Partida Rol por web

En ese momento entra una chica en el aula... Ayer no estaba... Además su cara es... Peculiar... Parece casi una muñeca... Además, hay algo en su forma de moverse que me pone los pelos de punta...

- Acaba de entrar una chica. - Le comento a mi amigo Kyle en un tono de voz bajo. - No estaba ayer en el examen.

La observo un momento, como se sienta alejada de todos los demás.

Sin duda no todos tenemos que ser grandes amigos, de echo estoy seguro que entre nosotros surgirán grandes rivalidades, pero todos estamos en el mismo barco. Creo que sería positivo que se acercara al resto... Aunque ella sabrá... 

Resopla indignada. No había conseguido lo que quería respecto a Damian y Nataly. 

- Disculpa, el descansar es un placer único.- Dice sonriente al escuchar a Damian quejándose de su indispuesta tarde.- Se estira bostezando pero con la sonrisa intacta. - Pues estoy ansiosa por empezar el club. No te preocupes, les haré ver a todas lo interesante -y altamente mujeriego- que eres.- Le dice sacando la lengua. 

- En cuanto lo de matar criaturas... Yo sigo pensando lo mismo. No pienso hacerlo. Pobrecillas.- Responde intentando zanjar el tema de conversación. No le gustaba hablar de ello y mucho menos recordarlo. - Yo ayer me compré habilidades ¿Has ido a la tienda? Ahora puedo adquirir las habilidades de un zorro y un colibrí.  - Se nota el cambio repentino de tema. Pero, la verdad, este era más interesante. 

Un pequeño incidente que ocurrió ayer? Las balas esas le habían dado en mal sitio? No le pregunté nada más, no es que me importara realmente. Me senté algo alejado de la gente, ya que no tenía intenciones ningunas de hacer amigos. Saqué, como siempre hacía que tenía que esperar, mi libro para continuar leyendo.

Ni siquiera me inmuté, ni miré a la chica nueva que había entrado, poco me importaba.  Y me reí cuando escuché al amigo de Kyle falso, seguir con sus descripciones, hasta de las cosas más absurdas, es que le iba a estar contando todo con detalle? me lo imaginaba diciéndole “ahora me he peído en silencio y le he echado la culpa a otro” que pesado, ojalá Kyle falso recuperara la vista pronto…

Frank tras quedarse pensativo unos segundos, se encogió de hombros, sin saber a quién se refería Nick, ya que aparte de Nick, Marcel y él mismo, no había nadie especialmente musculado en su clase.

- No caigo ahora mismo la verdad… ¡Cuando lleguemos a clase me lo señalas! - entonces cayó en que se estaban entreteniendo demasiado y realizó un gesto a todos con la mano - Que hablando del tema, va siendo hora de ir entrando.

Tanto él como Michael, se fueron para adentro.

Damian suspiró

- Es probable que acabemos causando problemas a la gente del club pero… bueno, así será divertido.

Cuando Irania comentó lo de las criaturas la miró durante unos segundos, eso era algo duro y aunque Irania se negase eso podía poner en serio peligro su vida. Pero dejó de lado el tema, decidió continuar con el de la tienda.

- ¿Comprar? Pues no, aún no he ido, había pensado en aprender un poco más y que nos hablen de ellas en clase. Y ¿Qué quiere decir de zorro y colibrí? ¿Cómo funcionan? - Preguntó curioso

Irania y Damian llegaron al edificio donde se impartían las clases y allí en la puerta vieron a Nick, Marcel, Lis y Helen que parecían estar hablando y a Sandra y Nataly llegando también como ellos, aunque algo más cerca.

Pero una voz llamó la atención de todos.

- Venga chicos, hoy tendremos otro interesante día de clase.

Frank y Michael fueron los siguientes en entrar y con un saludo general desde la puerta, se sentaron en el primer lugar que pillaron. Tras ellos, llegaron Nick, Marcel, Lis y Helen, que hicieron más de lo mismo, después Sandra y Nataly y finalmente Irania y Damian, que eran seguidos por el profesor Lyan Zetch que cerró la puerta tras de él.

