Partida Rol por web

-¡Espera!- dijo en voz demasiado alta. -Esto... quiero decir... ésta también es mi parada y... bueno... sobre esos sueños de los que hablas...- se quedó callado durante un momento. -Vamos Benji, ¿qué puede pasar?-.

-Yo también he estado teniendo extraños sueños últimamente... si quieres podríamos quedar, no sé, ¿a tomar un café y hablar de ello?- preguntó sin muchas esperanzas de recibir una respuesta satisfactoria.

-Ahora tengo que ir a trabajar- dijo señalando el enorme edificio de oficinas. -¿Quizá después?-.

Un placer, inspector. Me gusta colaborar siempre que puedo. Le respondí mientras le acompañaba a la salida. Si considera que necesita preguntar algo más, ya sabe por donde paro... y si.. seguiré su consejo...

Me encaminé nuevamente a mi despacho. Malditos policías. Siempre metiéndose donde no les llaman o buscando asesinos donde no exinten.... Miré la hora, aun quedaba un rato hasta que llegase Miguel y poder irme a comer tranquilo. Era lo que tenía este trabajo, siempre debía haber alguien en el edificio, sobre todo durante el día. Y teniendo a un trabajador de baja, otro de vacaciones y los otros dos de recogida, no podría irme hasta que mi hermano llegase.

Por fortuna, desde mi despacho podía ver todo el CCTV de la funeraria, así que pinché la cámara de la entrada principal y el hall y puse la radio mientras disfrutaba de la paz de mi despacho.

Pronto irrumpieron con las noticias, en las cuales se mencionó una muerte similar, por no decir idéntica, a la del profesor de yoga... sólo que en Barcelona. ¿Qué demonios está pasando? ¿A todos les ha dado ahora por morir de forma anormal? reí, como si se tratase de un chiste macabro. ¿Y mi hermano? Joder! Que tengo hambre!

Rebusqué por los cajones algo que comer, nada... se notaba que era todo nuevo, aun no me había dado tiempo a dejar algún snak empezado o galletas por ahí. En cuanto lleguen los chicos con la recogida o mi hermano, me la pela quien sea el primero... me largo a comer.... Comencé a recordar nuevamente el sueño,  más que lo que veía, lo que sentía cuando estaba allí, realizando aquel siniestro ritual. Empezaba a impacientarme. Hacía mucho que no me ponía tan nervioso e irritable. Estúpido sueño... no me jodas que me va a estar alterando de esta manera...

Confusión, su pecho estaba agitado y su corazón latía con fuerza, miraba en todas direcciones sin entender lo que ocurría, los aparatos dispuestos a su alrededor le asustaban, sus conocimientos médicos no le ayudaban a entender que hacía allí, ¿y su amiga? ¿ya se la habían llevado? ¿donde estaba?

Se sujetó la garganta sin moverse mucho, después fue a quitarse los instrumentos que la controlaban, pero reaccionó a tiempo para no dejarse llevar por los nervios, buscó el botón que tenía que haber para advertir a quien estuviera como responsable. Principalmente dispuesto a llamadas de emergencia, y sin duda aquello lo era, despertar allí sin saber por qué, y sus nervios activos, lo hacían problemático, miró si a los pies de la cama estaba la ficha con los datos del paciente y los síntomas o problemas del mismo, o dicho de otro modo, una hoja de historial que le explicara lo que le había pasado y por que tenía tantas máquina as monitoreándole.

Quería salir corriendo, estaba exhausta y a la vez tan exaltada que los movimientos de su cabeza eran más rápidos que la capacidad de acostumbrar a sus ojos a la leve iluminación que proporcionaban las propias máquinas.

Si seguía sin acudir una enfermera, no lograría contener su nerviosismo, respiraba con dificultad por una hiperoxigenación, y el tiempo transcurría lento en su estresante estado. Se acurrucó sobre la cama, sentada y algo temblorosa, por que motivo su insistencia a la hora de mantener la calma no quería hacerle caso.

Incapaz de decir algo, apretando ahora sus ojos, con ganas de gritar y desahogarse, conteniendo el miedo, casi podría imitar a su sueño y pedir por querer no morir, ella no podía haber hecho nada a su amiga, solo podía ser su imaginación. "No... no quiero morir... tengo mucho miedo... por favor no me mates... no quiero morir, yo no soy eso... no quiero serlo, solo soy una chica normal... solo soy...".

Por un momento pensó en esas palabras y de algún modo se parecían tanto a sus actuales pensamientos, que daba coherencia a ser algún síntoma psicológico. - solo soy - pensó de nuevo, no estaría mal ser alguien capaz de ayudar a quienquiera que lo merezca, pero en ese momento se sentía una víctima, alguien que debería estar ayudando al mundo, en vez de perder el tiempo en esa habitación.

