Partida Rol por web

El camino de las agujas

Pasado

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20/10/2012, 18:23
Engel

Los dos caminos parecían iguales. Uno se extendía hacia el este y el otro hacia el oeste, pero ninguno de ellos parecía muy transitado y ambos semejaban estar custodiados por una legión de robles centenarios de gruesos troncos y espeso follaje.

- ¡Dichosos carteles! -protestó Engel- ¿No nos dijo tu amiga chiflada que el camino seguía recto hacia el norte? ¡Pues hacia el norte no hay camino! ¡Brrrr!

La mamá de Engel, a diferencia de la de Lily, no le había enseñado a leer, así que la niña tuvo que explicarle lo que significaban aquellas letras. 

- Pues no sé qué decirte, Lily. Yo no le veo ningún sentido a esas indicaciones. - comentó Engel mientras revolvía en la cestita que Lily había apoyado en el suelo - ¿Estás segura de que sabes leer? A mí no me gustan ni las agujas ni los alfileres. Los dos pinchan. ¿Pero por qué no me invitas a una de estas deliciosas magdalenas mientras te lo piensas?

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20/10/2012, 22:37
Pequeña Lily

La pequeña Lily se sentó en el suelo, frente a la señal. Abrió la cesta y sacó dos magdalenas, una para cada uno. La comió despacio, no, no la estaba saboreando. Pensaba. Sacó la mermelada y metió el dedo golosa para acabar relamiéndolo.

Estaba confusa y no sabía que camino elegir.
-Iremos por el camino de las agujas-decidió

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21/10/2012, 15:32
El lobo feroz

A medida que la pequeña Lily y Engel se adentraban en aquel bosque por el camino de tierra su aspecto se volvía más y más siniestro, como si una vieja maldición pesara sobre aquel lugar. Las raíces de los árboles sobresalían ahora como intentando escapar de aquella tierra maldita y sus troncos se habían vuelto más oscuros y retorcidos. De alguno de ellos sobresalían incluso punzantes espinas que la pequeña Lily se preguntó si tendrían algo que ver con las agujas de los letreros de la bifurcación.

- Creo que nos hemos equivocado de camino, Lily -dijo Engel nervioso-. Deberíamos volver atrás antes de que se haga de noche.

La tarde ya había caído y las sombras de aquellos árboles se alargaban como enormes dedos que quisieran atraparlos. La pequeña Lily no estaba segura si conseguirían salir de aquel bosque antes de que cayera la oscuridad, cuando repente escuchó un sonido entre la maleza y un instante después, un enorme lobo se se había interpuesto en el camino. El lobo gruñó enseñando sus colmillos y se acercó con paso lento hacia la niña. Engel se había escondido entre sus piernas muerto de miedo. Entonces el lobo le habló con una voz cascada y profunda:

- ¿Quién eres y qué haces en mi bosque?

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21/10/2012, 16:30
Pequeña Lily

La pequeña Lily que jamás había visto un lobo, se quedó sorprendida sorprendida del tamaño de ese perro y como se autodenominaba señor del bosque pero eso no le hizo tener miedo.
-Me llamo Liliana pero puedes llamarme Lily -le contestó respetuosamente y con una humilde sonrisa, ignorante del todo. La pequeña miró al gato entre sus piernas y sonrió más profundamente.- Buscamos el camino al castillo de las nubes, donde vive Giacomo.-Le respondió a sus dos preguntas afable. -No pretendíamos pasar por sus dominios sin permiso... pero creo que nos hemos perdido -dijo mirando a ambos lados- ¿le importaría dejarnos pasar y seguir nuestro camino?-Sopesó la cestita en su brazo y se la ofreció.- A cambio le daré todo el contenido de la cesta, ¿qué le parece, señor? -le preguntó ladeando la cabecita y sin dejar de sonreír tan tierna como inocente.

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22/10/2012, 20:31
El lobo feroz

El lobo se acercó a la cesta de Lily y la husmeó.

- ¡Ja! ¿Pretendes comprarme con frutas? Uno de tus muslos estaría mucho mejor -le dijo acercando su hocico a las piernas de Lily-. Pero descuida, no pienso comerte. En realidad me he acercado al camino porque necesito tu ayuda. Verás: en este bosque vive uno de tu especie que odia a los lobos y que quiere echarnos de este bosque aunque llevemos mucho más tiempo aquí que él. Se pasa el día buscándonos y cuando ve a uno de nosotros nos dispara piedras de fuego. También pone trampas peligrosas cerca de nuestras guaridas, trampas con afilados colmillos de metal que cuando se cierran nos atrapan para siempre.