- Sentaos todos, la clase está a punto de empezar.

Cuando todos se sentaron, comenzó a hablar

- Hoy comenzará la clase de las habilidades. En estas clases trabajareis vuestras habilidades innatas como las habilidades que hayáis comprado en la tienda por lo que si alguien no tiene ninguna habilidad innata y no piensa comprar ninguna, puede irse, pero recomiendo quedarse aunque sea a esta primera clase.

Esperó unos segundos, para ver si alguien dejaba el aula, y luego continuó.

- Hoy he venido personalmente a presentaros a vuestro profesor de esta asignatura ya que es… un poco distinto por decirlo de alguna manera, se trata del profesor Yang. ¡Profesor! - alzó la voz - entre, por favor.

Tras eso, la puerta se abrió y entró una extraña criatura… era humanoide si pero no tenía pelo alguno, su piel era de un gris pálido con un ligero tono verdoso. Esto, su extraño rostro y la cola tenia llamaron la atención de todos los alumnos que se quedaron sorprendidos.

Comenzó a hablar con una áspera voz, que parecía la de un anciano hablando con la nariz taponada.

- Encantado de conoceros alumnos. Yo soy el profesor Yang aunque, podéis llamarme Yang a secas. Por si surgen dudas, no, no soy un ser humano, soy una bestia que surgió igual que el resto pero que gracias a la habilidad de uno de los vuestros, se limpió toda la malicia que había dentro de mí.

Se tomó unos segundos para tomar aliento. Daba la impresión que le costaba un poco hablar.

- Él murió hace tiempo pero, como agradecimiento a limpiar el mal que había dentro de mí, me quedé aquí ayudando y aquí sigo. Agradecería que este año no hubiese ningún intento de asesinato por vuestra parte y que me tratéis como un profesor más. Y ahora, venid conmigo.

Tras lo dicho, salió por la puerta.

Con un gesto hace entender a Damian que después le contestaría a la pregunta. Habían llegado a clase y por lo visto no habían venido muchos alumnos. 

Se coloca al lado de los demás, sin decir ni una palabra para variar. No tenía ganas de hacer amigos, se le notaba a leguas. Asiente a las palabras del profesor y frunce el ceño. La verdad que no sabía en qué clase estaba, solo sabía que tenía que estar en esa clase. No se había mirado el horario y tan solo se había resignado a seguir a su mejor amigo. 

- Tiene cara de amargado... Dudo que supere a la profe de ayer.- Le susurra a Damian, quien se había colocado a su lado, tan bajito que solo la podía escuchar él. 

Poco a poco fueron viniendo más alumnos. Eso no le gustaba a Irani, prefería clases más "intimas". Se sentó sin reprochar -cosa rara en ella, aunque si se trataba de sentarse y vaguear nunca reprochaba- y escuchó al profesor. Pareció ser de las pocas que no se sorprendió al ver su cara y escuchó atentamente sus palabras. Casi quiere lanzarse a aplausos al escuchar la historia del profesor, pero eso ensuciaría su reputación. Mira a Damian con una cara que quiere decir "¿Ves? ¡Te lo dije! No tenemos porque matarlos." 

Soy de las primeras en seguirle con una sonrisa sincera. 

Mientras veo llegar al resto de alumnos, voy susurrando los nombres a mi amigo Kyle.

Al llevar una venda en los ojos, no es capaz de verlos a todos.

- Sentémonos. - Le comento mientras nos acercamos a una de las sillas.

Después de esto, veo que entra uno de los profesores.

- Es el profesor Lyan Zetch. - Le comento al oído, sin embargo, al poco, entra otro profesor. - Este... Te le describiré luego...

Escucho atentamente lo que tiene que decir y me agrada ver que nadie abandona la sala. Parece ser que todos estamos interesados, en mayor o menor medida, en su clase. Por mi parte, su aspecto no supone un problema. Si es profesor aquí, será por algo.

- Tenemos que seguirle.

