Partida Rol por web

- N-no diga tonterias, puedo sentir que le ha gustado lo que le hice. Dijo riendo cuando notó como se le ponía dura bajo el pantalón. Pero a pesar de sus juegos asintió, sin dejar de agarrar el antebrazo de Hans, pegada a el y de vez en cuando volviendo a meter mano a su paquete. - Esta...bien, lléveme a mi habitación.

No tardaron en llegar a la habitación estudiantil. En cuanto la puerta se abrió ella se soltó para dejarse caer sobre la cama, quedando tendida boca arriba. Abrió sus piernas completamente y sin ninguna vacilación comenzó a masturbarse. - No puedo parar..necesito...lo necesito dentro de mi. ¡Necesito su superpolla!. Mientras suplicaba se introdujo tres dedos en su vagina hasta el fondo, moviendo estos ritmicamente mientras con la otra mano se estimulaba un seno. Eran pequeños, de pezones duros y rosados.

La única ropa que tenía puesta eran  calcectines blancos , largos hasta casi la rodilla típicos del uniforme estudiantil, así como una camisa blanca abierta, suelta por los hombros  y los lazos de sus dos trenzas.

Samuel sintió facilidad en introducir sus dedos y como estos chapoteaban en su interior, la presión de los músculos vaginales apretando ritmicamente. 

- Uhmm..Ohh...Vamos, deja que vea tu superpolla...Dijo Zian al liberarse de la lengua de Samuel que habia buceado en su boca. Con destreza se coló a través de la bragueta del pantalón, frotando el paquete y sintiendo como se endurecía con su contacto.

A pesar de disfrutar con el momento se permitió mirar al joven y sonreir. - Dejé a alguien en la otra habitación...atada..Sugirió por si Samuel captaba la idea, ya con el pene del hombre liberado de la presión dela ropa al que sujetaba, agarrado en su mano. 

Pues empecemos por ahí- respondo levantándome y ayudándola a levantarse- aunque luego quiero ver que tal entra mi superpolla en esa boca.

Añado al comentario con cachete en el culo.

De camino a su habitación intento apartarme cada vez que noto sus manos en mi paquete, pero entre su actitud y sus caricias me noto cada vez mas excitado, es casi como si pudiera olerla

"joder, es una cria, una alumna. No puedo hacer esto"

Respiro hondo y procuro recordar nombres de estrellas, pero en cuanto llegamos a la habitación y ella me demuestra a las claras su estado ya no puedo mas, su cuerpo es puro fuego y es lo mas apetitoso que he visto en muchas semanas. Me aseguro de que la puerta este cerrada y me bajo los pantalones murmurando

-las clases aun no han empezado-

Mi verga sale en toda su longitud y dureza apuntando al techo. Cojo sus muñecas y las levanto por encima de su cabeza dejandola indefensa, mi glande acaricia su ardiente y humeda entrada, parece un volcan

-ya sabes como es el sexo con un chico, ahora te voy a enseñar como es con un hombre-

Adelanto mis caderas y empiezo a penetrarla, pese a los tres dedos de un momento y el sexo de antes noto resistencia mientras se la meto hasta el fondo sin prisas, es entonces cuando empiezo a follarla con un ritmo rápido pero sin prisas besandola al mismo tiempo

Me sentia realmente bien teniendo a Andrea cerca mio, y mientras buscabamos comida y un lugar donde sentarnos, un miembro del personal de seguridad nos llamo a seguirle, sin darnos el motivo del por que. Me encogi de hombros y mire a Andrea con confusion antes de seguir a la oficial. Si nos estaban llevando por lo de la puerta eso deberia haber pasado en el momento si era algo serio.

En cuanto llegamos a destino y sentimos el sonido de la puerta cerrandose con llave mis nervios se disparan y no puedo evitar preguntar -A que se debe eso?- no era claustrofobico pero cuando un desconocido o casi desconocido se encierra contigo en una habitacion no es muy bueno.

Tras asegurarme que la puerta se encuentra bien cerrada y nadie va a entrar a molestar decido acercarme lentamente a la joven que ahora se encuentra sentada al pie de su cama, cogiendo la silla del escritorio para sentarme frente a ella y cruzar las piernas para adoptar una posición algo más seria.

