Partida Rol por web

EL BLOQUE III

HALL DEL BLOQUE

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16/02/2015, 13:13
Samuel Lerman

-No esperes a que vuelva a por ti y acompáñame. Eres necesaria, pero tú decides. Y si te quedas aquí, piensa, cuando veas que el mundo se va a pique, que, quizá, se va a la mierda porque no hiciste aquello que podías hacer. Pero como digo, tú decides -no se había vuelto, aunque había hablado alto y claro, ralentizando el paso-. Aun así, espero que tomes la deciisón adecuada.

No supo si lo siguió o no. Sus sentidos estaban proyectados al frente. Tras un recodo, la amplia sala de los horrores volvió a materializarse, con Ehfront y los suyos como únicos seres vivos del lugar.

-Nos ponemos en marcha. ¿Por dónde se fue Jhonson? Es el mejor itinerario si queremos alcanzarlo.

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16/02/2015, 18:56
Tom Ehfront

Tom te ve acercarte y, evidentemente ha de preguntar la pregunta lógica No habías llamado a una.. ah vaya, menuda preciosidad! está claro por sus palabras que camina detrás de tí. Está por aquella puerta, a mitad pasillo. Te dice indicando claramente una de las puertas que hay al otro lado del Hall. Vamos, salgamos rápido de este lugar, me pone los pelos de punta
Isabella camina a tu lado pero unos pasos atras, en silencio, escuchas su respiración asustada pero controlada. Detras vuestro va el joven soldado de la cara descubierta y detrás de él, cerrando la comitiva, los dos soldados de las máscaras que llevan entre ambos una de las cajas de armas. Abre el paso Tom.
Cuando estáis por la mitad de la habitación escuchais un sonido extraño y precioso, como el cantar de una sirena, sería dificil saber de donde sale porque diríais que sale de vosotros mismos. Al segundo después todo alrededor vuestro toma vida... y os ataca.

Notas de juego

Para delimitar mejor en que consistiría el ataque sería como si estuvieseis en una jaula enorme de gorilas, y estos se volviesen locos y intentasen mataros. El "arma" principal con que van a atacaros son puñetazos y mordiscos, la naturaleza extraña y horrible de esos seres los hace más peligrosos.
Posible salida: directa y atravesar todo aquello. Es jodido sin saber que os podéis encontrar, pero evitaría amontonamientos.
Posible salida: aguantar "el tipo" un asalto y intentar ver de esas cosas cuales son más peligrosas, cuales se mueven más rápido...cuales están "fundidas" con el suelo y por tanto no os pueden seguir, etc... Sería la más aconsejable pero claro, estar quietos un asalto significa tener más enemigos alrededor cuando os pongáis en marcha.
Suerte

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17/02/2015, 10:57
Samuel Lerman

El horror congelado volvió a la vida. Frente a ellos una potencial salida, promesa de quizá nuevas amenazas. Y Lerman no era amigo de emboscadas en las que el frente y la retaguardia constituyeran un peligro constante.

-Formación circular y avance lento, paso a paso. Isabella, junto a mí. No quiero un resquicio de aire entre vosotros. No desperdiciéis munición. Disparos a la cabeza -dijo con voz firme y alta-. Prioridad, aquellos que se acerquen con mayor rapidez. Después, a todo aquel que pueda desplazarse. Ni un solo disparo contra los fusionados al suelo. Si alguno tropieza o cae, se detiene la formación. No dejaremos a nadie atrás. ¡FUEGO!

Puso su arma en modo tiro a tiro, el pulso firme. Había nacido para aquello y sabía que moriría así algún día. Pero intentaría que no fuera aquel.

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18/02/2015, 22:28
Tom Ehfront

