Partida Rol por web

En cuanto Jaden me acerca el teléfono, se lo arrebaté casi con desesperación. No tenía tiempo para decirle que posiblemente su teléfono acabaría inservible, al menos, hasta que tuviera tiempo para repararlo y devolverlo a su estado normal.

Mi mente estudió al enemigo que teníamos delante a toda velocidad: drones de combate. Todo dron necesita de un control, una baliza, algo que le ordene cómo moverse y a dónde. La distancia promedio que puede separar al dron de su controlador puede variar, pero estaba segura de que no podía andar lejos, y que podía sustituir a su actual controlador para hacerme yo con el mando. Al hacerlo desde un móvil le dejaría algunas funciones inoperativas, pero lo importante era neutralizarlo.

Los teléfonos disponen de varios tipos de conectividad: wifi, bluetooth… modificar el espectro de esa conectividad para sustituir en la que estaban sintonizados dron y controlador no me podía resultar muy complejo. Mi objetivo sería el dron volador, que en el momento en el que frotaba mis dedos de forma frenética en la pantalla, atacaba a Jaden.

 - ¡Jaden! -grité al verle caer.

  No había tardado mucho en reconfigurar el teléfono. Ahora tocaba saber si había conseguido dar con la red en la que operaba el dron aéreo. 

Conforme tecleas en el móvil el dron empieza a emitir pitidos y a volar de forma confusa. Unos pocos comandos más lo detienen en el aire frente a ti y sus visores empiezan a parpadear freneticamente.

En el móvil ves como los datos pasan a una velocidad de vertigo hasta pararse en una simple pantalla en negro lista para que introduzcas ordenes para el dron. Por ahora parece que es tuyo.

No me lo he tomado a mal tranquila, el dron actua como tuyo en tu siguiente turno (comos si fuese droidcat) y en el del dron haré tiradas en oculto cuando intente librarse de tu control.

De improviso el dron volador empieza a disparar y para mi mala suerte yo soy el objetivo. El corazon se me acelera a mil por hora, mi adrenalina se dispara por los aires y por unos segundos veo a camara lenta los disparos. -Sobrevivir ¿eh?-  pienso con un fiera sonrisa al entender lo que habia dicho el director. Desenfundo la espda que mi padre insistio que llevase, no pensaba necesitarla tan pronto, desvio algunos proyectiles pero no soy lo suficientemente rapido. -Mierda- pienso al no poder detener uno de disparos. El impacto hace que pierda el aliento, trastibillo y caigo al suelo, quedando aturdido. La cabeza me da vueltas, oigo como de lejos a Ersebeth gritando. Trato de incorporarme, paso mi mano por donde habia caido el proyectil, no habia sangre. No lo entendia, era obvio que me habian dado. Como puedo me pongo otra vez de pie y sacudo la cabeza con fuerza recuperando un poco el aliento. Ya algo despejado veo como los otros drones se acercan. Corro zigzagueando hacia adelante, esquivando los disparos, si me mantenia en movimiento era menos probable que volvieran a darme. Salto y resbalo debajo de uno de los robots mas grandes quedando en su punto ciego. Detras de el me cubro de los otros drones. Con espada en mano, busco la parte donde hay menos armadura e intento atacar, sin embargo aun sigo aturdido, me mareo por unos instantes por lo que mis piernas fallan y provoca que hinque una rodilla en el suelo.

Mientras Jaden se posiciona debajo de uno de los drones intentando cubrirse Regulus se lanza con ferocidad animal sobre el otro intentando destrozar su coraza frontal.

Sus afiladas garras consiguen destrozar el recubrimiento exterior del dron, aunque no llega a arrancarlo totalmente los daños son claramente visibles y no parece que la armadura del dron vaya a resistir mucho más.

Mientras el metamórfico se ensaña con su enemigo el otro dron gira sobre si mismo y encara a Jaden, en apenas un segundo levanta su brazo mecánico y se lo baja con fuerza sobre el chico. Pero Jaden está preparado y se aparta justo cuando el dron descargar su golpe que impacta con fuerza contra el suelo.

A la vez el dron que está siendo atacado por Regulus reacciona y se quita al chico de encima, cogiendolo con un brazo y lanzandolo con fuerza contra el suelo. El chico reacciona rápido y evita la mayor parte del golpe rodando al tocar el suelo sin recibir apenas daños.

