Partida Rol por web

-Si es lo que deseais, mi señor....-

Aunque cláramete no me hace ninguna gracia el ser despreciada así.

-Aunque carece de sentido el que yo haya venido entonces.-

No comenté más, no tenía ganas de discutir con Lord Baelish.

Ser Hull asiente con un movimiento de cabeza a la propuesta de Brock Lannister.

-Puede elegir guardias, pero no puede excederse, no entramos todos en la fortaleza y tenemos que tener la situación bajo control...Son demasiadas casas, lo siento señor.

Véis como se acerca el maestre al lugar dónde os halláis, viniendo desde atrás.

-Tiene razón. Si cada casa hiciese lo propio podríamos tener problemas, hay tensión. Sonríe nervioso ante Ser Hull.

Me giro en la silla a hablar con el recién llegado -Gracias por el aviso maestre - aprovecho para echar un ojo a los soldados que vienen con la comitiva, la mayoría se ven cansados y desgastados sin embargo veo a algunos lo suficientemente leales para acompañarnos, les señalo y les hago un gesto para que avancen hacia mi posición – creo que estos serán suficientes - señalo a uno de los restantes de mayor rango y le entrego una bolsa con algunas piezas de oro- toma, procura que no se lo gasten todo en prostitutas y vino ojala en un sitio cercano y todos juntos…. ya os enviare ordenes asi que estad atentos.
Mi querido caballero Hull Gargalen esta es la comitiva representante de la casa Lannister espero ahora este todo en orden y podamos entrar a la fortaleza

entre los guardias que escojo para entrar  va mi guardia personal.

Cuando los soldados de las Islas del Hierro desenfundan sus armas me asusto y me divierto al mismo tiempo. Los hombres podrán ser muy devotos e ir proclamando su Verdad allí por donde pasan, pero una referencia a sus partes les ofende tanto o más que un insulto a su dios. Un hombre es un hombre, pienso, sea viejo o joven, noble o plebeyo, y desde luego, siga al dios que siga. Menosprecia su virilidad y tendrás un enemigo, alaba su 'potencia' y lo tendrás en el bolsillo.

Pero, ¿quién quiere la amistad de un sucio sacerdote del Dios Ahogado?

-Por supuesto, señor -respondo al viejo clérigo-, seguro que si rezáis con fe vuestro dios obrará el milagro.

Mas Lucyen interviene para poner paz y todo queda en nada. Unas palabras muy sensatas, y me alegro de que no haya llegado la sangre al río, aunque me hubiera gustado que puestos a desenfundar las espadas hubieran sido Lord Gendry y sus soldados los primeros en hacerlo. Que Desembarco del Rey y las demás Casas hubieran visto que no nos dejamos insultar, y menos a plena luz del día.

De todos modos estoy cansada por el viaje, tengo ganas de llegar a la fortaleza y ver dónde han pensado alojarnos (espero que no nos menosprecien dejándonos habitaciones de servicio o algo así). Quiero descansar un rato y olvidar este incidente: los hombres de las Islas del Hierro, en realidad, son diminutos en comparación con otras Casas con las que tendremos que lidiar.

Lucyen asiente ante las palabras de Lord Gendry- iré con él y su comitiva, eso es bueno- piensa. No tenía sospechas que le fueran a dejar a un lado, pero aún así y todo ese gesto se agradecía.

Lo que estaba claro es que aprendiz tendría que moverse con cuidado. La escena de hoy mostraba que los ánimos estaban a flor de piel, y un comentario desafortunado podría llevar a la tragedia.

Durante un breve instante, al escuchar las palabras de Petyr, se pudo ver una leve sonrisa en la cara de Lurleen pero nadie se dio cuenta de ello.

Bien, esto ya me gusta mucho más...con esa salvaje lejos tendré a Meñique más controlado.-Pienso mientras volvemos a ponernos en marcha y Kaya y otros soldados quedan allí fuera.

Parece que la crispacion desaparece.

Arya se siente algo mas tranquila pero no deja de observar todo a su alrededor.

Cuando Lord Gendry le dice que ira en su comitiva se siente bien ya que el noble confia en su fama.

Sigue al lado del joven aprendiz, por si volveria a ocurrir algo.

Los soldados rasos sin gran estatus social se quedan en las afueras de la ciudad con el maestro de armas de la casa que los organiza. El resto pasáis al interior de la fortaleza. Majestuosa, con el rojo claro predominando, os hace sentiros pequeños en   un mundo lleno de historias ocultas. Recorréis una gran variedad de pasillos y patios guiados por Ser Hull y su escolta. Os guían hasta la Bóveda de las Doncellas, donde os esperarán vuestras habitaciones. Un soldado pide a Gaheris Bane, de manera muy cortés que lo acompañe con su escudero Raimiel y se alejan del grupo acompañados por algunos caballeros como Ser Robb o Ser Agus. Brock y, curiosamente Walter, irán por otro lado, a habitaciones de un rango algo superior, acompañados de sus escoltas personales.