Esta mañana, no muy lejos de aquí, mi compañera cayó en una de esas trampas. Está preñada y pronto iba a parir una camada de lobeznos fuertes y sanos. Intenté ayudarla, pero con mis patas no puedo manipular el mecanismo.  Tú, sin embargo, tienes dos manos. El cazador abre las trampas con sus manos. La cachorra humana puede abrirlas también. ¿Me ayudarás? ¿Ayudarás a mis hijos?

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22/10/2012, 21:17
Pequeña Lily

La pequeña Lily sonrió ampliamente encantada de, por fin, ser útil y ayudar.
-¡Por supuestos! -exclamó. -Pero con una condición -dijo dando aires enigmáticos-ni a mí ni a mi amigo, nos harás daño y nos indicarás al final del camino hacia donde dirigirnos para llegar al castillo de Giacomo. -Lily tomó aire, pues había dicho todo de corrido y le faltaba el aliento en la última palabra. Y ahora Lily estaba más que contenta y super-orgullosa de si misma por ser una niña tan lista y valiente.

En cuanto le dijera que si, se echaría a andar detrás del lobo para ayudar a su familia. Pues por otra parte, aunque se la fuera a comer después de ayudar a su compañera, seguramente le ayudaría sin pensarlo dos veces.

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23/10/2012, 21:38
El lobo feroz

El lobo es leal con los que le ayudan. El lobo nunca traiciona. Tienes mi palabra de que no os haré daño. Yo no conozco las tierras más allá del bosque pero te acompañaré hasta salir de él. Ahora sígueme, pequeña, no tenemos tiempo que perder.

El lobo se adentró entre la maleza y la pequeña Lily siguió su rastro. No muy lejos del camino, oculta entre los helechos, una loba gimoteaba con su pierna atrapada en un cepo de caza. Ya había desistido de intentar escapar y ahora se limitaba a lamerse la herida que le habían provocado aquellas duras puntas de hierro. Tal como había dicho el lobo, su pronunciado vientre anunciaba un estado avanzado de gestación y miraba a Lily con unos pobres ojos lastimeros.

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24/10/2012, 09:37
Pequeña Lily

La pequeña Lily que en un principio se había hecho la valiente, se apiadó de la pobre loba. El trayecto que las separaba lo acortó a base de una pequeña carrerita hasta arrodillarse frente a ella.
-Soy Lily-se presentó dulcemente antes de iniciar el rescate.

Con sus dos manitas tiró firmemente de la trampa pero muy fuerte para ella, sólo era una niña. Volvió a intentarlo desesperada una y otra vez, con la cara roja del esfuerzo y sus manos ensangrentadas, le dolía todo el cuerpo, le faltaba el aliento y sudaba terriblemente . Volvió una última vez para acabar resoplando en bufido del esfuerzo.
-Lo siento. No tengo la fuerza necesaria-le dijo al lobo a su espalda.-Soy demasiado pequeña-admitió.

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24/10/2012, 10:48
Engel

Engel, que hasta entonces había permanecido escondido en la espesura a salvo de los dos lobos, correteó hasta su ama y le lamió las heridas de las manos:

- Lo estás haciendo mal, Lily -le dijo-. No es cuestión de fuerza. Mi anterior ama, la bruja, ponía trampas para ratones y eran muy parecidas. Tienes que buscar el seguro. Aquí está, ¿ves? -Engel señaló con su pata una diminuta palanquita que hasta entonces se le había pasado desapercibida a la pequeña Lily-. Cuando tiras de él, aflojas el mecanismo y luego es  mucho más fácil abrirlo. Venga, inténtalo de nuevo.

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24/10/2012, 12:21
Pequeña Lily

Lily abrió mucho los ojos al comprobar lo que decía Engel. Acarició su cabeza con el dorso de la mano para no manchar con su sangre el pelaje del felino.

Abrió el mecanismo y después fue muy fácil abrirlo. Sacó la trampa de la pata de la loba y se la llevó con sumo cuidado. Cogió un palo y atravesó los dientes para cerrarse en este.
-Ya nadie más será atrapado en esta trampa.-Confirmó. Se acercó al lobo y se le quedó mirando.- ¿Necesitas mi ayuda en algo más? -preguntó fervientemente, deseando ayudar. Y en eso, se golpeó la frente con la palma de la mano abierta, y dejándola con manchas de sangre.- ¡Es verdad! -exclamó.- ¿Has visto a una niña un poco más mayor que yo con una capa como la que llevo?

