Partida Rol por web

Apreciando ambos artilugios; es sin duda, el hacha pequeña, lo que más seguridad parece que me transmite; aún así no cojo ninguna de las dos opciones, dejándolas sobre la mesa para hacerme con ellas antes de que salgamos de la carbonera...

Mientras, bastante cerca de mi posición, Sydney permanece en el suelo traqueteando una de las baldosas del sótano; al parecer, su estado es algo extraño por lo que con la ayuda de Jack tratan de averiguar si es sólo una baldosa vieja o quizás... no quiero pensarlo pero quizás...; no sé, ese corazón...; no quiero pensarlo.

A pesar de ser inevitable el mantenerse allí, mirando al pequeño recuadro del suelo, la pregunta que hace Harvey a Jamison, provoca que mis ojos se dirijan directamente al ya, cada vez más, misterioso mayordomo de la casa...

- ¿Tallar objetos metálicos? Pues ya podía haberse dedicado a algo más útil y mejor remunerado, unos se pasa toda la vida trabajando y los demás se dedican ... a tallar objetos metálicos. Si por lo menos hubiese usado algún material noble quizá hasta se podrían vender porque el cobre tampoco es que sea muy valioso ...

La visión de la caja hace que su hilo argumental mental se corte en seco.

- Si contiene algo valioso podríamos repartirlo entre cuatro y no entre siete ...

Evidentemente, sus hilos mentales siguen progresando de la manera habitual.

¿Os importa?, dice Jack agachándose ya a recoger la pequeña caja metálica. La preguna ha sido meramente por cortesía, porque, sin esperar respuesta alguna, la observa detenidamente, desata la cuerda e intenta desvelar los misterios que pueda esconder, levantando su tapa a la vista de todos.

El estado de la caja y la poca antiguedad de la cuerda hicieron sospechar a Sydney que, lo que estuviera oculto allí no llevaba demasiado tiempo y, visto el lugar que probablemente fuera valioso Pero a quien se le ocurre esconder algo en este sótano. Si lo descubrí fue casi por casualidad.

Al ver como su "joven" primo intentaba tomar la caja que el ha descubierto, lo deja hacer, sin embargo le dice, mientras lo mira a los ojos - Tranquilo, primo, tranquilo. Todos queremos saber que contiene... pero no pienso averiguarlo de rodillas en en este "agradable lugar". Podrías, por lo menos, dejar que me pare? -

Ya de pie, sacó del bolsillo de su cazadora el cuchillo que había tomado en la cocina. - Bueno, intentarás desatarla? o quieres que directamente la corte? -

- ¿Os importa? - dice Jack, cogiendo la caja metálica. Mientras intenta desatar la cuerda, Sydney le pasa el cuchillo y Jack la corta al fin.

Jack coloca la caja a la vista de todos y, bajo la atenta mirada del resto y bajo la luz del quinqué, la abre.

El color de los billetes es inconfundible, y es lo primero que los primos procesan. En la caja, cinco gruesos fajos de billetes de $100 esperan, cuidadosamente colocados. Están nuevos, y claramente llevan ahí poco tiempo.

Los primos se miran con incomprensión. ¿Qué significa esto? ¿Quién escondería estos billetes bajo el suelo del sótano? ¿Y con qué motivo? Y, lo más importante: ¿a quién le importa?

Jamison contempla los billetes y luego a los familiares con cara de incomprensión. Parece tan sorprendido como ellos.

Harvey sondea el terreno

- Vaya, eso repartido entre 7 es mucho dinero ... y repartido entre 4 es una verdadera fortuna.

Mira a los demás tratando de averiguar que están pensando hacer al respecto.

Ante la presencia de los cinco "ladrillos" de dinero, los ojos de Sydney se encendieron Con eso yo podría... Infinidad de posibilidades se cruzaron por la mente del médico mientras analizaba las implicancias del ofrecimiento del abogado.

Nadie sabe que lo encontramos y... quien nos lo reclamaría? aunque quizás... La idea surgió en su cabeza y, tras unas dudas decidió expresarla en voz alta - No será por esto que mataron al abogado? Quizás quedarnos con este dinero sea peligroso.