Tras estrecharle la mano al sujeto y tomar asiento como me lo indica, tomo en mi mano la taza de cafe presto para comenzar la conversación.

-Pues verá primero que nada quiero agradecerle el hecho de que me halla recibido a pesar de las obligaciones y asuntos propios que debe tener. Mi nombre es Dagobert Blau y me dedico a la administración de redes informáticas en una compañía de Nuremberg. He venido hasta acá pues ayer en la noche tras despertarme sobresaltado como ya es costumbre desde hace no más de dos semanas aproximadamente, me he puesto a investigar en el ordenador sobre el problema que tengo y he encontrado una interesante publicación que está realizando el grupo científico con que usted trabaja, y de ir a atenderme con un psicologo he preferido venir a veros a vosotros que sois científicos.- tomo un sorbo del café y prosigo. 

-Verá usted como ya le decía desde hace no más de dos semanas en las noches tengo un sueño perturbador, el cual no se asemeja en nada a la cotidianidad de mi vida y dado sus características provoca que me desvele en medio de la noche, lo que afecta considerablemente mi rendimiento durante el resto del día. He intentado combatirlo con todos los medios tradicionales que hay, pensar en otra cosa, tomar medicamentos para dormir mejor, entre otras cosas, pero siempre está ahí, pensé que ustedes con esos métodos que verdaderamente no entendí mucho me podrían ayudar a deshacerme de él o al menos entender porque no puedo dejar de soñar con él.- tomo otro poco de la sustancia oscura de mi taza, respiro y prosigo.

-¿Cree usted que su equipo podría ayudarme?.-

- Por supuesto…si pasado mañana no me veis en el barco ,ya sabeis…jejeje..buscarme en Bora-bora

Esta espada ya la conozco. Además la he empuñado, estoy seguro. Es la que aparece en mis sueños. Es una de las armas con las que he matado a aquella chica en estos sueños recurrentes.

Y quiero volver a empuñarla. Es una atracción muy fuerte. Que me pasa? Por qué me fascina tanto?

No puedo pensar en nada más. Sigo trabajando pero no paro de lanzar furtivas miradas al estuche. Me tiene hipnotizado. Necesito saber más, necesito empuñarla. Necesito respuestas. Espero que el anticuario de Tórshavn pueda arrojar luz sobre mi problema.

Ya hemos llegado al puerto, por fin. Me voy a la biblioteca para ver que puedo averiguar sobre este asunto de los malditos sueños.

Tenía unas ganas tremendas de darle una paliza pero por ahora tenía que parecer un "chico bueno" así que me las guardo para mi pero si alguna vez la veía fuera de allí iba a disfrutar de lo lindo haciendole tragar ese orgullo.

Doy un portazo al salir y voy a ver a la maldita psicologa.

Hace oídos sordos a las risas de sus compañeros, como si no fuese capaz de oírlas, mientras agacha la cabeza para pasar rápido y no hacerse notar demasiado. A veces desearía ser invisible o desaparecer de allí.

Se encamina hacia su pupitre revisándolo rápidamente para asegurarse de que todo está normal. Al instante, ve la nota y no puede evitar cogerla.

-Ailien, me gustaría hablar contigo, tengo entendido que no tienes una buena situación económica y un conocido necesita personal para un trabajo de media jornada, no paga mal , guárdalo en secreto porque sino cualquiera de las otras chicas de la clase van a quererlo y a ti te hace mas falta seguro

La lee varias veces, desconfiada. Un trabajo le vendría genial, sería estupendo poner la calefacción en invierno o comer pollo frito cuando quisiese, quizá incluso comprarse unas botas nuevas. Pero no sabía  si podía fiarse de ella. Podría no haber sido escrito por el delegado y ser simplemente una broma para hacerle quedar mal o para que perdiese el tiempo esperando en la cafetería. Aunque el quedar en un sitio público era tranquilizador, no podrían hacerle mucho allí.

Aún dubitativa, guardó la nota dentro de la mochila antes de sentarse y preparar los útiles para la primera clase. Iría, solo tenía que esperar a que las clases terminaran para saber si era una broma o no.

La chica sonríe mientras bajaba del autobús y dice:

- Muy bien, si quieres podemos vernos en la cafetería que está justo enfrente de la parada, la verdad que hoy es mi primer día trabajando en el tienda de moda que hay aquí al lado.

La chica mira a Ben y añade:

- Nos veremos luego

La chica se aleja hacia una zona algo más comercial del área de la parada, parecía que la chica sonreía un poco divertida, pero realmente no sabía si acudiría o no, aunque algo le decía que podría hacerlo.