-¿Cuál es tu nombre, joven? -Pregunto mientras alzo una ceja y cruzo también los brazos, dejando escapar una sonrisa divertida al ver que la joven parece percatarse más o menos de por donde van a ir los tiros. -Puedes buscar todas las escusas que quieras, pero por desgracia para ti no soy estúpida y se perfectamente que si sales con eso puesto para recibir a un "amigo" es porque ese "amigo" tiene ciertos derechos especiales. Por supuesto no puedo tolerar algo así mientras estoy de guardia y menos sabiendo que tus tutores habrán pagado una gran cantidad para que puedas estar aquí aprendiendo y no acostándote con el primero que pasa. -Entono la palabra amigo con algo más de insistencia para hacerla resaltar puesto que está claro que se trata de algo más.

-Mi deber como soldado es vigilar que no suceda nada a los residentes de la nave, eso también implica conductas sexuales y, por lo tanto, debo de aplicar una disciplina acorde a tu caso~

- Me llamo Martina, soy la delegada del segundo curso..dijo con cierto orgullo, inflando el pecho lo que hizo que sus atributos se marcaran contra la fina y trasparente tela negra.

Se puso mas nerviosa porque no estaba convenciendo a la de seguridad, tragó saliba y bajó la mirada.

- Esta bien, pero no diga nada. ¡Cual es su castigo?. Pienso hacer lo que me pida, mi historial no puede quedar manchado.

Miró a Nina con cierta duda y picaresca, sin moverse de la cama donde se había sentado. Esta a su merced y no sabía bien que debía hacer, si quedarse callada o seguir implorando su perdón. 

- Oh señor, ¡La tiene enorme!...AHHhh, OUhhh..¡M-me encanta! ¡N-no pare!..Grito entre gemidos cuando se sintió penetrada sin compasión por el profesor Harket.

Han sintió un tremendo placer mientras entraba a por todas, algo que hacía mucho no hacia y menos con alguien tan joven. Entre sus manos era como una muñeca, por pequeña y menuda por lo que pudo hacer con ella cuanto quiso, tomarla en el aire. 

A pesar de un pecho pequeño tenía unas buenas caderas y un culo prominente donde se agarró para seguir follando sin vacilación. Se sintió mas vivo que nunca, incluso le parecía que su vigor era mas potente, así como el tamaño de su pene.

- Me esta volviendo loca, ahhhhh, Cayó recostada en la cama, de espaldas y se separó los cachetes ofreciendo su ano virginal.

Samuel se encontró pronto en la habitación de al lado, la contigua aquella que espiara. Estaba de pie, apoyado contra la mesa y ahora eran dos mujeres y no una las que se encontraban a su entera atención.

Uhhmmpt, ahhrff, Zian, la mujer rubia chupaba con fuerza y succión, engullendo hasta la mitad el pene de Samuel, pero era la otra, la que se peleaba a gastas como estaba, quitando a la otra el juguete que era la polla del hombre para metersela entera, hasta la garganta.

- M-me encanta chuparle la polla señor. Admitió cuando se liberó de ella y respiró, soltando una ristra de saliva y arcadas.

Al fin desperté aunque no sabia si era por el escándalo que se había  presentado afuera o por que inconscientemente deseaba estarlo. Me sorprendí un poco por que recordé que aun estaba en la habitación de Scarlet, así que me levante y vestí lo mas rápido que pude, y si tenia un poco de vergüenza pero nada que no pudiera medio disimular.

Scarlet ya estaba vestida. Junto a la puerta. Se nos hace tarde... creo que  ya deberíamos de estar en el comedor. Saldré primero, no  quiero levantar tantas "sospechas" a los profesores, te guardare un asiento y te veo allá,¿vale?-le doy un beso rápido en los labios y salgo del dormitorio asegurándome que nadie me viera antes de ponerme en marcha-

Mientras caminaba por los corredores me aseguraba que la ropa no estuviera tan desaliñada y la alisaba con la manos. Si no hubiera caído exhausto hasta tiempo me habría dado de ducharme para limpiarme, pero  no había tiempo, solo quedaba esperar que nadie lo notara demasiado.

La sensación es casi demasiado ya. Ejercer un mínimo de control sobre mi cuerpo, requiere de toda mi fuerza de voluntad.

Cuando cierro la puerta con lleva, los dos adolescentes me miran ligeramente asustados y empiezan a hacerme preguntas. Me fijo en sus cuerpos jovenes, deseables,...

- Ha habido una posible brecha de seguridad. Tenemos que asegurarnos de que nadie ha sido contaminado. - digo mientras me quito el uniforme, quedándome completamente desnuda.

Si, vale, no es gran cosa. Pero mi mente está principalmente ocupada en no saltar encima de ellos y arrancarles la ropa, ahora mismo.