La respuesta a las palabras de Lerman son automáticas, se escucha una caja caer, el sonido de velcros despegándose y como un par de cascos caen al suelo: los soldados necesitan toda la visión posible. Lerman nisiquiere les ve los rostros, podrían estar a un millón de kilómetros de él. Ahora cada uno de ellos tenía un tramo concreto de estancia que vigilar y una horda de aberraciones que detener. Isabella ahoga un grito al ver el silencio en que transcurre todo, no hay gritos ni brabuconadas. Tampoco ráfagas interminables de ametralladores llenando el suelo de cartuchos humeantes: los cinco habían sido instruidos por el bloque, y el bloque solo formaba a los mejores. Isabella estaba asistiendo a una demostración de lo mejor que el bloque podía ofrecer, un trabajo en grupo implecable y un grado de concentración que a ella le parecia inhumano. Sí tenían miedo no lo demostraban, hacían gala de sangre fría, no solo por no perder la compostura ante aquellas "cosas", sinó por que esperaban que se les acercasen para no errar el disparo.
La orden de disparar a la cabeza había sido complicada con algunas de aquellas cosas que tenían más de una o que, a primera vista, no tenían ninguna. Aún así habían superado el primer tramo sin ninguna baja.
Lerman indica Ehfront un posible problema.
El problema era que en su camino se encontraban tres aberraciones formadas todas por un mínimo de tres pobres desgraciados, que daban como resultado seres que uno casi deseaba matar por intentar darles algo de paz, ya que sí caían fulminados cuando acababan con su cabeza. Así lo habíais hecho pero era difícil saber si no tenían alguna cabeza escondida y les podían dar un susto, o si detras de sus masas corporales, casi muros de carne, se encontraba algo peor...

Notas de juego

Tirando recto dos asaltos más de sufrimiento*
Rodeando a aquellas aberraciones tres asaltos*

*a ojo avizor, más adelante podríais encontraros una "formación semejante"...si elegís el camino equivocado

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20/02/2015, 20:50
Samuel Lerman

Ante la mención de su nombre, Lerman viró unos centímetros la cabeza para visualizar aquello a lo que Ehfornt se refería. Vio la amalgama de cuerpos y miembros, hidras deformes fruto del sueño de un loco metido de LSD. Valoró de forma automática el escollo, evaluando las dificultades apreciadas también por el que ahora era su segundo. 

-Mantened la formación. Seguid disparando con igual eficacia y modo. Atentos, vamos a evitar a esas aberraciones triples que obstaculizan nuestro paso. Que queden a las 8:45 de la cabeza , a las 3:15 de la cola del grupo. Sincronizad vuestros pasos. Despacio y sin pausa. Adelante. 

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20/02/2015, 22:56
Director

Como si la formación circular fuera una rueda fija, unida por radios invisibles, todos avazan como un solo. La única excepción era, lógicamente Isabella, que caminaba en el centro con las manos en la cabeza. Un acto reflejo entre el horror y la necesidad de disminuir el sonido de los disparos.
Las ráfagas comienzan a ser más frecuentes. Nadie dice que "cada vez hay más" porque no hay ningún ciego entre vosotros y nadie quiere morir con una obviedad en la boca: incluso Isabella parece seguir esa norma.
rodeáis con lenta efícacia aquella muralla de carne y suspiráis por haberlo hecho. Tras la enorme "espalda" de una de esas monstruosidades os salta lo que parece un torso con muchos brazos y un rostro en el tórax. Muerde en el brazo a Ehfort pero este se deshace de él con dos disparos entre lo que parece una mezca de cejas y clavícula.
Una voz de chica que no conoces (y que solo puede ser de uno de los soldados con máscara) habla a tu espalda.
Si la intensidad del ataque continua nos quedaremos sin munición antes de llegar...
La caja con munición había quedado atras, en una zona "limpia" pero a la cual había que llegar a través de la orda que os intentaba cercar.
Puedo ir yo a por munición dice Isabella que quizá necesita sentirse útil, sin pararse a pensar que quizá es mejor sentirse vida. Aún así la idea no es totalmente descabellada.
También podría ser que estéis ahora en la "hora punta" del ataque de las aberraciones y que en unos metros más aflojen el ataque y lleguéis sin necesidad de más munición...

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23/02/2015, 18:02
Samuel Lerman

Lerman escuchó, meditó y decidió. Todo el proceso fue inmediato. Había sido educado para ello.

-Formación, nos detenemos. Isabella, si crees que vas a ser capaz, confío en ti. Nosotros protegeremos tu avance. No te arriesgues innecesariamente. No mires a los lados. Nosotros nos encargamos de abrirte un pasillo. Corre, recoge la munición y regresa. Damas, caballeros, quiero a dos abriendo camino a Isabella junto a mí. Los restantes protegerán los flancos y la retaguardia. No desperdicien la munición. ¡Ya!

Notas de juego

Invierto un bloque en la misión de Isabella.

