Partida Rol por web

Ella, La Reina.

Parte I - El pueblo de Atwater

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18/04/2018, 17:11
Director

En el valle del Nentir el pueblo de Atwater está ubicado al sur del mapa, en la periferia occidental del Bosque Harken junto a la ribera del río Blanco, el Camino Real donde se sitúa es una de las principales carreteras del valle y hace de este punto un camino obligado para el paso de las caravanas y otros viajeros.

Población: Alrededor de unas 350 personas viven en el pueblo de Atwater. La población está formada básicamente por humanos, aunque hay una minoría de medianos debido a los campamentos cercanos de las riberas del río Blanco. Los elfos también son una raza común en el pueblo, debido a lo cerca que están los territorios del clan élfico de los Cantores forestales. Miembros de otras razas son más bien raros, normalmente llegando al pueblo como viajeros, sea como integrantes de las caravanas mercantes o de grupos de peregrinos o mercenarios.

Gobierno: No existe ningún terrateniente o noble que gobierne Atwater, y el barón del Bosque de Harken poca influencia ejerce en un pueblo tan alejado de sus dominios. Los ancianos normalmente son respetados y se les busca pare pedir consejo, solucionar asuntos del pueblo o para que hagan de intermediarios en rencillas locales.

Defensa: No hay. El pueblo y el bosque colindante están libres de monstruos y bandidos gracias a la influencia de Ella.
Durante la invasión de los orcos de clan de las Lanzas sangrientas, hace cien años, Atwater fue uno de los pocos lugares que fue totalmente ignorado por la horda; pero no sabeis muy bien por qué...

Dioses: En Atwater se rinde culto a Melora para mantener a raya a los seres de los bosques, a Bahamut por protección y a Pelor para las buenas cosechas. Algunos incluyen en sus plegarias a Avandra, la siempre popular diosa de la suerte. Además los rumores que os han llegado dicen que se venera a una diosa única de este lugar.

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Los Grifos Blancos

Actualmente formáis parte de la Compañía de los Grifos Blancos, un pequeño grupo de aventureros que pertenece al gremio de mercenarios de la ciudad de Fallcrest, ubicada en las tierras centrales del valle. Os encontráis en este momento en el viaje de regreso a casa, luego de haber terminado vuestra última misión. Esta consistió en escoltar a un mercader hasta la ciudad de Albridge, ubicada en la región nororiental del Bosque de Harken. Mientras estuvisteis en Albridge, el lord regente de aquella ciudad os encargó una nueva misión, que consiste en llevar unos documentos importantes al lord regente de Fallcrest. La recompensa por entregar los documentos les será otorgada una vez regresen a dicha ciudad.

El Camino Real, la ruta más rápida de regreso a Fallcrest, pasa también por Atwater, haciendo que el paso por el pueblo sea algo obligatorio. Debido a las inclementes lluvias que han estado azotando la región desde los últimos meses, la Compañía se ve forzada a detener su viaje en plena noche y buscar un lugar donde refugiarse de la tormenta. 

1. La posada de Corby

A lo lejos podéis divisar la chimenea humeante de una gran casa. Tiene esos aires de casona que suele poseer la virtud de pertenecer a fondas, posadas y refugios para viajeros. La fina lluvia cae desde hace rato, empapándoos lentamente pero con una efectividad que os tiene calados hasta los huesos. Al lado del caserón, a medida que os acercáis, podéis ver una alta torre de reciente construcción con una única puerta de hierro.

La zona, aunque resulta encantadora, muestra una particularidad algo extraña. En vuestro camino hacia el núcleo de la población vais pasando junto a algunas granjas desperdigadas, y os dais cuenta de que algunos campos son extremadamente fértiles, con hermosas cosechas y algunas vacas y ovejas gordas y sanas. Mientras que las tierras de otras granjas en cambio poseen campos pobres y descuidados, repletos de plantas raquíticas o enfermas, donde la tierra parece incapaz de entregar ningún fruto que merezca la pena. En algunas de éstas últimas, veis algunas vacas escuálidas y otros escasos animales prácticamente en los huesos.

A un lado del camino, justo cerca de la entrada a la villa, podéis ver el cartel con la imagen de una jarra en la primera casa que se encuentra en los límites de la pequeña comunidad. Parece un lugar perfecto para descansar y recobrar fuerzas por el largo camino. 

