Partida Rol por web

Me quedé mirando el trozo de pan, lejos de azorarme por estar desnuda en la calle y levanté la vista hacia Ethan, como preguntándome si aquello era una broma.

- ¿ Pan duro? - Después de haber tenido que pasar tantas veces por distintas formas en aquel viajecito y aún con agujetas por todo el cuerpo, lo que me comería era una vaca, no un trozo de pan duro... Y el problema, es que ahora me la comería cruda sin el menor problema.

Miré al chico que no conocía, antes de responder a las preguntas del que sí, pues no sabía si podía hablar libremente de aquello y no me apetecía imaginarme la típica escena de un pueblo medieval con antorchas en la mano cazando al monstruo.

- ¿ Se puede hablar... delante suyo? - Miré a Diego como disculpándome. - Lo siento, no es nada personal es que no te conozco y supongo que estoy un poco confundida.

Miré el pan y al final le di un bocado.

- O buscamos algo que alimente, ropa de verdad y dinero o iré a una iglesia diciendo que me han atracado sólo para que me den algo!

Puse una carilla de pena que se la hubiera creído cualquiera.

Mire a Brooke, con una sonrisa- lo siento es lo unico que hemos podido conseguir, pero ibamos a buscar algo mas de comida y sobretodo ir a buscaros.- la mire unos segundos contento de por lo menos haber encontrado a una.

Si, es de confianza. me ayudo a salir de un verdadero infierno. Donde me llevaron los tipos con los que me pelee para ayudaros a escapar. me dieron una paliza y un cabronazo me pego un tiro. cuando desperte estaba colgado de unos ganchos atravesandome la piel. Alli estaba Diego, es como nosotros y juntos logramos escapar...

me fio de el, como me fio de ti Brooke..ciertas situaciones uneen mucho y creo que los tres estamos viviendo la misma historia- Sonrei y me gire un segundo hacia diego- El ha conseguido traerte hasta aqui.-

Ethan me había respondido como si le hubiera dicho primero que no me fiaría nunca de aquel chico, que no había sido así, pero para mí que se estaba poniendo a la defensiva aunque fuera de manera involuntaria y eso me hizo negar con la cabeza.

- Vale, vale, tampoco necesitaba tantos detalles... - Le hice el típico gesto que se le hace a alguien cuando quieres que se relaje un poco. - He estado... en... no sé como se llama ese sitio donde están los espíritus. No me acuerdo... - Me toqué la barbilla sin recordarlo. - Estábamos en la casa de un anciano que no tenía ojos y estaba un poco como...retorcido y me dijo que mirara en un espejo y aparecí allí. He estado con mi madre. - Sonreí más que feliz y satisfecha por ello. - El resto está bien o lo estaba la última vez que les vi donde el viejo.

Al decir esto me quedé unos momentos mirando al chico y negué con la cabeza.

- ¿ Puedes hacer buhos? ¿ Yo también puedo?

Eso lo preguntaba porque si era quien me había llevado ahí algún truco tenía que tener y yo, siempre estaba deseando aprender todas aquellas cosas que a todo el mundo le parecían inútiles.

Se habia quedado estupefacto, ¿una chica? ¿buho? ¿y el cuervo a donde fue? ¿el cuervo habia llamado al buho y...?

que puta complicacion...

Le sonrio ampliamente a la chica.

-- Gracias a Cuervo y gracias a Buho, no, no puedo hacer buhos, los espiritus de las criaturas de la naturaleza estan con nosotros y han escuchado la suplica de Ethan, supongo, es complejo de explicar y mas complejo aun de entender, yo no se mcuho tampoco, soy tan nuevo como cualquiera. -hizo memoria- estuviste en la Um..bra, Umbra, donde viven los espiritus, hemos estado ahi, pero no vimos a ningun ser querido, todo lo contrario.

Volteo la mirada hacia Ethan.

-- ¿alguna idea de que hacer ahora? -miroi a Brooke un segundo, de forma analitica- Brooke, verdad? eres muy guapa, llamaras la atencion. Volver al mercado ni hablar...

Yo estaba segura de que todo lo que había en aquel lugar, la Umbra como decía aquel chico no era malo, pues la mitad de lo que estuve allí, habían sido los momentos más felices de mi vida, aunque puede que también los más duros, al recordar aquello que dormía en mis recuerdos por ser demasiado doloroso y bueno, también doloroso físicamente hablando, porque lo de cambiar de forma y sentir como se cambiaban todos tus huesos de sitio era agotador e incluso me había saltado las lágrimas.

