Partida Rol por web

No habrá juegos, no te llevarás a nadie de este planeta pues hoy el Barón Ascanio de la gloriosa Casa Metaxas terminará con tu miserable existencia. A pesar de sus palabras al acercarse al xenos precipitadamente su ataque fracasa.

Aunque la ráfaga de Agathon falla la mayoría de los disparos, pero uno le alcanzan en el costado, provocando una horrenda herida en la que se les ve las costillas, "Mal nacido, cabrón..." son los únicos insultos que conseguís entender, el resto lo dice en eldar, o eso creéis, pero lo siguiente que dice, lo hace en dirección a la quimera, que tras señalaros, esta ataca de forma directa y brutal, ignorando cualquier peligro, solo en dirección al piel blanca, atacando con un zarpazo, pero los hábiles reflejos del soldado consiguen que lo esquive que solo le arranque parte de la protección del brazo.

Europa se acercó para reventar a tiros a la quimera enzarzada en combate, rápida en proteger al Barón.

El aspecto imponente de la quimera no consiguió acobardar a los guardias imperiales. Nikolaos quedó aguantando al posición mientras Agathon recibía la terrible envestida de la quimera. Lamentablemente para ella y sin saberlo, había cometido un grave error; ponerse a quemarropa de sus escopetas. Nikolaos gritó mientras disparaba todo lo que tenía contra la Quimera. 

La batalla final por el control de la nave había empezado, y los hijos del emperador estaban ganando, el herido maestro de las bestias le costaba respirar con un agujero del tamaño de un puño en el costado y echando sangre por la boca, por el otro lado, la quimera se lanza furiosa sobre Agathon, pero solo consigue romper parte de su antifrag y recibir una cantidad atronadora de fuego, pero gracias a su condición de ser disforme, sale vivo de la situación, pero rodeado de enemigos, y el único que carga contra el maestro de las bestias eldar cegado por la justa ira del emperador es el barón Ascanio, se olvida que el enemigo esta una barandilla a metro y medio sobre el y no puede llegar con armas cuerpo a cuerpo _¹.

Aun herido, el eldar oscuro se levanta con látigo en la mano, y mira al Baron, "muy típico de los mon-keing el poner a un incompetente en el mando" y levanta el látigo, calculando el golpe y ataca al Baron, pero para desgracia del xeno, este se enreda, con la barandilla y solo salen de su boca insultos en un mónton de lenguas, alguna conocidas y otras no tantas,

Viendo que el enemigo podía alcanzar con su látigo alza su pistola apunta y dispara al xenos.

- ¡Monstruo! ¡Vuelve al abismo que te engendró!

Y dispara a la quimera auxiliado por un compañero.

La quimera grita un horrendo chillido al recibir el disparo bolter de Agathon y tras las mismas desaparece, volviendo al oscura disformidad de donde procede y dejando solo al eldar oscuro que capitaneaba la nave vacía nave de cualquiera que le pudiera ayudarle a salir de su situación.

Un escalofrío recorrió a Europa, empezando desde sus rodillas, pasando por sus caderas, cruzando su columna vertebral para llegar hasta sus hombros y hacérselos sacudir con violencia. Con alaridos expulsó de sí misma el pánico que aquel monstruo le causaba y disparó sobre su amo, ansiando verle muerto al igual que su criatura disforme.

- ¡Yaaaaiiiii! ¡Yaaaaiiiii! -y con odio infinito comenzó a acribillar con su escopeta de combate- ¡Muerte, muerte y muerte a vosotros!

La caída de la imponente mantícora no hizo sino hacer que Nikolaos tuviera una explosión de euforia y se encarase al líder enemigo. 

-¡Qué! Ya no te ríes tanto ¿eh?-dijo mientras recargaba la escopeta-¡Me voy a divertir contigo, bastardo!¡Encaja esto!

Lamentablemente el disparo falla y las postas de escopeta se pierden en el aire. El guardia imperial masculla un gruñido de fastidio. 

Con el disparo de Europa se acaba con la vida del maestro de las bestias eldar, aunque el disparo en el pecho no lo habría matado, junto con la herida en la costilla del bolter de Agathon, hacen que el xeno abandone este mundo, haciendo de el un lugar mas limpio de impuros y xenos, respiráis tranquilos por primera vez desde que recibisteis la noticia de la invasión y al mirar al cielo, beis que hay una batalla naval en el espacio, demostrando que el plan esta saliendo bien, pero mirando a vuestro alrededor, la dantesca imagen de cadáveres de eldar oscuros y camarada de los pieles blancas os recuerdan a las duras luchas que librasteis en la cruzada, pero unos pasos os sacan de vuestros pensamientos.

Al girar con vuestras armas listas para rematar al que podía ser el ultimo de los xenos, os dais cuenta de que es el comisario, viene un poco herido en el hombro y su pistola bolter hecha humo, signo de que a sido usada, "Calma, soy yo, he bajado a la sala de mandos, donde había un par de eldars pilotando, he conseguido que giren la nave para encaminarla hacia otra donde están todavía peleando, ya me he desechos de ellos pero los cabrones, ..." no termina la frase, sino que se lleva la mano derecha al hombro izquierdo y hace una mueca de dolor, terminando la frase, "Europa, no hace fata que mires esta herida, busca a ver si hay mas de los nuestros vivos o tomaos un respiro" os dice el comisario.

- Maldita sea comisario, estaba empezando a preocuparme. Pense que no iba a llegar al concurso de belleza.

- Como digáis, Comisario -aceptó la Medicae, pues quién iba a discutirle a un comisario y riéndole la broma a Agathon, quien tenía los arrestos bien puestos como para soltar aquel chascarrillo.

Se acercó a Nikolaos con mucha mala leche detrás de su sonrisa traidora y le golpeó el pecho con el puño en gesto de hermanamiento cómplice. Pero la intención de que el gigante se relajase venía con segundas, ahora que habían parado los tiros pudo soltarle una cincha de su armadura, descubrir su costalar y de una vez por todas cerrarle aquella maldita herida para rellenarla con cantidades irresponsables de bioquímicos.

- ¡Jajajá! ¡Te pillé! -rió animada cuando aquello dejó de sangrar de repente y le quedó más nítido que de costumbre, también para mofarse de su compañero al que esperaba haber pillado por sorpresa- ¿Qué? ¿Cómo se siente ahora? ¿Listo para reventar a más éldar?

Nikolaos se dejó caer sobre el suelo. Estaba al borde de sus fuerzas. Tenía todo el costado derecho de la armadura rezumando sangre a consecuencia de las terribles heridas. 

-Gracias, señor-.

Tras la aparición del comisario el Barón recupera la respiración para descubrir que en su brazo izquierdo tiene un leve corte. Europa tal vez puedas echarle un vistazo a esto no me gustaría tener problemas con esto, por cierto chicos un excelente trabajo con esto xenos cuando terminemos os invito a una ronda.