El hermano de Henry no tardo mucho en llegar, al verle se acerca y dice:

- Hey, como te va? oye me he enterado que tu profesor de Yoga ha muerto de repente, vaya tela no?... ahora que ibas a empezar a ir, pero que no te quite las ganas eh

El hombre se sienta sobre la mesa y añade:

- Bueno, creo que deberías de descansar un poco, vete a comer, que yo me hago cargo de lo que queda por el momento aquí... aunque no creo que sea un día demasiado ajetreado la verdad

Luna mira su ficha y puede ver como el informe indica que había sufrido un desmayo repentino y que llevaba medio día durmiente, al parecer los médicos lo habían atribuido a una fuerte conmoción por la muerte de su amiga, por los análisis que le habían hecho no tenía nada extraño. Apenas unos segundos después entra por la puerta un hombre, por sus ropas medico que al verla sonríe y dice:

- Vaya, me alegra verla despierta, pero debería de quedarse tumbada en su cama... dígame, como se encuentra?, está en el hospital porque sufrió un desmayo, se encuentra bien? dígame, como se llama

Decía mientras se acercaba dispuesto a hacer un examen de la chica.

El hombre escucha atentamente al chico y se queda unos segundos pensando, cuando este termina de hablar dice:

- Por lo que me cuenta ese sueño se repite desde un día concreto... eso podría suponer muchas cosas, que usted recuerde ese día fue un día normal en su vida cierto?...

Se queda unos momentos callado reflexionando y entonces añade:

- He escuchado de sueños así, que se repiten una y otra vez durante la noche y en todas las ocasiones el sueño tiene un cierto significado oculto, es decir, si ve claramente a algunas personas puede ser porque o bien ha visto a esas personas aunque usted no fue plenamente consciente o tiene algo que ver con ellas, dígame, ve nítidamente a alguien?... y cuál es el contenido del sueño? me parece realmente interesante

La biblioteca no era precisamente la más grande del mundo, pero podría servir, había algunos estudiantes estudiando para sus exámenes, algunas personas que acudían a leer el periódico o algún libro. Un hombre mayor de casi 60 años y una chica joven eran los encargados de la biblioteca, mientras ella ordenaba algunos libros, el estaba atendiendo amablemente a unos niños de unos diez años que preguntaban por algunos libros. El lugar estaba realmente tranquilo y parecía que era un remanso de paz.

El despacho de la sicóloga era un lugar aséptico, realmente no llamaba mucho la atención, se notaba que la mujer acudía allí a trabajar y no quería que su vida privada influenciara nada de lo allí presente, al ver como entra Brian le indica que toma asiento mientras coge algo para tomar nota, la mujer mira algunas anotaciones y dice con una voz algo monótona:

- Bueno, no te lo explicare porque ya sabes cómo va esto, hoy te voy a preguntar por qué es lo que te pasa por las noches, según parece mientras duermes algunos de tus compañeros te han escuchado gritar

La mujer mira a Brian a la espera de la posible después de este.

La chica paso sus horas de clase como siempre, atendiendo mientras algunos simplemente miraban pasar las horas, un par de veces sintió como le golpeaba una bolita de papel y como se disculpaban falsamente como si fuera parte del juego que estaban llevando. Finalmente las clases terminaron, no paso nada especialmente diferente durante las clases ni durante el recreo, en este los chicos salieron corriendo en tropel hacia el patio mientras que las chicas se acercaron a ella y como hacían muchas veces le criticaron su forma de vestir y su peinado.

La cafetería donde le habían citado era un lugar transitado, ella no había ido nunca porque sabía que era bastante cara, de hecho el público habitual de este lugar eran personas adultas que en ese momento estaban tomando café en su mayoría. En una de las mesas pudo ver al chico que le había citado, con un café frente a él el chico no parecía precisamente un  chico de instituto, más bien parecía uno de los adultos que había en el lugar, estaba leyendo algo en su caro Ipad último modelo y parecía que no se había dado cuenta de la presencia de la chica.

Primero pensó en posibilidades, ¿realmente había sufrido tantos nervios como para desmayarse? Pero al ver al hombre, se calmó un poco y comenzó a responder.

- Luna Sardá Diaz, 21 años, nacida el 1 de Diciembre del 94, algo desorientada pero recapacitando, bastante nerviosa, algo asustada de ver que puedo ser tan débil, es la primera vez que me desmayo, llevo una dieta equilibrada y redirijida cuando me hace falta aumentar o disminuir azucares, hierro u otras necesidades parecidas, cuando me he despertado veía un poco borroso, quizás por los propios nervios, las máquinas no me han ayudado mucho en eso jeje - dijo todo del tirón intentando acabar rápido con las comprobaciones básicas, para decir después lo que le interesaba.