En realidad, más allá del peligro Sydney estaba decidido. La herencia era algo que vendría después, pero el efectivo "libre de impuestos" que estaba delante de el le podría servir de adelanto.

Los problemas son dos. Como callarlo a Jamieson y si el resto acepta que no le avisemos a nuestroas "queridos primos". El abogado seguro que está dispuesto a mantener el silencio y nuestro amigo tenista... supongo que también, pero Jack...es demasiado idealista quizás... - Supongo que esto no está incluido en la herencia y pertenece a quien lo encuentre... somos cinco - El viejo jamieson me adorará de por vida, pero es mejor que sea una parte para el y no tres para los zánganos que quedaron en la biblioteca. Lo único que falta es que les cuente... - Supongo que aquellos que no tengan miedo de quien lo haya escondido aquí deberían quedárselo -

Veremos que dicen los demás... aceptarán?

Mientras las posibilidades pasan por las cabezas de todos, contais el dinero (todas las miradas fijas en las manos del resto, para que nada desaparezca): el total sobrepasa las primeras espectativas de Sydney.

En cada fajo contais 150 billetes de $100. En total, $75.000. No es ni siquiera una de las partes que os correspondería a uno sólo por la herencia, pero, sin duda, es un importantísimo pellizco "libre de impuestos", como han pensado algunos Duncan.

Quedan en el aire muchos interrogantes. ¿Quién ha podido esconder esto aquí? Es algo reciente ¿Y por qué? ¿Con qué fin? No teneis respuestas todavía, pero teneis un largo fin de semana por delante, y quizá podais encontrarlas.

Harvey está pensando la mejor manera de conseguir un buen pellizco de la manera más discreta posible.

- ¿Qué os parece si nos quedamos con un fajo cada uno de nosotros 4 y del 5º fajo le damos la mitad a Jamison y dejamos la otra mitad dentro de la caja? Así podríamos volver arriba con la caja y hacer como que no la hemos abierto aún, una parte del dinero se quedaría dentro con lo que tampoco estaríamos ocultando toda la información a nuestros queridos parientes, e incluso puede que esa parte tambien nos la repartiésemos más adelante.

- Y luego más adelante quizá podamos hacer un nuevo reparto más justo y equitativo con la valía de cada uno ...

- Es una posibilidad... podría ser - El medico asintió con su cabeza, sin negar la alternativa que le proponía Harvey, pero sin querer comprometerse hasta ver como reaccionaba el resto de los presentes.

Mi mente, totalmente desencajada, ya no por la cantidad de dinero sino por la sucesión de situaciones extrañas que se están dando en tan poco tiempo, queda perpleja tratando de conseguir dilatar algo más sus arterias para hacer llegar cantidades más elevadas de O2 al cerebro...

Los setecientos cincuenta billetes de cien, totalmente ordenados dentro de la caja, me hacen pensar en lo fácil que puede ser hacerme con un buen botín; es como ganar un Wimblendom pero sin sudar... ¿y morir?.... Escucho y observo con atención cada movimiento y palabra que emiten mis familiares. Se nota que somos de la misma raíz; todos deseamos lo mismo al precio que sea... La mentira.Así, de este modo, trato de pronunciarme en medio del improvisado botín; creo que la idea de Harvey es tentadora pero también arriesgada.Mantengo una respiración prolongada y corremos el riesgo de que la astuta Fiona y el desconfiado Jeffery se hagan con información de más; pero por otro lado... Venga Peter hazte con ese botín...En fin, supongo que sí, será una buena idea; pero necesitamos contar con la confianza de Jamison.A la vez que me giro para hacerle entender con una mirada que no están las cosas para imprevistos.

Quizás, a partir de ahora seamos parte de las desgracias que se "sigan" produciendo; ó quizás, no existan tantos muertos en la casa como se aparenta...los pensamientos retumban en el interior de Peter.

Harvey empieza a sonreir inconscientemente.

- Bien, bien.