Cojo a Kyle suavemente por el brazo y le levanto para seguir al profesor. 

La gente fue llegando, pero no atendí ni saludé a nadie, seguí con mi libro hasta que el profesor llegó.

Llegó el profesor Lyan y nos explicó que para esta clase eran necesarias las pastillas de habilidades, suerte que yo las había comprado la tarde anterior, y una clase como esta me vendría genial para aprender a utilizarlas.

Cuando Lyan nos presentó al profesor de Habilidades y este entró por la puerta, tuve que reprimir una cara de asco, disimula kyle, disimula…. Su voz tampoco es que fuera melódica. Dios, las tienes que tener a todas locas, eh?  Una bestia sin malicia? Tampoco es que te pudieras fiar de eso…. Tendría que andarme con cuidado con el profesor deforme. Aunque sentí algo de pena por él con su último comentario, sólo un poco. Habían intentado matarle??? Bueno profesor yang, yo no la haré mientras no me des razones para hacerlo, pero espero que no pretendas que confiemos en ti.

Me levanto de mi sitio y le sigo, cuando así lo pide.

Cuando llegaron, al parecer estaban hablando de Nate. ¡Ella le conocía! Pero ni siquiera tuvo oportunidad de comentar nada porque en seguida les llamaron al orden. Bueno, ya luego hablaría con los demás. No había prisa.

Se sentó con cuidado, lentamente, sin hacer ningún tipo de movimiento brusco, y escuchó atentamente las palabras de los profesores. Debía decir que agradecía tremendamente no tener que moverse para aquella clase. Y además, el profesor... ¡era una bestia! 

Interesante.

Prestó atención, aunque pronto su mente vagó hacia las facciones de aquel ser. 

Es algo feo... no tiene nariz... o sí. Espera... tiene agujeros... uf, es calvo. No me gustan los calvos. Pero qué ojos más pequeños tiene... y qué pedazo de frente. No me gustaría ser una bestia. ¿Ligará este "hombre" con alguien? ¿Y cómo será sin ropa? Es decir... ¿tiene pelo? ¿O será como los gatos egipcios esos? ¿Y dientes? ¿Tiene dientes?

El sonido de las pisadas de los compañeros la sacó de su ensimismamiento, y sin querer se levantó más deprisa de lo que habría querrido. Puso una mueca de dolor, pero pronto se recuperó. Siguió a los demás. Estaban Irania y Nick. Y Eli el de los ojazos azules. Quizás debería disculparse por lo del día anterior... Se acercó a él, sonriendo:

- ¡Hey! Soy Nataly. ¿Me recuerdas? Lamento lo de ayer. Quedaste segundo de milagro. Espero no haberte hecho mucho daño. Además, la profesora no tuvo compasión a pesar de que gané.

Antes de poder seguir nuestras conversación nos llamaron al orden para empezar la siguiente clase. El profesor que la impartía era raro... era... ¿cómo? ¿un monstruo? Estaba claro que cada día iba a ser una sorpresa. 

Pese a que yo no tenía ninguna habilidad innata me quedé a la clase. Sentía curiosidad por ver o saber las habildiades de mis compañeros y sobre todo la de Marcel. Nunca estaba de más saber de qué estaba rodeado. 

Quizá al acabar vaya a ver si el Dojo está abierto. O a mirar alguna habilidad.

Mientras seguimos al profesor, Nataly, la chica que ganó la prueba de ayer, se acerca disculparse.

- No tienes que lamentar nada.

La contesto con una ligera sonrisa.

- Solo era un ejercicio.

Parece una chica simpática y, aunque yo no haría lo que ella hizo, no la guardo rencor. Todos estamos en el mismo barco, de manera que tenemos que remar en la misma dirección.

Todos siguieron al profesor y llegaron a lo que parecía un laboratorio, era una de las aulas cerradas para la cual sacó la llave antes de entrar. El laboratorio era un lugar oscuro y sin ventanas, con luces verdes y algo tenues iluminando distintos puntos del lugar y llena de monitores y aparatos electrónicos, además, era muy grande.

