Partida Rol por web

Esta loco,siempre pensando en combatir sin importarle que puede haber y sin pensar los riesgos.
Me dirijo a la llama para dejar la cuerda la coloco en su sitio y cuando saco la mano el anillo de oro con hojas de olivo aprece vistiendo mi ruda mano sin darme cuenta.
Me dirijo hacia Dornadar.
Yo ire contigo,pero alguien del centro del grupo debe iluminar el techo,no olvidemos que son arañas.El ritmo del grupo sera pausado,no se nos puede dejar ninguna araña atras.
Estarara loco pero es mejor ir a su lado.

No veo nada,es necesario que aguien ilunine el camino

Para evitar posibles daños o tratar de evitar algusno, uso el poder de la protección en mi persona, un leve movimiento de manos y listo. La magia me protegerá un poco ahora. Ante las palabras de Menthor, busco un par de antorchas y enciendo una de ellas, porque yo tampoco veo.

No me simpatiza mucho la idea de tener que encerrarnos en la cueva de nuestros contrincantes, la última vez que nos escondimos en una cueva ajena nos fue bastante mal... Y no creo que estas anfitrionas sean tan amables como ese gran yeti de dejarnos vivos.

Me situo en el medio del grupo y me quedo con la ballesta en la mano libre, deseando no tener que necesitarla mucho, pero solo es un deseo.

No alcanzas a ver nada ni a escuchar nada, la ocuridad y el silencio reina en la caverna.

Avanza unos pasos, tratando de mantenerse lo más silenciosamente que puede. Pero la oscuridad y el terreno desconocido hacen que no sea del todo lo que andaba buscando. Se coloca tras un recodo y anima a sus compañeros a avanzar con él para ir todos juntos.

Dornadar avanza junto a su compañero Loy.de momento parece que esta todo tranquilo pero no hay que confiarse,las arañas son seres muy traicioneros y en cualquier momento se podrian llevar una sorpresa.

asi que el enano se mantiene atento esperando que entren el resto de sus compañeros para seguir adelante.

-Vamos chicos!!!,parece que de momento no hay nada con que divertirnos.Avancemos y terminemos esto.-

Sí, los de delante, ancended las antorchas necesarias y empecemos.

Zaius preparaba su arco.

Avanzais un poco en la penumbra y solo con la luz de las antorchas, pero no esuchais ningún ruido ni lobrais ver nada desde donde os encontrais.

Tenemos que seguir hacia delante,mientras que tengamos luz.
Dragus sigue hacia delante,no nos puedes dejar ha oscura.
Tras decir esto,miro alrededor haber si encuentro algo que me pueda ayudar

No encuentras nada

A pesar de estar rodeado por mis compañeros, no puedo evitar ponerme nervioso, el encierro y el no saber por donde podría venir el ataque me tensa los músculos.  Menthor me ide que no me retrace y es ahí cuando caigo en la cuenta de que me estaba resagando. Apuro el paso y vuelvo a mi posición con la ballesta en la mano y cargada.

Avanzais algo mas pero todavia no conseguis ver nada, todo esta en silencio y un olor a carne muerta os embriaga.

La oscuridad me ciega a pesar de la antorcha, necesito más iluminación si quiero ser útil. - ¿Y si encendemos otra antorcha? - Propongo hasta que el hedor de carne putrefacta llega a mi nariz, mi estómago comienza a dar signos de incomodidad. Mi nariz, quisiera poder arrancármela por un momento y evitar esto. Sigo caminando, pero con claros signos de no estar del todo a gusto acá, o con claras señas de no estarlo para nada.

Por lo que veo, nadie tiene una antorcha a mano, eh? Dijo el abuelo. Sacó una y se la pasó al Menthor, una vez encedida.

Por delante necesitáis más luz.

A la luz de la antorcha que lleva el guerrero, el monje sigue avanzando. La cueva está oscura como la cueva de aquél lobo que se encontró hace años. ¿Años? ¿O fue realmente hace no tanto, en otra vida, en otra situación, cuando su hogar y sus hermanos estaban en pie?

Escudriña sus alrededores tratando de vislumbrar algo que le dé una pista sobre el paradero de las arañas.

Avanzo al mismo paso que los demás y ahora más iluminados por estar dos antorchas encendidas. - A este paso no llegaremos nunca. - Tratando de levantar la moral con mi comentario.