Notas de juego

Todo el grupo hace una tirada por Percepción.

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19/04/2018, 13:39
Celingadir Dulranlan
Sólo para el director

No hacía más que unas pocas horas que había llegado al pueblo y ya se había instalado en una no muy espléndida posada. El ambiente estaba enrarecido la gente apesadumbrada caminaba cabizbaja por las calles apenas hablaba y bajaban la mirada cuando sus ojos se cruzaban con los del elfo. Celingadi gustaba de la compañía del pueblo y en especial de la sonrisa y la ingenuidad de los niños de todas las razas, pero la gente en aquel lugar parecía no reaccionar ante su presencia como él estaba acostumbrado.

Tras dejar la mayoría de sus cosas en la habitación de huéspedes bajo las chirriantes escaleras de madera de abeto hacia el salón común de la posada donde se reunían pequeños grupos de parroquianos, mercaderes y viajantes sentados alrededor de algunas  mesas bajas de madera desgastada y grasientas por el paso de los años y el uso. Camino lentamente observando a la gente y dejándose ver hasta ocupar un lugar en el suelo junto al fuego desde el que podía contemplar casi toda la estancia. De entre los pliegues de sus túnica azul con bordados dorados sacó un libro de tapas forradas en seda color burdeos, con letras  y  filigranas de plata, lo abrió por una página al azar y ojeo unos segundos el texto pasando páginas  a delante y atrás como buscando algo en concreto. Al fin se paró en una historia que  llamó su atención su  y al calor de la lumbre sentado en el suelo con su túnica enrollada sirviéndole de manta comenzó a leer con voz firme pero no muy alta, en un tomo muchas veces practicado y estudiado, el justo para llamar la atención de los asistentes, pero sin llegar a molestar. 

“En una pequeña choza en las montañas vivía un pastor que no tenía por compañía más que su rebaño de ovejas y un viejo y peludo perro que le  acompañado toda su vida pero que ahora apenas si podía moverse dada su vejez y el peso de su pelambrera…”

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19/04/2018, 18:12
Feanor Neya

Una posada… por fin tras tan largo viaje eso es justo lo que necesito, el olor de la cocina, la bebida y las multitudes contentas me recuerdan a mis viajes y a todo lo que he conocido, vaya que la aventura tiene sus recompensas. 

Atwater… no recuerdo haber pasado alguna vez por este pueblo es una vista curiosa debo decir, en su mayor parte se ve tranquilo con un cierto encanto, me intriga un poco la división tan marcada entre algunos cultivos y otros, pero eso no es importante ahora, lo importante ahora es descansar un poco.

Compañeros este se ve como un buen lugar para calentarnos y descansar, ¿quién me sigue?

- Tiradas (1)

Notas de juego

Soy un mitad elfo, visto ropa fina, chaqueta y pantalones marrones, camisa azul con un pañuelo en mi bolsillo. Mi forma de hablar no es de ninguna manera creída sino mas bien cordial. 

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20/04/2018, 00:15
Kaysa Gundarson
- Tiradas (1)

Notas de juego

Dejo hecha la tirada y mañana hago el post. Por cierto, deberíamos decidir quién lleva los documentos.

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20/04/2018, 03:01
Behar Qen

-Yo te sigo amigo chef, mi espalda grita por un buen lugar donde dormir-
Estiró los músculos de la espalda con la ayuda de mis manos y se logra escuchar un leve tronido de huesos.
-Hey Tristan, espero que tengas bien guardados los documentos para que no se mojen con esta lluvia del demonio-

- Tiradas (1)

Notas de juego

Creo que el más adecuado para la tarea es el confiable paladin (imagino que tambien seria el líder del grupo), ¿Que opinan compañeros?
Cierto es clérigo, error mío :v

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20/04/2018, 03:24
Tristan Durant

-No parece que haya mas opciones en un poblado tan pequeño... y esta lluvia no parece que vaya a detenerse pronto.

Ya habían pasado muchas horas viajando y el joven humano comenzaba a sentirse irritado, quizás no sea la mejor posada en la que haya estado, pero era mejor que dormir fuera con el clima de la temporada.

Dio una ojeada a sus compañeros muy por encima, no llevaban mucho tiempo juntos pero debía confiar en ellos...

Al escuchar a Behar, asintió con la cabeza al tiempo que colocaba su mano contra su pecho.
-Estarán seguros compañero... entremos a la posada...

