Partida Rol por web

El nuevo orden mundial

Así fue como todo comenzó

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11/11/2017, 17:31
Director

 

El declive de la raza humana

 

Todo comenzó en diciembre de 2010. Las navidades de ese año fueron eclipsadas por una de las mayores crisis que la humanidad ha sufrido, la crisis energética. El consumo desmedido y la escasez de recursos provocaron que se superaran las peores previsiones posibles y, por esa fecha, ya se habían agotado casi todos los combustibles fósiles al alcance de la mano del hombre. El petróleo fue el primero en desaparecer y las medidas tomadas para sustituir ese tipo de combustible fueron en vano.

Tras esto, en todos los países se establecieron medidas, limitaciones, para que las centrales energéticas restantes pudieran suplir los servicios mínimos pero esto solo agravó la situación. Muchas personas no aceptaban la situación en la que se encontraban y las obligaciones impuestas, acostumbrados a una vida cómoda veían la crisis como un fallo del gobierno, que no había sido capaz de afrontar un problema que se veía venir desde hace años. Como consecuencia, las calles fueron tomadas por el pueblo y se originaron revueltas en todos los países del mundo.

El pueblo exigía una solución y, en medio de ese ambiente de crispación, surgió a la luz S.I.N.F, un grupo de científicos que ofrecía una solución utópica para el problema de la humanidad. Proponían la creación de una nueva central nuclear de fusión con la que podrían producir una mayor cantidad de electricidad, acabar con la insuficiencia energética y reutilizar la totalidad de los residuos generados de forma que esta nueva central, produciría "energía limpia".

A pesar de que el proyecto no tuvo mucho apoyo y se veía como algo idealizado, a falta de otra propuesta, la primera central de S.I.N.F comenzó su construcción en el norte de Estados Unidos. En marzo de 2013 se inauguró dicha central y, por primera vez en 3 años, la mitad norte de EEUU pudo abastecer a todos sus habitantes. El hecho fue tan esperanzador que en mayo del mismo año se comenzó la construcción de centrales S.I.N.F en todo el mundo.

En enero del año 2017 S.I.N.F se encargaba de la energía de todos los países del mundo y la crisis energética se convirtió solo en un recuerdo del pasado, algo que se pensaba que nunca volvería a pasar. La paz volvió paulatinamente a las calles y la humanidad siguió su camino sin ningún altercado mayor durante algunos años, sin embargo, la tranquilidad no duró demasiado.

 

El 7 de septiembre de 2025 la central principal de S.I.N.F en EEUU estalló de forma instantánea y poco después lo hicieron otras centrales del norte de américa. En apenas unos minutos una de las principales potencias mundiales fue arrasada y en su lugar quedó una inmensa nube rojiza de radiación. Millones murieron sin que pudiese hacerse nada por ellos y la contaminación se extendió por agua y aire llegando a todas partes del planeta y afectando así al resto de la población.

Se desconocía si la catástrofe fue debida a un ataque terrorista o a un accidente en la central pero, independientemente del origen, los gobiernos ordenaron el cese de la actividad de todas las centrales S.I.N.F, su demolición y la inmediata disolución de la institución.

De nuevo, el planeta entero se encontraba con una crisis que pensaban solucionada. A la falta de energía había que añadir la contaminación de la vegetación y la fauna y por tanto de los alimentos. Los fallecidos por las explosiones no fueron las únicas víctimas del suceso. En los años posteriores murieron muchos afectados por radiación, por falta de alimentos. La humanidad se encontraba al borde del precipicio una vez más.

Esta vez no se confió en ninguna institución, los gobiernos de casi todos los países se reunieron en un consejo para establecer la orden reguladora de 2025. Debido a lo sucedido en EEUU y a los problemas que el ser humano estaba enfrentando se prohibió todo uso de energía nuclear, se estableció un control y una limitación del uso de la electricidad y de los recursos y, además, se creó una fuerza del orden para asegurar asegurarse de que las medidas establecidas eran cumplidas por todos los ciudadanos, la Fortfall.

 

Los años fueron pasando y lo que al principio era una promesa de salvación se convirtió en una dictadura. La normalidad volvió para gran parte de la población y todos los servicios retomaron su funcionamiento habitual pero las diferencias entre clases sociales cada vez se hacían más notable. Aunque en cierta forma se pudo suplir la falta de crudo cuando se creó un nuevo tipo de combustible, el glaciol, muchas personas se encontraban sin apenas recursos. Cada día más y más gente acababa viviendo en la miseria o muriendo mientras que aquellos de clase media o alta seguían manteniendo su estatus.

En algunos lugares del mundo comenzó a desaparecer gente, los ataques a instituciones del estado y las revueltas se suceden uno tras otro. Fenómenos extraños, sin explicación, son rápidamente ocultados, sin ni si quiera aparecer en los medios de comunicación. El gobierno se mantiene en segundo plano mientras Fortfall se extiende haciéndose con el poder poco a poco.

Pero la esperanza aún no está perdida. Existe un grupo de personas en contra del gobierno y de Fortfall, una fuerza de lucha, de oposición contra la represión del pueblo. El símbolo de la rebelión por un futuro mejor.