Todos entraron, incluidos el profesor Lyan, que parecía que iba a estar de acompañante, aunque se mantenía atrás, simplemente observando y tras entrar todos cerró la puerta.

El profesor Yang comenzó a hablar

- Este es mi laboratorio y aquí impartiré mis clases sobre las habilidades especiales. Empezaremos por hablar por encima de todas ellas.

Se recuperó un poco de hablar, le costaba y tras varas palabras tenía que parar, haciéndolo todo un tanto más lento.

- La mayoría de las habilidades se pueden clasificar en función su funcionalidad, aunque hay algunas que por sus características únicas se salen de esta clasificación. Primero empezaremos hablando por las más comunes, las habilidades potenciadoras. Son las más fáciles de usar y de dominar y se dividen en dos tipos, las puras y las hibridas. Con las puras potenciáis directamente algún rasgo vuestro, como por ejemplo la fuerza para usar directamente la habilidad como si de un arma se tratase o por ejemplo vuestra potencia mental, para aumentar la fuerza de otras habilidades, y luego tenemos las hibridas, con las cuales el portador adquiere rasgos de algún animal, aplicados a un tamaño humano. Solo entre las habilidades potenciadoras hay una gran lista.

Continuaba haciendo descansos al hablar… haciendo la clase algo lenta. Pero quizá se compensaba con el hecho de que estaba dando una información bastante útil.

- Además, ambas tienen cada una un rasgo especial. Las habilidades puras, a parte de su uso típico, existe una forma especial de usarla y es tan simple como concentrarse en una parte del cuerpo al usarlas, aunque obviamente solo sirve con las que potencian alguna capacidad física. Al hacer esto, solo se activa la habilidad en esa parte del cuerpo y a cambio se puede potenciar de una u otra forma la habilidad. Por ejemplo, si usamos súper fuerza en un solo  brazo o súper agilidad solo en las piernas, a cambio, la duración de la habilidad será mayor, mientras que si usamos súper regeneración concentrándonos en una herida en concreto, obtendremos unos beneficios mayores y más rápidos que usándola de forma convencional.

Aunque se le notaba cansado de hablar, no bajaba el tono ni el ritmo, aunque continuaba parando unos segundos cada una o dos frases.

- Por otro lado las hibridas se podría decir que son "únicas" en cada persona. La misma habilidad en dos personas distintas puede reflejarse de manera muy distintas pues el punto de vista que tiene la persona sobre el animal afecta mucho a la forma resultante. Además, cuanto más se familiariza una persona con un animal ya sea pasando mucho tiempo en forma híbrida y/o teniendo un animal de esa raza como mascota, se ha demostrado que puede llegar a aumentar a más del doble el tiempo que esa persona puede mantener la transformación y en los casos más raros, una misma persona ha desarrollado varias formas de un mismo animal simplemente se concentraba en una de ellas al tomar la pastilla.

Esta vez había usado frases algo más largas, así que sus pausas eran algo mayores.

- Ahora quiero dos voluntarios, con los cuales vamos a hacer una exposición de habilidades potenciadoras. Todo aquel interesado en ser voluntario que escriba en un papel una capacidad física que quisiera aumentar y el nombre de tres animales. Tened en cuenta que aunque tenemos mucha variedad de animales, hay otros muchos que no, así que escribid estos tres animales en orden de prioridad.

Irani mira a Damian y le sonríe mientras le da un codazo y ladedea la cabeza para pedirle a su amigo que escuchara. Con esa súper explicación no le haría falta contar más sobre sus habilidades. Levanta la mano apresuradamente en cuanto el profesor pide voluntarios y, rápidamente, comienza a escribir el orden de preferencia en un papel, esperando que nadie la mirara y asegurándose de ello tapándola con la mano. De los presentes el único que sabía q habilidades tenía era Kyle y Damian. Ya se veía con desventaja por ello.