- Sí. - Asentí con la cabeza. - A mí me agarró un búho, aunque supongo que seríaun super-búho porque me levantó como si no pesara nada sin ni siquiera tirarme del pelo o clavarme las uñas en el lomo...

Empezaba a divagar y negué con la cabeza.

- Yo todo lo que he visto no es malo. Un mujer muy buena, que creo que es una especie de diosa que nos cuida por lo que dijo mi madre que se llama Gaia, hizo que pudiéramos vernos y... bueno... yo no conocía a mi madre... Aunque por otro lado unos espíritus me engañaron y seguramente hubieran intentado... pero el búho me sacó de allí.

Mezclaba las cosas y hablaba demasiado rápido como para que se me entendiera demasiado bien, pero es que todo aquello era demasiado difícil, como cuando había respondido a lo del búho.

Cuando me dijo que era muy guapa arrugué el gesto, incluyendo la nariz, pues no sabía qué quería decir para no morirnos de hambre.

- Pues... pues.. por mí podemos asaltar una carnicería... - Sonreí, pero estaba hablando totalmente en serio.

Escuche atentamente cada palabra de ambos y aun seguia sin entender nada de Buhos, cuervos, umbra y espiritus.

Sigo pensando que esto parece un "Mal viaje" de extasis-  Sonrei bromista, pero realmente lo pensaba.

Me lleve la mano a la cabeza, para echarme el cabello sucio hacia atras.

Deberiamos buscarlas e irnos de aqui. A eso ibamos Diego y yo, a por vosotras.

yo tambien tengo mucha hambre y si vas asaltar una carniceria voy contigo- Devolvi esa sonrisa complice bromista

Me quedé unos momentos pensando, más que nada por lo que acababa de decir Ethan de buscar a las demás y luego, sin decir nada miré a mi alrededor y me moví para asomar la cabeza a la entrada del callejón y observar unos instantes la calle.

No tardé en girarme para hablar.

- Yo ya he estado donde las dejé, quizás... recuerde por dónde se va cuando me sitúe..

Mis palabras no sonaban demasiado convincentes, pues no sabía si sería capaz de hacerlo, pero como era la mejor alternativa que teníamos, me puse a tratar de averiguar dónde estaba.

- No puede ser tan difícil..

Se rasco la cabeza.

- pues te sigo... en el camino veremos si les pedimos algo mas a algun vendedor de frutas o algo asi... ¿Brooke podrias poner ojitos de cachorro? jejeje

Me giré y miré a Diego con una sonrisa en los labios, asintiendo después, pues lo único que se me había dado bien siempre de forma natural eran cosas como esa y casi cualquier trasto que se enchufara. Así que me dispuse a hacerle una demostración y puse una de esas caras de pena que no parecían para nada fingidas e incluso puse morritos.

Cuando volví a poner mi expresión normal me reí.

- No sé pelear, no me gusta hacer ejercicio... pero la gente se me suele dar bien... - Con eso quería decir que se me suele dar bien engañarla o buscar la forma de que me ayuden. - También soy una máquina con la XboX pero eso no creo que influya aquí ¿ no? 

Me eché a reir y luego volví a centrarme en lo que estaba haciedo, pues lo que menos quería era perderme. Había que poner rumbo hacia la casa del ciego que ve son ojos.

Por lo menos espero que tengas mas idea, pues yo no se por donde buscar...Estoy mas perdido que un hijoputa en el dia de la madre- Bromee, mientras observaba a Brooke, asomarse por el callejon intentando situarse.

Sonrei al ver la carilla que puso Brooke.- La verdad que dan ganas de ayudarte poniendo esa carita.

Te dejaremos a ti a la gente, a mi se me da mejor "coger prestado" lo que no es mio y si hay pelea yo sere tu guardaespaldas- Volvi a sonreir

Le dieron gaas terribles de mimas y acunar a Brook cuando puso sus carityas de nenita en apuros, aun que estaba un poco sobre actuada, le dio ternura y mucha gracia, solto una risa potentisima y luego bajo la voz cohibido, pero aun con hilaridad dijo:

--valiente grupo estamos hechos; una gamer con carisma, un ladron de puños duros y un pseudo espiritista, por lo menos no nos quedaremos sin tema de conversacion ni nos aburriremos si nos pescan de nuevo.

Las palabras de Diego fueron un catalizador para comenzar un viaje a quien sabe dónde; Brooke se puso en camino intentaba recordar cual sería el camino indicado y al parecer esto estaba dando resultado; Uno tras otro los paso de los tres jóvenes les llevaron por las calles hasta el punto de buscar alternativas para que las miradas de los lugareños les sean esquivas; faltaban un par de cuadras para poder salir del pueblo cuando una voz les chisto desde la vereda de frente.