Cuando la oficial se explica mi rostro se llena de mas dudas reflejadas en mi expresión confusa, despues de todo había mas gente en el comedor y dando vueltas por la estación, era raro que justo ahora nos hicieran comprobar y no cuando nos atrapo aquel otro oficial antes.

-Inspección oficial?- Preguntaria aun dudoso de lo que estaba diciendo pero pronto termine con la boca abierta ante lo que estaba viendo, me quede pasmado cuando note que empezo a desvestirse y mas o menos cuando iba por la mitad busque mirar en otra dirección y taparme los ojos con una de mis manos.

-Que que, que esta haciendo?, por que se desviste de repente?- Preguntaría nervioso en mas de una forma.

Me quedo pasmada, mirando a la oficial, sin poder apartar la vista de ella. Nunca me han gustado las mujeres, no soy de esas. Pero algo en mi me impide apartar la vista. ¿Quizás sea efecto del gas de antes? Estamos en un salón, cerrado... no pasaría nada si...

Miro a Nathan, que aparta la vista de ella. ¿Qué hago? Me debato entre una cosa y otra. Recien acabo de empezar a conocer a Nathan. Pero la tentación... no sé si podré resistir. Busco la mano de Nathan, y acerco mi cara a su oído. Parece que ella también sufrió el efecto del gas... pero más fuerte... No sé qué más decir. Por una parte, mi cuerpo pide responder a la mujer que tengo enfrente. Por otra, mi mente me impide moverme.

Tras oir lo de fuera, y también a Shouji, cierro la puerta alarmadamente y con respiración agitada. - Eeeeeeeeeeeeeeeeee, no, tu te esperas 5 minutitos. - Ay dios, ay dios, ay dios, no sabía que no podíamos follar entre nosotros... o igual sí podemos no sé, pero tampoco sabía que me iba a tirar a alguien en la primera noche, me van a llamar de zorra para arriba Agacho la cabeza totalmente roja para no mantener contacto directo - Ha-hay profesores fu-fuera, si sa-sales te ve-verán y sabrán que ocurrió a-aquí - le explique entrecortadamente - Espera unos minutos y ya sí sal. - Dije aún mirando al suelo

Mi ritmo pronto se acelera hacia el frenetismo, su vagina se siente increiblemente bien me siento mas potente y mas grande que nunca, supongo que en el fondo tenía un deseo reprimido por mis alumnas. Y además entre su pequeño tamaño y la menor gravedad de la luna puedo manejarla a mi antojo para ir haciendo diversas posturas sexuales.

Es en uno de los cambios de postura cuando ella me ofrece su ano, lo que me sorprende de veras, el orificio se ve increiblemente pequeño, parece imposible que mi miembro pueda entrar ahí, lo cual hace que tras la sorpresa inicial esgrima una amplia sonrisa de pervertido mientras me inclino sobre ella apoyando la punta de mi glande en el ano ofrecido

-bueno, menos peligro de embarazo-

Empiezo a arremeter con decididas embestidas abriendome paso milimetro a mi limetro mientras noto como voy dilatando el apretado esfinter hasta que noto como acaba de entrar todo mi glande. Entonces tengo una idea.

Localizo el espejo que no puede faltar en la habitación y me siento levantando conmigo a la chica sin sacar mi polla de su ano, entonces levanto sus tobillos hasta sus hombros. Queda totalmente expuesta en el espejo

-fijate bien, vas a ver perfectamente como te la meto toda, hasta los huevos-

Y empiezo a embestir, cada movimiento de caderas hace que entre unos centimetros mas, es un conducto tan estrecho que no parece posible pero tras largos minutos de penetración lo consigo, está completamente empalada y yo me siento a punto de explotar

-masturbate, metete los dedos, quiero notar como acaricias mi polla desde tu coño-

Y tras esa orden ya me olvido del espejo y me concentro  en gozar, gozar, gozar. El estrecho conducto va dando mas de si hasta que me muevo dentro y fuera con facilidad y velocidad y mi placer con el hasta que finalmente ya no puedo aguantar mas, aprieto sus pezones, empujo con todas mis fuerzas y empiezo a correrme como nunca en mi vida. Es un orgasmo brutal, intenso e increiblemente largo, cuando acabo me parece que en el espejo su vientre está algo hinchado.

Caigo hacia atrás agotado sobre la cama, sin hacer ademán de salir de su culo

-espero que ya estes satisfecha-