Iba detrás de la ganadora de la prueba de ayer y del pesado que no dejaba de describirle al Kyle falso, todo. Y fue entonces cuando escuché que el pesado había sido el segundo ganador. El tal Eli? Ah! Entonces él era Eli! No solía interesarme por saber los nombres de nadie, a excepción del Kyle falso, por razones obvias. Que venciera Nataly ya lo había supuesto, porque había empezado con ventaja, al igual que Irania, pero lo de Eli tenía más mérito, hasta dónde yo sabía, él había empezado como todos.

Antes de llegar al sitio y prestarle atención a fétido, pasé por delante de Damian. Me debes 20 créditos! Le recordé con una sonrisa. Ya que aunque eran sólo 20 créditos, eran mis 20 créditos!!! Había ganado Nataly como yo había apostado!  

Llegamos al laboratorio de Frankenstein, un lugar cerrado y oscuro, y ahora era cuando nos encerraban a todos allí y nos descuartizaba. 

Por suerte para nosotros, éramos demasiados y decidió dar la clase, explicándonos lo de las habilidades, a su paso lento y parando cada pocas palabras, era como si le costara hablar, como a Frankenstein!

Pidió voluntarios y aunque me interesa probar ese tipo de habilidades, decidí mantenerme al margen, sería mucho más productivo observar como iba para los demás.

Una vez llegamos a la nueva clase, nos sentamos.

El peculiar profesor comienza con su explicación, momento en que saco una pequeña libreta de uno de mis bolsillos y comienzo a apuntar todo aquello que sea relevante. 

Por ahora, con mi poder Innato tengo suficiente, pero siempre está bien aprender cosas nuevas. Aunque, por ahora, no me quería prestar voluntario para algo así. 

La explicación era bastante similar a la que me habían dado en el Club pero aún así presté atención por si me aportaba algo nuevo sobre aquel extenso tema.

Cuando pidió un par de voluntarios me quedé en mi sitio pues al no tener ninguna habilidad innata ni haber comprado ninguna aún no tenía sentido que me presentara. 

Fancis, John, Eli, Kyle, Jennifer, Jessica, Rod, Frank, Alexis, Helen, Michael, Lis, Marcel, Nick, Nataly, Sandra, Kyle, Jade, Irania, Damian y Astrid eran los alumnos que habían asistido ese día a clase.

En princio, Irania fue de las primeras en presentarse como voluntaria, seguida de Frank, de John, de Alexis, Marcel, Nataly, Francis y Michael, aunque poco después Astrid también se ofreció como voluntaria.

El profesor Yang los miró a todos y ¿sonrió?

- Sois muchos voluntarios por lo que… cambiaré las reglas y seréis cuatro.

Miró a los voluntarios y comenzó a señalar. Primero a Irania y a Frank, que habían sido los primeros y casi sin pensarlo. Continuó ojeando y seleccionó a Nataly y finalmente a Astrid, que parecía desinteresada y se había ofrecido en el último momento.

- Vosotros seréis los cuatro participantes. Será simple, un combate a muerte y gana el que sobreviva.

Esperó unos segundos antes de continuar hablando, le gustaba ver la cara de los estudiantes de primero cuando decía esto por primera vez. Tras ese tiempo se acercó a una mesa y pulsó uno interruptores que encendieron varias luces, que iluminaron cuatro grandes butacas rodeadas de aparatos eléctricos y una especie de casco con cables arriba, que parecía sacado de una película de ciencia ficción y una gran pantalla dividida en cuatro partes.

- Pero lo haremos de modo seguro, combinando el poder de la tecnología y el de un antiguo alumno que ahora trabaja aquí, se ha creado esta máquina, con la cual al sentaros ahí podréis "entrar" en una especie de… juego virtual muy realista.

Volvió a parar de hablar y recuperó el aliento de nuevo.

- Sin moveros de aquí os veréis transportados a otro lugar y allí podéis luchar e incluso morir sin sufrir daños reales… aunque mientras estéis sentiréis dolor, calor y esas cosas.

Tras eso, los invitó a sentarse a cada uno en un sofá.