El Dron no puede parar la lluvia de golpes de Malcom y cae al suelo con su recubrimiento exterior visiblemente dañado. No parece que se haya desprendido ninguna pieza pero los daños son evidentes. El dron no tarda en levantarse y prepararse para atacar al objetivo más cercano.

Jaden y el otro chico respondieron al ataque de los drones con ferocidad. No les perdía de vista, ni a ellos ni a los robots, levantando la vista a menudo del teléfono mientras tecleaba las órdenes frenéticamente. Droidcat se abrazó a mi pierna.

Ordené al robot volador que atacase al dron que estaba enfrascado con Jaden, disparándole con todo lo que tuviera. El procesamiento del teléfono no era lo mejor para este tipo de situaciones, así que no podía saber cuánto tiempo podría mantener al dron controlado antes de que quién estuviera detrás de él modificase la señal para recuperar su robot. Así que, para evitar riesgos y eliminar una amenaza más, decidí darle una orden kamikaze: después de disparar desde su posición, le mandé estrellarse contra el dron al que se enfrentaba el chico de las garras. ¿Quién sabe? Quizás del choque podría acabar con dos pájaros de un tiro...

Su golpe solamente me provocó unas magulladuras, que apenas sentí con la adrenalina del momento. Malcom se acerca para golpearlo y le hace un daño considerable. Bien, este chico es fuerte! Pensé.

En ese momento el dron se elevo de nuevo y arremetió contra Malcom, por lo que enfurecida grité: Hey! estabas peleando conmigo! hacia el drone, mientras cerraba mi puño para golpearlo nuevamente.

El fuerte golpe de Natjinka lanza al dron volador contra la pared, detrás de uno de los drones terrestres, cuando vuelve a despegar veis que se mueve de forma errática, ese golpe le ha hecho bastante daño.

La chica del pelo azulado te responde gritando. -¡Yo soy María! ¡Pero dejemos las presentaciones para luego!- luego se lleva la mano al bolsillo y saca lo que parece una pastilla roja.- No quería usar esto tan pronto.- susurra para sí antes de tragarse la pastilla y llevarse las manos a la boca.

Veis como su estómago y su garganta adquieren un brillo anaranjado y la chica se quita la mano de la boca para soplar de nuevo contra el dron más cercano a ella. Pero de su boca no surge una rafaga de viento como antes sino una poderosa llamarada que cubre gran parte de la sala golpeando al dron volador y al terrestre cercano a él.

Cuando las llamas se dispersan los drones vuelven a quedar a la vista. El terrestre parece haber resistido las llamas en gran medida pero el volador está claramente dañado. Apenas se mantiene en el aire y las chispas que suelta ya son claramente visibles.

-¡Sonya acaba con él!- grita María a la otra chica. Esta asiente sutilmente antes de lanzar su pelo contra el dron. El cabello agarra con fuerza al robot y lo estampa con fuerza contra el suelo convirtiendolo en un amasijo de metal y cables.

Los otros dos drones no parecen inmutarse de la caida de su compañero y siguen atacando.

El primer dron ataca a María, la chica más cercana a él. La golpea fuertemente con su puño lanzandola por los aires hasta que cae rodando al lado de la pared.

El segundo dron, que sigue posicionado al lado de Sonya, ataca de nuevo a la chica. Distraida atacando al dron volador no ve venir el golpe y acaba en el suelo junto a 

Así no está funcionando, no del todo... Paso de los drones y tomo posición entre estos y Sonya y María. Dejadles actuar primero, yo me encargaré de detener sus ataques y así ustedes dos se encargan de hacerles daño. Me preparo para interceptar las arremetidas de los drones y evitar que hagan daño a María y Sonya.

El dron volador dispara numerosas ráfagas contra el dron que estaba atacando a Jaden provocandole diversas abolladuras en su coraza, al percibir estos impactos el dron se da la vuelta hacía su agresor que se dirige a yoda velocidad contra el tercer dron.

La embestida es suficientemente fuerte como para derrumbar al gran robot que Regulus estaba atacando. El dron volador no ha salido mejor parado, cae a un lado de la sala con sus motores inutilizados. Solo los cañones parece que esten en pleno funcionamiento.