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25/10/2012, 18:29
El lobo feroz

La loba se acercó cojeando a la pequeña Lily y frotó su cuello contra sus piernas en señal de agradecimiento. 

El macho respondió entonces a su pregunta:

-Sí, la conozco. Se llama Caperucita y era mi amiga. Siempre que venía por el bosque me daba una loncha de tocino que traía en su cesta. Pero ya hace tiempo que no viene por aquí. La última vez que estuvimos juntos apareció el cazador que pone estas horribles trampas y me disparó. Falló por muy poco y yo eché correr lejos de allí. Es posible que ese hombre sepa algo. Si quieres te puedo llevar hasta cerca de su casa, pero no voy a entrar en ella. Es muy peligroso.

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25/10/2012, 23:26
Pequeña Lily

La pequeña Lily miró a Engel entusiasmaa. Pidiéndole permiso.
-Acaba de decir que es muy peligroso, Lily. Y él es un lobo feroz-le advirtió condescendiente. Pero la niña no apartó la mirada del gato y este acabó sucumbiendo a sus encantos.-¡Oh! ¡Ya! ¡Para! ¡Está bien! Iremos
La pequeña sonrió feliz. podría devolverle a Hilda su hijita.

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27/10/2012, 18:40
El lobo feroz

-Espérame en la guarida -le dijo el lobo a su compañera-. Estaré de vuelta para para el parto, pero ahora debo cumplir la promesa que le he hecho a esta niña.

La loba se alejó cojeando y la pequeña Lily siguió aquel gran lobo que las malas lenguas llamaban feroz, pero que a ella le había caído simpático. Cuando llegaron al sendero que venía recorriendo la pequeña antes de su encuentro, el lobo le explicó que lo más seguro llegar atravesando la espesura. Lily y su gato siguieron a su guía adentrándose en aquella espesa vegetación, pero ahora a Lily ya no importaba que hubiera plantas espinosas por el camino, pues las cómodas sandalias que le había regalado Hilda protegían sus pies. Lo peor de todo era que se había hecho de noche y Lily no alcanzaba a ver más allá de un palmo de su nariz, así que tuvo que seguir por el oído los pasos del lobo, y después de un par de trompicones con alguna raíz que sobresalía del suelo y de comerse más de una rama baja, llegaron a un sendero.

- Ahí tienes la cabaña de la que te hablé - le dijeron un par de ojos brillantes-.

Lo único que veía Lily delante de ella era la más completa oscuridad, pero si el lobo le decía que allí había una cabaña debería de ser cierto.

- Ahora debo irme. Mi camada me espera. Si quieres salir del bosque lo único que tienes que hacer es seguir este sendero más allá de la cabaña. Y gracias por tu ayuda. Ahora eres amiga de los lobos. Si te vuelves a encontrar con uno de los nuestros, dile que eres amiga de Wulfus y te ayudará. 

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28/10/2012, 22:31
Pequeña Lily

La pequeña Lily miraba aquellas dos pequeñas luces en la oscuridad mientras asentÍa a las palabras del lobo feroz.
-Gracias, Wulfus,-respondió ella-mucha suerte con tus cachorros
Dicho esto se quedó en la completa oscuridad mientras oía la asmática respiración del felino. Dio un paso firme y eso le llevó a más hasta que en la oscuridad de la noche deslumbróuna pequeña luz a través del cristal de una ventana.

Se acercó tanto como le pareció prudente hasta ver que aquella luz noera nada más que la lumbre del hogar. Rodeò la cabaña y llamó a la puerta con humildad

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29/10/2012, 20:09
Caperucita

En la pequeña chimenea de aquella cabaña aún alumbraban algunos rescoldos, pero la pequeña Lily no veía a nadie dentro. En un primer momento pensó que sus habitantes podía estar durmiendo, pero la única contestación que tuvo a su llamada fue el monótono criar de los grillos. Prevenida por su encuentro con los osos sobre lo que significaba entrar sin permiso en casas ajenas, la pequeña Lily volvió a llamar, esta vez más fuerte y entonces pudo escuchar, procedente del  interior, la voz gimoteante de una niña:

- ¿Quién llama? Por favor, ayuda. Sáquenme de aquí. Me han secuestrado.

