Partida Rol por web

CANAL DE MANDO

Señor, por el hecho de que hay oleaje, estoy seguro de que existe un pasaje subterráneo, que es un río: este alimenta la laguna. Será muy complicado encontrarlo mirando desde la superficie, me temo, así que, si decide usted ese camino, habría que sumergirse. Una pega es que el agua está demasiado fría y para evitar una hipotermia rápida deben activarse los equipos de calefacción de las armaduras y eso consumirá baterías. Otra posible pega es que el agua vaya a favor de la dirección que llevemos, en cuyo caso tendríamos dificultades a la hora de controlar nuestro movimiento, y, de caer alguien, podría arrastrar a todo el mundo, en cadena. En contra de lo que parece, si el agua viene en contra, no habría tanto problema, ya que el peso de nuestros trajes compensaría el empuje, y recibir este de cara sería más eficiente a la hora de resistir.

- Creo que es el único camino - dice el joven Teniente con dudas - Debemos tomar una decisión rápida, vienen muchos más. - mientras toca el agua con precaución.

Escucho por el intercomunicador los mensajes de mis compañeros, que vienen a ser más de lo mismo que yo ya había percibido al acercarme a la laguna. El proceso del cambio de mira es infructuoso, y eso significa volver a lo que alguna vez ha demostrado ser práctico en mi hogar de origen: la luz directa. Así que vuelvo a cambiar a la lámpara, mientras rebusco en mi mochila, agachado en el suelo.

-Sargento mayor, bajo el agua recomiendo luz directa de las lámparas. Estoy sacando mi linterna más potente, solicito permiso para realizar un barrido en la laguna para ver algo más que con nuestros focos, señor. Si vamos a meternos ahí, la ligera lo va a tener muy duro, tengo también una cuerda de nylon que podría hacer una vía para acelerar el proceso de inmersión y salida, señor. -Informo, mientras abro el kit de supervivencia que me he traido en la mochila sacando los dos objetos mencionados y volviendolo a cerrar y guardar. Si hacen falta, puedo llevar ambas cosas fuera sin que resulten en una molestia, y espero que cincuenta metros de cuerda sean suficientes para el recorrido submarino que tengamos que realizar, o nosotros las vamos a pasar jodidas y los ligera han sobrevivido al descenso para nada.

La laguna allí presente parecía que podía ser una verdadera molestia. Rodearla, si era necesario, podía llevar mucho tiempo, que no tenían realmente. Eso, sin mencionar el hecho de que podía haber sorpresas submarinas, todavía peor que la pérdida de tiempo.

Resumiendo, que cualquiera de las opciones no era nada halagüeña.

Tras ver que Popov había hecho lo que había podido con respecto a sus heridas, con ningún éxito, Sonia decidió usar el kit básico del cuchillo para recuperarse un poco. Eso debería bastarle hasta recibir verdadera atención médica. Por sus cojones que iba a ser suficiente.

Ante la propuesta de Sonny de meterse en el lago para comprobarlo, ella no lo dudó. Su misión era protegerlo de principio a fin de ese descenso.

- Señor, yo le acompañaré en ese barrido de la laguna.- dijo firmemente.

Después de escuchar las palabras de todos los presentes, tomo una decisión acerca de eso:

 - "Esta bien. Sonny y la Cabo Ramírez buscarán el camino. Gawain, irás con ellos pues me dijiste haber visto el condenado burbujeo. El resto manténganse agrupados y formen un perímetro defensivo mientras sanamos a los heridos cuanto podamos. Recarguen municiones. Sonny, déjame la cuerda pues amarraremos a los ligeros para llevarlos y que estén el menor tiempo posible en el agua. No aguantarán mucho la temperatura."

Me acerco a uno de la ligera y comienzo a sacar el medical kit para intentar sanarlo.

- "¡A la orden, Señor!" -

Me sitúo junto a Sonny y la Cabo, listo para iniciar la inmersión. Compruebo que todos los sistemas de mi traje están sellados. Me preparo para activar la luz normal más potente y para encender los sistemas potenciadores de Fuerza del traje, los voy a necesitar.

Sigo intentando desencasquillar mi arma, pero parece que nada resulta. El cartucho parece doblado en la recamara y me siento demasiado indefenso.

El teniente informa de que más bichos están por llegar, tenemos que estar preparados, así que cojo la belcher de mi espalda y corro hacia Wallace.

-Wallace, tengo un problema con mi morita, no consigo desencasquillarla, si tienes un segundo ¿podrías echarme una mano?.

Dicho esto apunto hacia el túnel por el que hemos venido. No podemos relajarnos, los bichos están ahí y cada segundo que nos quedemos quietos, es una nueva oportunidad que les damos para que nos alcancen.

Ahora que me he parado, observo el lugar en su conjunto...un bello lugar sin duda alguna...

Mkoll siguió avanzando para reunirse con el resto, una vez se hubo apagado el fuego, mientras desencasquillaba su Hawkeye, que se había quedado encasquillado en su último intento de disparo. Por suerte, no había sido determinante, y nadie había muerto por ello... Pero pronto tendrían compañía, y prefería tener todas sus armas a punto. 

Parecía que les iba a tocar aguantar allí mientras Sonny, Gawain y la cabo intentaban dar con un camino en aquella laguna. Desde luego, en cuanto encontrara una buena posición de tiro, iba a reemplazar su hawkeye por el morita estándar, pues algo le decía que iban a quemar mucha munición mientras esperaban. 

Hightower consigue reparar el casco por él mismo y por suerte, porque ella quizá lo habría estropeado aun más. Hay veces que no se puede acertar en todo. Se acerca a Wimger cuando le pide ayuda también y esta vez espera poder ser de ayuda realmente... antes ha conseguido desencasquillar sin ningún problema su arma.

