Partida Rol por web

Amanece lentamente mientras Tom descansa tranquilamente, dejándo salir todo el cansancio acumulado a causa del viaje. La ventana permanece abierta. Una suave brisa se cuela por ésta y desde fuera se escuchan los sonidos de los pájaros al anunciar la llegada de la mañana.

Cuando Tom abre los ojos se encuentra en una habitación desconocida, como en los últimos años. No sabe cómo lo consigue, pero siempre tiene el dinero necesario para poder viajar y encontrar a los familiares de las víctimas de ese accidente al que sobrevivió. Ha conseguido satisfacer el deseo de la mayoría de ellos. Ni siquiera es consciente del tiempo que lleva detrás de éste cometido, pero sabe que tan sólo le quedan siete personas de esas 887 personas que perecieron.

Cansado se estira en la cama y se levanta restregándose los ojos. Mira la habitación del hotel. Es bastante bonita y cómoda para ser barata. Un armario de ébano decora la estancia para que los clientes guarden sus maletas, pero Tom no lleva maleta, una mochila pequeña es su equipaje. La cama pequeña descansa junto a una pared al lado de una mesilla decorada con una lámpara de lava. Las paredes lo saludan vacías, sin decoración. En la habitación no hay nada más, pues el baño es común a todas las habitaciones.

Sobre la mesilla descansa el sobre que dejó la noche anterior antes de meterse a dormir. Lo abre sentado en la cama. Dentro hay fotos de los siete últimos parientes de las victimas. Sus investigaciones le han llevado a Londres, Inglaterra. Siete de las personas de ese vuelo eran de allí. Mira las fotos. Detrás de cada una de ellas tiene el nombre, la dirección y algunos datos de la persona en cuestión, incluyéndo el parentesco con el fallecido.

Miras las fotos con sus nombres: Michael, Michelle, Alice, Jefferson, Betty, Marcus y Maybell. Los nombres te saludan desde las fotografías mientras tomas un ligero desayuno en una cafetería. Tratas de decidir a quién visitar primero.

Como todos los días desde el accidente Tom intenta sonreir a todo el mundo , nadie sabe que repercusion puede tener una sonrisa, ademas memoriza los nombres de las camareras para poder llamarlas por su nombre .

Su desayuno se alarga mas de lo estrictamente normal , esta cansado y no recuerda la ultima vez que hablo con su hija.

sigue su ritual de poner las fotos al reves y sacar una al azar , esta vez es una mujer y en su foto tenia una mirada triste .

que nombre pone....Alice pues bueno Alice tu eres la siguiente , espero que esta vez desde el cielo puedas tener una mirada alegre.

Tom se levanta y a pesar de que casi no le queda nada deja una muy buena propina

Bernabet tenias razón las tostadas de este lugar son especiales .

Como otra persona anononima sale , pero Tom sigue con una sonrisa

Los pasos le llevan hasta una casa bastante normalita. Un bloque de pisos en un barrio normal. No tiene mucho dinero así que ha ido andando, le duelen un poco los piés pues esos zapatos los tiene bastante malgastados. Es bastante pronto y Tom duda de si ella estará en casa. Coge la foto y la gira. Lee lo que pone detrás para recordar de quién era familiar. Hace bastante años ya del accidente, de echo, dentro de poco hará una década desde aquello, pero Tom no olvidó a ninguna de aquellas víctimas.

"Alice Smith. Hija de Arnold Smith. Veinte años. Trabaja de camarera con turno rotativos. Soltera. Vive sola".

Vuelve a voltear la foto y mira a la soriente Alice de nuevo. Aunque dentro de esa sonrisa, atisba unos ojos tristes y melancólicos.

Tom mira los ojos de la pariente de Arnold , parece triste y su sonrisa cansada.

Tom pone la mejor de sus sonrisas , y se pregunta como se sentiría Arnold al ver a su hija ya adulta , tras esperar media hora frente a la puerta decidió llamar esperando que ella estuviera allí , en sus manos un viejo sombrero algo gastado .