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23/02/2015, 22:31
Isabella Pars

Con el Ya! Isabella sale corriendo en dirección a la caja como si el mismo diablo fuese tras ella. No mira hacia atrás, salta con agilidad sobre los cadáveres de esos monstruos y se aleja hasta la caja. Durante un momento tienes un flash de la joven entrenando en la playa, corriendo por las mañanas: el entrenamiento que había realizado para huir de la gente que ahora mismo le protegía las espaldas con feroz precisión. Cada una de aquellas cosas que se le lanza es interceptada y cae, se estrella, como un avión muerto. Cuando llega a la caja la coge con las dos manos y empieza a arrastrarla por el suelo lo más rápidamente que puede, se lanza al suelo para evitar una de aquellas cosas que ni tansiquiera llega a hacercársele. Sigue arrastrando la caja con esfuerzo pero con sus ojos febriles mirando hacia vosotros, es difícil saber que esta pensando, pero dirías que por una vez no piensa en su dolor, en su pasado, en sus perdidas. Ahora piensa en un grupo que, a su vez, puede salvar un mundo.
Llega junto a vosotros y practicamente se lanza al suelo, donde abre la caja.
¿Cual queréis?
La respuesta es un grito coral de voces, como un grito procedente de una sola garganta pasando a través de muchas bocas, os hiela la sangre y tú localizas rápidamente de donde viene: justo al lado de la puerta que tenéis que cruzar hay otra que está bloqueada por el cuerpo de una de esas cosas: diríais que esa cosa está muy furiosa, que el dolor de aquella puerta aún la enfada más...y que si eso que sobresale es como la punta de un iceberg, es Muy grande. Es difícil saber cuanto aguantará la puerta...

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25/02/2015, 15:43
Samuel Lerman

-¡Buen trabajo! -afirmó con un tono que hubiera empleado para afirmar que la tierra era redonda y que sin embargo solo podía ser tomado en sus labios como lo que era, un cumplido.

No hubo tiempo para más. El aullido provocó que el propio Lerman sinitera erizarse el vello de sus antebrazos. Se giró y la fría mirada azul se detuvo en la informe masa que obturaba la puerta contigua a aquella que debían cruzar.

-Recoged toda la munición, recargad armas. ¡Ya! -ordenó con metódica frialdad, haciendo lo propio-. No tenemos tiempo. Es hora de avanzar con rapidez. No sabemos cuánto permanecerá eso ahí ni deseo saberlo. Ni un solo disparo a esa cosa. No quiero atraer su atención más allá de los imprescindible. No quiero ráfagas. Disparos sueltos a lo que se acerque únicamente en nuestro avance. Formación de a dos. Ehfront y uno de vosotros al frente. Ella conmigo después. Vosotros dos en retaguardia. Manteneos alejados de eso y cruzad la puerta tan pronto lleguéis a ella y deteneos después. No quiero riesgos ni caer en una trampa por actuar imprudentemente. Somos seis y así quiero que siga siendo.

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25/02/2015, 22:49
Director

Antes las palabras de Lerman Isabella se permite una sonrisa propia de alquien que se ha demostrado algo más a sí mismo que a los demás, luego se aparta para ver delante de ella como recargáis, aquello le recuerda a la imposiblemente rápida coordinación con que los mecánicos cambiaban las ruedas de formulo uno. Avanzáis el último tramos y sobreviene la desgracia: cae del techo, pesadamente, una aberración que recuerda a ese muñequito que recortas sobre una hoja doblada y luego lo estiras para ver que son tres. Le falta unbrazo y un trozo de torso, seguramente fundidos con el techo, de donde se los debe haber arrancado para liberarse y caer sobre vosotros... justo sobre la pareja de soldados que marchaba en retaguardia. Justo en ese momento escucháis el repicar metálico de la puerta metálica que tiene cogida la otra monstruosidad humana: está apunto de salirse de sus goznes y convertirse en un problema.
El hombre triple se ha enrollado sobre aquellos dos, lanzándoles mordiscos a la cara que intentan esquivar. Disparan pero los tiros impactan contra el suelo ya que están apresados sin poder apuntar. De las tres cabezas solo tienes una a tiro limpio, otra más complicada y otra que nisiquiera ves.

Notas de juego

Si os detenéis y abrís formación podríais salvarles... pero el "gigante" podría quedar libre y enfrentaros a un verdadero problema.