Brooke fue la primera en girarse y observar a un sujeto desalineado con media sonrisa en ro rostro con un gran gorro de reggae que les hacia un gesto de que se acercaran...El sujeto estaba desalineado y con una barba que se rascaba constantemente, su cabello y manos parecian las d eun obrero de años pese a ser un joven dde unos veintitantos.

Parecía que por algún motivo que no conocía estaba yendo por el camino que creía correcto, como si algo me atrayera al lugar, aunque no supiera ni por qué calles estaba caminando... parecía que al menos volver iba a resultar sencillo y eso, viendo que nada lo había resultado hasta ahora, era toda una novedad.

Escché cómo alguien nos llamaba y al girarme vi a un tío que seguramente llevaría como un mes sin darse un baño, por no decir toda su vida y con un aspecto que era el de alguien que te va a dejar sin un pavo como te descuides, pero como no me robara el nombre que era lo único que tenía ya que ni la ropa era mía...

- Chicos, no sé quien es... - Susurré a mis compañeros que ya se habían percatado también de que nos llamaran, para que al menos supieran que yo por mi parte, no había visto nunca a ese individuo.

De todas formas, con mi curiosidad habitual me acerqué, al parecer sin haber escarmentado de la última, aunque al menos ahora trataría de pecar menos de ingénua que antes.

- Hola... - Dije cuando lo tuve delante. - ¿ nos hemos visto antes?

Aquella era mi forma más agradable de decir " para qué carajo nos llamas ", pero como siempre, mostraba una de esas sonrisas amigables que hacían que la gente se sintiera agusto delante mía. Años de práctica y entrenamiento para ponerla...

El mipulso de tirarse sobre el tipo y golpearlo a la voz de "quien mierda eres?!" fue acallado de inmediato, despues de semejantes torturas, tan frescas en su memoria, no estaba capacitado para responder de forma adecuada a alguien que los llamaba con tanta naturalidad, dejó de Brooke se encargara, ella mismo dijo que la gente se le daba bien, pero la siguio, manteniendo un metro de distancia, fingiendo una naturalidad y relajacion que no sentia.

y era un pesimo actor en esos casos.

Miró de nuevo al sujeto, soslayado, luego miro a Ethan fijamente.

El muchacho con aspecto desaliñado y gorro de Reagge los miró, suspicaz

-Vaya, parece que al fin os he encontrado ¿Eh?

Puso ambos brazos en la cintura y se rió algo.

-Menos mal. Comenzaba a cansarme de dar vueltas y vueltas buscandoles de aqui para alla...

Luego de que la mujer le habló, enarcó una ceja y le comentó, sugerentemente..

-No, pero me habría encantado cruzarme contigo, muñeca...

Tras aquello, y un momento de silencio total, respiró profundamente y miró a todos.

Se colocó en una posición mas normal y alzó la voz

-Mi nombre es Artidor, me ha enviado el viejo... ya sabeis, Jorscar Ojos-en-la-niebla. Mi misión es encontraros y hacer de niñera hasta un lugar en el que podáis recuperar la comunicación. Podéis creerme, o no, pero el viejo puede enfadarse si tardamos mas de lo establecido...

Dicho esto, parecía mas que suficiente. Los miró uno a uno, mientras sacaba un movil bastante nuevo del bolsillo, y luego volvió a hablar..

-¿Alguna pregunta?

Parecía que llevábamos escrito en la cara que éramos lo que éramos y que estábamos buscando la guarida del viejo, y eso, me hizo sentir incómoda aunque no mucho más que cuando me llamó muñeca.

- Te hubiera dado igual haberme encontrado antes...te lo aseguro... - Pensé un poco molesta por un comentario así, pero ahora necesitaba volver a donde nos llevaba y asentí a sus palabras obviando aquel comentario.

- Estábamos tratando de encontrar aquel lugar para volver...

Yo siempre tenía mil preguntas que hacer, aunque por no acercarme demasiado a aquel tipo igual me las ahorraba esta vez.

- ¿ Está muy lejos? - Pregunté impaciente por poder usar algo de agua para lavarme un poco y quizás, conseguir algo de ropa interior, que andar sin ella era molesto.

El comentario de la muchacha le hizo sonreir...

-Bueno.. Francamente, no parecéis del tipo de persona que sepa guiarse por una ciudad y encontrar algo. Eso me hace pensar que ha sido mas que lógico el hecho de que me hayan mandado aquí...

