Partida Rol por web

 El mediano acompañaba al grupo sin haberse presentado. Siempre estaba encapuchado y no hablaba para pedir absolutamente nada. Y siguio tranquilamente al grupo hacia la posada. Sus pasos eran lentos y tranquilos. Su piel era fria y tersa como el marmol y sus ojos negros muy oscuros. Aunque era un mediano tenia un aire extraño de superioridad tal vez era un hombre complicado. Avanzo sin entablar conversacion con nadie. Simplemente escuchaba lo que todos tenian que decir. 

Maxwell, francamente, no me siento nada cómoda en la ciudad, me gusta más estar rodeada de árboles, arroyos y animales que de casas, mugre y hombres de dudosas intenciones...

Segun afirmo esto, miro de reojo al primero con el que me cruce, como si sospechara de el.

Asique cuanto antes llegue a la posada y refresque el gaznate, mejor. Lo lamento si mis modales no son los de una refinada damisela, pero me crié en el bosque, y no estoy muy acostumbrada a que me avasallen con preguntas... Supongo que al final terminaré acostumbrandome, espero que sepais disculparme.

Las últimas palabras van obviamente mas bien dirigidas hacia Neldryn, con una media sonrisa que pretende ser de disculpa...

Maldición, al final me pudo el sentimiento de culpa... ¿Por qué le he dicho eso? Ahora SI me va a doler la cabeza... En fin, paciencia, no se hacen nuevos amigos espantando al primero que quiere darte conversación...

Pasais por la puerta de la empalizada siendo observados por los guardias desde sus torres y por el guardia que os ha dado la bienvenida; al entrar en la ciudad podeis ver mas de cerca las casas, son casas pequeñas, de madera y piedra, de techos muy altos y chimeneas pequeñas.

La gente camina tranquilamente por la ciudad pero al veros no puede evitar quedarse mirando a tan extraño grupo de aventureros.

Parece gente trabajadora, ropajes normales, nada ostentosos, humanos en su mayoria aunque podeis ver algun que otro elfo y un par de gnomos que rapidamente se esconden en sus casas antes de cerrar la puerta.

Despues de un par de minutos llegais hasta lo que parece ser la taberna

John Coffe, se trata de un edificio de dos plantas bastante ancho y bastante algo, de su chimenea sale bastante humo y los alredores parecen estar frecuentados por alegres humanos borrachos.

La puerta de la taberna esta abierta y tiene un cartel bien grande: Por favor, sientese, nosotros le atenderemos lo antes posible. Decidis entrar; el interior de la taberna es bastante luminoso a pesar de las pocas ventanas que hay, la claridad del sol inunda el primer piso completamente; una barra bastante larga y cinco mesas amplias con sus cinco sillas cada mesa forman todo el mobiliario del primer piso.

A pesar de ser bastante pronto, cuatro de las cinco mesas estan ocupadas y de la ultima mesa solo quedan cuatro sillas aunque en la mesa de al lado solamente estan sentados tres hombres estando dos sillas libres.

Saltatrampas, muy entusiasmado, se acerca hasta la mesa libre pasando entre la gente que abarrota la posada. Durante el corto trayecto, los saquillo de Saltatrampas se van llenando inexplicablemente de las pertenencias que de los parroquianos. Tras llegar el primero hasta la mesa, se sube a ella y comienza a hacerles gestos a sus compañeros para que se aproximen

Tras un rápido vistazo al local, me dirijo directamente a la mesa que nos señala Neldryn y me siento en el punto que permita una mejor visión de toda la planta. Tras acomodarme lo mejor posible, y tras decidir que no sería muy adecuado quitarme las botas en medio de tanta gente, estiro las piernas e, ignorando claramente el cartel, en cuanto el posadero pasa cerca me dirijo a el, sin preocuparme de si venía a preguntar:

Póngame una pinta de cerveza por aquí, y no se si mis compañeros querrán tomar algo... Oh, y quizá podría decirnos que tienen para comer...

Sin esperar respuesta aparto la mirada del posadero para estudiar desinteresadamente a la gente que ocupa las otras mesas, y sólo después vuelvo a prestar atención al grupo y al posadero.

-Mmmh .. si te entiendo ami me gustaría estar rodeado por un sinfín de tormentas y relámpagos que callasen toda la noche por todos lados y por cualquier logar .. Muajajajaja – Empezándose a exaltar cuando empieza hablar de tormentas gritando y riendo como un verdadero villano de telenovela. – Em .. Em .. Disculpa por eso ultimo, solo diré que te entiendo vamos para la taberna tengo hambre y yo ando fastidiado de caminar – Relajado ya en esas últimas palabras aprieta el paso para entrar primero a la taberna donde lo atienden amablemente. Una vez adentro pide una comida sencilla y un vaso de vino no muy corriente pero sencillo, lo suficiente para que un viajero pobre pueda pagar. – Aaaah .. por fin me puedo sentar después de caminar tanto, vengan vengan amigos siéntense aquí conmigo – Les grita a su grupo de compañeros, sentándose a esperar su comida y ver que decidirá el grupo sobre ir con el príncipe o descansar hasta un nuevo día.