- Y ahora empieza la verdadera batalla, la que las espadas no ganan... - comenté a Brock  por el camino

A no ser que la situación se vaya de las manos y opten por el asesinato

Den se acerca cuando se está organizando la comitiva hacia el aprendiz de maestre Nuestro Azor Ahai es tan bondadoso como carismático. Mirad con que implacabilidad ha calmado los representantes del mar enfurecido... y luego dudan del poder de R'hllor.

Por otro lado, convendría que cargase un collar con monedas de hierro en el pecho por el momento. Si bien aún su cuello es tan rosado como la piel de un recién nacido, no quisiéramos mostrarnos menos poderosos de lo que esperan nuestros enemigos... espero no se sienta ofendido.

Tienes mucha razón Walter , aquí es donde tu y yo nos hacemos valiosos y ponemos el granito de arena que completa el castillo- le digo mientras le paso un brazo por los hombros amistosamente- de niño mi padre me contaba muchas historias sobre cosas que sucedieron dentro de estos muros , alguna vez me dijo que el nombre de fortaleza roja no era tanto por su exterior sino por el rojo que ha corrido dentro…. Ojala salgamos de esto rapido y que no perdamos la cabeza en el proceso.

No se a ti pero me han entrado unas ganas enormes de comer pescuezo relleno de pimientos en salsa agridulce- le suelto y me dirijo a uno de los guardias de la fortaleza que nos dirige – oye amigo sabes cual es el protocolo a seguir? Cuando será la gran reunión? Quiero salir cuanto antes de esto para disfrutar los placeres mundanos que la gran Desembarco del Rey promete a sus visitantes , apenas consiga librarme de esto empezara la verdadera visita -

Ramiel miraba todo a su alrededor como si no hubiera mañana, miraba con entusiasmo cada palmo de la zona, incluso a veces retrasandose del grupo y teniendo que correr para alcanzar los mayores, con las piernas mucho más largas.

Al ver que los separaban del resto del grupo para darles una habitación, Ramiel se despidió .- Cuidaos señores... que corren tiempos muy negros...

 Miro al resto del grupo y me dirigí a Brock y a Walter:

 - Tened cuidado, ya sabéis que hay mucho bromista suelto...

 Era un clave para decirles que se cubrieran las espaldas, luego me fui con mi escudero.

En absoluto- responde. Estaba acostumbrado a esos comentarios de ser considerado un maestre extraño por no llevar collar de hierro- sin embargo, temo que no puedo complacerle. Los aprendices no tienen derecho a llevar todavía un collar hasta que no se convierten en verdaderos maestres y demuestren sus habilidades. Si me pusiera uno, estaría deshonrando tanto a nuestra orden como a nuestra casa puesto que, ¿quien quiere tener a un farsante de maestre?

Y dígame, vista la situación, ¿tan mala es la relación entre los seguidores del Dios de la Luz y el Dios Ahogado?

Asintió al hombre de armas y a su joven escudero. 

- No olvidéis que tales consejos y buenos deseos también os aplican... - dejé caer, mientras me retiraba junto a Brock

Esperé paciente y vigilante junto a mi señor, no creia que fuera la forma más correcta de proceder pero tratar de corregirle en público sería todavía más inadecuado. 

Me limité a guardar las formas junto a él en espera de la respuesta. 

Los krakens son depredadores del mar, temibles en el agua, pero presa fácil en tierra firme. Lo mismo aplica para los nacidos en las islas del hierro. Sus leyes no les permiten creer en dinero, así que ellos pagan el precio de hierro por los objetos si son hombres. Es una cultura sexista y opresora, seguramente que una mujer como nuestra Melara, Asha Greyjoy y hasta la difunta Danaerys Targaryen les parecerían inferiores a sus opositores varones. Son salvajes, pero el comercio sin su "permiso"  pondría a poniente tan escaso de dragones como el día que salieron de esta ciudad con destino desconocido.

En definitiva, que es mejor no molestarles excesivamente- dice Atreides- lo previsible si hablamos de un kraken. Lo que a mi me preocupa es que tengamos que ir en esta ciudad con escolta en caso de que se vuelva a producir un enfrentamiento como el que hemos visto hoy. Y francamente, no se ha derramado sangre por suerte.