Espero que esta vez no me confundan con un vendedor

La puerta parece no abrirse nunca. Pasan algunos minutos antes de que Tom escuche unos pasos ansiosos acercarse a la puerta. Escucha como se descorre un cerrojo en la parte de arriba de la puerta y otro en el centro y acto seguido escucha como gira una llave dentro del pomo. La puerta se abre lentamente y tras ésta Tom puede ver a la bella Alice que le mira extrañada con sus ojos azules.

-¿Qué desea?-le pregunta con una voz bastante dulce, coherente con su apariencia.

"Vaya, pensé que era Ameli" piesa para sí al ver a Tom.

Se mantiene pegada  a la puerta, como en guardia por si tiene que cerrarla desprisa, parece no fiarse muco de él.

Buenas señora!

Dijo arrugando amablemente su propio gorro .

Me llamo Tom soy el único superviviente del accidente en el que falleció su padre .

Tras decir eso Tom callo un instante .

Ese accidente cambio mi vida , decidí que tenia que honrar de alguna manera a todas las personas que fallecieron en el avión.

Hace una década que intento ayudar a cumplir los sueños de las personas que fallecieron , soy pobre y esto me costo gran parte de mi vida.

Nuevamente callo un instante

Me gustaría hacer algo que honrara la muerte de su padre ya que seguramente el mereciera vivir mucho mas que yo .

Tímidamente le dio una tarjeta con un numero de móvil .

Entiendo que esta situación es rara pero si recuerda algo que su padre hubiera deseado agradecería que me lo contara

Alice lo mira extrañada, sin saber muy qué decir. Parece comprender las cosas muy lentamente. No atina casi a hablar y cuando Tom le tiende el teléfono casi no atina a cogerla. Se le cae al suelo y se agacha a recogerla, aun tratando de comprender qué quiere decirla aquel hombre extraño al que no concoce de nada.

Cuando, por fin, comprende lo que aquel hombre quiere decirla una mueca de medio dolor aparece en su rostro.

-Bueno... señor... señor..-dice tratando de recordar como dijo que se llamaba-. Mi padre hace diez años casi que murió... no creo que cumplir ahora un sueño suyo sea... sirva de mucho.

Tom puede notar la congoja en la voz de la muchacha. En ese momento llega a casa de la muchacha una chica increíblemente guapa y atractiva. Parece saber por dónde pisa y se nota que le gusta llamar la atención.

-Vaya, hola, Ameli...pasa-le dice Alice con expresión de dulzura y Tom puede notar la admración en su rostro.

Alice deja pasar a la tal Ameli a su casa y vuelve su mirad a Tom.

-Yo... se... se lo agradezco. Seguro que mi apdre le estaría muy agradecido... pero...-no termina la frase, se nota que quiere ser educada y no quiere cerrarle la puerta en las narices.

Nunca es tarde para un sueño señorita!!.

Tras eso Tom se marcho a dar un paseo , sabe por experiencia que estas cosas tienen que rumiarse

-¡Señor...Tom!-grita Alice antes de salir corriendo detrás de él-. Mi padre le estaría muy agradecido, le prometo que lo pensaré... ahora tengo una visita, Ameli-te dice con una sornisa de admiración y le notas que está tremendamente orgullosa de su amiga-. Le llamaré-te promete antes de volver a su casa.

Camina por la calle, y sabe a ciencia cierta que Alice tardará en volver a llamarle. Tiene poco dinero y las fotos guardadas en un bolsillo.

Analiza en su mente a Alice como casi siempre analiza a todos los que le ayudaron a cumplir su cometido. Parece una chica muy dulce y que siente especial admiración por su amiga Ameli. Parecía querer mucho a su padre, pues ¿qué otro motivo lleva a alguien a fiarse así de alguien a quién no conoce?. Sabe que le llamará, pero no sabe exactamente cuánto tardará.

Saca las fotos de su bolsillo. Las otras seis personas que le quedan lo saludan desde la foto sonrientes.

recordo un viejo dado de las vegas que le regalo su hija....

son seis por una vez podria confiar en el azar !

pues sera Michelle el siguiente 

Los pasos le llevan a lo que parec un barrio bastante acaudalado. Se encuentra delante de un chalet de tres plantas. Parecen tener dinero. De nuevo coges la foto d eMichelle y lees lo que pone detrás.

"Michelle Morris. 25 años. Hermana de Alex Morris. Vive con su madre pues su padre se divorció de su madre cuando ella era muy pequeña. Se dice que tiene un carácter extremadamente dulce y cariñoso".