- Tiradas (1)

Notas de juego

En realidad es un clérigo :3

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20/04/2018, 11:05
Celingadir Dulranlan

Las nubes lluviosas encapotaban el firmamento impidiendo la visión de las estrellas en lo que podría haber sido una apacible noche de camino a la luz de la luna. Sin embargo el agua empapaba ya hacía tiempo la capa de algodón con la que Celingadir se cubría y estaba empezando notar también humedad atravesando  ya su túnica de viaje, cuando deslumbraron el pueblo. Estaba deseando disfrutar de la hospitalidad de la posada, quitarse aquellas ropas y sentarse juntos al fuego.

Sus compañeros de viaje parecían también ansiosos por llegar a cobijo.  Asintió ,distraído en sus pensamientos, a todas las palabras y recomendaciones por apretar el paso que sus acompañantes sugerían para llegar lo antes posible bajo un techo seguro.

- Tiradas (1)
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20/04/2018, 19:48
Kaysa Gundarson

El viaje desde las Montañas del Norte hasta el valle había sido un paseo. Kaysa aún no asimilaba que pudieras recorrer millas y millas de terreno liso, sin gargantas ni accidentes, y sin que a cada paso toda la fauna quisiera comerte. Era una sensación extraña. En comparación con los peligros que su Clan afrontaba allá en las cumbres, los dos bandidos patéticos que habían tratado de emboscarla cerca de Albridge habían sido tan blandos que casi le habían dado pena. 

Casi. La pena no les había salvado, y habían acabado con sus cabezas colgadas de la cabellera de las ramas de los árboles, tal y como su clan solía hacer con los bandidos, para que dieran ejemplo a los demás. Tendría que vivir como aventurera en aquellos lugares extraños a los que la habían mandado, por lo que se unió a los Grifos Blancos, aquella extravagante compañía que tenía guerreros santos, cuentacuentos y hasta cocineros, aunque al parecer a este último no le hacía demasiado gracia que le llamasen cocinero. Cuando se había acercado a ellos por primera vez, había llamado primero al clérigo, pues era el único que tenía, a sus ojos, verdadero aspecto de aventurero. El guerrero santo había tenido que bajar la vista, pues Kaysa llegaba a duras penas al metro cuarenta de estatura, lo que hacía que a veces la confundieran con una niña. Sin embargo, bastaba un segundo vistazo para ver que no lo era: sus brazos eran gruesos como troncos, sus piernas parecían capaces de partir un álamo de una patada y el volumen de su voz no era para nada tan bajo como su estatura. 

Así que allí estaba, unida a aquel grupo extraño. Tras la misión de escolta, sorprendentemente fácil, habían partido de Albridge con órdenes de su jefe (Lord regente, le llamaban por allí) de llevar unos papeles a Fallcrest. A Kaysa no le gustaban mucho los papeles. Donde hay papeles, mejor no te quedes, decía su padre a menudo, y en más de una ocasión los viajeros del clan le habían dicho que en el sur había gente que mataba y moría por papeles, y que algunos de aquellos documentos les ataban más que si fueran cadenas de hierro. Kaysa nunca había dado crédito a aquellas historias, pero comenzaba a ver que, para su asombro, eran verdad. Cómo no se había extinguido ya aquella gente, eso sí que no lo sabía. 

La misión de ahora parecía sencilla: había que ir por el camino real hasta Fallcrest. Para eso tenían que pasar por Atwater, pero cuando llegaron estaba lloviendo con insistencia. Kaysa no estaba muy cansada, y habría podido intentar comprar por allí un caballo y avanzar unas cuantas millas más antes de parar a descansar, ahorrando tiempo, pero no iba sola. No tendrían suficiente para comprar caballos para todos, y a sus compañeros se les veía en la cara que soñaban con un fuego y una buena cama. Aquel pueblo parecía estarlo pasando bien y mal a la vez: algunos animales parecían demasiado sanos y otros demasiado enfermos. Recorrió el pueblo con la mirada, a ver si algún detalle llamaba su atención. 

-Vamos a la posada-dijo, con su voz siempre enérgica y elevada, bastante poco femenina-A ver qué tal es la cerveza de este sitio.

Notas de juego

Bien, pues quedas como guardián de los papeles, Tristan. 