Marcó un número en el movil y mientras este llamaba, miró a la muchacha y le sonrió y guiñó un ojo.

-Lo suficiente como para que podamos conocernos mas a fondo, señorita.

Pasó, literalmente, de los otros dos, aunque los miraba, para conocer sus reacciones. Al parecer, la muchacha era la mas sociable del grupo, y pese a su entrenamiento se la sentía cansada, agotada de caminar, con ropa sucia y muy alerta a cualquier cosa. Lo mejor sería salir de allí cuanto antes. Alguien cogió el movil al otro lado.

-...Si...¿Señorita? Mándeme si es posible un taxi a la Calle.. Pheyton Street, Nº8. ¿Es posible que esté en media hora?

El murmullo del movil apareció y luego cesó..

-Entiendo.. Sin problemas. Pero recuerde que mantengo mi influencia con el señor  Lewis.. no creo que le guste que me haga esperar demasiado....Si..

Sonrió. Al parecer el resultado era positivo

-Muchas gracias... Hasta otra.

Así colgó el movil, lo colocó nuevamente en su bolsillo, y ni por un momento dubitativo, les dijo mientras se giraba.

-Seguidme. Debemos de llegar a una de las calles en las que se termina el pueblo. Desde allí y con un vehículo, podremos alcanzar nuestro objetivo.

Comenzó a avanzar, dándoles la espalda y mirándolos de reojo. Volvió a girarse por un segundo y dijo, gesticulando mucho

-¡Vamos! Va, ya habra tiempo despues de dudar de mi ¿Si?

Volvió a darse la vuelta, suspiró y siguió avanzando. La verdad es que las pintas que llevaba  no le hacían mucho juicio.

A mí aquel tío me estaba dando ganas de darle una patada en el culo, porque ese comentario sobre lo que podíamos o no hacer, había herido mi orgullo, pues pensaba que lo estaba haciendo bien hasta que había aparecido él.. pero claro, si quería llegar a donde el viejo no podía ponerme a pelear con él o a decirle si siempre era así de gilipollas o había tenido que entrenar para conseguirlo.

- Será capullo...

Lo mejor fue ignorar aquel comentario y seguir con lo importante.

- Sí, tendré que dar gracias de que nos hayas venido a rescatar..! - No pude morderme la lengua todo lo que me hubiera gustado, aunque mi comentario más que hiriente había sonado a chiste pues me imaginé a una princesita en una torre teniendo que aguantar todas las tonterías del príncipe hasta que le diera por sacarla de allí.

- Si es que las princesas de Disney siempre han sido unas incomprendidas...

Miré a mis compañeros unos instantes y tras encogerme de hombros, viniendo a decir algo así como " es nuestra únca baza " comencé a caminar tras el hombre.

- Bien. Guíanos. - Dije quizás menos sociable de lo que me había mostrado antes, pero la culpa era suya por herir mi orgullo.

Escuchó las palabras de la mujer. Sonrió a medias y miró hacia atrás.

-Oh, tenedlo seguro: Dad gracias que me teneis. Este es mi territorio, tratad no ensuciarlo, ¿Entendido?

Guiñó el ojo a la mujer y volvió a darse la vuelta, mientras avanzaba. Sabía que lo seguían ya, así que aceleró el paso.

-Cuanto antes lleguemos, menos posibilidad hay de que alguien trate de destruirnos o detenernos. ¡Vamos!

Hizo un gesto hacia delante mientras seguía avanzando... por ahora, se calló un instante para evitar problemas con la mujer, a la que al parecer su forma de presentarse no le había gustado en demasía.

Sus palabras me hicieron mirar hacia los lados y también sentirme como una extraña andando por aquella ciudad, quizás porque me había quedado pensando en lo que acababa de decir.

- ¿ Si este es tu territorio cual es el nuestro?

Me hacía sentir extraña en un lugar como aquel. En realidad, me estaba sintiendo como si fuera una inútil a la que todo el mundo tenía que hacerle las cosas, pero viendo que en el poco rato que me había quedado sola, casi consigo que me maten o quizás algo peor, me tocaba agachar las orejas y mover el rabo.

- ¿ Siempre es peligroso que estemos en la calle? - Pregunté porque empezaba a creer que estuviéramos donde estuviéramos tendríamos que temer por nuestras vidas. - ¿ Qué tiene de agradable ser lo que eres si lo único que tienes que hacer es preocuparte de que no te maten? ¿ Eres feliz así? - Nunca me daba cuenta de que mis preguntas podían llegar a molestar a alguien, pero era algo que formaba parte de mi naturaleza. - ¿ Y lo del gorro es por algo en especial?