolvía a sus diggibudies.

Fue entonces cuando todo cambió.

Primero, un leve parpadeo en las lámparas del techo.
Después, un pitido agudo que brotó de cada HoloStrap al mismo tiempo, como un latido digital sincronizado.
Y finalmente, los ordenadores de la biblioteca (decenas de pantallas en fila) se encendieron de golpe, aun estando apagados, emitiendo un brillo blanco, intenso, cegador.

No era el resplandor normal de un monitor; parecía derramarse hacia afuera, expandirse por el aire como si quisiera materializarse en el mundo real. Los reflejos se proyectaban en las paredes, los pupitres y los rostros de los presentes, arrancando sombras largas y deformes.

Y entonces, en esa blancura vibrante, la silueta de un ser imposible tomó forma.
Al principio era solo una mancha oscura rodeada de chispazos verdes y azules, pero poco a poco se definió:
un cuerpo felino, esbelto y letal, compuesto de metal bruñido y cables que parecían músculos. Ojos rojos como carbones encendidos. Tentáculos digitales que surgían de su espalda, oscilando como látigos de energía.

El aire de la biblioteca se llenó de un zumbido eléctrico.
El olor a ozono y plástico quemado era inconfundible.

La criatura sonrió (o algo parecido), mostrando colmillos de datos corruptos.
Y su voz, distorsionada, no vino de su boca sino de cada pantalla al unísono:

—Protocolo A14 activado. Objetivos localizados. Neutralización inmediata.

 

=> La acción trascurre en el mundo digital <=

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13/09/2025, 13:14
Tetsuya Ueda

Tetsuya se inclinó apenas hacia adelante, bajando la voz como si aquel gesto pudiera amortiguar el rugido metálico que sacudía el Mainframe. Sus ojos no se apartaban de la silueta felina que había hecho temblar las plataformas con cada paso. Este se preparo para usar a sus compañeros de cobayas contra la criatura.

-Datamon… no te expongas. -susurró con firmeza, una calma forzada que ocultaba la tensión en sus hombros- Quédate atrás y observa...

El reflejo rojizo de los circuitos se proyectaba en su rostro mientras hablaba.

-Necesitamos entender cómo se mueve, cómo ataca. Si salimos de frente sin un plan, caeremos en el mismo error que quiere provocarnos. -Sus dedos apretaron el HoloStrap, buscando transmitir seguridad al vínculo que lo unía con su compañero digital. -Analiza. Memoriza cada patrón. Deja que los otros reciban el primer impacto, si es inevitable… nosotros encontraremos la grieta en su defensa.

Su mirada se endureció un instante, luego regresó a la calma.

-Confío en ti, Datamon. Nuestra ventaja será saber más que él cuando llegue el momento.