Partida Rol por web

Alza la mirada, pensativo; pero finalmente responde:

Tal vez en Cuba... o en Jamaica, lo mismo da. Esos españoles saben construir barcos, pero ni idea de defenderlos.

Frunzo el ceño ante la negativa de Cohe.

Tenemos que haber llegado aquí por algo.

Ciertamente quedarnos platicando no nos iba a ayudar en nuestra misión, no tardaríamos apenas nada en rastrear todo el islote buscando juvel, además si se encontraba allí no debíamos perder tiempo, cuanto antes lo encontremos antes lo podremos poner a salvo.

Me gustaría ver mejor el lugar en el que estamos, ¿podemos pasear? Invito a John.

- No veo porque no. Usted conoce la isla, así que supongo que sería el guía ¿no?

el Largo señala a vuestro alrededor casi indignado:

¡Pasear! ¿Me tomáis el pelo? Está bien, paseemos

John echa a andar a buen paso, pero es imposible perderlo en este islote. Se para en la playa, cerca de la zona de vegetación y os señala los árboles:

Estos son los cocoteros. Un poco mas para allá hay tres o cuatro plataneros, pero aún están verdes.

Esta vez avanza hacia vosotros y os pasa de largo.

Y aquí están las rocas... No puedes tumbarte en ellas, pues además de no estar pulidas hay cangrejos. Deliciosos, eso sí, pero poco abundantes.

Se cruza de brazos. No está enfadado en absoluto, pero sí sarcástico.

Mientras caminamos miro de vez en cuando a Cohe para ver si sigue escaneando la zona.

Si, la verdad es que no hay mucho que ver en este lugar.

Cuando llegamos a la playa intento distinguir alguna otra isla cercana a donde nos encontramos.

La idea de que aquel hombre no llevaba abandonado mucho tiempo seguía rondándome la cabeza, su tono no era para nada el de una persona desesperada por su vida, igual creía que podría sobrevivir a base de cocos, plátanos y cangrejos hasta que alguien diera con él, de echo quizás ya se hubiera adaptado a esa situación.

¿Cuánto llevas aquí John? No podía evitarlo, quería satisfacer mi curiosidad.

Unas dos semanas, algo menos. ¿Por qué lo preguntas?

Continúo escaneando y de paso busco la fecha exacta en la que nos encontramos y las coordenadas. Después busco en la base de datos si algún fenómeno extraño sucedió en esta fecha, en este sitio... con un poco de suerte estamos en el triángulo de las bermudas!!!

Mera curiosidad. Respondo a John, me seguía escamando algo de aquel hombre, para haber aparecido de la nada delante suya no es que estuviera ni especialmente sorprendido salvo al inicio, ni asustado, ni ha hecho las innumerables preguntas a las que yo estaba acostumbrado.

O yo soy el paranoide...

Salgo de la TARDIS. El sonido del oleaje y el olor del mar están tan bien como me habían contado, eso me habían contado, pero no me gusta la primera actitud del hombre, aunque voy a salir a ver ahora que parece más tranquilo el tipeje.

Buenas. Bueno, has estado comiendo esos bichejos durante dos semanas-le digo, y asiento, comprendo su actitud- Podremos sacarte te aquí de alguna forma.

Viendo que parece no haber juvel en el lugar en el que habíamos llegado a parar lo mejor sería marcharnos sin perder el tiempo (que ironía) y continuar con nuestra misión.

Poco me parece que podamos hacer, ¿pasan a menudo barcos cerca de aquí? Igual conseguimos que nos vean.

Suelo ver barcos, pero pasan demasiado lejos y algunos cercanos me ignoran. Si hubiera alguna forma de llamar su atención...

- ¿No se le ha ocurrido prender un fuego grande? Cortando un par de palmeras se podría llamar la atención de algún barco seguramente. Voy a ver si encuentro algo que nos permite cortarlos y otra cosa que nos permita prender fuego cuando veamos un barco.

Dicho eso comienzo a caminar hacia la TARDIS en busca de un hacha o similar y una caja de fosforos.

Amigo John, sólo por curiosidad, que día le dejaron en la isla? Si es posible con la mayor exactitud, año, día, hora del día...

Si, esa idea puede ser buena. Digo cuando Roberto propone lo del fuego. Te ayudo. Y le sigo hacia la TARDIS.

Aunque no necesariamente tienen por qué preocuparse en un barco por un fuego en una islilla, confiemos en que esté de paso algún buen samaritano. Bueno, y si no siempre podemos salir de aquí y continuar la búsqueda en otra parte.

al ver que sus compañeros se marchan les dice Tampoco estaría de más sacar unos espejos para hacer señales con el sol... y quizás unas Lupas.
Después se vuelve a John el Largo, este humano le empezaba a desconcertar. Porqué habrían caído en esta isla? Qué relación tiene con el Juvel?... Perdón amigo John, le he interrumpido, me iba a contar que día le dejaron aquí...