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21/04/2018, 17:18
Director

Como aventureros perceptivos os dais cuenta de que hay una cantidad bastante elevada de aves de muchas clases en la zona. Especialmente de cuervos negros que sin apenas hacerse notar pueblan tejados y ramas de árboles en gran número.  

La posada es un lugar espléndido. Uno de los pocos sitios tan buenos, en cuanto a alojamiento se refiere, que os habéis encontrado en mucho tiempo. De recia construcción y limpia parece ser que al posadero o posadera no le ha debido ir mal la vida, rebosa abundancia y calidad.
 
En el mismo instante en el que entráis en la posada, os percatáis de que un aire rancio de tensión flota en el ambiente. Un grupo de lugareños parece mantener una seria discusión, aunque sin levantar la voz de manera audible y cuervos de negro plumaje se acumulan en las vigas del techo de manera siniestra. Los lugareños os miran bruscamente, para acto seguido entregarse a tomar sus bebidas de manera más discreta y en silencio. Apreciáis claramente que los ánimos están tensos y los rostros acalorados por el sofoco que acarrea el intercambio de duras palabras. 

Al frente de la barra os encontráis a lo que parece ser un posadero; maduro, de tez rosada, bigote poblado y algo grueso que limpia una jarra con mirada perdida, al fondo una desconsolada mujer con actitud triste prepara en la cocina dos ollas de lo que parece ser guiso de calabaza con col por lo que podéis oler desde la entrada.

Debido a su afición por la cocina Feanor llega a distinguir las especies que lleva el guiso, al fijarse un poco más distingue que los ingredientes que se dejan ver en los platos de los comensales, estos son escasos y de valor por estas tierras, quizás provenientes de alguna caravana.

El tono de las discusión de una de las mesas cada vez se eleva más - ¡No podemos permitirlo! - dice un lugareño, - Esto traerá consecuencias al pueblo.... - dice otro con el que comparte mesa.

En ese momento el posadero posa la Jarra limpia y golpea fuertemente la barra acallando las voces que siguen murmurando, después se queda cabizbajo con una mirada turbia en su rostro...

 

Notas de juego

Celingandir y Tristant haced una tirada por historia.

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21/04/2018, 20:47
Celingadir Dulranlan
Sólo para el director
- Tiradas (1)
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22/04/2018, 05:19
Feanor Neya

Entro al local junto a mis compañeros, vaya que estoy cansado pero la suerte que tengo al conseguir un lugar como este en medio de la nada!, al entrar digo en una voz un poco alta.

Vaya compañeros, definitivamente alguien nos está cuidando para encontrar un lugar tan hermoso y bellamente cuidado como este sin duda podremos descansar un poco y recordar un poco del buen vivir!

 

Me acerco al hombre frente a la barra… y con una gran sonrisa me dirijo al tabernero.

 

Buenas tardes señor, mis compañeros y yo buscamos un lugar en donde quedarnos para descansar quizás comer un poco, vera hace mucho que no nos topamos con un lugar tan bien mantenido como este, ni con un plato de comida de tan buena pinta como el que sirven aquí mis más sinceras felicitaciones a la chef y a usted por sus cuidados, ¿cree tener espacio para nosotros?

Notas de juego

No recuerdo si es la mañana, la tarde o la noche mis sinceras disculpas si me equivoque

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22/04/2018, 17:16
Celingadir Dulranlan

Celingadir entra siguiendo al grupo y se detiene a pocos metros de la entrada contemplando el interior, mientras con sumo cuidado se quita la capa empapada y comprueba alarmado el estado de humedad de su túnica.

”Desde luego necesita cambiarse de ropa con urgencia si no desea coger un resfriado” piensa.

La posada es mucho mejor de lo esperado incluso el ambiente se siente acogedor pese a la actitud alterada de algunos de los parroquianos y de los extraños cuervos que parecen vigilar todos los movimientos de los habitantes de la pequeña aldea.

Observa como sus compañero se dirige al posadero mientras el comienza a avanzar por la sala observando a los asistentes.

“-Bonitas mascotas” dice señalando con la mirada a las vigas donde se posas los animales y observado la reacción de los pueblerinos.

Notas de juego

Tengo el Rasgo "Posición de Privilegio"

La gente asume que tengo derecho a estar donde quiera que esté y siempre tratan de que me sienta cómodo y evitar mi descontento....