En la foto la chica parece de expresión dulce y de ojos soñadores. Se nota qe sonríe con ganas.

Guarda la foto de nuevo y mira el chalet. Tras la verja puede ver que tienen un perro bastante grande. Parece que tienen bastante dinero y que son la típica familia Londinense.

Tom duda de si llamar o no, en todos estos años ni una sola vez se encargo de 2 personas a la vez pero la cercanía del final de su labor le empujo a llamar.

El perro ladro pero Tom ni se inmuto .

Los animales no atacan mientras no crean que eres un peligro...

Ve como alguien sale de dentro del chalet, parece ella, lo puede jurar por el color rojo intenso de su pelo. Ve como va hacia el perro y lo ata con una correa. Luego, camina hacia la puerta en la que se encuentra Tom.

-No queremos nada, gracias-le dice con un tono increíblemente dulce en la voz, con un tono que casi se puede palpar el azúcar.

Observa que es una chica natural, sin pintar y vestida con un chandal. Sale de la casa con el perro a sus piés.De cerca el perro parece bastante más grande que de lejos y bastante más fiero, pero la expresión dulce de su rostro y los ojitos caídos le hacen tener cara de perro tranquilo a pesar de haber ladrado cuando llamó.

Parece que Michelle se va a hacer footing.

Tom sonrío ante el comentario de la chica.

No soy un vendedor señorita...

Tom calla durante un instante.

Yo estaba en el avión en el que falleció su hermano, es mas fui el único superviviente , ese accidente marco mi camino a seguir en la vida .

Los últimos años los dedique a intentar cumplir los sueños de todas las personas que allí estaban , o por lo menos hacer algo en su nombre.

Nuevamente Tom callo .

Agradeceria una pista de como honrar a su hermano

La apariencia de Tom era la de un hombre cansado , pero sus ojos desprendían la determinación de un hombre con un objetivo

A medida que habla Tom ve como la expresión dulce y cálida del rostro de ella se torna lúgrube y triste. El silencio se espande entre ellos y Tom puede sentir que podría cortarlo con un cuchillo si lo tuviera a mano.

-¿Sabe...Sabe lo raro que suena eso?-le dice con un deje de amargura en su acaramelada voz.

El perro se mantiene sentado a los pies de su dueña.

-Yo... no quiero sonar descortés... siento si le parezco impertinente... pero... mi hermano hace años que murió... y... no entiendo qué conseguiría con honrarle o cumplir su sueño-parece dolida, aún así su tono sigue siendo dulce y amable e incluso llega a sonreírle.

Se queda allí parada sin apartar sus expresivos ojos del rostro de Tom.

Tom miro a la chica con la dulzura de un padre.

Desde el accidente he intentado hacer algo por todos los que alli perecieron y le aseguro que siempre fue util es mi humilde forma de pagarles a todos por ser yo el unico en salir con vida .

tom intento sonreir.

es lo unico que me queda en la vida hacer lo correcto

Tom observa como Michelle lo ira con lástima.

-De verdad, señor... yo se lo agradezco en nombre de mi hermano...-pero algo en su rostro cambia pues parece que de nuevo iba a darle una negativa-. ¿Tiene un teléfono de contacto? Me pondré en contacto con usted, señor...-deja en suspenso, pues Tom no le ha dicho ni su nombre ni su apellido.

Tom puede notar los penetrantes ojos del perro en él y de rebote en Michelle pues aprece que Tom les ha interrumpido el paseo.

Si claro!!!

me llamo tom y este es mi numero de contacto y este mi hotel . dice tom dandole una nota

Tras eso acaricia amablemente al perro

Me marcho comprendo que esto tiene que ser incomodo .

Fue un placer señorita michelle !

Tras eso tom sigue su camino

-Muy incómodo-le reconoce abiertamente con dulzura mientras acaricia la espesa mata de pelo del perro.

Luego alarga la mano y coge la tarjeta que le tiende Tom.

-Estoy segura que Alex le estaría agradecido por la intención. No perderé su número, pero no le garnatizo nada, señor Tom-añade dulcemente y con una voz melodiosa.

Luego le observa alejarse.