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26/02/2015, 20:45
Samuel Lerman

-¡NO DEJAMOS ATRÁS A NADIE! -la voz de Lerman fue un rugido superponiéndose a cualquier otro. Era un soldado ante todo y muy consciente de que perder a dos efectivos, no solo era algo impensable para un militar en acción sino que además suponía una merma de efectividad del 16,6% en el grupo. De un 20% si se eliminaba de la ecuación a Isabella. Perderlos ahora era hipotecarse de cara al futuro. Además, la lealtad hacia su persona de aquellos hombres y mujeres en caso de éxito, se multiplicaría. Y aquel era un activo que no podía desperdiciar-. Apertura en abanico, disparos sueltos, modo francotirador. Únicamente cabezas y brazos. Cuando los recuperemos, a la carrera. ¡FUEGO!

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26/02/2015, 20:56
Samuel Lerman
Sólo para el director

Notas de juego

Un bloque para la operación salvamento.

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27/02/2015, 23:34
Director

Tom y la otra soldado se van abriendo al tiempo que disparan a aquellas cabezas nada más las tienen a tiro. Aquella aberración cae muerta entre espasmos liberando a los otros dos soldados que, aún temblando, se reunen junto a vosotros... justo para ver como un gicantesco y amorfo ser que en algún momento fué humano sale, tras arrancar completamente la puerta, como un enorme gusano de carne salpicado de brazos, piernas y cabezas...todas con el mismo rostro semidesfigurado de lo que en alguna vez fue una bella mujer. Todas las cabezas gritan y el gigante, tras impulsarse con todos sus brazos se erige en alto...para luego dejarse caer sobre vosotros con todo su peso.

Notas de juego

La puerta la tenéis justo al lado, pero primero habrá que evitar ser aplastados...

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01/03/2015, 12:44
Samuel Lerman

Nadie había quedado atrás, tal y como había prometido, pero si bien una amenaza había sido obviada, una nueva y más terrible se alzaba ahora como un insano gusano hecho de carne humana ante ellos. El chillido conjunto de mil bocas, procedentes todas ellas de un idéntico rostro clonado mil y una veces por el terror que reinaba en aquel infierno que era el bloque, fue el grito previo a la caida de la masa de carne con un solo fin. Aplastarlos.

La puerta que constituía su salvación se situaba prometedoramente cerca, igual que la muerte que se lanzaba sobre ellos.

-¡RETROCEDED FUERA DE SU ALCANCE! ¡CORRED PERPENDICULARES A LA PUERTA! ¡UNA VEZ CAIGA Y ANTES DE QUE PUEDA ACTUAR DE NUEVO, ATRAVESAD LA PUERTA! DESPUÉS ¡DISPARAD A LAS CABEZAS!

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01/03/2015, 12:51
Samuel Lerman
Sólo para el director

Notas de juego

Gasto un bloque. Prioritario salvar a Lerman e Isabella. Después, el resto del grupo. Cuantos más se libren, mejor.

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03/03/2015, 09:52
Tom Ehfront

El enorme gusano de carne, miembros y rostros repetidos cae violentamente alcanzando a la soldado del bloque. Tu, junto a Isabella y Tom lo esquiváis dandoos literamente de bruces contra la ansiada puerta. Tan pronto como la abrís Tom se dirige corriendo a una caseta embebida en la pared. Lo ves a través de un enorme ventanal,
Cuando digas la bloqueo!! grita, Isabella se hace un ovillo tras de tí ante la locura de la situación. Tu permaneces con la puerta abierta disparaondo ráfagas a algunas de esas cosas que intentan colarse dentro del pasillo. Aguantas hasta que el gusano se vuelve a poner en pié, aguantas unos segundos que la lógica te dice deberían de ser los últimos. Haces uso de tu sangre fría y te permites un par de segundos más que son vitales para que los dos soldados más jovenes -a quienes ya habías salvado la vida hacía apenas unos minutos- se lancen en plancha dentro de la "zona segura" del pasillo. En el mismo momento que cierras escuchas un klik y sientes como decenas de barras metálicas recorren la puerta "por dentro".
El primer golpe del gusano contra la puerta suena como una explosión.

Notas de juego

La puerta aguanta por ahora, y dirías que al menos por diez o quince minutos más.