¡Por fin la pequeña Lily podía cumplir su sueño de ayudar a alguien! Pero primero debía encontrar la manera de entrar en aquella cabaña. La puerta estaba cerrada con llave y los estrechos barrotes de las ventanas no dejaban espacio suficiente como para que una niña pudiera colarse por ellos, aunque algún pequeño animal sí que podría intentarlo...

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31/10/2012, 12:05
Engel

Después de mucho protestar y de las palabras convincentes de Lily a Engel no le quedó más remedio que aceptar la peligrosa misión.
-¡Eres un héroe felino!-le dijo la niña para animarlo. Y el gato soberbio como el solo, sacó pecho y se quedó mirando al infinito como un gran héroe humilde. Pegó un salto y llegó a la ventana. Buscó por la casa el origen de aquella voz hasta llegar a la cocina donde se encontró.....

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31/10/2012, 19:49
Engel

- ¡Miau! He visto algo horrible, Lily -le dijo Engel a su ama cuando regresó del interior-. 

El gato tembló con un escalofrío antes de continuar hablando.

- Ahí dentro hay una niña desnuda y esposada a la pata de una cama. Estaba sollozando y temblando de frío cuando la vi. En la cabaña no hay nadie más, pero seguro que quien le haya hecho eso no tardará en volver. Deberíamos marcharnos de aquí cuanto antes. El lobo nos dijo que la salida la salida del bosque queda cerca,  así que ¡vámonos!

Engel, tan cobarde como siempre, no pensaba más que en salvar su pellejo, pero ¿iba a dejar la pequeña Lily a aquella niña abandonada a su suerte sin ni siquiera intentar rescatarla? Mientras la pequeña Lily pensaba qué podría hacer, la misma voz de antes volvió a sonar en el interior de la cabaña.

- Por favor, ayúdenme.

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01/11/2012, 10:47
Pequeña Lily

Lily se armó de valor. No iba a mentir, no iba a decir que no tuviera miedo pero lejos huir, la pequeña se enfrentaba a sus temores para socorrer a los demás.

Se giró sobre si misma en busca de algo útil. De un salto bajó del porche y cogió un largo palo de hierro. Se puso frente a la puerta e hizo palanca, no le costó mucho. A la tercera, la puerta cedió. Lilý se echó hacia atrás mientras la puerta se desplomaba en el porche con un ruido sordo.

Otra vez la voz del interior volvió a sonar.
-Ya voy a ayudarte-dijo la pequeña con su voz infantil mientras sorteaba la puerta para acceder a la cabaña. Se dirigió a la habitación y sin demora se puso a desatar a la niña rápidamente.-¿Eres Caperucita?-preguntó mientras le ayudaba alevantarse.

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01/11/2012, 12:58
Caperucita

Caperucita lloriqueaba muerta de frío con nariz moqueante. No se trataba más que de una niña de diez años de carácter asustadizo como su madre que, como había dicho Engel, se encontraba completamente desnuda y esposada a la pata de la cama con unos grilletes de hierro.

- Oh, gracias, muchas gracias -le dijo a la pequeña Lily besando sus mejillas con las suyas bañadas de lágrimas-. ¿Pero cómo sabes quién soy y por qué llevas mi capa? Pero es igual... no tenemos tiempo que perder. Herman puede volver en cualquier momento. Detrás de la cabaña hay un cobertizo donde guarda la herramienta. Allí debe de haber algo con lo que serrar la pata de la cama. ¡Corre, rápido! Si Herman vuelve por aquí me obligará a hacer esas cosas horribles...

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01/11/2012, 19:27
Pequeña Lily

¿Cosas horribles?se preguntó la pequeña Lily y mientras se dirigía al cobertizo empezó a hacer un recuento de lo que podría ser. Comer brecol, darse un baño. ¡Oh, si! Caperucita necesitaba un buen baño. Quedarse castigada mirando a la pared. Comer acelgas. Comer lechuga. Comer espinacas. Dejarla sola (y desnuda) en el bosque. Comer pimientos Eran todas las cosas que se le ocurrían y le parecían más que horribles.

Cogió la herramienta y volvió corriendo a la cabaña, con la mala pata, de que acabó tropezando en el felpuso. Pero aún así, corrió hasta Caperucita y despuès de mucho esfuerzo la liberó.
-Me envía Hilda, tu mamá. Es curioso, ella tiene un novio llamado Herman-le dijo mientras echaba su capa sobre la niña temblorosa de miedo y frío.