Partida Rol por web

Dai se reverenció de nuevo y después se marchó.

Tenía mucho en lo que pensar y mucho que preparar antes de comenzar con la misión. Así que se fue a su habitación para revisar todo lo que sabía sobre la joven que debía proteger y preparar todo lo que pudiera necesitar.

De vez en cuando, sin darse cuenta acariciaba el dragón de jade... la relajaba, se sentía a través de él más unida a su padre.

A la mañana siguiente, cuando te diriges al Wynn a buscar a tu "protegida", Karma te recibe, siempre servicial y dispuesta a ayudar.

- Buenos dias, señorita Konomichi. ¿Puedo ayudarle en algo?

- Muchas gracias Karma. Lo cierto es que quería encontrar a la víctima del teatro, me gustaría hablar con ella y comprobar que se encuentra bien. ¿No sabrás por casualidad dónde puedo encontrarla? ¿Verdad? no perdía nada por intentarlo, aquella joven era muy eficiente en su trabajo, a la par que amable.

A la joven asiática no le gustaba ir con mentiras ni hipocresías, cuando no quería decir algo, simplemente no lo decía, y cuando necesitaba algo, le gustaba ser sincera. Probablemente lo contrario a la mayoría de las mujeres residentes en Las Vegas.

Karma hace un gesto para que la sigas a su despacho. Una vez dentro, y asegurándose de que las puertas están cerradas y nadie puede oíros, te invita a sentarte.

- La señorita Fabrizzo ha insistido mucho en que no revelemos sus actividades mientras se encuentre alojada aquí; teme por su seguridad. Pero... viendo el papel que tu y tus compañeros hicisteis en el teatro, supongo que puedo confiar en ti y que la señorita Fabrizzo no corre ningún peligro. Esta mañana ha salido temprano, a un congreso de accionistas de diversas compañías eléctricas. Creo que se celebraba en el salón de actos del casino Flamingo.

La joven sonrió mientras andaba y entraba en su despacho.

- Comprendo, es de entender después de lo que ocurrió. Sin embargo, no me parecía que fuera una mujer de negocios, supongo que no tuve tiempo de observarla bien, y ni siquiera hablé con ella directamente. Por supuesto que puede confiar en mí. Por favor ¿puedo pedirle que sea tan amable de contarme todo lo que sabe sobre ella? ¿o al menos... todo lo que pueda decirme sin quedarse en una posición incómoda? trataba de estar natural, pero lo que hacía Dai era concentrarse para mantener en su memmoria todo lo que Karma le contara y atar todos los cabos que pudiera mentalmente. Aun así sonrió y se acomodó en el asiento.

- Bueno, es la hija de Giacomo Fabrizzo, director de una compañía eléctrica italiana llamada Solaris, de la que ella es además accionista y posiblemente heredera. Al parecer ya han intentado chantajearla e incluso secuestrarla antes, ya que su padre se ganó muchos enemigos haciendo que cerrasen centrales electricas de la competencia con denuncias medioambientales.

- ¡Vaya! Al parecer necesitará más protección de lo que yo había pensado. meditó la joven. No es una vida muy tranquila entonces. Quizás deba ir a presentarme, podría trabajar para ella y protegerla mientras esté en la ciudad. dijo tranquilamente.

- Lo cierto es que a pesar de todo se niega a llevar guardaespaldas; prefiere ser discreta

Dai se extraño mucho ante la información que Karma le estaba dando, y le pareció interesante a la vez.

- ¿Por qué cree que tiene esa actitud? ¿No le resulta extraña? Lo normal en una mujer de su posición sería lo contrario. Aunque fuese discreta y tuviese solo uno.

Karma se encoge de hombros

- Ni idea; supongo que es muy celosa de su intimidad y no le gusta sentirse vigilada. Todos los ricos tienen sus manías.

- Pues me resulta extraño, que después de que ya lo hayan intentado siga sin ceder, tal vez lo que esconde es más importante que ella misma. Jum.... la última parte no la dijo en voz alta.

Se levantó de la silla, bueno, si no hay nada más, he de marcharme, quiero ir a buscarla y ofrecerle mis servicios, sinceramente creo que está en peligro y no puedo permitir que estando en peligro no haga nada por salvarla.

Karma asiente sonriendo

- Espero que tenga suerte

Saludo a la joven con una ligera reverencia y se marchó hacia la salida del Hotel.

Gracias a la información de Karma, Dai sabía exactamente dónde podía encontrar a la señorita Fabrizzo.

Esta mañana ha salido temprano, a un congreso de accionistas de diversas compañías eléctricas. Creo que se celebraba en el salón de actos del casino Flamingo.

Así que se dirigió en taxi al casino Flamingo.

La ostentosa decoración del Flamingo te recibe a la entrada del casino. Después de pagar el taxi y preguntar por el salón de actos, te comunican que has llegado justo en el momento en el que terminaba la reunión. Hay muchísima gente abandonando el salón de actos y no aciertas a ver a Valeria entre tanto gentío.

La mueca de su boca muestra su fastidio por no encontrar a su protegida, así que busca una situación un poco más elevada para poder tener otra perspectiva.

La joven no era una mujer alta, por ello le era bastante difícil cuando había mucha gente poder encontrar a alguien fácilmente, pero tenía otras cualidades que suplían esa falta.

Aprovecha el escalón que da a uno de los ventanales para subirse y poder mirar desde allí.