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22/04/2018, 19:26
Kaysa Gundarson

Kaysa caminó al frente de sus compañeros, no parecía molesta por la lluvia, y en algún momento incluso alzaba la cabeza para que las gotas cayeran sobre su rostro. La lluvia era un regalo de Obad-Hai, y no había que tratarlo de forma irrespetuosa. Empujó la puerta con fuerza y ambas manos, haciendo que saliera despedida hacia dentro del local. Con las manos en el pesado cinturón de cuero remachado en hierro que llevaba, avanzó con paso enérgico por el interior de la posada. 

No parecía mal sitio, o por lo menos lo que Kaysa había visto de las ciudades sureñas indicaba que aquel era uno de los lugares ricos de su pueblo: estaba bien construido, de paredes sólidas y sin materiales baratos o de mala calidad. El sitio estaba lleno, lo cual no explicaba en absoluto que el ambiente fuese tan tenso que parecía que podía irse a cortar. Miró a la cara a los clientes sin ningún pudor, buscando el motivo por el que parecían irse a cagar todos encima, pero no lo encontró. ¿Les iría mal la cosecha? ¿Tendrían alguna banda de asaltadores por las cercanías? Algunos parecían enfadados, cosa que no se correspondía con las caras viandas que se veían en sus platos. La peor era la mujer del posadero (o eso suponía que era): tenía cara de tristeza infinita, y no parecía ser solo porque su guiso fuese de col. 

Como de costumbre, no prestó mucha atención a las palabras de cortesía de sus compañeros. Caminó como si fuese por su casa hasta la barra y de un salto se subió a un taburete alto, porque si no la barra le llegaba más o menos a la nariz. 

Dio un puñetazo en la mesa que hizo retemblar la barra entera, y bramó:

-¡Posadero! Póngame algo de cerveza, de la fuerte. Una buena jarra grande, sin escatimar. 

Y, ya que estamos-prosiguió, un poco más bajo, pero aún tan alto como para que le oyera toda la taberna-¿Alguien me explica por qué está todo el mundo tan tenso como en una cacería de trolls? ¿Tenéis problemas de bandidos?

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22/04/2018, 20:26
Director

Pareces recordar un cuento que te fue leído por la vieja gnoma de tu infancia en uno de los libros que te regaló tu madre, este cuento infantil parecía tener cierta relación con lo que está ocurriendo en este pueblo, en el se hablaba de un pueblo y bosque colindante libres de monstruos y bandidos gracias a la influencia de una diosa de extraña naturaleza que proporcionaba abundancia a quienes bendecía o todo lo contrario a los que no, pero siempre a cambio de algo...

También viene a tu mente una de tus lecciones de historia de la academia de magia que durante la invasión de los orcos de clan de las Lanzas sangrientas, hace cien años, Atwater fue casualmente uno de los pocos lugares totalmente ignorado por la horda; aún seres tan ignorantes como los orcos fueron lo suficientemente sensatos como para evitar las tierras, te preguntas también si eso tendrá algo que ver con el cuento de tu infancia.

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23/04/2018, 02:31
Tristan Durant

Antes de entrar a la posada se percata de que hay un numero inusual de aves en las cercanías, un poco extraño pero no le pareció que hubiera una razón para sospechar nada. -"quizás solo son ideas mías".

Avanzó hacia la puerta y casi se tropieza con Kaysa, mira apenado a su alrededor en un reflejo, nadie lo había notado al parecer, se aclaró la garganta, y entro tras la mujer, mas aves y dentro de la posada ahora si era demasiado, rebusco en su mente por algún pasaje o consejo que le hayan dado referente a una cantidad preocupante de cuervos dentro y fuera de los edificios.

Dentro se sentía un ambiente tenso, el lugar era bueno, la comida por el olor parecía buena también entonces ¿que seria?, ¿la cosecha?, ¿animales enfermos?, ¿bandidos?, ¿o quizás algo mas?

Prefirió guardar silencio mientras sus compañeros a su modo, expresaban su preocupación por el pueblo.

