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Dragon Age: Las Cenizas de la Ruina

8. La Angustia

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20/12/2011, 00:08
Lynn

A Lynn se le cortó la hilaridad y su rostro se transformó en una mezcla de sorpresa e indignación.

La envidia es un pecado muy feo—dijo con tono cortante—. ¡Esas barbaridades no las digas ni en broma!

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20/12/2011, 00:11
Cassidy

Cassidy se detuvo y se giró a medias mirando a la clériga por encima del hombro.

¿Quién dijo que era una broma?

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20/12/2011, 00:16
Gabrielle

Gabby cogió a Lynn por el brazo.

Vámonos —le urgió.

Se le habían quitado las ganas de reír de golpe. Una cosa era intercambiar pullas y otra muy distinta desearle la muerte (o la posesión) a otras personas. 

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20/12/2011, 00:18
Lynn

Lynn en un principio se quedó rígida con los labios apretados en una fina linea, como si lo que estaba oyendo le pareciera demasiado absurdo para ser cierto. Durante un instante tuviste la sensación de que se iba a soltar, iba a dar dos zancadas y le iba a dar al mago el bofetón de su vida.

Pero Lynn no era así. En lugar de eso se limitó a girarse con tanto brío que la trenza le cambió de hombro pasando a colgar sobre el derecho en lugar de sobre el izquierdo.

Sí, vámonos—espetó—. Oir reprochar de inmadurez a este tipo sí que es una broma.

Echásteis a andar en silencio mientras Cassidy hacía lo propio continuando su camino a sonoras zancadas, visiblemente molesto. Cuando estuvísteis cerca de la escalera que conducía al tercer piso donde se hallaban las estancias de los Encantadores Superiores, la clériga soltó un suspiro entre incrédulo e indignado, como quien acaba de escuchar una blasfemia colosal.

Ese mago es horrible.

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20/12/2011, 00:29
Narrador

Subísteis las escaleras hasta la tercera planta, Lynn llegó resollando aunque aseguró que no necesitaba pararse a recuperar el aliento. Recorrísteis el pasillo hasta llegar a la puerta de la habitación de Wynne que se encontraba abierta.

Tu amiga hizo un gesto de silencio llevándose un dedo a los labios y te indicó que te asomases junto a ella, hiciste lo propio y pudiste ver a tu maestra caminando de un lado a otro de la habitación. Su paso era tranquilo como si simplemente estuviera entretenida dando vueltas pero el hecho de que no se detuviera dejaba entrever cierta impaciencia.

Lynn emitió una risita y te empujó suavemente para que te escondieras de nuevo en el pasillo, después tocó con los nudillos a la puerta.

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20/12/2011, 00:34
Wynne

Los pasos de Wynne se detuvieron y pudiste escuchar la voz ligeramente sorprendida de tu maestra.

¿Lynn?—dijo—. Oh, es decir... hola, Lynn.

Hubo una pequeña pausa.

¿Dónde está Gabrielle?

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20/12/2011, 00:36
Gabrielle

Gabby salió de su escondite de un salto.

¡Lo he conseguido! ¡Lo he conseguido! —soltó de nuevo aquel chillido agudo y se lanzó a los brazos de su maestra.

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20/12/2011, 00:40
Wynne

Wynne en un principio se sorprendió de la aparición sorpresa pues sus ojos azules se abrieron mucho, pero en cuanto te recibió en brazos emitió una risita floja.

¡Ah!, mi pequeña, felicidades—dijo estrechándote suavemente—. Estaba segura de que lo conseguirías. Deja que te vea.

En efecto, la certeza que impregnaba la voz de Wynne daba a entender que lo de que estaba segura era literal. Te apartó un instante sosteniéndote por los hombros y te miró con ternura, aquella ternura y aquella cálida serenidad interior que siempre tenía su mirada. 

Estás radiante—sentenció—. Estoy tan orgullosa de ti.

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20/12/2011, 00:48
Lynn

El entusiasmo de Lynn hizo un inciso en la escena

¡Cuenta, Gabby!—dijo agarrándote de la manga—. Tienes que contarme cómo lo lograste.

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20/12/2011, 00:50
Wynne

Wynne miró a Lynn y ladeó la cabeza, luego suspiró pacientemente y puso los brazos en jarras.

Jovencita—dijo como una abuela echando una suave reprimenda—. ¿Cuántas veces tengo que mandarte a la cama esta mañana? Creo que esta ya es la cuarta.

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20/12/2011, 00:52
Lynn

¡Ay! estoy bien, Wynne. De verdad—respondió Lynn negando con la cabeza y levantando ambas manos como si la apuntasen con un arco dalishano—. No he desayunado pero eso es todo.

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20/12/2011, 00:53
Wynne

No has desayunado y no has dormido ni dos horas entre una cosa y otra—recordó la anciana cruzándose de brazos con una sonrisa sabihonda—. Pequeña, como no descanses un poco las ojeras van a llegarte al domingo que viene.

La clériga se ruborizó un poco e hizo circulitos fastidiados con la punta de una bota en el suelo, como si acabaran de pillarla en una trastada.

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20/12/2011, 13:14
Gabrielle

Es curioso que me preguntéis cómo me fue, ¡por que las dos aparecisteis en mi Angustia! ¿Qué tal si os lo cuento en la cantina? Yo también me muero de hambre.

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20/12/2011, 13:59
Wynne

Lynn y Wynne intercambiaron una mirada entre interrogante y curiosa al escuchar aquello, luego volvieron a observarte a ti.

Eso sí que tengo que oírlo. Aunque, la verdad, creo que la cantina no es el sitio más adecuado para hablar de una Angustia. Son asuntos muy discretos—entonces levantó un dedo como quien objeta algo—. Por suerte, para lo del hambre tengo solución.

Se acercó a la mesa y destapó una fuente que estaba cubierta con un paño de seda. El olor hizo que se te hiciese la boca agua.

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20/12/2011, 14:46
Lynn

¡Galletas!—exclamó Lynn con los ojos soltando estrellitas casi de forma literal. De hecho hasta se relamió—. ¿Son conjuradas? ¡Aaaah! ¡Huele que alimenta!

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20/12/2011, 14:47
Wynne

A la cama, Lynn.

Wynne señaló hacia la puerta teatralmente con un brazo recto mientras ponía el otro en jarras.

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20/12/2011, 14:49
Lynn

¡Pero Wynne, tienen nevadito!—protestó la clériga—. No puedes ponerme galletas con nevadito delante de las narices y decirme que me vaya, ¡tengo hambre!

Su estómago pareció estar de acuerdo ya que gruñó.

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20/12/2011, 14:52
Wynne

Está bien, pues desayuna pero luego vete a descansar un rato.

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20/12/2011, 14:53
Lynn

—Ah, no, no, no, no... Peor todavía—negó Lynn echando mano rápidamente a una de las galletas de la fuente sin ni si quiera sentarse—. ¡No quiero perderme la historia de Gabby!

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20/12/2011, 14:55
Wynne

Wynne puso los ojos en blanco y suspiró con resignación dejando caer el brazo con el que señalaba la puerta.

Querida, eres más terca que una mula...