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04/03/2015, 19:50
Samuel Lerman

Las invisibles traviesas de metal se cerraron con un sonoro ruido metálico que inspiraba seguridad o que la hubieran inspirado de no ser por el inmediato golpe de la amorfa y dantesca masa de carne del otro lado, una pesadilla arrancada de alguna mente enferma.

A aquel inmenso retumbar le sucedió otro sonido, el del golpe del puño de Lerman contra la puerta. Uno de los soldados, la mujer, había caído y nada había podido hacerse por ella. Que los números cantaran a su favor, que cinco hubieran sobrevivido, que no hubiera habido más víctimas siendo muy fácil que las hubiera habido no era motivo de tranquilidad. Para Lerman todos eran importantes si se hablaba de una facción militar operativa y en plena misión de campo.

-¿Estáis bien? -dijo volviéndose hacia el grupo y ayudando a ponerse en pie a Isabella-. Tranquila, por el momento estamos seguros. Lamento haberos fallado. No se repetirá -las palabras estaban dirigidas en esta ocasión a los pálidos soldados y a Ehfront-. Esa soldado no debería haber caído. Es mi responsabilidad -se pasó una mano por el cabello, un gesto que hablaba de su rabia y frustración, si bien su gélida mirada permanecía inalterable-. Esa puerta aguantará, pero no por toda la eternidad. Si la cosa sigue golpeando, la estructura acabará por ceder. Calculo que disponemos de unos minutos antes de que eso ocurra, ventaja suficiente para poner tierra de por medio y alejarnos de este peligro -su forma de decirlo dejaba claro que no dudaba de la presencia de nuevos problemas-. Recargad las armas, comprobad vuestro equipo, bebed algo de agua si tenéis. Deshaceos de lo que no sea necesario. Ehfront, conocías esa garita y su funcionamiento. ¿Dónde estamos exactamente? ¿A dónde dirige este pasillo? No quiero moverme a ciegas y que acabemos en un cul de sac con eso tras nosotros.

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05/03/2015, 17:14
Tom Ehfront

¿Estas de broma? dice Tom sorprendido, uno cree que tiene tímpanos de hielo por sangre hasta que te ve actuar.
Tras estas palabras escuchas como uno de los dos chavales no se está de comentar Si hubiese sido Jhonson nos hubiese dejado ti-ouch el otro le hace callar aunque no parece opinar diferente. Ambos miran nerviosamente la reacción de Tom. Este lanza una mirada de reproche a los jóvenes pero nada más Justo en la puerta que tenemos a la derecha, a la mitad del pasillo, ahí está Jhonson con el Nexo y, oh vaya tras notar vibrar el walky Tom se lo saca y lo enchufa,
Volved todos aquí de una maldita vez!! La voz retrona en el pasillo y como respuesta tiene otro violento golpe en la puerta.
Durante la escena los soldados habían bebido, incluso pasandoos alguna botella de agua a Isabella y a tí, se habían deshecho de la munición de aquellas armas que no iban a usar y de demás elementos inútiles, todos guardados en la garita por si los necesitaban en el futuro.
Estamos listos dice Tom.

Cargando editor
06/03/2015, 19:56
Samuel Lerman

Vio la sorpresa, el agradecimiento, la crítica velada y un asomo de la lealtad que haría de aquellos soldados sus hombres si llegaba a disponer del tiempo suficiente. Las palabras de Johnson citándolos a través de una orden ladrara llegó alta y clara. 

-Listos para seguir adelante. Mantendremos la formación para evitar cualquier sorpresa. Ehfront y yo al frente. Isabella detrás. Vosotros cerráis el grupo. Adelante. 

Cargando editor
07/03/2015, 10:33
Director

El grupo avanza silencioso, el único sonido que os acompaña es el de la puerta siendo golpeada por aquella masa informe de allí fuera. Ante algún golpe especialmente fuerte Isabella da un respingo, siempre sin abrir la boca ni romper el silencio de la formación.
Cuando llegan a la puerta indicada, a la derecha del pasillo, uno de los soldados más jovenes se pone a un lado por si quieren abrirla de manera coordinada como en una intrusión en territorio enemigo, quizás llevado por el comportamiento sigiloso del avance o por la llamada furiosa de Jhonson que auguraba problemas.

Notas de juego

Evidentemente también se puede abrir girando el pomo y entrando de manera normal...