- Tiradas (1)
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23/04/2018, 03:02
Behar Qen

Mientras caminabamos hacia la taberna, creo yo que todos nos dimos cuenta de la gran cantidad de aves negras que se encontraban en toda la aldea, mi experiencia personal me dice que donde hay cuervos hay sangre derramada y donde hay sangre la muerte está rondando, comenzaba a preguntarme si seguía siendo buena idea permanecer aquí pero como mis compañeros no les parecía molestar, tal vez porque tienen conocimiento que yo no, seguí adelante.
Al entrar a la taberna, sorpresa sorpresa, más pájaros negros y justo cuando nuestra pequeña pero salvaje amiga abrió las puertas todos las miradas se clavaron en nosotros, parecían estar discutiendo pero como nosotros sólo estábamos de paso no era de importancia, me acerqué a la barra y justo como Kaysa yo también pedí comida y bebida, mientras esperábamos la respuesta del posadero de si tenía espacio para nosotros o no.
-Por fin, comida real... estaba cansado de esas raciones secas, ¡otro tarro más de cerveza amable señor!- seguía actuando como si nada pasará pero nuevamente Kaysa hizo uso de su fino tacto y pregunto directamente que carajos estaba pasando ahí, una sonrisa se dibujó un mi rostro al escuchar la pregunta de la única figura femenina del grupo.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Tiro percepción para detectar si algún comensal o las aves reacciona a la pregunta de Kaysa de manera violenta o de otra forma
Por cierto olvidé colocar el modificador que era +3 sería un total de 20

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23/04/2018, 08:36
Director

Pareces recordar un cuento que te fue leído en tu infancia en uno de los libros que te regaló tu madre, este cuento infantil parecía tener cierta relación con lo que está ocurriendo en este pueblo, en el se hablaba de un pueblo y bosque colindante libres de monstruos y bandidos gracias a la influencia de una diosa de extraña naturaleza que proporcionaba abundancia a quienes bendecía o todo lo contrario a los que no, pero siempre a cambio de algo...

También viene a tu mente una de tus lecciones de historia en la capilla de Pelor que durante la invasión de los orcos de clan de las Lanzas sangrientas, hace cien años, Atwater fue casualmente uno de los pocos lugares totalmente ignorado por la horda; aún seres tan ignorantes como los orcos fueron lo suficientemente sensatos como para evitar las tierras, te preguntas también si eso tendrá algo que ver con el cuento de tu infancia.

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23/04/2018, 12:18
Director

Al escuchar las palabras de la bárbara todos los lugareños se giran y miran al grupo provocando un silencio incómodo, tras esto vuelven a sus mesas entre miradas desconfiadas, cuchicheos y corrillos constantes. Parece que están preocupados, pero no es fácil confiar en unos recién llegados.

El único que levanta la mirada es el posadero que tras la barra y con una clara esperanza en su rostro os dirige unas palabras en tono amable.

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23/04/2018, 13:34
Corby

- Oh...¿Que ven mis ojos?, ¡aventureros!. Bienvenidos a mi Posada, por supuesto podéis llamarme Corby. 

Contestando a Feanor.

- Por supuesto que tengo unas camas de buena factura y comida caliente para vosotros, hoy tenemos guiso de calabaza. Por favor sentíos como en vuestra casa. No hagáis caso de las habladurías de estas gentes, no son más que patanes.

Contestando a Kaysa y Behar, Corby se agacha tras la barra y saca dos jarras de buena calidad con grabados de la marca de la posada hechos a fuego, a continuación abre un grifo de uno de los toneletes de su espalda y llena las jarras con una buena cerveza dorada apoyándolas sobre la mesa.

- Espero que sea de su gusto, no hay una cerveza igual en millas. 

Contestando a Celingadir. 

- Oh, Señor elfo, espero que esta humilde posada sea confortable para su gusto. ¿Bonitas mascotas? (en tono más bajo se acerca al elfo) se referirá a estas criaturas que están por todo el pueblo, supongo que será época de cuervos...

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Cuando termina de hablar el tabernero apoya sus dos brazos sobre la madera de su barra y suelta un sollozo.

- ¿Y bien que os trae por aquí? son tiempos aciagos.... 

Notas de juego

Es de noche, serán las 11 aprox.

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24/04/2018, 07:49
Director

Tratas de fijarte bien cuál ha sido la reacción general de las palabras de Kaysa, pero no logras ver una reacción fuera de lo visto, parece que los lugareños son personas desconfiadas. Lo que si logras sacar en claro es que algo debe de preocuparles y por la forma de hablar seguramente tenga que ver con el posadero.

Los cuervos únicamente dan pequeños saltitos en las vigas del techo y sueltan graznidos que te parecen totalmente aleatorios.