- Eva, mi compañera,... - sabía que no había nada que hacer, pero pese al miedo a preguntar, tenía que hacerlo - ...¿se sabe algo?

Por fin! exclamé cuando vi a mi querido hermano cruzar la puerta de mi despacho. Si llegas a retrasarte un minuto más, te hubiese tocado realizar mi autopsia. Qué rápido vuelan las noticias en esta ciudad! La verdad es que ha sido algo... extraño. Me estiré en la silla, colocando mis manos sobre la nuca. Estaba bien y se ve que luego... ploof.. comida para gusanos... Lo más curioso es que vino un inspector a preguntarme sobre ello.

En fin, dije mientras me levantaba, sabes que me encanta tu compañía, pero.... mi estómago manda ahora. Tan pronto repongan al profesor, regresaré a yoga le sonreí. Los chicos salieron a una recogida a las afueras. Miré el reloj. Deben de estar al llegar. Un varón de 76 años, regresaba a casa de hacer la compra. Dicen que un infarto. Esperame para hacer la autopsia, hoy me toca a mi averiguar la causa de la muerte. Le guiñe un ojo. Estaré en el restaurante de siempre. le grite ya desde el pasillo.

El restaurante no estaba demasiado lejos de la funeraria. Tan sólo un paseo de un par de calles, el cual merecía la pena realizar siempre con buen tiempo. Además allí el trato era muy cordial, no en vano pues comía practicamente siempre allí. No era nada del otro mundo, pero la comida era casera y fresca, el trato humano y el menú del día siempre tenía algo a mi gusto. Además, segun entraba por la puerta y el camarero me veía, ya me estaba haciendo señas para sentarme en mi mesa favorita o bien apresurando con disimulo a quien la ocupase, si andaban ya en los postres.

Así pues me encaminé hacia "Casa Antonio", comer.... regresar al trabajo, auptopsia, atender a la familia del fallecido... realizar una buena venta...  y a casa...

Observó como Laura se alejaba en dirección a la zona comercial.

¡No podía creer en su suerte! Literalmente, de hecho. Si, la chica le había prometido que se verían luego, pero el caracter calculador de Benjamin no le permitía darse el lujo de fantasear con cosas que no creía probables.

-En fin, si viene será genial, y si no... bueno, un día más en la apasionante vida del señor White- pensó mientras se encaminaba a la entrada del edificio de oficinas.

Iba a ser un día muy, pero que muy largo.
 

La biblioteca de Kaldbak no es muy grande pero para una persona que casi vive en un barco es un sitio grandioso. El problema es que no se por donde empezar. Como busco? No me va a quedar mas remedio que preguntar a esta chica joven. No me suena que sea de aqui. Me acerco a ella y le pregunto.

- Hola ¡¡ Perdona mi ignorancia pero quisiera encontrar algun libro sobre el significado de los sueños. Teneis algo asi por aqui o estoy preguntando una tonteria?

Abstraigo la mirada como intentando recordar el sueño, cosa que no era tan difícil puesto que para mí ya era como una película que repiten todas las noches. 

- El sueño siempre comienza en un espacio donde no hay nada ni nadie completamente en blanco, luego logro oír como unas puertas se abren y por ellas penetra una ... y así le narro al Doctor Shnitch cada detalle del sueño, el perro, la niña con un anillo de mariposa en su mano, la chica a la cual no se le ve el rostro y las demás personas incluido yo que la apuñalamos todos en la zona entre el hombro y la axila.

-Eso es mi pesadilla de cada noche desde hace dos semanas más no recuerdo reconocer a ninguna de las personas que aparecen en el sueño. Dígame que me puede ayudar doctor, ya no resisto más estas noches de vigilia, ademas me he comenzado a asustar pues en el mismo lugar donde es apuñalada la chica me ha salido una cicatriz, justo en el mismo lugar y no recuerdo haber tenido algún tipo de percance por lo cual me pueda haber ocasionado la cicatriz. ¿Le gustaría que le muestre?-

Me pongo nervioso cuando nombra a los sueños, si se entera de lo que sueño o de las marcas de mi pecho seguro que no salgo de una institución psiquiatrica en mucho mucho tiempo. Me revuelvo algo intranquilo en mi sitio.

No se... eso es cosa suya... supongo que pesadillas por el sindrome de abstinencia o algo así Intento justificar. Pero seguro que para usted es alguna otra mamarrachada sobre traumas infantiles o vete a saber que gilipollez. Digo en un tono más agresivo intentando desviar la atención.