-Déjame el arma Wimger.

Toma la morita de su compañero y la revisa antes de hacer unos cuantos movimientos rápidos y precisos para que el casquillo salte y deje el arma otra vez útil y lista para el combate. Le devuelve el arma a Wimger.

-Arma lista y funcional. Ahora a defender.

Vuelve a su posición y apunta hacia la boca del túnel.

Bockman ahora volvía a ver, todo había sido un pequeño desajuste de uno de los cables que hacían interconexión para hacer los cambios de visión. Una vez solucionado mira al rededor y vuelve a ver la laguna ahora con mejores ojos. - Gracias Billy parece que era una tontería.

Volviendo al mundo real bockman hace caso del sargento y va a colocarse justo a la entrada del túnel apuntando hacia la retaguardia con su morita. Mientras todos terminaban de entrar a la cueva, sólo faltaban bichos detrás de ellos. Gordos y asquerosos bichos.

El rugir del motor del taladro aun podía escuchar con claridad a través del túnel por donde avanzaba, mas aun, la forma de los túneles generaban un retumbante eco que hacia se amplificara de forma peculiar. En el fondo aquello era bueno, les daba algo mas de tiempo antes de que el taladro dejase de ser el cebo que necesitaban en aquellos momentos.

Pese a ello la preocupación era creciente, la ves pasada que el teniente había presentido una amenaza, los bichos no habían tardado mas de 30 segundos en caer sobre de ellos; ahora al parecer eran mas y el tiempo se les agotaba.

Frente a ellos su gran obstáculo se mostraba imponente y conforme analizaban la situación más problemas surgían. Los fusileros ligeros no estaban muy a gusto con la situación, sabían que sus trajes térmicos no estaban hechos para sumergirse en el agua, mas aun, ni siquiera eran buenos con la nieve. Y todo eso sin contar con tener que aguantar la respiración por largo tiempo en aquellas difíciles condiciones; aun así, todo eso era mejor que perder la vida en las garras de una marabunta de bichos.

Y casi como si sus pensamientos fueran escuchados, un sonoro crujir de piedras se escucho a lo lejos, casi como si algo se liberase del suelo y lanzase las rocas encima de el hacia todas direcciones; el tiempo se les agotaba.

Bloqueo mis armas para la inmersión, tras el sellado de mi traje.

Desciendo a la laguna y mientras lo hago activo los potenciadores de fuerza del traje y activo la lámpara de luz blanca.

- "Nos vemos dentro de nada, compañeros." -

Con la autorización del Sargento Mayor, Sonia asintió, asegurándose de nuevo de que tenía el traje bien sellado y acercándose a la laguna con Sonny y Gawain.

- Sonny, irás en el centro, abriendo el paso, pero no te adelantes sin nosotros. Gawain - miró al aludido -, a su derecha. Yo iré en el flanco izquierdo. Separación máxima de un metro. Ojos bien abiertos, no sabemos si pueden haber sorpresas. Mantendremos el contacto por radio con el resto.

La lámpara estaba encendida ya, y mientras estaba a punto de entrar, Ramírez no pudo sino pensar que daba igual si era nieve o una láguna subterránea: el caso era helarse el culo en ese puto planeta.

- "¡Sí, Cabo!" -

Me sitúo en el flanco derecho de nuestro zapador y abro un canal de comunicaciones con O'Flaggerty. Él tiene un equipo de comunicaciones completo, como el mío, así que será el más adecuado para recibir la señal, incluso aunque esté bajo el agua.

-Preparaos para repeler un ataque, esos ruidos no me gustan.-Con esto el sargento se metió en el agua apagando el viscoso fluido en llamas que le cubría y volviendo a la formación defensiva.-  

Wayan se mueve a una esquina, aprovechando que la mayoría este demasiado preocupado defendiendose y cuando cree que no hay escuchándole conecta el canal de mando.

- Lo que presiento al sursuroeste es mucho más... grande - parece buscar la palabra unos segundos - más peligroso que lo rechazamos en el túnel anterior. Por otro lado creo que el agua es segura. O al menos no siento peligro en ella. Quizá deberíamos entrar todos ya.

Wallace me demuestra lo torpe que soy, ya que con un gesto rápido consigue solucionar lo del casquillo.

-Gracias Wallace, ya te pediré que me digas cómo lo has hecho.

Últimos instantes de tranquilidad en los que cuelgo la morita de la espalda.

-¿Por qué narices no avanzamos?, no estamos precisamente en nuestro territorio...

 Se escucha un estruendo y aprieto los dientes con fuerza. Los bichos vienen y si bien es cierto que les vamos a dar todo lo que tengamos ¿será suficiente?. Me dirijo hacia el sargento Evans para estar en mi posición otra vez. Mackeyn, Burnette y Mkoll permanecen en sus posiciones al igual que los de la ligera.

-Sargento-  estamos conectados por radio y hemos recibido ordenes, así que no me salen las palabras. 

-Son las ordenes...pero esto no es una detención...

Tras agradecer al Sargento Evans las granadas que le había facilitado, Burnette se mantuvo siguiendo al grupo mientras se aseguraba que sus armas estaban listas y a punto. El lanzagranadas había resultado ser un arma tremendamente efectiva, mucho más que en campo abierto, en aquellas cavernas, y asintió para sí, sabiendo que tendría que tener mucho más ojo a la hora de gastarlas.

Se mantuvo en un segundo plano mientras se organizaban posiciones para explorar aquella laguna, buscando un camino por donde encontrar su objetivo, y se puso en posición cuando, de repente, aquel sonido llamó su atención. Instintivamente, alzó el rifle Morita y apuntó a la oscuridad.