 El mediano se sento y se acomodo en su silla. No dijo nada. Miro a Shaanila e hizo una seña abriendo el dedo indice y el mayor y cerrando los otros. Cerro los ojos lentamente y volvio a abrirlos. Su mirada era tan fria que podria helar la sopa mas caliente que pudieran ordenar. Su rostro era el de un lobo solitario el de alguien que tenia una idea muy basica de lo que es la vida. Una idea muy fria. Sus ojos negros muy negros inexpresivos se hallaban mirando cada parte del cuarto.

Tras ver la mesa que Neldryn nos estaba indicando, tras pedir a los de la mesa de al lado una silla que no estaban usando me siento y dejo tanto mi mochila como mi petate a un lado de mi sill, mientras que mi espada y mi escudo los dejoe en el lado contrario junto con mi yelmo y mis ganteletes.

Uf, me acabo de quitar un peso  enorme de encima. Digo con una sonrisa y cuando veo al mesero acercarse lo suficiente le digo. Pongame un vaso de vino y me gustaría saber que tiene para comer.

Tras pedir me acerco un poco a Saltrampas y le digo susurrando pero lo suficientemente fuerte como para que los compañeros del grupo me oigan. No se te ocurra coger nada "prestado" de las personas que hay aquí, te lo advierto. Digo con voz decidida y con una actitud inamovible.

Y dirigiendome al resto de los miembros del grupo digo con tono mucho mas alegre y cordial. Bueno yo pienso que antes de ir a ver al principe ese podríamos visitar un poco la ciudad, ¿no os parece?. De todas formas el principe no se va a ir a ningún lado. Tras decir esto último sonrio mirando a todos los miembros de mi grupo y recostandome en mi silla.

 El encapuchado no dijo nada. Simplemente cruzo los brazos y espero la cerveza. Su rostro inamovible estaba mudo. Se mantuvo callado. Y esperando la cerveza se apollo en la silla. Era un mediano extraño. Era bastante alto para ser un mediano. Casi como un enano. Oia lo que decia el resto del grupo pero no hablaba. Era un hombre algo extraño. Cuando habia que actuar el sumplemente lo hacia. Pero no era muy sociable. Solo lo minimo indispensable. Todo lo que habia dicho se habia hecho entender con señas desde que habia llegado. Se sono los huesos de las manos unos momentos y observo todo su inventario.

El tabernero se acerca a vuestra mesa.

Alto, alto, alto, antes de que pidais nada dejad que me presente y os diga los precios jovenes aventureros. Dice con una sonrisa en la cara.

Mi nombre es John Coffe y esta es mi humilde posada.

Puedo ofrecerles cerveza, leche, vino y agua asi como una buena comida si traen hambre y si quieren una habitacion donde dejar sus cosas o dormir, tengo varias libres en el segundo piso.

Los precios son los siguientes:

Jarra de Cerveza:

       Comun: 4 pc

       Buena: 8 pc

       Esquisita: 1 pp

       Superior: 2 pp

Vaso de Leche: 2 pc

Vaso de Vino:

       Comun: 2 pp

       Bueno: 4 pp

       Esquisito: 1 po

       Superior: 5 po

Vaso de Agua: 1 pp

Racion de comida:

       Comun: 2 pp

       Buena: 5 pp

       Esquisita: 1 po

       Superior: 5 po

Media racion de comida:

       Comun: 1 pp

       Buena: 3 pp

       Esquisita: 6 pp

       Superior: 3 po

Ahora bien, si alguien es tan amable de decirme el pedido completo se lo traere ahora mismo.

Cuando el posadero se va, Lucian les pide una silla a los hombre que se encuentran en la mesa de al lado.

Estan ocupadas, dice uno de ellos, sin girarse ni siquiera para miraros.

Por sus ropas se podria decir que es un campesino pero por su musculatura bien podria ser el herrero del pueblo, sus otros dos compañeros son claramente campesinos que trabajan las tierras de labranza teniendo suciedad por toda la cara.

Observo como el camarero es un humano normal sin nada en especial salvo que su aspecto, a mi discrecion, es demasiado llamatovo en la taberna por esos pantalones rojos que hacen daño a la vista.

Desde luego para gustos lo colores. Pienso

Bueno, a mi me gustaría tomar un vaso de vino bueno y una racion de comida tambien buena, si no es mucha molesta. Le digo al mesero con una sonrisa en la cara. Por cierto, no nos ha dicho de cuantas habitaciones dispone y su precio. ¿Le importaria aclararme ese detalle?. Añado

Tras pedir me dirijo hacia los de la mesa de al lado. Seguro que no podriais dejarme la silla. ¿Yo no veo a nadie sentado en ella?. Digo cortesmente