Jack observa en silencio el dinero y escucha atentamente los razonamientos de sus primos. Parece que la cosa es unánime y que hasta incluso el bueno de Jamison puede estar de acuerdo en repartir el dinero.

vale... digamos que esto no es correcto... pero... ¿quién va a enterarse?, además, al fin y al cabo lo hemos encontrado nosotros, ¿no?... y con este dinero, si la cosa se pone fea y tenemos que salir de la casa precipitadamente, ya me da para cubrir algún gasto...

Jack mira a sus primos y les hace esperar su respuesta un poco más, en silencio, con aspecto pensativo pero con las cosa bien claras.

- No digamos nada a nadie, guardemos la caja vacía donde la encontramos y repartámonos el dinero ahora a partes iguales. Nadie más va a bajar aquí y nadie sospecha que podamos haber encontrado algo.

- ¿Todos de acuerdo?, dice finalmente Jack, buscando finalizar cuanto antes con el asunto y no despertar sospechas por su tardanza.

- Vaya con el idealista de los cojones. ¡Tiene madera de lider político!

- Por mi encantado.

Vaya que sorpresa el político no es tán "honesto" como da a entender. Ja!. Muchos principios pero al final somos todos iguales. Sydney toma uno de los fajos y lo guarda cuidadosamente en su cazadora. - Bueno, no hay problema - murmura complacido por la situación.

Su humor ha cambiado. La repentina fortuna que lleva en su bolsillo lo ha hecho olvidar, por un momento, el riesgo que conlleva permanecer en la casa.- Pero supongo que deberemos salir a buscar pistas en el exterior - Quien sabe si no encontramos alguna otra agradable sorpresa se plantea para sus adentros mientras se frota las manos a la espera de otro "obsequio". - Guardemos la caja en su escondite y vamos a ver que nos encontramos afuera -

Harvey toma uno de los fajos y se lo guarda en el bolsillo interior de su abrigo sin hacer ningún comentario, pero al hacerlo se fija discretamente en que no sean billetes reales únicamente el primero y el último billete del fajo, que sean reales todos (pero tampoco se pone uno por uno, claro).

- El cenador sería una opción fácil para revisar antes de comer, y de paso me gustaría echarle un vistazo a la puerta de la carbonera por la parte exterior, a ver si se podría abrir por la fuerza aun pese a nuestras precauciones.

La situación no agradaba nada al anglosajón, en un momento de debilidad por la ingesta de sus “tranquilizantes” se había quedado parcialmente indispuesto como para acometer la investigación de la carbonera. El no la recordaba nada amenazante, quitando la posibilidad de mancharse de pies a cabeza de negro carbón, y hubiera sido bueno acompañar a sus “apreciados” primos para escrutar el lugar. Poniéndose de pie se da cuenta del aspecto reinante de la sala y le envuelve en un halo de una sorpresa hiriente.

Me han dejado aquí… con… con… “las mujeres”… a mi, que tuve valor y compostura cuando ninguno pudo con la situación… a mi, que aborde el problema con profesionalidad detectivesca antes que ninguno, divaga la azarosa mente del lord, aunque su conclusión es algo ruda …quizás debería cambiar mi enfoque y rebajarme al repugnante estilo americano que tanto abunda en esta casa…no creo que mi difunto padre me lo perdonara.

Jefferey , al fin, se levanta y alza su aristocrática figura dirigiéndose a la salida mientras dirige unas palabras a sus primas.

Creo que podréis cuidaros solas, he demorada demasiado mi presencia en la carbonera y seguro que seré muy útil allí comenta soberbiamente si tenéis algún problema alzar la voz y acudiremos en vuestra ayuda queridas… finaliza seriamente mientras desaparece atravesando la puerta.

Arpías aunque gritéis quizás me haga el duro de odió… piensa imaginándose una grotesca escena felizmente.

El rumbo de sus pasos le va llevando hacia la cocina donde descenderá hasta el sótano para luego introducirse en la carbonera. En el transcurso del pequeño viaje hace acopio de algún candil aunque baja su potencia al mínimo, siendo muy tenue la luz, no quiere interrumpir la seguro exhaustiva investigación de sus primos.

Es más, cuando empiece a descender las escaleras iré apagando progresivamente la luz hasta que esta se haga ascuas, la sorpresa de una ayuda seguro necesaria los alegrara ¿no? planea divertido durante el trayecto.